Jasper Hale y Emmett Cullen
Estaba abrazada a uno de los brazos de mi prima mientras trataba de no quedarme dormida escuchando a mi profesor hablar sobre unos bailes extraños que teníamos que hacer.
Solté una carcajada al ver a dos chicos muy peculiares salir obligadamente al medio y escondí mis mejillas sonrojadas tras la bufanda que llevaba cuando Jasper me miró pidiendo ayuda
¡Vamos, Emmett! -se burló Aidana aún con su cabeza encima de la mía mirando a su novio-
No pienso hacer eso. Tengo que dejar algo de mi dignidad -pidió Emmett por encima de la música que sonaba y algunas parejas a sus lados comenzaban a bailar-
Vamos, Jas, hazlo por mí -añadí con una sonrisa inocente. Ambos se miraron, suspiraron y comenzaron a imitar el baile. Trataban de ir girando mientras movían su cadera y uno de sus pies pero parecían dos croquetas danzarinas. No pudimos evitar reírnos mientras veíamos a ambos intentarlo-
Está bien, está bien -nos interrumpió el profesor parando el vídeo- elegid a otras personas para salir
No -Aidana señaló a ambos tras ver sus miradas traviesas-
Hazlo por mí -repitió Jasper levantándome para sentarse en mi sitio. Yo le saqué la lengua en respuesta y me coloqué junto a Aidana-
Tenemos que hacerlo mejor que ellos -me pidió a lo que yo asentí con la cabeza. Comenzamos a hacer los pasos algo torpes pero bien hasta que me fijé en la mirada del rubio y sonreí-
¿Por qué siempre lo hacéis todo tan bien? -se quejó Emmett mientras Aidana se sentaba a su lado con una sonrisa burlona-
Somos Smith, ¿qué pensabas? -le respondió ella y comenzaron una pequeña pelea verbal hasta terminar en un beso-
Bailas muy bien -afirmó Jasper a lo que yo dejé un beso en su mejilla dejándome caer en sus brazos- está noche tendremos una cita. Conozco un restaurante donde se puede salir a bailar
¿Y cómo lo harás si eres arritmico? -me burlé pero dejé un beso en sus labios ante su cara ofendida- es broma. Te quiero
Está noche salimos -Emmett pasó su brazo por los hombros de su hermano a lo que ambos nos miramos e intercambiamos miradas. No podríamos decirle que no-
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