Lazo
Los demonios han existido por un largo tiempo, siendo una de sus características más destacables, fuera de comer personas y morirse si se exponen al sol, es su fuerte aroma. Por alguna razón, los demonios expulsan fuertes feromonas que logran atraer a cualquier persona que se propongan, ya sea alfa, beta u omega, sin embargo, son los omegas quienes están más propensos a caer en estas trampas. La razón de esto es simple, en su mayoría, los demonios son alfas, todos con aromas muy fuertes y atractivos.
Esto hizo que los Cazadores de demonios fueran prácticamente alfas y betas y, desde hacía ya cuatrocientos años que no se veía un cazador omega.
Y llegó Kyojuro, Kyojuro Rengoku, primogénito del antiguo Pilar de la Llama, Shinjuro.
La mini-copia de Shinjuro - porque hasta su respiración usaba - había demostrado ser un digno descendiente de la familia Rengoku, aún si era el único omega que había nacido en el linaje, siendo el primer omega en llegar a ser Pilar.
--¡Usted sabe que lo respeto con todo mi corazón, Patrón, pero estoy en contra de aceptarlo! -- exclamó el rubio, ¿la situación?
Situándonos cronológicamente, supongo que saben dónde estamos, pero, por si no lo saben, les diré:
Déjenme que les diga que les cuento que, recientemente se "descubrió" que había un cazador novato que iba acompañado por su hermana demonio, Tanjiro y Nezuko Kamado, esos eran sus nombres, omegas, los dos.
¿Por qué dije "descubrió"? Simple, Tomioka, Pilar del agua y Sakonji Urokodaki, maestro del Pilar y de Tanjiro, lo sabían.
Al final, dejaron vivir a Nezuko, bajo la promesa de los tres usuarios de la respiración de agua que, si la omega llegaba a dañar a alguien, la mataban y luego se mataban los tres.
Pero eso no importa. O sea, si importa en lo canon, pero esto es un fanfic, no mamen.
Digo, sigamos.
Bien. Un tiempo después, Tanjiro, junto con sus amigos Zenitsu e Inosuke (beta y omega respectivamente), fueron enviados a una misión en conjunto al Pilar de la Llama.
En esta parte le meteremos musiquita de estrellita de Mario Bros para poder ir a lo importante.
Hagan de cuenta que había un demonio en el tren, ese demonio los metió a todos en sueños diferentes donde todo era perfecto, hermoso y sin ningún problema.
Claro, la única que no se mimió fue Nezuko, luego despertó Tanjiro y fueron despertando uno a uno, menos Zenitsu, ese wey seguía mimidó.
Bueno, de que Tanjiro e Inosuke vencieron al demonio, el cual era una Luna Inferior que se había unido al tren y vivieron felices para siempre.
Mentira.
Conmigo, no.
Bueno, tampoco en el canon, pero meh, yo soy yo.
Cómo sea.
Resulta que, una vez "terminado" el conflicto, hizo aparición un segundo demonio, la Tercera Luna Superior.
Cagaron.
--Conviértete en demonio, Kyojuro -- era la milésima vez que el demonio de nombre Akaza le decía eso
--¡Me niego! -- respondió
Pelearon, pelearon y pelearon.
Bueno, Rengoku peleó, Akaza únicamente esquivaba.
--No daño ni mato a omegas ni a niños -- decía la Luna -- Sin embargo, Kyojuro, tú aroma se me hace bastante, cómo decirlo… ¿Apetecible? … Sí, esa es la palabra, apetecible, no me detendré, te haré mi omega
Ese comentario provocó un gran escalofrío en el Pilar, ese comentario lo había escuchado ya de cientos de demonios, todos intentando intimidarlo y hacerlo bajar la cabeza, sometiéndose. Claro, siempre acababan con la cabeza cortada (y de paso el pito). Sin embargo, esta era la primera vez que sentía miedo. Nunca antes imaginó toparse con una Luna Superior, ni que la misma le dijera eso.
Hasta el momento, incluso si el demonio no había lanzado un ataque, sabía que no sería capaz de vencerlo y eso lo ponía nervioso.
--'No te desconcentres' -- pensaba -- 'No tiembles, mantente firme, eres un pilar' ¡Soy Kyojuro Rengoku, el Pilar de la Llama y nunca me doblegaré ante ti ni ningún demonio! -- exclamó mientras preparaba su próximo ataque -- Respiración de la Llama, novena-
--Entonces me llevaré al omega de los aretes -- sentenció -- Muzan-sama parece muy interesado en él, también podría llevarme al omega de la máscara, me parece que es el tipo de la Segunda Luna
--¡No te atrevas! -- exclamó el omega mayor -- ¡Ustedes, váyanse ya! ¡Los refuerzos no deben tardar! -- fue ahí donde Kyojuro cometió el peor error, dejó de ver a Akaza por un momento
--¡Rengoku-San! -- exclamó Tanjiro
--Deberías concentrarte en mi, Kyojuro -- eso fue lo último que escucho, junto a un grito de Tanjiro
[×××]
No se supo de Kyojuro Rengoku casi un mes.
Muchos creyeron que había muerto, pero Kagaya dijo que siguieran buscando.
--En tanto no se encuentre su cuerpo o la misma Luna nos diga que lo ha devorado, Kyojuro sigue con vida -- sentenció con suavidad, estaba preocupado por su hijo
Esa preocupación se disparó el día en que el rubio apareció.
--¡Kyojuro! -- con las pocas fuerzas que tenía, Ubuyashiki se dirigió a tratar de apoyar al rubio -- ¡Kiriya, Tomioka no debe estar lejos, ve y búscalo!
Kyojuro había regresado, sí, pero no de la mejor manera.
[×××]
--¡Hermano! -- exclamó Senjuro mientras entraba a la habitación donde descansaba Kyojuro, deteniéndose abruptamente al ver el estado en el que se encontraba
--Kyojuro -- susurró Shinjuro con dolor
El rubio se encontraba postrado en una de las camillas, dormido, con vendas cubriendo gran parte de su cuerpo.
Claro, no hay que olvidar la resaltante mordida en su nuca.
--¿Quién fue? -- preguntó Shinjuro a Shinobu, la beta lo había guiado a un cuarto aparte para hablar a solas con el Rengoku mayor
--No estamos seguros, sin embargo es noventa por ciento probable de que haya sido la Luna Superior Tres -- sacó de un mueble algunas hojas, las cuales pasó al rubio -- Parece que esperó pacientemente a la luna llena para poder despertar el celo de Kyojuro, pero hay signos de abuso antes de eso… y… Bueno… Lo marcó -- calló por un momento, en lo que él mayor terminaba por leer los papeles
--¿Les dijo algo cuando lo encontraron? -- preguntó serio mientras veía a través de la ventana, donde Tanjiro, Zenitsu e Inosuke, junto a los demás Pilares esperaban por noticias
--No, el shock era demasiado -- respondió -- Incluso, cuando Ubuyashiki-Sama o Tomioka-San se acercaron a tratar de ayudarlo, él los repelía, no fue hasta que Mitsuri llegó que pudieron traerlo
--¿Cuándo podrá salir? -- preguntó mientras leía los papeles nuevamente, para luego apretarlo fuertemente
--En una semana… -- el silencio se mantuvo durante varios minutos en aquella habitación, hasta que la pelimorada decidió hablar nuevamente --... ¿Qué hará con el bebé?
--Aún qué quisiera que no lo tuviera, no es mi decisión, es la de Kyojuro, será él quien decida qué hacer -- tras esa sencilla respuesta, abandonó la habitación, necesitaba ver a su hijo
[×××]
Un mes después, la familia Rengoku se encontraba en su hogar.
En la cocina, Senjuro preparaba la comida con calma mientras que Shinjuro intentaba que Kyojuro le dirigiera la palabra.
--Vamos, Kyojuro, ¿no quieres batata? -- cuestionaba el alfa mientras le mostraba al menor aquel "platillo", sin embargo, este no respondió
Nunca respondía, de hecho.
Solo veía hacia el patio de su hogar. Sin moverse desde que Shinjuro o Senjuro lo dejaban ahí al amanecer hasta que lo buscaban para que fuera a comer.
Luego, ambos alfas organizaban lo que necesitaban para vender en el mercado mientras que Kyojuro solo se quedaba sentado junto a la mesa, viendo su vacía taza de té.
Cuando todo estaba listo, subían al omega a la carreta y se dirigían al mercado, donde Kyojuro se quedaba sentado junto a su padre y su hermano hasta que estos recogían todo al atardecer. Volvían a su hogar, donde el omega sólo se quedaba sentado viendo un tablero de Shoji, pero sin mover nada, cenaba y luego iban a dormir.
Claro, tenían más cuidados con él, pero esa era la rutina básica desde hacía ya un mes. Mes donde los síntomas del embarazo se hacían notar más.
"Es demasiado riesgoso el abortar, no se si fue la Tercera Luna o incluso Muzan, pero algo ata la vida de Kyojuro a la del feto."
Esas habían sido las palabras de Tamayo cuándo le explicaron la situación.
Así que, aparte de haber sido abusado, estaba obligado a seguir con un embarazo que no pidió, estaba obligado a tener un bebé que no quería y estaba atado a alguien que no amaba.
Estaba jodida la situación.
[×××]
Esa rutina había seguido hasta que el embarazo llegó a su cuarto mes, donde el omega comenzó a responder a su padre y su hermano, no eran más de dos palabras juntas, pero era un avance. Tampoco contestaba a cosas muy complicadas. Solo preguntas o comentarios que podía responder con "Sí", "No", "Gracias" y pocas más expresiones, pero eso hacía feliz a su familia.
Poco después comenzó a ayudar a tareas del hogar, sencillas, claramente, además de retomar el hábito que le había enseñado su madre: tejer.
Poco a poco fue volviendo a ser aquel joven alegre, claro, con sus allegados, con cualquier alfa externo a su círculo social era demasiado cohibido y temeroso.
Incluso, aunque seguía mostrándose un tanto renuente al bebé que llevaba en su vientre, decidió tratar de verlo con buenos ojos, a final de cuentas lo tendría dentro suyo un tiempo más.
--Cuando nazca, decidiré si lo criaré yo o lo daré a otra familia -- respondió al cuestionamiento de Shinobu cuando fue al chequeo del quinto mes.
La Pilar, por su parte, no necesito más respuesta. Era decisión de su amigo, después de todo.
Kanroji había ido muy seguido a visitar a su maestro, ayudándolo en todo lo que podía y llevando regalos, tanto para el omega y el cachorro como para el hermano y padre de Kyojuro.
Shinjuro creía que su hijo cuidaría de ese bebé, a veces lo veía verdaderamente emocionado cuando hablaba de él cachorro, pero seguía siendo una posibilidad.
Al sexto mes, tras unos extraños meses sin reportes de ningún demonio, decidieron hacer una especie de fiesta para celebrar la llegada del bebé.
Parecía que Kyojuro criaría al pequeño, claro, su padre y su hermano estarían dispuestos a ayudarlo.
Aquella pequeña fiesta se llevó a cabo en la Sede de los Cazadores, para que Ubuyashiki pudiese estar presente.
Cada Pilar llevó un presente diferente.
Uzui y sus esposas llevaron extravagantes regalos, como ropa llena de brillitos, peluches con "fuego" bordado y una réplica de la katana de Kyojuro, claro, de plástico para que el bebé no se lastimase.
Tomioka solo le regalo un oso de peluche. Gigante, pero un oso de peluche a final de cuentas. Relleno de peluches de katanas, cuervos y un muñeco chiquito de práctica de espadas. Pero un peluche. Tenía un manual de como usar la Respiración de Agua (por parte de Urokodaki), pero era un peluche.
"Nos quitó el aprendiz, le quitamos al sucesor" decía la nota de Urokodaki.
Shinobu fue un tanto más normal, le dio algunos pequeños kimonos, extrañamente, tanto de niño como de niña, pese a que todos estaban seguros era un niño.
"Son dos, no lo duden" declaró.
A Mitsuri le prohibieron llevar más regalos, decía que eran suficientes los que les habían dado ya.
Iguro le regaló un pequeño (enorme) cesto de batatas, además de dos réplicas del haori de Kyojuro.
"Le creó al instinto de Shinobu" decía.
Himejima, por su parte, teniendo experiencia con los niños, les regalo simplemente unas cuantas cobijas y almohadas.
Shinazugawa sólo regaló un par de katanas de madera para cuando el bebé creciera.
"Una más, por si se rompe"
Tokito… Tokito olvidó que había una celebración, así que olvidó el regalo. Les terminó dando unos churros que compró de camino.
Claro, los tres pequeños amigos de Kyojuro no se quedaron fuera, ni Genya ni Kanao, ni el resto de las niñas de la finca.
"No teníamos mucho dinero, así que cooperamos entre todos" dijo Tanjiro mientras enseñaba un gran paquete, lleno de ropa para bebé y algunos artículos más.
"¡Nosotros hicimos la ropa!" anunciaron orgullosas Sumi, Kiyo y Naho.
Ubuyashiki, por su parte, dio en su nombre un pequeño presente.
"Ese amuleto mantendrá alejados a los demonios" aseguró con su sonrisa habitual.
Todo fue feliz… Hasta la noche.
Cuando estaban por entrar a la residencia del Patrón, una fuerte presencia se sintió y una puerta se abrió desde el suelo y varias presencias pudieron percibirse.
El lugar se llenó de polvo y la mayoría se preparó para una batalla.
--Kyojuro, Senjuro, detrás de mí -- tras aquel evento, Shinjuro decidió que no dejaría que le hicieran daño a sus hijos de nuevo, así que se puso las pilas y dejó de andar de borracho.
Perdón, se fue lo serio.
Sigamos.
Una vez la nube de polvo se disipó, los humanos sintieron el verdadero temor.
No sólo estaban las Seis Lunas Superiores, también estaba su mayor enemigo, Kibutsuji Muzan.
--Lamentamos el retraso, pero la otra familia también llegó -- el líder de los demonios fue el que habló -- Llegamos lo más rápido que pudimos, a final de cuentas, no nos dieron aviso de esto y, lo que es peor, no le dijeron si quiera al padre
--Kyojuro -- murmuró Akaza, quien se encontraba tras Muzan, por el olor que "su" omega, era obvio que estaba más que asustado
La tensión del lugar era verdaderamente palpable.
--¿Qué buscas aquí, Muzan? -- el primero en hablar fue Shinjuro, mientras sostenía con fuerza su katana
--Nada malo, si es lo que creen -- respondió con simpleza -- Y, aunque vinieramos para eso, ustedes no podrían evitarlo, no serían capaces de vencernos a todos, ¿o sí? -- nadie respondió, la mera neta si estaba bien jodidos -- Únicamente queremos pasar un tiempo con la madre del futuro bebé
--Los -- le susurro Kokushibo al oído
--... Los bebés
--Uno es un ella -- volvió a susurrar
--... Lo que sea -- aclaró su garganta -- Así que, todavía no acabamos esta celebración, vamos, nos toca invitar la comida
La "fiesta" siguió, esta vez y con el disgusto de todos, los demonios de anfitriones, con Akaza pegado a Kyojuro en todo momento.
--Es mi omega, tengo el derecho -- afirmó
--'Chinga tu madre' -- pensaron los demás
La fiesta pasó… Incómodamente tensa, sobre todo para Kyojuro, pues la Tercera Superior no se separaba de él, toqueteandolo de más y diciéndole comentarios muy fuera de tono, trayendo muy malos recuerdos al omega.
Pasaron toda la madrugada así, con los demonios comiendo la carne de algunos desafortunados, viendo además cómo obligaban a Kyojuro a beber de la sangre de uno de los desdichados.
--Es necesario que los pequeños demonios nazcan fuertes -- reía Kibutsuji, sin embargo esa sonrisa se borró al ver que Kyojuro se negaba -- ¿Qué sucede? ¿Por qué carajos no tomas?
--Bebelo, Kyojuro
Ante una orden de su alfa, Kyojuro no pudo negarse más. Se sentía verdaderamente asqueado con todo lo que pasaba, sólo sentía que sería mejor morir, pero sabía que no lo dejarían.
Algo quería Muzan de esos niños y no estaba dispuesto a perderlos.
--¡Vamos, Kyojuro, bébelo todo! -- exclamó Akaza con alegría
Parecía que disfrutaba el sufrimiento del rubio.
Al salir el sol, los demonios se retiraron sin generar problema alguno, únicamente se despidieron y, tal cual como vinieron, tal cual se fueron.
--Nos vemos, Kyojuro -- sonrió Akaza antes de retirarse
Apenas esas extrañas puertas se cerraron, Kyojuro cayó de rodillas en el suelo y fue rápidamente auxiliado por su padre.
--¡Kyojuro!
--Quiero… Quiero ir a casa -- murmuró temeroso, luego de eso, su cuerpo no soportó más y vomitó todo lo que los demonios lo habían obligado a ingerir
--Tranquilo, tranquilo -- Shinobu se acercó hacia el omega para poder brindarle apoyo, dándole indicaciones a Shinjuro para lograr calmar a Kyojuro -- Será mejor que no salgan por ahora, no sabemos que puedan intentar
Todos estuvieron de acuerdo y, de manera rápida, la familia Rengoku, en compañía de las chicas de la Finca Mariposa, se dirigieron al sitio mencionado, donde descansaron un par de horas.
Kyojuro, Senjuro y las niñas durmiendo, mientras él resto estaba en alerta, no se sentían capaces de descansar tras lo ocurrido.
[×××]
Tras aquel suceso, los avistamientos de demonios llegaron a tal grado que el gobierno nipón se vio en la obligación de reconocer al Cuerpo de Cazadores de Demonios, así como la gran amenaza que representaban los seres de la noche.
El problema fue tal que varios Pilares retirados, como Shinjuro, Urokodaki y Kuwajima, tuvieron que volver a sus labores de caza demonios.
Mientras, Kyojuro y Senjuro se quedaban en la Finca Mariposa, siempre en compañía de alguien más.
Habían sido dos meses verdaderamente terribles.
Y eso había aumentado desde hace dos semanas.
--¿Sigue afuera, abuelo? -- cuestionó Zenitsu temeroso
--Sí -- respondió el mayor, viendo hacia la entrada de la finca, donde Akaza se encontraba sentado, viendo directamente a la entrada de la casa, con una socarrona sonrisa en el rostro
--¿B-Buscará a… ?
--Es probable -- nuevamente y como había hecho las últimas tres noches, Kawajima se acercó a dónde la Luna Superior, quien se puso de pie
--Buenas no-
--¿Qué buscas aquí? -- no buscaba entablar una conversación, solo quería que se fuera
--Creo que sabe lo que quiero -- respondió el demonio con simpleza
--No quiere verte, largo
--No quiero irme, traigalo
Esa era la conversación de todos los días, fuese el Pilar que fuese…Menos Shinjuro, ese sacaba hasta los insultos que ni siquiera habían sido ideados.
No dijeron más. Solo se miraron fijamente, incluso, para molestar, Akaza se agachó hasta estar a la altura del menor.
--Qué aburrido -- murmuró el demonio, para luego comenzar a caminar en dirección al pueblo -- Me voy, díganle a Kyojuro que lo quiero ver mañana, si no sale -- abruptamente se detuvo y volteo a ver en dirección a la finca, más específico a una de las habitaciones, donde un temeroso Kyojuro observaba todo -- Entraré por la fuerza, pero antes mataré a todos en el pueblo
Luego se fue, según dicen las personas que vivían cerca, entró a sus casas a asustarlos y a destruir todo el lugar, demostrando que realmente iba en serio.
--Tranquilo, hermano -- susurró Senjuro, ambos parados en la entrada de la casa, a solo unos pasos de la entrada de la finca, esperando por la llegada de Akaza
El día había pasado demasiado rápido para el gusto de Kyojuro. Poco pudo dormir en la noche, por lo que ahora estaba más que cansado.
Sentía que moriría en cualquier momento.
Claro, Kyojuro tenía un trato especial (amistad con Pilares) por lo que los que no estaban en misión fueron a vigilar el encuentro.
--Somos tres, si la hacemos -- aseguró Mitsuri, junto a ella, Uzui y Tokito, además dentro de la finca, Tanjiro e Inosuke estaban a te tos a cualquier cosa
Pasadas las once de la noche, Akaza hizo acto de presencia, pero no estaba solo.
--Akaza-dono, ya quería venir a visitar a tu omega -- Douma, la Segunda Luna Superior, estaba acompañando a Akaza
--'... Creo que ya cagamos' -- pensó Uzui
--Ven, Kyojuro -- habló la Tercera Luna mientras extendía su mano
Algo temeroso, el omega acató la orden. Prefería hacerlo a voluntad antes que volver a ser obligado por la voz de mando del alfa. Senjuro se mantuvo firme al lado de su hermano, acompañándolo en todo momento.
Esto no le agrado al peli-rosa -- ¿Y tú qué? -- cuestionó molesto
--No dejaré sólo a mí hermano -- respondió serio
--Tsk… Solo vayámonos
--¿Ir? ¿A dónde? -- preguntó Kyojuro en voz baja
--¿Cómo qué a dónde? Obviamente al nido dónde darás a luz
--P-Pero y-ya y-tengo el mío
--¿Me estás contradiciendo?
Rápidamente Kyojuro negó y sólo comenzó a caminar, siendo acompañado por Senjuro.
Douma, por su parte, solo vio hacia adentro de la casa, donde podía apreciarse un joven cazador de cabello azulado.
--'Pronto habrá otro omega en espera' -- pensó el rubio, por su parte, Inosuke sintió un severo escalofrío
[×××]
Habían vuelto a perder el rastro de Kyojuro, sin embargo, ahora no sólo era el omega, Senjuro, su hermano menor, había desaparecido con él.
Shinjuro estaba que se jalaba las greñas del estrés apenas se enteró, doce horas después de la desaparición.
Esto se "calmó" un poco cuando recibieron un mensaje de Senjuro.
"Estamos bien, pero no creo que dejen que Kyojuro se vaya de aquí pronto."
Era obvio que algo así pasaría. Un alfa tiende a ser verdaderamente territorial cuando su omega va a dar a luz. Un demonio lo sería muchas veces más.
Durante dos semanas recibieron pequeñas y cortas notas de Senjuro, la mayoría quejándose de Akaza y otras más con pequeños mensajes de Kyojuro.
Y llegó el gran día.
En vista de que Kyojuro se negaba con toda el alma a ser atendido por alguno de los demonios, Akaza se vio en la necesidad de llevar a Shinobu y a un acompañante.
Obviamente fue Shinjuro.
--Sal, lo pones nervioso, así nunca podrá dar a luz -- fueron las contundentes palabras de Shinobu
--Tengo el derecho de estar aquí
--No, no sí el omega no quiere
--No me iré
--Entonces esos niños no nacerán, porque el miedo que le produces a Kyojuro no deja que se dilate lo suficiente
--¿Y qué hay de ellos?
--Ellos son su familia, personas que lo han cuidado y ayudado tras sufrir un trauma, que, por cierto, causaste tú
El demonio no dijo más. Solo vio a la beta y salió de la habitación, dejando solo a los humanos.
--Tranquilo, Kyojuro-San -- murmuró calmada mientras se acercaba al adolorido omega -- Todo saldrá bien
[×××]
Tras varias horas de espera, se pudo escuchar un fuerte llanto y, minutos después se escuchó el segundo.
Los dos bebés habían nacido y nadie sabía quién estaba más ansioso: sí los humanos por los nervios que sentían, Akaza por entrar a ver a sus hijos o Muzan para saber si podría conquistar el Sol a base de chamacos.
[×××]
Shinjuro y Senjuro preparaban todo para poder ir a vender al mercado.
Mientras Senjuro terminaba por preparar los bentos que necesitarían para el día, junto a las mochilas que en las que llevarían lo que ocupaba, Shinjuro subía todo a la carreta.
Cuando estuvo todo listo, ambos rubios se dirigieron al altar que tenían en su hogar, donde la foto de Ruka descansaba junto a la de Kyojuro.
Pero creo que esto es muy repentino, así que volvamos unos cuantos meses atrás, días después del nacimiento de los bebés de Akaza y Kyojuro, la Sede de Caza Demonios lanzó un ataque hacia la base de sus enemigos.
Lograron encontrar el lugar con la ayuda de Tanjiro y su desarrollado olfato, por si se lo preguntaban.
Al llegar, se desató un completo caos. Cientos de Cazadores perdieron la vida y, cuando sólo quedaban las Lunas Superiores y Muzan, fue cuando los Pilares empezaron a morir.
--No dejaré que se los lleven -- sentenció la Tercera Superior, mientras tenía tras suyo a Kyojuro y sus hijos, frente a él, Shinjuro, Senjuro, Tanjiro y Tomioka preparados para pelear -- ¿O qué? ¿Planean matarme y matar a Kyojuro en el proceso? ¿O acaso no recuerdan que él está vinculado conmigo? ¿No recuerdan que lo mordí?
Los tres cazadores se quedaron callados, habían olvidado aquel detalle: si un omega muere, el alfa al que está vinculado caerá en una profunda depresión, de la cual muy difícilmente se saldría, pero, si un alfa muere, su omega moriría junto con él.
Estaban contra la espada y la pared.
--Entonces me encargaré de capturarte y mantenerte atado para que no te les acerques jamás -- tras esa declaración, Shinjuro corrió a atacar a Akaza, quien respondió al ataque
--Hay que irnos, hermano -- susurró Senjuro mientras llegaba junto a él, si bien no podía pelear, podía hacer lo posible para sacar a su hermano de ahí, aprovechando la distracción del demonio
--Senjuro -- murmuró Kyojuro mientras se ponía de pie, sin tomar a sus hijos -- ¿Podrías hacerme un favor?
--¿Cuál? -- preguntó extrañado, mientras tomaba a sus sobrinos en brazos, comprendía lo débil que estaba su hermano y que no podía hacer mucho esfuerzo, así que él llevaría a los niños
--¿Podrías cuidar a los niños por mi?
--¿Hermano?
--¿Puedes prometerlo?
--Sí, pero no entiendo porque lo preguntas
--No te preocupes -- se hinco un poco, para luego besar la frente de su hermano y la de sus cachorros -- Cuídense mucho
Antes de que Senjuro dijera algo más, Kyojuro corrió en dirección a la batalla, donde los tres cazadores tenían una notable desventaja.
Mientras corría, tomó una de las espadas que había tiradas por ahí y trató de atacar al demonio por la espalda. Este, al estar concentrado en los ataques, no supo reconocer la presencia de la persona de atrás, por lo que sólo se volteo y atacó al estómago de Kyojuro, atravesándolo por completo. --Kyojuro -- soltó con arrepentimiento
--Te veo en el infierno, maldito imbécil -- fue lo último que escuchó Akaza antes de que Kyojuro cortara su cabeza
--¡Kyojuro! -- exclamó Shinjuro cuando, poco a poco, el cuerpo de la Tercera Superior comenzó a desaparecer, haciendo que el omega cayera al suelo
--¡Hermano!
El daño había sido letal, sumado a la muerte del alfa, Kyojuro había muerto segundos después de cortar la cabeza del demonio.
[×××]
--¿Aún no despiertan? -- mientras Shinjuro terminaba de subir las cosas a la carreta Senjuro había ido por Haruko y Keizo al cuarto del difunto Kyojuro
--No, les gusta dormir mucho --respondió con una sonrisa, tras eso, colocó a los bebés en una improvisada cama dentro de la carreta y comenzó a caminar junto a su padre, camino hacia el mercado, donde pasarían hasta unas horas después de anochecer, al fin y al cabo, sin la amenaza de los demonios, eran libres de quedarse ahí cuanto quisieran
Jeje... Hola *le avientan piedras* perdón, perdón, sé que debía actualizar otras cosas...
Pero los fanfics... Y la escuela... Y la flojera... Pero ya, ya me voy a poner las pilas, si no, me pegan, les parece?
Pero... Bueno... He de decir que me obsesione con esta pareja y no me arrepiento.
Byes.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro