Indicaciones obscenas; 'Te apetece mucho cuando lleguemos a casa', 'Mantén los ojos abiertos, mírame, bebé' y '¡Suficiente, por favor, no puedo más!'

Aviso de pelusa; 'Cántame otra vez'.

Advertencia; size kink, timeskip!kenma, lector implícito más grande (como en altura o tamaño de pene, no importa)

"Estás listo para cuando lleguemos a casa", Kenma sintió que su cuerpo se congelaba, tensándose ante las palabras (M/n) susurradas en su oído, sus ojos se abrieron como platos y su rostro se puso rojo brillante.

"Hagámoslo de nuevo en algún momento", Kenma ignoró por completo lo que le dijo el chico frente a él, mirando hacia abajo y decidiendo que sería mejor si solo seguía en silencio a (M/n), dirigiéndose a casa en total silencio.

Kenma arrastraba los pies por el pavimento, caminaba más lento que de costumbre, sintiéndose un poco asustado -y excitado- por lo que (M/n) quería e iba a hacerle cuando llegaran a casa, casi no quería para llegar allí, pero al mismo tiempo, quería estar allí ya.

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Y aquí estaba ahora, sus dos brazos cubrían su rostro sonrojado y sus ojos brillantes, llorando y gimiendo lo suficientemente fuerte como para que (M/n) lo escuchara, mezclándose con el sonido de sus pieles chocando.

(M/n) miraba la forma en que el cuerpo de Kenma se sacudía con cada embestida profunda dentro de él, su mano acariciaba y presionaba el bulto visible en la parte inferior de su abdomen, prestando mucha atención a los sonidos apagados que podía escuchar. Sabía que Kenma se sentía avergonzado por sus gemidos y gemidos lascivos y agudos, pero quería escucharlo más fuerte. Quería que gimiera su nombre lo suficientemente fuerte como para que todos supieran a quién pertenecía Kenma.

Entonces, molesto un poco por el hecho de que los brazos de Kenma cubrieron la mayoría de sus gemidos, (M/n) levantó las manos y apartó los brazos del hombre de su rostro, inmovilizándolos a ambos lados de su cabeza, sin embargo, Kenma simplemente cerró los ojos y miró hacia otro lado, algo que hizo que (M/n) se inclinara y depositara besos en su cuello expuesto, subiendo lentamente a su mejilla antes de susurrarle al oído.

"Mantén los ojos abiertos, mírame, bebé", dejando escapar un fuerte grito ahogado ante el particular empuje duro dentro de él, los ojos de Kenma se abrieron de par en par, retorciendo sus muñecas lejos del agarre suelto de (M/n), envolviendo sus brazos. alrededor de su cuello, sus delgadas piernas alrededor de sus caderas, sosteniéndolo más cerca de su cuerpo, jadeando por aire y gimiendo ante los profundos y duros empujes dentro de él.

"¡Suficiente, por favor, no puedo más!" Apartando su cabello de su rostro, (M/n) le dio un beso en los labios, juntando sus frentes.

"Sé que puedes tomarlo, amor, puedes tomar mucho más que esto", murmuró contra sus labios, manteniendo el contacto visual, "Muéstrame lo bien que puedes tomar mi polla".

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Completamente exhausto, Kenma yace en la cama, temblando por las secuelas que acaba de atravesar su cuerpo. Fue aseado por (M/n), quien puso algo de su ropa sobre su cuerpo, cambió las sábanas y lo acostó sobre el colchón, cubriendo su cuerpo y colocándose a su lado.

Kenma dejó que (M/n) lo abrazara, jugando con su cabello y tarareando una canción antes de murmurar la letra en voz baja, tranquila y relajante. Gimió, acariciando su rostro en el pecho de (M/n) sintiéndolo vibrar con su voz antes de que de repente se detuviera. Sin levantar la vista, Kenma envolvió su brazo alrededor de (M/n) y se colocó encima de él, sintiéndose reconfortado por el suave agarre alrededor de su cintura.

"Cántame otra vez", después de pensar que Kenma gimió porque quería que se callara, (M/n) se sintió un poco aliviado cuando murmuró esas palabras con una voz aturdida y somnolienta, y continuó cantando canciones que sabía que poner a Kenma a dormir en unos segundos.