Aclaraciónes: no habrá maldiciones para ningún personaje.

Ranma mujer.

Intento de lemmon . Leer bajo su responsabilidad.

Capitulo dedicado a: Chriissss

Ryoga se mueve incómodo en su cama, volteó del lado contrario en donde se supone estaría su prometida pelirroja, pero al palmear y ver que esta no se encontraba, se sentó en la orilla de la cama para buscar con sus pies sus sandalias, caminó con mucha pereza puesto que aún era muy temprano, un poco más de lo que se levantaba para ir a dar clases de artes marciales con Ranko.

Al bajar las escaleras vio la luz prendida de la cocina y le llegó a sus fosas nasales el rico aroma a hot cakes recién hechos, no espero mas para estar en el marco de la puerta para saludarla con un tierno beso en la mejilla, pero grande fue su sorpresa al ver a tan bella mujer desnuda que tan solo llevaba puesto el delantal color rosa que ocupada siempre cuando ésta le cocinaba.

Ranko: oh, ¡buenos días Ryoga!, toma asiento, el desayuno esta casi listo! — dijo con una amplia sonrisa para después regresar a lo que estaba haciendo, dándole la espalda al colmilludo.

Este por el contrario, se quedo mudo al no creer lo que estaba presenciando, a duras penas pudo tomar asiento en aquel pequeño comedor dentro de la cocina, tomó el periódico que estaba en la mesa para distraerse de aquella tentación, borrar todo pensamiento pecaminoso y recordando las palabras que le dijo su "queridisima"  suegra cuando estos eran novios "mi hija tiene que llegar virgen al altar, pobre de ti en donde me le toques un pelo a mi dulce e inocente niñita"  tragó saliva con tan solo recordar la "advertencia" de esa mujer con un rifle en manos. 

Estaba viendo las noticias sin importancia en esas hojas, pero de ves en cuando movía sus ojos discretamente por encima del periódico en dirección a  Ranko, podría jurar que ella lo estaba seduciendo al mover sus caderas al compás de una melodía que tarareaba ella y que él desconocía.

Cuando Ranko acabó, colocó en la mesa dos platos que contenía una hilera de 4 hot cakes bañados en miel con una rebanada de mantequilla enzima, acompañado de 2 huevos estrellados con tocino y una pequeña porción de uvas y kiwi. y de bebida en una taza el rico café que solo ella sabe como le gustaba a el y para ella solo una taza de té, pues le ayuda a estar en armonía y en paz con sigo misma. Desde que Ranko se mudo al comprometerse ella se encarga de alimentarlo muy bien, ya que lo considera muy importarte.

Ranko está sentada en frente de el, aún con el delantal puesto, lo cual el colmilludo agradeció ya que no degustaría del todo su desayuno.

Cuando estos acabaron,sin decir ninguna palabra en todo el trayecto, la chica recogió todos los platos para lavarlos, Ryoga solo la observaba, y no sabe de donde sacó el valor para siquiera abrir la boca para hablarle.

Ryoga: A-amor, n-no es que me moleste o algo parecido, pero... ¿por que no tienes ropa?

Ranko deja lo que estaba haciendo, se seca sus manos y a paso decidido va con Ryoga para después sentarse a horcajadas sobre sus piernas y pasar ambos manos por la nuca del colmilludo, este iba a protestar pero fue callado con un beso brusco por parte de la pelirroja, ella intenta profundizarlo, Ryoga le sigue, convirtiéndolo en un beso húmedo y sonoro, la abraza acercándola mas a él, Ranko involuntariamente mueve sus caderas de adelante hacia atrás, como consecuencia provocando roces con la entrepierna del hombre, que de a poco estaba despertando.

Ryoga: pa-para Ra-Ranko — interrumpió en jadeos el candente beso que le brindando su chica.

Ranko: ¿por qué? a tu "amiguito" parece gustarle — señala el miembro del chico que ya estaba por demás despierto sin siquiera darse cuenta, Ryoga no tardó en que su lindo rostro estallara en un bello color rojo. 

Ranko se baja de sus piernas para después arrodillarse quedando justo en frente de la entrepierna de Ryoga, quita el primer botón de sus pantalones y baja la cremallera con su boca lentamente, lo observa por unos momentos, y con su mano diestra lo acaricia por encima de su ropa interior, se levanta y se sienta en la mesa llamando con su dedo indice a Ryoga, éste sin pensarlo dos veces ya estaba entre las piernas de la chica besándola con pasión y mucho amor, estaba por continuar pero un sonido sonoro lo hizo parar.

Ryoga: ¿e-escuchas eso? 

Ranko: ¿escuchar que?

Aquel ruido se hizo cada vez mas fuerte a tal grado de que el chico se llevara ambas manos a sus oídos...

Se sienta de golpe en la cama, sudando y con la respiración agitada, ve a todas partes, estaba soló en aquella habitación, ya después de que se calmó un poco, se enfrento a la realidad... solo era un sueño, un sueño que fue producto de una de sus fantasías sexuales que tiene reprimidas. 

Al quitarse las sabanas se topó que tenia una erección, que después lo solucionaría en el baño, bajó a revisar ver si estaba su querida prometida, pero no estaba, solo estaba una nota en el refrigerador que lo sostenía un imán de flor.

"Ryoga, te dejo el desayuno preparado, tuviste el sueño muy pesado hoy, así que yo estaré entrenando cerca del río, regresaré cuando acabe. 

Te amo.

Atte: Ranko"

Ryoga se quedó mirando algo triste a la nada.

Ryoga: era muy bueno para ser verdad.

Espero les haya gustado :3 ...

Adiós, nos vemos a la otra.

Patitas pa que las quiero