Esa semana de vacaciones había sido diferente a las demás, su padre no los envió de viaje como siempre, no como castigo, sino como precaución, pues el chileno y la mexicana pasaban mucho tiempo juntos a solas, y ahora Felipe Montesinos se daba cuenta de su error. No quería confrontarlos directamente, no podía, en su experiencia, prohibir algo solo motivaba más a Valerio, necesitaba otra estrategia para separarlos o al menos para que fuesen más prudentes, pues en su corazón de padre que de cuando en cuando mostraba, su preocupación era Lucrecia, a quien quería más que a su propio hijo por irónico que suene.

- Hija, ¿Puedo hablar contigo un momento? - Felipe Montesinos

- ¿De qué se trata? - Lu

- Sé que no eres mi hija biológica, y que Valerio no es tu hermano de sangre, por lo que su relación no es algo fuera de lo ordinario y a pesar de mi voluntad se dio-Sr. M

- Aja, ¿Pero? – Lu

- Lucrecia, a pesar de todo siempre serás mi princesa y quiero lo mejor para ti, me temo que Valerio está lejos de merecer ese título, estoy convencido de que eres una joven inteligente que sabe lo que le conviene– Sr. M

- ¿Si me estas pidiendo que termine con tu hijo querido padre, temo que es un tema que solo concierne a los dos involucrados, en este caso Valerio y yo – Lu

- Me concierne, porque están bajo mi tutela, querida- Felipe

- ¿Te molesta que follemos? –Lu

El señor Montesinos endureció y suspiro profundo para no perder la calma, e comentario de la joven lo descoloco un poco.

- Si me molesta o no, no viene al caso, les interesa poco o nada mi opinión, sobre todo a tu hermano – Felipe M

- Medio hermano, aunque ahora no es ni eso – Lu

- Yaaa....¿Tu novio entonces? – Felipe

- No hemos formalizado, pero hoy en día quien lo hace- Lu

- Yaaa....no quiero sonar amenazante, pero no me agrada la idea de que vivan bajo el mismo techo, vayan a la cama del otro y no tengan una relación definida – Sr. M

- Papa no suenas para nada amenazante... ¿Qué es lo que quieres entonces? ¿Cuál es el punto al que quieres llegar? – Lu

- Me he visto en la obligación de alertar al personal... – Felipe siendo interrumpido

- ¿No hablas enserio? –Lu

- Hablo muy enserio – Sr. M

-No somos niños- Lu

- Solo quería avisarte para que no sean encontrados en una situación incómoda- Felipe

- Tengo 17 años, no necesito niñera –Lu

- Si no hago esto, necesitaremos niñera...pero para mis nietos –Sr. M

- No exageres, sabemos cuidarnos –lu

- Seguro, la última vez me quedo claro- Felipe

- Papa no soy una niña – Lu

- Para mi siempre lo seras – Sr. M depositando un beso en su frente y salientod sin decir nada mas.