Advertencia; che'nya está en celo, ooc! che'nya(?, beso negro.

La mente de Che'nya estaba confusa, un poco más mareada, todo debido a la alta temperatura de su cuerpo. Ya le envió un mensaje de texto a su novio sobre su problema y actualmente lo estaba esperando.

(M/n) llegó al dormitorio de Che'nya, sin molestarse en llamar a la puerta ya que el gato híbrido le dijo que simplemente entrara. El sonido de la puerta llamó la atención del hombre de cabello violeta, gimiendo en voz baja mientras extendía su mano para (M/n), su manera silenciosa de decirle que ya no tenía supresores disponibles y que solo lo tenía a él. (M/n) entendió y cerró la puerta detrás de él, era tarde en la noche en los dormitorios de la Royal Sword Academy, tenían que estar callados.

O tan silenciosos como podrían ser.

(M/n) caminó más cerca de la cama y se subió a ella, cerniéndose sobre Chen'nya e inclinándose para besarlo, lo que lo hizo gemir y gimotear, empujando sus caderas hacia arriba para tratar de obtener algo de la fricción que anhelaba.

Bajando las manos, (M/n) quitó la ropa inferior de Che'nya de su cuerpo, acariciando lentamente sus muslos hasta que sus dedos se arrastraron hacia arriba y entre ellos. Apenas adornando su entrada, (M/n) sintió que sus dedos se cubrían con el resbaladizo líquido que Che'nya estaba liberando, el toque hizo que el hombre debajo de él se retorciera en la cama.

"Estás tan mojado", susurró y Chen'nya se dio la vuelta sin decir una palabra, levantando las caderas de la cama, balanceándolas mientras levantaba la cola. (M/n) observó la vista mientras extendía sus manos para separar sus mejillas, mirando su agujero, goteando y retorciéndose.

Inclinándose, presionó su cara contra su trasero, sacando la lengua y arrastrándola lentamente, saboreándolo. Che'nya agarró la almohada, luchando por mantenerse en silencio mientras empujaba sus caderas hacia atrás sobre la lengua de (M/n), sintiendo que lo penetraba y lamía dentro de él.

Esta era una de las formas más rápidas de hacer que Che'nya se calmara, por lo general, después de que lo comieran solo necesitaría dos orgasmos más para sentir que la temperatura de su cuerpo bajaba a la normalidad.

Mirando hacia arriba, (M/n) vio cómo el cuerpo de Che'nya temblaba, sus gemidos ahogados por la almohada. Retrocedió, lamiéndose los labios y tirando de su parte inferior de la ropa lo suficientemente bajo como para sacar su erección, presionando su punta húmeda contra el agujero goteante de Che'nya.

Che'nya dejó escapar un gemido ahogado cuando (M/n) estaba completamente dentro de él, sus ojos rodaron hacia la parte posterior de su cabeza mientras sus brazos cedían, yaciendo inerte en la cama mientras lo único que lo sostenía era ( Las manos de M/n ) en sus caderas. Continuó gimiendo y gimiendo cada vez que el macho de pelo (h/c) empujaba profundamente dentro de él, satisfaciendo esa picazón que cubría todo su cuerpo.

"Eres... demasiado lento, (M/n), por favor... muévete más rápido~" suplicó, mirando por encima del hombro al hombre detrás de él.

Apretando los dientes, (M/n) hizo lo que le dijeron, causando que Che'nya soltara gemidos más fuertes y agudos. Estaba siendo casi demasiado ruidoso, por lo que (M/n) se inclinó sobre él, presionando su pecho contra la espalda del hombre tembloroso, y cubrió su boca con su mano.

"Tranquilo, bebé, los demás escucharán", murmuró junto a su oído, y la sensación de su aliento caliente contra su oreja suave y sensible hizo que los ojos de Che'nya se llenaran de lágrimas, su cuerpo temblaba mientras se corría.

Su embestida no se detuvo hasta que el cuerpo de Che'nya quedó débil y tembloroso, sus ojos entrecerrados y desenfocados a punto de quedarse dormido. (M/n) lo cuidó y se acostó a su lado hasta que llegó la mañana siguiente.

Y no se sorprendió mucho cuando despertó con una sensación de pesadez en su cuerpo, y cuando abrió los ojos, allí estaba Che'nya, con los ojos cerrados y las cejas fruncidas por el placer, sus caderas golpeando contra su muslo, dejando a cabo silenciosos jadeos y gemidos. Estaba a punto de correrse, cuando (M/n) lo inmovilizó en su lado de la cama, y ​​se fue mirándolo con ojos amarillos sorprendidos.

"¿Todavía estás caliente? ¿No te follé lo suficientemente fuerte anoche?" Che'nya solo negó con la cabeza en respuesta, lo que hizo que (M/n) sonriera mientras se inclinaba, "Entonces será mejor que llames para reportarte enfermo hoy".