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Mi sangre es tuya (SxM)

Hola.

Traigo este nuevo capitulo o oneshot donde colocó a Shaka x , esperemos y les vaya a gustar.

Esto es para:
RomaHeta

Tu Ships fue el ganador. Okno, solo que ya quería hacer uno de ellos. Y si seguiré haciendo mas de Kanon x Sorrento.

--†--

Era una noche lúgubre.

Mü, es un joven que acaba de mudarse a las calles de Grecia, venido desde un país recóndito. El Tibet.

Había cambiado todo aquel bello paisaje para venir a una ciudad común.

Para Mü eso era lo mas aburrido, en la ciudades grandes solían pasar demasiadas cosas y no dejaban pensar al ser humano como era debido, gracias a la tecnología y cosas de esas.

Él aun creía que aquellas cosas místicas podían existir, como las brujas, dragones, etc. Debido a su manera de pensar.

Solía leer demasiado, en su antiguo trabajo lo catalogaban el loco de la fantasía, un absurdo sobrenombre.

Pero así debía hacer.

Shion era su tío y como era de costumbre tenia a otra persona, Dokho, su tío tenia a un pequeño niño, siempre pensó que su tío había tenido un romance con alguien, puesto el pequeño niño llamado Kiki tenia prácticamente apariencia a él.

Pero el dejo de importarle eso.

Cuando fue a trabajar por primera vez había sido en un hotel como recepcionista, anteriormente tenia uno, de una pequeña posada en su pueblo, claro, que ahí era una posada o motel, ahí era un edificio, edificio famoso, era reconocido por toda Grecia.

Desconocía al propietario de aquel enorme edificios pero siempre mencionaban que llegaba alrededor de las 8 pm, solamente duraba pocas horas y se iba, eso le parecía extraño, puesto no había ningún jefe de la familia ahí, mas que ese dueño.

Mü era inteligente y en cuestión de horas aprendió lo básico, su compañera sabia bien que era lo necesario y a pesar que estaría en turno nocturno no se había molestado.

Esa misma noche la mujer acomodó sus pertenencias ya se iba a casa, miro hacia Mü con nervios. Era el cuarto día y los lideres o mas bien el jefe había pedido que lo dejaran solo, haciendo su trabajo.

Para el tibetano seria algo nuevo, sus nervios eran notorios, no le había tocado estar solo de noche, su compañera mencionaba que era tranquilo, pero algunos huéspedes solían pedir servicios.

Y ese día él seria el quien estuviera en recepción.

Durante su estadía en aquel lugar que leía una revista que encontró, pudo escuchar como alguien estaba enfrente, lo había asustado de sobremanera, provocando que le peli lila se pusiera de pie, se inclinara mientras daba disculpas.

-Perdone señor -se disculpó -¿En que puedo ayudarlo? -pregunro esta vez viendo al mencionado.

El hombre solamente miro sin emoción o gesto alguno, cerro sus ojos con lentitud y comenzó a hablar.

-Finalmente conozco al nuevo recepcionista -hablo -Espero y no me decepciones -dijo mientras de encaminaba por un pasillo.

Mü miro confuso mas no dijo nada.

Al paso de unos 20 minutos fue llamado, rápidamente coloco una taza de café que tomo de la cocina del hotel y rápidamente se dirigió a la oficina. No sin antes acomodar su traje, no quería verse mal ante su jefe.

No le parecía extraño, de hecho era normal, anteriormente había conocido a alguien así, pero debida admitir aquella persona había perecido.

Cuando llamó a la puerta, obtuvo una afirmación, cosa que se dirigió y miro al rubio, estaba tranquilamente leyendo documentos y algunas fichas de pago.

-Que bueno, ya sentía la gargantas seca -dijo el rubio.

-Lo siento -se disculpo, dejando la taza sobre el escritorio.

-No te disculpe -dijo -Toma asiento dudo que no vaya a venir gente a esta hora -habló el rubio, quien señalaba la silla.

-Gracias señor -dijo algo nervioso.

Era extraño, sentía como su algo lo atacaría. Aunque a final de cuenta su mente jugaba una mala pasada, por el simple hecho de que se sentía asechado.

-¿Te ha gustado trabajar aquí? -preguntó el rubio con calma.

-Claro señor, es algo sencillo, igual que en mi antiguo trabajo -respondio.

Mü le demostró una sonrisa sencilla, cosa que el mayor sintió con satisfacción y sonrió.

-Señor... -llamo el peli lila quien de puso de pie.

Mü miro algo raro, si, miro aquellos zafiro, transformarse en escarlata.

Se disponía a simplemente correr, pero estaba estático. Sus piernas no respondían solamente quería correr ponerse a salvo de aquel hombre.

-Siempre hacen lo mismo -hablo el rubio.

-Hmp... -intento moverse.

-No ed necesario, no podrás moverte, estés bajo mi control, un control que luego quieras sentir -sonrió.

Se colocó enfrente del tibetano, su sonrisa era coqueta y sus ojos eran rojizos, pronto comenzó a aproximarse, al grado de que Mü sentía la respiración del mayor. Era una fría respiración, cerro sus ojos fuertemente, pero no sentía nada, hasta después de uno segundos.

Unos labios quien eran demandante, que dominaban en absoluto, pronto la mano del rubio subió hasta la mejilla, quitando aquella cabellera que le estorbaba. Bajo hasta cuello, cosa que al llegar olió y abriendo poco a poco su boca le brindo una mordida.

Mü no pudo gritar simplemente sentía aquel pequeño pinchazo, era un ardor tremendo, extraño, que comenzaba a hacerle daño. Sentía como algo le succionaba.

-Ah~ jadeo.

Shaka dejo de hacerlo, lamió aquella sangre que brotaba de la pequeña herida y se colocó enfrente del menor.

-Tú... -silencio.

-No me haga daño -hablo en un suspiro.

Shaka, lo miro una vez mas, sus ojos tomaron aquel color rojizo y se dispuso a continuar

El mayor ignoró aquello, solamente siguió con su acción, Mü nuevamente cerro sus ojos con fuerza, pudiendo sentir como aquellos le daba una extraña sensación, aunque pronto sintió como en su entrepierna se colocaba la puerta del rubio.

Mientras una mano intentaba entrar por debajo de la camisa.

Un sonrojo lo habían inundado, no sabia que hace estaba tan confuso. Poco a poco fue perdiendo el sentido, su visión se nublo y pronto termino desmayado.

[...]

Despertó de golpe.

Miro a su alrededor, estaba en una especie de habitación, rápidamente había corrido hacia el espejo que había ahí, miro su cuello, se mostraba limpio, sin marca alguna. Dio un suspiro de alivio, suponía que todo aquello era gracias a sus creencias. Su sueño le estaba jugando una mala pasada.

Busco su corbata dispuesto a seguir con sus labores, ya que mirando el reloj de aquella habitación no pasaban de las 2 am.

Ese turno le hacia largo.

La puerta se abrió mostrando una silueta del rubio, a principio Mü temió pero se tranquilizo, ya que el rubio detonaba una tranquilidad y preocupación.

-Me da gusto que hayas despertado -aliviado -Cuando fuiste a verme caíste desmayado -dijo.

-No se lo que paso, creo que fue por la falta de sueño -dijo con vergüenza.

-Sabes es la primera vez que veo a alguien así -dijo quien se puso enfrente del tibetano.

-¿Eh? ¿A que se refiere? -pregunto.

Esos ojos había cambiado, Mü comenzó a retroceder, pero aquello había sido impedido por la cama.

-Las pasiones carnales humanas siempre son tan notorias -hablo con seducción.

-¿Que? -pregunto confuso.

Shaka término por quedar encima de él, comenzó a besarlo, a principio Mü peleaba pero aquel beso en los labios lo detuvo, lo hizo detener, lo hizo sentir, coloco ambas manos a si costado dejando que el rubio siguiera sus acciones, cosa que así hizo, la mano del rubio se introdujo por debajo de su camisa de botones, que debido que no estaba fajado tomó aquello, Mü suspiro al sentir la fría mano de su jefe tocar su piel, cosa que Shaka sonrió y prosiguió besando hasta bajar a su cuello, en donde lamia y besaba aquella zona.

-Nadie se ha resistido a esto -susurro -Pero me llamaste -entre besos.

-¿Como? -preguntó casi inaudible.

-Por medio de tu sangre -hablo.

Aquello le hizo sentir extraño, mas nunca se negó siguió sintiendo como la mano del mayor salia para quitar boto a botón mientras besaba la boca.

-Ah~ jadeo -Tus manos... -susurro.

Shaka no dijo nada simplemente continuo besando su pecho blanco, jugo con sus pezones quien pronto prosiguió a bajar, era la primera ve que Mü estaba en una circunstancia así.

-No -suplico.

-Se que eres virgen, tu sangre es tan deliciosa -dijo en susurro.

Las caricias seguían en aumento y Mü sentía que ya no podría ocultar sus ganas de querer de suspiros, Shaka había bajando el pantalón del tibetana, comenzando a jugar con el sexo de este. Pudiendo mirar sus expresiones de satisfacción. Más eso no era suficiente.

Quería seguir, quería hacerlo suyo.

Seguía jugando con el, haciendo que sintiera placeres, cuando finalmente obtenido todo aquellos gemidos y jadeos, subió hasta sus labios y comenzó a darle leves besos, bajando hasta su cuello y clavar sus dientes, mientras sus manos recorrían su cuerpo.

Pronto pudo sentir como la pasión del menor aumentaba, terminando por aferrarse al rubio.

[...]

Comenzó a despertar y termino por sentarse rápidamente.

Miró a todos lados hasta que pudo reflejarse en el espejo del tocador.

-¿Que sucedió? -pregunto en susurro.

Toco su cuello con la intención de poder encontrar una marca, mas nada, se puso de pie y se dirigió mas de cerca al espejo, envuelto en la sabanas, pero no había seña.

Miro el reloj, quedó dudoso, que había pasado durante la noche, ¿que había sucedido? Recordaba a ver visto a ese rubio, su jefe.

-Diablos -susurro.

Rápidamente se cambio y salio corriendo.

Llego a recepción se acomodo un poco y pronto siguió con las "labores" acomodando algunas cosas y pronto algunas personas llegaron.

Sobre todo su compañera.

-Buen día Mü, ¿Como te fue en la noche? -pregunto con una sonrisa.

-Bien, aunque si que es cansado -dijo con algo de nervios.

-No te dormiste ¿cierto? -pregunto.

-No, claro que no, solo que estuve junto con el jefe -respondio.

-Vaya, esperemos y te de consejos, muchos han recibido sus consejos y han salido adelante -dijo la mujer.

-¡Oh! Bueno -dijo con nervios.

Con aquello hizo sentir una extraña sensación pero que podía hacer, simplemente era alguien menor, alguien que no tenia importancia.

[...]

Durante su camino recordaba o a menos intentaba, hasta que hubo algo que le dio escalofríos.

"Mi sangre es tuya..."

Esa extraña manera de decirlo le hacia sentir temor.

Simplemente dio un suspiro, había estado pensando que aquello que término llegando a casa.

Tal vez aquello seria algo sencillo.

Aunque a final de cuenta seria lo mejor.

Fin~

.....

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