Volkov se recostó en la cama al lado de Horacio y abrazó el cuerpo desnudo de este para luego besarle la espalda y reposar su cabeza en su hombro.

— Te amo — le dijo en el oído haciendo que el menor soltase una risa y voltease para quedar frente a su novio.

— Te amo — le respondió mientras que paseaba sus dedos por el cuerpo de su amado que igual que el suyo se encontraba despojado de ropa.

— ¿Que quieres hacer ahora? — le preguntó V mientras que le acariciaba el cabello con una mano y con la otra le frotaba la mejilla derecha.

— ¿Podemos quedarnos aquí un rato más? — preguntó conectando sus miradas — ya luego podemos ver una película o preparar la cena...pero ahora solo me apetece seguir aquí contigo...

— Nos quedaremos aquí entonces todo el tiempo que quieras cariño mío —le respondió y besó su frente.

Acción que hizo al menor sonreír para luego acercarse más a este buscando su calor siendo recibido entre los brazos del ruso.

— Amo esto... — le confesó Horacio para luego repartir unos besos delicados en el pecho de Volkov.

— ¿Qué de todo? — quiso saber mientras que seguía acariciando la espalda de este.

— A ver — se apartó un poco para poder mirarlo mientras reía en alto sin romper la intimidad y la tranquila atmósfera que mantenían — que lo he disfrutado todo, de puta madre... — habló contagiándole su risa.

Porque Volkov lo sabía, daba fe de ello porque al igual que Horacio, el disfrutaba cada vez que tenían relaciones sexuales.

— Pero esto que hacemos ahora... — continuó el menor apegándose más a él volviendo a colocar su cabeza en su pecho — es incluso más significativo para mí.

— ¿Puedo saber porque? — le interrogó mientras besaba la cabeza de este una vez se acomodó nuevamente.

— Justo por eso que acabas de hacer — respondió con una sonrisa dejando a Volkov un poco confundido puesto que el no consideraba haber hecho algo fuera de lo normal — es que...yo nunca había hecho el amor con alguien hasta que llegaste tú... — volvió a separarse pues quería mirar a su ruso a los ojos mientras le decía esto — si que antes había tenido relaciones y todo ese rollo con otras personas... pero no es lo mismo tener sexo a hacer el amor — le explicó mientras que Volkov solo lo escuchaba y continuaba acariciando la espalda del moreno justo donde su tatuaje compartido se encontraba — y yo amo hacer el amor contigo y luego tener momentos aún más íntimos como este en los cuales nos quedamos aquí acostados hablando, dándonos más cariño o ambas cosas como ahora hacemos — sonrió inconscientemente denotando su felicidad — amo muchísimo esto...

— Entonces... — comenzó a decirle V luego de unos segundos donde permanecieron abrazados— haremos el amor todas la veces que quieras y luego te llenaré de caricias para que recuerdes siempre que lo nuestro va más allá de ese tipo de intimidad — beso nuevamente la frente de este — que nosotros conectamos de muchas formas y cada una de ellas es única y especial — finalizó bajando su mirada buscando ellos ojos bicolores de su pareja para encontrarlos cristalinos, por lo que sin decir nada más, lo levantó y acostó sobre el para poder abrazarlo mejor mientras que Horacio ocultaba su rostro entre el cuello y el hombro de V.

No era necesario decir nada más, ambos sabían lo que el otro pensaba y entre abrazos y caricias ya todo había quedado demostrado. Amaban esta nueva etapa que su relación les había brindado, pero más amaban estos momentos aún más significativos donde se expresaban y mostraban de la manera más real y pura que podían ser.

Solo eran Horacio y Viktor demostrándose su amor, y eso era lo más significativo para los dos.

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