Especial San Valentín - 1ª Parte
Intentaré que sean dos entregas, la primera la elección de sus parejas, compras, y fabricación del chocolate y todo lo demás, y en la segunda serán las entregas y las reacciones. La segunda espero ponerla en el mismo día de los enamorados... mucho estrés para este cuerpo vago.
Así que con la lista aquí a mi lado, intentaré comenzar.
Atención: Si aparece un personaje no canon, no se asuste, puede ser la OC de la escritora que quiere participar :3
--------------------------------------------------------------
¡El día de San Valentín se acercaba! (inserten meme de Sam va lentín) ¡Era momento de empezar a prepararlo todo, que no es bueno hacer las cosas a última hora! (ojalá me aplicase yo eso... ya dejo de hablar, perdón)
Varios días antes del día señalado, varias hermanas valkirias se reunieron juntas en uno de los jardines del Valhalla, habiendo quedado para salir a comprar los ingredientes y preparar entre todas chocolates para regalar. Seis valkirias se reunieron, pues no había más a quién esperar, empezando a caminar juntas.
- ¿Reginleif no va a venir? - preguntó Randgriz mirando atrás, sabiendo que su hermana era realmente puntual.
- No se apuntó a venir con nosotras, sus razones tendría... - Prour iba caminando detrás de ellas.
Sus pasos eran más largos y si iba delante iba incómoda, pues sabía que le tapaba completamente la vista a sus hermanas.
- También podríamos haber invitado a la señorita Eva... - comentó Geir con inocencia.
Era tarde para que Hrist, a su lado, le tapara la boca a la menor. Brunhilde caminaba seria mirando al frente, callada, pero emanaba un aura un tanto enfadada. Hrist le sonrió a la valkiria menor.
- Dos mujeres que van a cocinar chocolates al mismo hombre puede resultar algo violento si van juntas... - le explicó.
- Y sobre todo si está casado con ella y no tiene ninguna oportunidad - Hlökk terminó de comentar eso con una sonrisa.
No era su intención herir a Brunhilde, pero era su forma de ser...
- Entonces... - Geir la miró - ¿Vas a cocinar para dos...?
Ella asintió seria y decidida, volviendo su paso más rápido y dejándolas atrás.
- ¡Nuestra hermana mayor no sale soltera de esta! - exclamó Prour levantando un puño con felicidad.
*
A la vez que las valkirias salían juntas, Jack regresaba por otro lugar con una bolsa de papel en su pecho. Él había comprado todo el chocolate y el resto de los ingredientes, comprando de sobra porque tanto él como sus dos compañeros eran unos novatos en el arte culinario, por no decir en la repostería. Era fácil comprarlos ya hechos, pero... se iba la magia, claramente. Había encargado los moldes y algunos utensilios de cocina a sus compañeros... y rezaba internamente para que ese viejo japonés hiciera bien las cosas.
Conforme andaba, miraba a las personas a su alrededor. Sus colores eran bellos, eran de amor, cariño, algunos con nervios, emoción... nunca había visto tantos colores bonitos juntos representados en dioses. Escuchando a su espaldas las chanclas de los japoneses chocar contra el suelo, Jack se detuvo y les esperó, viendo llegar a Sasaki y Okita con una bolsa cada uno.
- Oh, caballeros, ¿fue todo bien? - preguntó al ver sus bolsas.
- Todo bien, compré los moldes - Sasaki sonrió enseñando unos con forma de corazón típicos, y detrás de esos tenía escondido un molde con forma de pececitos.
Okita solo asintió, enseñando en su bolsa que tenía un pequeño libro de recetas más las cajas para guardar luego los dulces.
- Me alegra entonces tenerlo todo - Jack sonrió levantando las puntas de su bigote - Volvamos entonces. Esto no será rápido.
*
Mientras, Eva estaba frotando y limpiando unas bonitas manzanas rojas que sonaban apetitosas al ser golpeadas, y sonreía felizmente. Tenía al fuego una olla cerámica donde había metido cacao y endulzaba con caña de azúcar. Lo iba moviendo y lo probaba poco a poco, midiendo con su propio gusto y paladar el dulzor del cacao. Todo esto sería mucho más fácil si tuviese las herramientas que tenían los demás, pero a ella le gustaba hacerlo así. Además, no sabía leer, pero no tenía prisa. No iba a hacer algo tan complicado, solo bañaría las manzanas en el cacao y las dejaría enfriar, sabía que a su marido le gustaba eso, así tan simple.
- Seguro que le gustan... - ella sonrió sonrojada - Espero ser capaz de hacer el chocolate bien...
*
Loki iba flotando y silbando en un tono bastante agudo y molesto, llevando en su mano una caja cuadrada de dulces de San Valentín bastante simples. No, no estaba enamorado ni iba a declarársele a nadie, ni ser formal o pedir una bonita amistad... Iba a vengarse por un estúpido regalo relacionado con una silla de montar caballos...y necesitaba para ello un poco de ayuda. Le molestaba creerlo, pero era lo mejor. Así se aseguraba de que iba a salir como planeaba. Dio una risita aligerando su marcha, sonriendo ladinamente.
*
- Daos prisa, lentos. Todo debe estar perfectamente preparado cuanto antes posible.
La diosa griega del amor daba órdenes a sus sirvientes mientras ella estaba cómodamente sentada en la espalda de uno de ellos, dando golpecitos molesta con las uñas en la cabeza calva de uno de ellos. Mientras, varios preparaban por ella los dulces y chocolates que ella tenía que entregar, y ella solo daría el último toque como diosa del amor que era para asegurar que su "víctima" cayera de una maldita vez a sus pies.
Ella sacó de entre sus pechos un frasco rosado con un corazón por tapadera, mirándolo sonriente y decidida, haciendo ruido al pasarlo por sus uñas. Si, definitivamente su presa caería en le momento en que su lengua tomará uno de sus chocolates...con extra de amor de la diosa Afrodita.
*
El dios Poseidón se encontraba en sus aposentos de brazos cruzados, mirando con serenidad varias cosas que tenía encima de la mesa. El dios había mandado comprar los dulces, unos de la más extrema calidad porque él no se veía metido en una cocina haciendo chocolate...ni siquiera obligado. Solo el hecho de mancharse de pringoso ya se le hacía inaudito. No, no pasaría por eso, además de que no le saldría bien.
Había mandado comprar chocolates y bombones de muchos tipos varios, pues no sabía cuales les gustaría a él...no tenía ni idea. Ni una sola y remota idea. Así que antes de gastar su orgullo y dignidad preguntando a alguien y que se enteraran, haría un combinado de muchos tipos. Al menos acertaría, seguro, con alguno...a no ser que no le gustará el chocolate. Esa nueva duda le hizo abrir los ojos como platos y fruncir los labios, un poco molesto, golpeando con sus dedos en su brazo.
No era tan difícil, por lo menos estaba el detalle y el sentimiento en todo caso...pero se aseguró de elegir los chocolates más perfectos de entre todas las cajas para hacer la suya propia variada, entre los que incluían algunos con forma de corazón o de decorados amorosos...que escondería en una elegante y bonita caja formal. Así nadie sospecharía nada, solo era una muestra de respeto...y había más oportunidades de que la abriese en soledad y revelase lo que había en su interior sin tener muchos testigos. Todo estaba planeado...
*
Las seis Valkirias habían terminado sus compras y se ayudaban la una a la otra en una gran cocina con distintas estancias. Prour no tenía problema en llevar las 50 bolsas que tenían, tampoco como Randgriz de limpiar y preparar toda la cocina, Hrist de pelar fruta, Hlökk de la batidora, Geir con el libro de recetas y Brunhilde... Andaba un poco estresada, pues tenía que cocinar para dos y seguramente tenían un apetito voraz.
No había problema si una tenía que ayudar a otra, pues algunas como Hlökk no eran buenas en la cocina, pero Randgriz y Hrist si que sabían desenvolverse bien.
La cuarta valkiria había optado por algo tradicional y bonito, teniendo una caja en forma de corazón donde metería bombones típicos hechos por ella, pues era una chica sencilla...y Lu Bu también lo era.
Hrist también era como ella, en el sentido de gustarle las cosas sencillas y tradicionales. Además, seguro que a Sasaki le gustaban los dulces, y que no tenían que ser muy ostentosos, decorados para que le gustarán. Tenía cara de goloso y seguro que también sería feliz si le regalaban algo de chocolate.
Hlökk lo tenía algo más complicado, pero ya estaba acostumbrada a los retos. Sus chocolates debían ser elegantes y finos, tal vez con un fino relleno de diferentes tes, como negro y rojo entre los favoritos.
Prour iba a seguir el camino de Randgriz... Salvo que tenía que multiplicar la cantidad de una manera bestial. Raiden comía vorazmente todo lo que fuese, pues necesitaba mucha energía...la gastaba pronto. Y otra cosa era ver dónde escondía semejante cantidad de chocolate que tenía pensada... Sin que su padre se enterase.
Geir estaba concentrada en leer el libro con el ceño fruncido. Lo suyo era realmente sencillo, solo quería hacer chocolates con fresas...tierno, lindo...y afrodisíaco, aunque eso último no lo sabía ella.
Brunhilde no paraba quieta. Trabajaba rápido y lo hacía todo muy brusco con el ceño fruncido. Trabajar bajo presión siempre la ponía de mal humor. De esa forma tan brusca de hacer las cosas, sus hermanas la miraban impresionadas. Brunhilde tomó un cuchillo para empezar a cortar y pelar las manzanas a semejante velocidad que hizo que cortase un poco la yema del dedo índice.
- Ah, maldición... - Dijo dejando el cuchillo con brusquedad en la mesa y yendo a echarse agua en el dedo.
Las demás se miraron y dejaron lo que estaban haciendo, yendo hacia ella a la vez. Cuando Brunhilde iba a agarrar el cuchillo de nuevo, la mano de Hrist se puso sobre la suya deteniendola.
- Hermana...no hagas eso en tu estado...
- Le pidió amablemente.
- Ya te has cortado... - Randgriz le tomó el dedo y le puso una curita - No queremos más accidentes.
- La próxima vez te vas a cortar el dedo entero - Hlökk se puso en jarras.
Ella bufó, dando un golpe en la mesa con la palma de la mano.
- Perdón, es que estoy estresada - dijo molesta.
- Tranquila, no lo habíamos notado - Prour giró los ojos.
- Así no puede hacer chocolate de amor, hermana... - Randgriz le sonrió con cariño - No puedes prepararlo todo con ansiedad y estrés, sino con cariño y ternura. Son para quienes amas, y le quieres transmitir amor...no nervios.
Ella bajó la cabeza mordiéndose el labio con nervio y luego suspiró. Cierto es que tenía un poco de más estrés que los demás... Y siempre se esforzaba mucho...pero sabía que sus hermanas no la iban a dejar tirada y la ayudarían con lo que necesitase.
*
Mientras tanto, Jack tenía abierto un libro de cocina en sus manos que leía un apartado para la repostería. Sobre su hombro, Kojiro observaba los dibujos del libro, y por debajo de su brazo, Okita miraba también. Jack los miró a los dos sin mover la cabeza.
- Caballeros, si quieren que les dejé el libro, pidanmelo...
- Oh, nononono...no es eso - Sasaki se excusó negando - Simplemente era ver los dibujos.
- Además, ninguno de nosotros sabemos leer este idioma - siguió Okita.
- Comprendo, discúlpenme... En ese caso si no os importa, os leeré las recetas y los ingredientes. ¿Tienen pensado que quieren cocinar exactamente?
Ellos dos se miraron. Solo ese vistazo fue suficiente para que Jack entendiera que ellos no habían visto nunca una cocina, ni sabían usarla ni preparar nada. Jack había tenido que aprender a defenderse solo en la cocina cuando quedó sin nadie, pero nunca había preparado chocolate. Definitivamente eso iba a ser más difícil de lo que pensó, incluso ahora teniendo que ayudar a Okita y Sasaki, como buen caballero que era.
*
Loki había llegado a donde quería, siendo una habitación de puerta simple sonriente. Necesitaba un poquito de ayuda, y sabía a quién pedirla, a quien seguramente estaba haciendo chocolate también. Agarró el pomo de la puerta, quedándose quieto un momento, y luego lo empujó abriendo. El lugar no era una habitación corriente, sino que más bien parecía una cueva húmeda que parecía un refugio subterráneo. Él pasó flotando, mirando estanterías llenas de cosas extrañas y libros, deteniéndose al ver a dos ojos escarlatas mirándole. Enfrente de él, había un ser semejante a un enorme caballo de ojos agresivos y dientes afilados, con su crin y su cola llena de algas marinas. El ser le olfateó toscamente, a la vez que Loki esperaba y escuchaba de fondo.
- Una pizca de pescado podrido para el aroma... - murmuró una voz - un lagarto ahogado, por supuesto...
Allí atrás había una mujer de espaldas mirando un libro y echando cosas a un caldero con un color horroroso. Cualquiera diría que estaba haciendo una pócima en vez de... chocolate. ¿Y esos ingredientes? Pobre quien se intoxique con eso...
- Y las algas, no pueden faltar...
Echando un puñado al caldero, lo movió con un gran cucharón, orgullosa de su creación. Loki pasó esquivando al animal una vez que le olfateó y reconoció, no queriendo mojarse al estar cerca de ese caballo que parecía empapado. Tampoco es que le gustarán mucho los caballos...aunque esa yegua era aceptable.
- Vamos a tener una víctima asegurada si se come eso que tienes ahí... - comentó flotando y sentándose en la mesa a su lado, observando lo que hacía - Eres única haciendo el chocolate...
Ella le miró de reojo con una mueca seria y algo despreocupada, sacando el cucharón de la olla mientras eso burbujeaba de una manera horrible, por no decir como olía...
- ¿En serio crees que esto es para él? Realmente eres idiota, Loki...
Ella volcó el contenido de la olla intencionadamente sobre un largo comedero que había detrás de la mesa. Tras eso, le puso el cucharón sucio y maloliente encima de los labios a Loki con un rápido movimiento, para molestarle, sobre todo, consiguiendo que pusiera una mueca y se frotara rápidamente la boca con la manga, sacando la lengua con asco.
- Uisce, cariño, hora de comer - dijo cambiando su voz a una más suave y agradable, llamando a su kelpie de mascota - Con cuidado, está caliente.
Ella se quitó de ahí, dejando paso a su kelpie que iba a oler la comida, siendo algo delicioso para una raza como la suya, mientras la chica se iba caminando tranquilamente hacia otra parte, donde acababa esa parte del lugar que parecía la cueva de un brujo y empezaba lo que era ya un hogar normal, yendo a una cocina normal a lavarse las manos.
- ¿Puedes decirme ya que es lo que quieres? - preguntó sin mirarle secándose las manos - Estoy muy, pero que muy ocupada, y ahora me voy a concentrar tanto que ni quisiera voy a oír.
- Oh, ¿no puedo venir por una vez sólo con la intención de ver a mi querida amiga y compañera de líos y desastres? - preguntó con una falsa sonrisa.
- Sin pedirme algo, no - contestó ella empezando a mirar en cajones.
- Entonces dejo de fingir, se me da mal.
- Se te da bien, pero conmigo no funciona.
Ella sacó unos boles y utensilios de cocina, yendo a sacar de la nevera algunas cosas dando saltitos. Se le había quitado su cara seria y concentrada de antes, pareciendo otra persona, tarareando e incluso bailando un poco mientras iba de acá para allá. Sonreía y no se podía estar quieta. Loki sacó la lengua hacia un lado con una mueca.
- No me gusta cuando te pones así, me da asco... - admitió - ¿Dónde está la mujer fría y sanguinaria que conocí, aquella a la que le gustaba molestar y herir emocionalmente a los demás para poder nutrirse con sus sentimientos oscuros? - preguntó haciendo un poco de drama.
- Ahora mismo dormida - contestó - Ahora solo existe la Morrigan enamorada - contestó ella con una sonrisa que le retaba a seguir hablando.
Loki hizo otra mueca volviendo a sentarse en el borde de la mesa, cruzando sus brazos molesto.
- Has elegido mal... - masculló.
- No te oigo, estoy empezando a concentrarme y a ignorar - ella sonreía poniendo el fuego.
- ¿Hay alguien más aburrido para ti que él?
- Cuidado que voy~
Un golpe de sartén le pasó rozando el cabello a Loki si no llega a bajar la cabeza. Era claramente un ataque hacia su pregunta, pero la diosa celta lo había hecho parecer que solo seguía bailando felizmente.
- Vale, vale... antes de te concentres demasiado y saques esa... asquerosa faceta cursi tuya, ¿tienes algo para hacer inodoro e insípido un alimento bastante... potente?
- ¿Algo como para hacer que algo similar a un chile fantasma no sepa ni se note su sabor hasta que ya esté en el vientre mezclado con chocolate? - ella seguía preparando cosas sin mirarle y sonriendo.
- Eso es lo que más me gusta de ti... - tendió su mano hacia su mejilla y le dio un tironcito, pero ella no se inmutó - No tengo que contarte mucho para que sepas a lo que me refiero. Será eso cierto de qué ves el futuro...
- Es cierto, ya no se cómo decírtelo. Así te digo que si no me pedías ayuda no lo ibas a conseguir...
- Genial - Loki dejó una caja cuadrada de dulces comprados en la mesa - Hazme el favor ya que estás y me lo preparas con chile y eso para camuflarlo.
- De eso nada - Ella le dio la espalda batiendo en un bol - Estas cosas las prepara uno mismo. Tienes que hacerlo tú.
- Morrigan, no me voy a declarar, voy a vengarme de un viejo regalo - Él frunció el ceño - Detesto la cursilería.
- ¿Ah, si? - ella sonrió, terminando de echar el chocolate en la olla para empezar a prepararlo - ¿Detestas la cursilería? Ven que mimo entonces un poco, que te abrazo y te quiero mucho~
Ella se rió yendo hacia él con los brazos abiertos lista para abrazarle, pero a Loki le daba escalofríos y huía de ella flotando y amenazando que nada de cursilerías.
Luego ella volvió, recordando una cosa y olvidándose de Loki.
- Ah, si... También debo hacer chocolates para mi suegro, debo ganarme a la familia - comentó canturreando y volviendo a su trabajo felizmente.
- ¿Le haces chocolate formal a tu suegro y a tu querido amigo no le haces de amistad? - preguntó asomándose a su lado, poniendo una mano en su pecho, como herido ante eso.
- No te lo mereces - ella sonrió victoriosa.
- Vas a acabar sola - le dijo seseando como una serpiente - Sssssssolaaaa...
- ¡Vete a la...! - ella estiró una mano hacia él y una bola de magia negra salió disparada.
Loki se rió agudamente esquivando eso, siguiendo con sus tonterías en voz baja. Ella giró los ojos intentando ignorarme y volvió a sonreír mirando el chocolate, emocionada.
***************
Y con esto termina la primera parte ^^
Luego en la segunda veremos qué chocolates han preparado cada uno y sobretodo, el darles el regalo a sus amores ^^ (a excepción de Loki, claro)
Y por último... Solo por curiosidad... ¿Qué opinan de mi querida Morrigan? ¿A quién le estará haciendo el chocolate?
Lo sabremos el día de San Valentín ^^ ❤️
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro