Sonreí aliviada tras entrar a su coche.
Apoyé mi cabeza en el cabecero del asiento y tiré mi mochila a algún lugar de los asientos de detrás
¿Y ese tan buen humor? -me preguntó sarcástico a lo que yo solté una pequeña risa y ladeé la cabeza para verle-
Llevo un par de semanas estudiando mucho para este examen. Al fin es el último -le expliqué para luego sujetar su mentón y besar sus labios. Su sonrisa me dijo que eso era lo que quería- estoy muy cansada. ¿Me llevas a casa?
Yo había pensado en invitarte a cenar pero si estás muy cansada... -comenzó Peter para luego mirar con una sonrisa-
Un batido de chocolate -señalé segundos después sacándole una risa- y hamburguesas y papas
Todo lo que pidas -aceptó él a lo que yo le sonreí y le abracé como pude. Solté una risa cuando me colocó en su regazo y acarició mi espalda- yo sé cómo tratarte de la forma correcta
Tú sabes cómo hacerme feliz -le corregí notando sus labios en mi frente-