[Ninguno de los dos esperaba reencontrarse de esa manera...]

— ¿Porque estás con esta gente? — le preguntó el Ruso — no entiendo nada.

Volkov estaba confundido pero a la vez aliviado. Después de un año sin saber nada él por fin lo tenía frente suyo. Aunque hubiese deseado que las circunstancias fuesen totalmente diferentes.

— Venga — lo ánimo H — arriba que eso no ha sido nada — le dijo mientras lo ayudaba a levantarse.

— ¿Estás bien? — le preguntó haciendo el mayor esfuerzo posible para formular correctamente la pregunta.

— Joder... — soltó en un suspiro como respuesta — luego hablaremos de eso.

— Pero... — quiso interrumpirlo pero este no se lo permitió.

— No te esfuerces demasiado en hablar — le seguía diciendo Horacio mientras iban subiendo y se acercaban a un auto — tenemos que salir de aquí ahora mismo.

— ¡NO! — gritó cómo pudo dejando confundido a Horacio.

— ¿Como que no? — le cuestionó — No te encuentras bien... joder que debo llevarte a un hospital o a un lugar seguro...

— Parker...y.... — comenzó a decir V mientras tomaba aire — Parker y Alanna.... No... no podemos dejarlos...

— ¿Que dices? — cuestionó ahora sorprendido mientras dejaba a Volkov recostado en el asiento de copiloto del auto — ¿que Parker y Alanna también están aquí? — preguntó sorprendido mientras que Volkov solo asentía.

Horacio cada vez entendía menos. De un momento a otro, todo se había salido de control y no lo había notado.

— Vale... — volvió a dirigirle la palabra al ruso — ¿son los que estaban en el túnel? — V asintió mientras trataba de acomodarse en el asiento — Perfecto, nos acercaremos en el auto y los recogeremos — dijo para luego colocarle en cinturón de seguridad — hay alguien más aquí.

Volkov solo se limitó a asentir. Si bien había tenido heridas peores, ninguna situación previa se comparaba a esta. Se podría decir que el "shock"del momento lo tenía peor de lo que debería. Aunque como bien había dicho Horacio, si este no recibía atención media, podría empeorar.

Horacio entró al auto y condujo hasta el interior del túnel donde con prisa se acercó para retirar las máscaras de los abatidos y comprobar lo que Volkov le había dicho.

— Jodeeeeer — gritó al percatarse de que en efecto eran ellos.

— ¿Jefe? — preguntó Parker confundido.

— Tranquilo — le respondió mientras lo ayudaba a ponerse de pie pero este se volvió a tirar al suelo.

— Alanna... — le dijo en un susurro y le señaló el cuerpo de su prometida — ella primero...

Horacio no lo pensó dos veces y tomó a Monier en brazos para colocarla en el auto.

— Stephen... — repetía mientras las lágrimas seguían cayendo por su rostro — cuiden a Stephen... que no... que no le pase nada... por favor....

— No diga esas cosas Monier — la regañó Volkov el cual aún estaba consiente.

Mientras que Horacio sin entender nada, volvió por Parker para dejarlo en la parte de atrás del auto junto a Alanna al igual que a Blake quien ya se había quedado inconsciente.

— ¿Blake? — preguntó Parker dudoso. Y es que de los ahí presentes, era el que menos había sido herido a excepción de Horacio.

— Si — afirmó H — ¿cómo salimos?

— Pero aún queda alguien en el suelo... — habló ahora Volkov.

— Dioooos — volvió a gritar, el momento estaba siendo demasiado tenso para él, toda esta locura lo estaba comenzando a abrumar, pero debía comenzar a asimilar que esta era la realidad — espero no arrepentirme de esto.

Dicho esto se volvió a bajar del auto para tomar a su padre del suelo y meterlo en el maletero del auto. Aún no sabía si había sido buena idea pero ya luego se las apañaría, como siempre lograba hacerlo.

— Vale... — volvió a suspirar una vez entró de nuevo al auto y observó a sus pasajero para asegurarse de que todo estaba bien y poner el auto en marcha — los voy a sacar de aquí — les dijo mientras conducía a una salida y los iba mirando constantemente por el retrovisor — todo va a estar bien, todo va a estar bien — se repetía desesperado.

— Lo... lo estará ahora... — le dijo Volkov a la vez que colocaba su mano en la pierna de este como hace mucho tiempo no había podido hacer haciendo que Horacio lo mirara fugazmente con una pequeña sonrisa para luego continuar atento al camino.

La verdad es que ninguno entendía lo que había sucedido. Se habían abatido entre ellos mismos. Jamás pensaron que luego de un año se volverían a encontrar en una situación como esa. Una situación tan extraña, confusa y peligrosa.
Agradecían que la heridas que todos presentaban no eran tan malas gracias a la protección que ambos bandos usaban. Aún no tenían claro cómo habían terminado así. No tenían claro cómo terminaron enfrentándose sin percatarse de que eran sus amigos los que estaban del otro lado.

Definitivamente algo no cuadraba en todo esto. Lo sabían y estaba muy seguros de eso. Al igual que estaban seguros de que lo sucedido había sido provocado con todas las intenciones de que se enfrentaran. O por lo menos eso era lo que Victorio Volkov iba pensando en el camino.
Mientras que Horacio tenía mil preguntas. ¿Qué hacia Volkov ahí? ¿Cuándo habían regresado Parker y Alanna? ¿A donde se había ido Maia? ¿Quién era Stephen y porque Alanna solo mencionaba su nombre? Estas y muchas preguntas más rondaban su cabeza.

Pero en estos momentos, tenía una prioridad, y era que tanto Volkov como sus amigos estuviesen bien y se recuperaran. Solo de esta forma podrían hablar y aclarar las cosas por completo. Había confiado en ellos en un pasado y confiaba en Volkov con sus ojos cerrados.
Por lo que solo le quedaba ayudarlos a recuperarse para poder aclarar el panorama y contestar todas esas dudas.

Mientras que su padre... pues ya luego averiguaría que hacer con él. Ahora mismo le importaban más las vidas de quienes estuvieron con él y lo apoyaron cuando sin dudarlo. Le preocupaba el bienestar y la salud de los que hace mucho consideró como la familia que la vida le brindó luego de tanto daño que le causó. Y estaba claro que no les iba a fallar, a ninguno...

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