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No es un misterio que Thor Odinson es algo torpe, a Loki no le extraña que se lastime de vez en cuando y no sea capaz de guardar la calma, aún así lo ama

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En un departamento lujoso de la ciudad de New York se encontraba Thor Odinson preparando la cena para su amado, Loki, rara vez era él quien se encargaba de esa tarea pues Loki era mucho más habilidoso con la cocina y más de una vez el rubio terminaba con cortes en sus dedos, Loki ya le había prohibido acercarse a la cocina, pero ese día era especial ya que sería su segundo aniversario y el azabache volvería muy cansado a casa después de trabajar en su industria de modelar todo el día, trabajo del que no se podía permitir escapar por la cercanía que existía con la nueva temporada de verano, así que si, esa era la oportunidad perfecta para Thor de preparar una buena cena y redimirse.

Sin embargo los dioses no querían estar del lado de vez y como un amargo recordatorio de su escasa habilidad terminó quemándose la mano al no usar un paño para tomar la olla a alta temperatura, el contenido se repartió en el suelo y dos marcas rojas alargadas se dejaban ver en sus palmas, eran muy dolorosas, para aumentar su humillación en la cocina Loki llego en ese instante apresurado ante el ruido que escuchó nada más abrió la puerta, el azabache frunció el ceño con molestia, Thor había desobedecido su prohibición y por la forma en la que el rubio ocultaba sus manos detrás de su espalda supo que había pasado lo que intentó evitar sacando a Thor de la cocina, el ojiverde sujeto el puente de su nariz mientras apretaba los ojos intentando calmarse a sí mismo, Thor solo bajo la mirada avergonzado aún con dolor en sus manos.

— Bien — suspiro el pelinegro cuando ya se encontraba más tranquilo — Déjame ver — estiró sus manos en dirección a Thor para que le mostrara sus heridas, Thor se mostró reacio a hacerlo hasta que junto con un suspiro cedió apoyando el dorso de ambas manos sobre las palmas de Loki mostrándole el daño.

Loki suspiro, no se podía descifrar si era decepción o preocupación, el pelinegro relajó su expresión mientras guiaba a Thor hacia la llave del agua y la encendía para mojar las manos de su amado y relajar un poco el dolor, el rubio se quejó, pero no hizo más escándalo.

— Perdón Loki, solo quería intentar hacer algo especial para esta noche y al final solo termine arruinando todo y causándote más molestia de la necesaria — Thor se mostraba arrepentido, Loki no podía estar furioso con él pues el rubio no tenía malas intenciones, su novio era realmente muy torpe y sentía que ya era suficiente castigo con esas dolorosas marcas en su piel.

— Ya, ya — intentó consolarlo con un suspiro, corto el flujo de agua y fue a buscar unas vendas para evitar que las pequeñas heridas que se habían abierto lleguen a infectarse, volvió con Thor y tomó asiento en la encimera esperando que el rubio tome lugar entre sus piernas.

— Auch — se quejó el rubio mientras sentía el alcohol en sus manos y luego ver cómo eran vendadas, ardía y era molesto, no era la primera vez que Loki hacía eso, sin embargo no era capaz de acostumbrarse.

— Debes cuidar tu cuerpo, Thor, especialmente tus manos — cuando terminó el vendaje Loki tomó la mano herida de Thor y la posó con cuidado sobre su mejilla mientras cerraba los ojos, le gustaba el toque de Thor sobre su piel y lo desconsolaba tenerlo herido.

Thor besó los labios de pareja con cariño en forma de disculpa y agradecimiento por lo que había hecho, Loki quizá no era muy cariñoso con sus palabras, pero cada detalle era único y Thor no dejaba de aprender de cada uno de ellos descubriendo cada día uno nuevo. Loki abrazó a su amado por el cuello profundizando el beso, el azabache amaba mil cosas del rubio que nunca admitiría, una de ellas era su habilidad al besarlo, tan intimo, tan propio, tan único, con un solo beso lo hacía volar y soñar, sentirse feliz.

— Ya no estés triste Thor-pe, no estoy enfadado contigo y además debemos celebrar, limpiaré lo del suelo y llamaré para que nos traigan comida — Thor gruño cerca de los labios de Loki, no le agradaba la idea de que su pareja limpiara el desastre que había causado, se le notaba al azabache lo cansado que estaba su cuerpo, pero Thor no podía decir mucho en contra de sus deseos, Loki era muy astuto y orgulloso.

— Lo limpiare mañana

— Conociéndote te tropezarás con el líquido y terminarás en el suelo — la poca confianza que Loki le tenía hacía suspirar a Thor decepcionado, el rubio lo miro con ojos suplicantes esperando que Loki lo deje limpiar, pero sabía que eso no ocurriría por sus heridas.

El azabache suspiro acercando más al rubio a su cuerpo, rodeó con sus piernas la cintura de su amado y apoyó su frente con la de él.

— Eres un desastre, Odinson, pero como desastre te amo — Thor sonrió inflando su pecho con orgullo haciendo reír a Loki — Te amo — Thor sonrió triunfante — Te amo — el rubio elevó su rostro con altanería. Loki reía ante la actitud de Thor, era muy gracioso cuando quería.

— Yo también te amo Loki, no sabes cuanto — juntaron sus labios nuevamente en un beso, Thor olvido el dolor y Loki su cansancio, Thor podía ser un torpe y Loki poco cariñoso, pero junto al otro brillaban y se complementaban, mostrándole al otro lo que no podrían mostrarle al mundo.

— Feliz aniversario, Thor

— Feliz aniversario, por este y muchos, muchos más

— Pero sin quemaduras

— Si, sin quemaduras

Ambos rieron para seguir compartiendo besos llenos de amor.

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