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El dia de la Noticia Parte - II

— ¡Horacio! — gritó Volkov al ver como el auto del moreno rodaba frente a sus ojos — ¡Parker, Blake! — les hablo por la radio — ¡Que venga una puta ambulancia a mi 10-20 ya! — les indicó sin darles tiempo a preguntar lo que pasaba.

— 10-4 — respondieron ambos a la par mientras que el ruso se bajaba del patrulla y se acercaba al vehículo.

— Horacio ¿me escuchas? — llamó mientras se iba acercando con prisa — Horacio por favor — pidió ahora mientras que las lágrimas comenzaban a caer inconscientemente por su rostro.

Una vez cerca del vehículo, Volkov pudo divisar a Horacio, este se encontraba inconsciente, pero agradeció al universo que este a pesar de haber salido desenfrenado y a toda velocidad, se haya colocado el cinturón de seguridad. Lo que le permitió soltar un pequeño suspiro.

— Vas a estar bien vas a estar bien — se repitió a si mismo mientras comenzaba a examinar el escenario para encontrar la manera segura de sacarlo de ahí.

Por la mente de Viktor, recorrían miles de opciones, pero debía ser precavido para no causarle un mayor daño a Horacio en el proceso. Y es que luego de tantas veces a lo largo de su tiempo juntos que habían tenido accidentes, ya sabia como proceder, pero este caso era diferente, en esta ocasión la manera en la que sucedieron las cosas lo habían bloqueado por completo.

— ¿Dónde demonios esta la puta ambulancia? — volvió a cuestionar por radio con desesperación mientras observaba como las personas que estaban a su alrededor se acercaban.

— En camino — respondió Parker antes de que este les volviese a preguntar — Blake y yo vamos hacia tu 10-20 y Alanna está de camino al hospital donde nos esperará con el personal médico.

Volkov no les contesto, pero sintió otro pequeño alivio. Ahora solo debía preocuparse por sacar a Horacio del vehículo antes de que las cosas empeoraran.

— Lo hare yo mismo — dijo y sin pensarlo de nuevo, intento abrir la puerta estropeada del lado de Horacio para facilitar el proceso.

Con cuidado y sin importarle todos los pedazos de cristales quebrados que habian en el suelo, se colocó debajo de Horacio para amortiguar la caída de este una vez desabrocho el cinturón de seguridad. Una vez lo tuvo en sus brazos se permitió respirar con un poco más de tranquilidad por unos momentos los cuales se fueron rápidamente al percibir un olor extraño.

— ¡Cuidado! — se escuchó como las personas que estaban observando todo a la poca distancia le advertían ya que estas se habían percatado de un detalle que él no.

Lo que hizo que este sin preocupación alguna por su estado físico, colocara una de sus manos sobre los cristales para retroceder velozmente y salir del vehículo para luego con cuidado tomar a Horacio en sus brazos y retroceder a una distancia prudente del vehículo justo a tiempo antes de que este explotase.

— Mierda — dijeron Parker y Blake al llegar al lugar junto con una ambulancia de los bomberos y un fire engine detrás — ¿V están bien?

— 10-4 — respondió mientras recostaba a Horacio en su regazo y le tomaba el pulso — ¿Horacio? — le habló ahora con miedo en su voz al no sentir el pulso de este — ¡No tiene pulso! — gritó con miedo en su voz mientras que se acercaban los médicos que habian bajado de la ambulancia — ¡No tiene pulso!

— Por favor apártese caballero — le indico el medico de gafas mientras que se agachaba para atender a Horacio — Ostias — dijo ahora sorprendido mientras que comenzaba la reanimación cardiopulmonar — ¿Hope? — lo reconoció Loki — ¿Y ahora en que te metiste?

— ¡Deje de hablar y sálvele la vida! — le alzó la voz el ruso a este dejando en claro su preocupación.

— Necesito que se aparte — le indicó ahora en un tono serio mientras que se acercaba una de sus compañeras para alejar a este a la vez otros dos se encargaban de apagar el fuego del vehículo.

— No me voy a mover — le respondio el ruso a la mujer mientras que retiraba con brusquedad el contacto que este había tenido con el a la vez que seguía mirando con los ojos llorosos como reanimaban al menor.

— Caballero debo insistir — le volvió a repetir aquella mujer con más carácter. Cosa que no pasó desapercibida por Parker y Blake quienes se habian mantenido un poco al margen de todo aun impresionados con lo que estaba sucediendo.

— Vamos V — le habló Parker acercándose a este — deben hacer su trabajo, de lo contrario solo perjudicaras a H.

Volkov inconscientemente se dejo llevar por este hacia atrás, pero seguía observando el cuerpo de Horacio sin pulso y con heridas por el accidente. A la par que por su mente volvían a predominar los recuerdos del día que su hermana falleció. El sonido del choque y el grito de Alexandra, ahora estaban mesclados con lo sucedido con Horacio. Y es que, en ambas ocasiones, este se encontraba hablando con estos, lo cual ya de por si para era un pequeño trauma que le carcomía la mente cada vez que en medio de una persecución tenían algún accidente leve. No podía creer como estaba condenado a este tipo de situaciones

— ¡Tiene pulso! — gritó Loki para luego soltar un suspiro mientras miraba a los agentes del FBI y Volkov volvía respirar de alivio — Vamos al hospital cagando ostias.

— A un lado — dijo la compañera de este la cual se acerco con una camilla — vamos Hope — dijo esta mientras junto con Loki lo colocaban en esta para luego dirigirse hacia la ambulancia — ¿Quién vendrá con él?

— ¡Yo! — dijo V mientras que los seguía hacia la ambulancia — Nos vemos allá — le dijo a sus compañeros.



Horacio abrió con pesades sus ojos, solo para sentirse agobiado por la fuerte luz blanca de la habitación en la que se encontraba. Intento cubrirse con sus manos, pero se percató que su mano derecha estaba siendo sostenida por alguien. Desvió su mirada hacia la derecha para toparse con que Volkov estaba dormido con la cabeza recostada en su camilla mientras que sostenía su mano. Sonrió para sí mismo por la escena, pero esta simple acción hizo que Volkov se levantase y pusiera alerta solo para percatarse que este ya había despertado.

— Hola — lo saludo Horacio intentando acercarse a este pero el dolor en su abdomen se lo impidió haciendo que tuviera que volver a recostarse — Dios ¿Qué me pasó?.... siento — comenzó a decirle mientras que el ruso lo miraba atentamente aun con preocupación en su rostro y sostenía más fuerte su mano — siento que la cabeza me da vueltas.

— Tranquilo solntset — le pidió para luego pasar su mano libre por el cabello de este — tuviste tuviste un accidente...

Le informo el ruso y fue cuando Horacio se percató de que este tenia los ojos rojos y rastro en estos de haber estado llorando por un buen rato. Lo que hizo que a su mente llegasen los recuerdos de los segundos antes del choque. Recordando así la terrible notica que había recibido.

— Viktor — lo llamó con la voz cristalizada — ¿Gus Gustabo ya no estáverdad? — preguntó aun sabiendo la respuesta a la par que las lágrimas comenzaban a caer.

Fue aquí donde el ruso se vio reflejado, y es que hace años atrás este era el que se encontraba en esa posición — Escúchame ¿sí? — lo tomó ahora con ambas manos mientras que algunas lágrimas también caían por su rostro, y es que el ver a Horacio así le destrozaba por completo el corazón.

— No, no, no — comenzó a decir el menor a la vez que se desesperaba un poco — ¿Por qué? — comenzó a llorar — ¿Por qué todos a mi alrededor terminan muertos o lastimados?

— No es así — le pidió mientras secaba sus lágrimas con cuidado.

— Claro que lo es — lo interrumpió — vivo con el miedo el miedo constante de que te suceda algo por el simple hecho de estar conmigo.

— Comprendo cómo te sientes — le habló con sinceridad en un tono suave — pero escúchame bien ¿sí? — le pido para recibir un asentimiento por parte de este — y se que ahora mismo todo a tu alrededor puede parecer muy oscuro muy muy mal pero el mundo no se va a terminar aquí para ti ¿me entiendes? — enfatizo mientras que veía a este secarse un poco sus lágrimas, pero era en vano ya que más se seguían asomando — tienes todavía toda una vida por delante, y ahora mismo esta bien que te sientas así ¿vale?

— Pero...

— Esta bien que te sientas así solntse — volvió a recalcar — es sano permitirse sentir, y debes sacar todo lo que tienes dentro ahora no tienes porque contenerte esta bien no estar bien todo el tiempo eso me lo enseñaste tú — le sonrió.

— Es que mi hermano, Viktor — lloró más fuerte — ¿Cómo se supone que viva ahora sin él? Que no que no es lo mismo no saber donde esta que saber que no lo volveré a ver jamás...

— Un dia a la vez Solntse — lo abrazó con cuidado de no lastimar las heridas del menor — vivirás un dia a la vez y en cada uno de ellos estaré yo ahí para apoyarte y sostenerte como siempre lo hemos hecho...

Horacio se permitió liberar sin temor todo lo que se estaba conteniendo. Si bien la perdida de su hermano lo había tomado desprevenido, agradecía infinitamente no estar solo en un momento como este. Mientras que Viktor se propuso a si mismo el mantenerse fuerte para que así el menor no se sintiese solo en ningún momento. Que supiese que podía contar con él, sin importar lo difícil que el panorama se pudiese presentar. Se encargaría de ser para Horacio el apoyo que este no tuvo cuando su hermana falleció. Se encargaría de ser su paño de lágrimas todo el tiempo que fuese necesario. Después de todo, cuando acepto regresar a Los Santo tiempo atrás, se había propuesto a si mismo que estaría para todo lo que el menor necesitase. Y una promesa así a estas alturas, era una que nunca sería capaz de romper.

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