N= Defensor de los ideales.

Touya= Paladín de la verdad.

_____= Estudiante de Profesor Pokémon.

N: 20 años.

_____: 20 años.

AU Pokémon Black and White.
_________________________________________

-¿Quién diría que Teselia podría estar tan tranquila?-
-Sí, luego de todo el tema del Equipo Plasma, por fin la región se encuentra en paz-
-Esperemos que la región se mantenga en calma-
-Sí-
...
-Y... ¿Como te va con tu investigación?-
-Bien, ayer estuve en la Bahía Arenisca estudiando a los Pokémon acuáticos-
-Me alegra ver que has encontrado lo que quieres ser-
-Sí, al principio estaba perdida, pero ahora sé que quiero investigar más de los Pokémon, quiero saber más de ellos. ¿Y qué mejor que convertirse en una profesora Pokémon para ello?-
-Concuerdo totalmente, ser profesor Pokémon te da mucha confianza, puedes investigar y conocer más sobre ambos, los Pokémon y los Entrenadores-
De repente, la puerta se abrió.
-¡Buenos días!-
Dijo una joven pelicastaña totalmente feliz.
-Buenos días-
-¡Hola, Touko!-
Respondiste alegremente.
-Buenos días-
-Touya, ¿no tienes deberes de campeón que hacer?-
-¡Hey! Yo también merezco un descanso, ¿sabes?-
Dijo el chico indignado.
-Ya ves, alguien no quiere cumplir con su deber-
Rió Touko.
-No es que no quiera hacer mi deber, ¡es que no quiero estar encerrado en la Liga Pokémon las veinticuatro horas del día esperando a que algún condenado se aparezca!-
-Wow. Calma, chico-
-Alguien está en sus días-
-Touko-
El chico miró a la joven con cierta molestia.
-Solo bromeaba, tonto-
-Jaja, te irritas muy fácil, Touya-
-Cállate, _____-
-Bueno-
-¿Vas a investigar algo hoy, _____?-
-¡Oh, sí! Quiero investigar en lo profundo del bosque de la Ruta 16-
-Ten cuidado, por ahí hay varios Entrenadores y Pokémon fuertes-
-¿Quieres que te acompañe?-
-Nah, vete a hacer tu labor de Campeón Pokémon-
-Solo intentaba ser amable-
Touya hizo un puchero y se cruzó de brazos.
-Jajaja, bien. Será mejor que me lo lleve. Cuídense, _____ y profesora Encina-
-Vayan con cuidado-
Dijo la mujer.
-Cuídate, Touko-
Y así, la joven pelicastaña y el pelicastaño se fueron.
-Bien, quizás debería ir ya a la Ruta 16-
-Sí, te vas a tardar investigándola y se puede hacer de noche si no vas temprano-
-En fin, muchas gracias por todo, Profesora Encina-
-De nada, buena suerte-
-Gracias, mándele saludos a Bel de mi parte cuando regrese-
-Claro que lo haré-
Saliste de la casa de Encina y te pusiste en marcha hacia la Ruta 16.
-Qué lindo es el paisaje de Teselia, desde que llegué me ha dejado sin palabras-
Tu Tepig asintió.
-¿Por dónde deberíamos comenzar a investigar?-
Tepig corrió a una parte del bosque y se quedó quieto.
-¿Por aquí?-
Tepig asintió.
-Vale, como el pequeño quiera-
Reíste.
Y así, comenzaron a investigar, lugar por lugar, rincón por rincón. Las horas fueron pasando y todavía no ibas ni por la mitad del bosque. Ya estaba en el atardecer, pero todavía no querías terminar la investigación.
-Aww, un pequeño Minccino-
Tepig corrió hacia el Minccino.
-¡T-Tepig! ¡No lo asustes!-
El Minccino corrió hasta que lo perdiste de vista.
-Aw, quería ver qué hacía-
Murmuraste decepcionada.
Tepig solo se sentó triste en el pasto.
-Tranquilo, Tepig. Él se asustó, eso es todo-
-Pig-
Tu Pokémon solo soltó un quejido y agachó la cabeza.
-Vamos a seguir investigando, ¿sí?-
-¡Pig!-
Tepig se levantó animado y comenzó a correr por todo el bosque.
-¡¿Tepig?!-
Corriste lo más rápido que pudiste para no perderlo de vista.
-Uf, uf, uf-
-¡Tepig! ¡No puedes salir corriendo así como así!-
Pero Tepig ni te miraba, estaba concentrado en un árbol de bayas.
-¿Quieres una?-
-¡Pig! ¡Pig!-
-Bien, ¿cuál quieres?-
-¡Pig!-
-¿Una baya Meloc?-
-¡Pig!-
-Ten-
Le diste la baya.
-¡Pig!-
Tepig hizo que la baya se tostara.
-Jsjs-
Reíste debido a la emoción de Tepig por comer la baya.
-¡Pig!-
Tepig se encontraba muy feliz comiendo su baya.
-Bien, tengo que limpiarte, señorito-
Dijiste agachándote y sacando un pañuelo para limpiar el hocico de Tepig.
-Y... ¡Listo! Ya estás limpio-
-¡Pig!-
Vamos, hay mucho que investigar todavía-
-¡Pig!-
Siguieron investigando hasta el anochecer.
-¡Oh, rayos! ¡Ya se hizo muy tarde!-
-¡Pig!-
Ibas a correr para salir del bosque lo más rápido posible cuando...
-¡Auch!-
-¿Pig?-
-Tsk, parece que no puedo correr-
-¿Pig? ¿Pig?-
Tepig se acercó a tu pierna para ver.
-¿Hm? Parece que me corté en algún lado-
-Pig-
Tepig se quejó triste.
-Tranquilo, Tepig. Estoy bien-
-¿Pig?-
-Tendremos que caminar, o de lo contrario nos quedaremos atrapados en el bosque la noche entera-
-Pig...-
-No hay señal en el bosque, eso es obvio-
-Pig-
-Caminemos-
-¡Pig! ¡Pig!-
-Tepig se puso enfrente de ti, impidiendo que te movieras.
-¿Tepig?-
-¡Pig!-
-¿No quieres que camine?-
-¡Pig!-
-Pero Braviary está en el departamento-
-Pig...-
-No te preocupes, tendré cuidado-
-Pig-
Tepig se apartó y comenzaron a caminar regreso a casa.
-¡Aaark!-
-¡Woah!-
-¡Pig!-
Tepig se puso enfrente de ti y ese Pokémon.
-Es un Zoroark...-
-No sabía que en este bosque se podían encontrar Zoroark salvajes-
-¡Aaark!-
-¡PIG!-
Tepig le gruñó a Zoroark.
-¡AAARK!-
Zoroark le contestó de vuelta.
-¡PIG! ¡PIG!-
-¡AAARK!-
-¡Tepig! ¡Tranquilo!-
Agarraste a Tepig en tus brazos y le pasaste la mano por la cabeza intentando calmarlo.
-Está bien... No pasa nada-
-Aaark-
-¿Estás bien? ¿Tu Entrenador está por aquí? ¿Estás solo?-
-Aaark-
Lentamente se alejó de ti.
-¡Pig!-
-No lo molestes-
-¿Pig?-
-Sigamos con nuestro camino-
-¡Aaark!-
Zoroark comenzó a correr rápidamente hacia ti.
-¡Uwaaah!-
Zoroark te tumbó al suelo.
-¡PIG!-
-¡Auch...!-
-¡Aaark!-
-¡Paaard!-
-¿Uhm? ¿Un Liepard?-
-¡Aaark!-
-¡PIG!-
Tepig estaba reclamándole a Zoroark por haberte tumbado.
-(Ese Zoroark... ¿Intentó protegerme de ese Liepard?)-
-¡PAAARD!-
Liepard se preparó para atacarte nuevamente.
-¡Pig!-
Tepig se puso enfrente de ti, recibiendo el ataque del Liepard.
-¡TEPIG!-
-Pig...-
Zoroark miraba atónito.
-Puedes atacarme cuánto quieras, ¡pero no te permitiré que le hagas daño a Tepig!-
Dijiste levantándote con las pocas fuerzas que te quedaban y cubriendo a Tepig.
Liepard se preparaba para atacar, pero entonces...
-¡Zoroark! ¡Patada baja!-
Zoroark rápidamente corrió hacia el Liepard y lo atacó.
-¡!-
El Liepard cayó debilitado en el suelo.
-¡Aaark!-
Zoroark rápidamente corrió hacia la voz que le dio la orden.
-¿Hum...?-
-¿Estás bien?-
La voz misteriosa se acercó a ti.
-S-Sí-
Era un joven peliverde.
-¿Qué hace alguien como tú aquí a mitad de la noche?-
-Estaba investigando el bosque-
-Deberías irte a casa-
-En eso estaba cuando ese Liepard nos atacó-
-Ya veo...-
-¿Ese es tu Zoroark?-
-Sí, lo es-
-Gracias, él me salvó-
-En realidad, yo no lo mandé. Parece que sintió tu olor y vino corriendo-
-Pero... ¿Por qué me salvaría si no me conoce?-
-Los Pokémon tienen un gran corazón, se preocupan mucho por las personas. Es cierto, hay varios que los atacan, pero ellos solo son territoriales-
-Lo sé, no es que sean malos, es que no les gusta que humanos invadan su territorio-
-Sí, y tú invadiste el territorio de este Liepard-
-Lo siento, no sabía que era su territorio-
-Eso no importa, debes irte antes de que despierte-
-Sí...-
Te levantaste y comenzaste a caminar.
-Supongo que no tengo de otra-
Dijo el joven.
-¿Hm?-
Se acercó a ti y te cargó.
-¡¿Eh?!-
-¡¿Pig?!-
-¿Aaark?-
-Tu pierna está sangrando, no llegarás muy lejos así-
...
-No te haré daño-
...
-¿Dónde vives? Te llevaré hasta tu casa-
-¡N-No! Déjame en frente de un Centro Pokémon, ¡yo me encargaré del resto!-
-La herida no es tan grave para llevarte al Centro Pokémon, pero tampoco es buena para que camines por ahí-
...
-No me dejas de otra-
-¿?-
El peliverde sólo siguió caminando hacia Ciudad Mayólica.
-Y-Ya puedes bajarme, iré al Centro Pokémon-
-No-
-¡¿?!-
El Entrenador del Zoroark siguió caminando, ignorando cualquier comentario que hicieras.
Estuvo caminando por un buen rato hasta llegar a un hotel en Ciudad Fayenza.
-¡E-Espera! ¡¿Q-Qué hacemos e-en un h-hotel?!-
-¿Puedes callarte un poco? Hay personas aquí-
-¡¿?!-
El peliverde agarró el ascensor hasta una habitación y entró en ella.
-Llegamos-
Dijo para llevarte y sentarte en su cama.
-¿Q-Qué?-
-Espera un minuto, ahora vuelvo-
Dijo para irse del cuarto.
-¿Por qué me trajo hasta su departamento?-
...
-Ya volví-
El joven peliverde apareció con un botiquín.
-Oh... Por eso me trajiste aquí-
-Sí, ¿por qué más? Ahora quédate quieta, esto puede doler-
-S-Sí-
El peliverde sacó un algodón, un pomito de alcohol y lo pasó lentamente en la herida de tu pierna.
-¡Auch!-
-Es inevitable, tiene que doler-
-Lo sé...-
Siguió pasando el algodón por tu herida hasta que ya no hubiera sangre.
-Esto debería ser suficiente por ahora-
-Gracias...-
-No tienes por qué agradecer-
-¡Pero te tomaste la molestia de cargarme y curarme!-
-No importa... Zoroark quiso ayudarte, no iba a dejarte ahí herida a tu suerte con ese Liepard-
...
-Deberías quedarte por esta noche-
-¡¿Q-Qué?!-
-¿Qué? Estás herida y dudo que puedas llegar a tu casa-
-P-Pero-
-Quedarte aquí por una noche no va a acabar contigo, aparte, es mucho mejor que quedarse afuera o en el bosque-
-E-Eso es cierto, ¡p-pero aún así!-
-Está decidido, te quedas-
...
-Si quieres puedes bañarte-
-Pero no tengo ropa que no sea esta-
-Puedes usar la mía-
-¡¿?!-
-¿?-
-¿Por qué le prestarías tu ropa a una extraña?-
-Es solo una opción, tú decides qué quieres hacer-
...
-Supongo que no tengo de otra, ¿no?-
-Aquí tienes-
-Gracias-
...
Entraste al baño, estaba limpio y tenía decoraciones muy lindas. Te quitaste tu ropa y te metiste a la ducha, giraste la perilla de la ducha para que saliera el agua. Era agua caliente, cosa que relajó a los tendones de tu cuerpo.
-Ahh... Esto se siente de maravilla-
...
Diez minutos después.
Cerraste la perilla, agarraste la toalla que te había dado el peliverde y te secaste. Cuando saliste agarraste la ropa que te había dado y comenzaste a vestirte. La ropa te quedaba muy grande, pero bueno, era esperable. Normalmente la ropa de los chicos es mayor que la ropa de las chicas.
Saliste del baño renovada, pero entonces, te acordaste de un detalle.
-H-Hey...-
-Veo que ya terminaste de bañarte-
-S-Sí-
-¿Qué pasa?-
-¿D-Dónde voy a dormir?-
-En la cama, yo puedo dormir en el sofá-
-¡D-De ninguna manera! Yo ya te he molestado mucho, aparte, ¡es tu departamento! Debes dormir en tu cama, yo puedo dormir en el sofá-
-Pero estás herida, el sofá será incómodo para ti-
-¡E-Eso no importa!-
-Me niego, dormirás en la cama-
-¡Entonces duerme conmigo!-
...
-¿?-
-¡!-
-Y-Yo no dije nada...-
Murmuraste nerviosa.
-Entonces está bien, podemos dormir ambos en la cama. Cabemos los dos-
Dijo el peliverde.
-Bien...-
Ambos se acostaron, cada uno en un lado de la cama.
Al día siguiente.
-¿Hmm?-
-Al fin despiertas-
-¿Qué hora es?-
-Son las ocho y media-
-Cinco minutos más-
-¿?-
Ibas a acostarte de nuevo cuando recordaste que estabas en el departamento de un chico el cuál ni siquiera sabías su nombre.
-O-Oye-
-¿Qué?-
-¿Como te llamas?-
-N-
-¿N? ¿Como la letra del abecedario?-
-Es mi apodo, mi nombre prefiero guardármelo-
-Ya veo... ¡Soy _____!-
-Lo sé-
-¿Como? No recuerdo haberte dicho mi nombre...-
-Tu Pokémon me lo dijo-
-¿Tepig? Espera, ¿como que te lo dijo?-
-Puedo entender a los Pokémon y comunicarme con ellos-
-Wow...-
...
-¡¡Eso es increíble!!-
-¿Tú crees?-
-¡Sí! Daría mi vida por poder comunicarme con ellos y entenderlos-
-¿Todos los profesores Pokémon piensan así?-
-No soy una profesora Pokémon, estoy aprendiendo para serlo-
-Tepig me dijo que ya lo eres-
-¡Tepig!-
Le reclamaste mientras te sonrojabas.
-Por lo que Tepig me ha contado, eres una buena chica, te preocupas bastante por los Pokémon-
-¿Vas a creer eso así como así?-
-Los Pokémon no mienten-
-Ya veo... Sí, son bastante sinceros con lo que quieren-
N se sentó a tu lado en la cama y pasó su mano por tu cabeza.
-¿?-
-No estoy totalmente de acuerdo con los métodos de los profesores Pokémon para investigar a los Pokémon, pero creo que puedo confiar en ti-
-¿Por qué no?-
-Sus métodos... Pueden llegar a herir a los Pokémon, odio eso-
-Pero no todos los lastiman-
-Sí, puede que la verdad se halle en tus palabras, sin embargo, no tenemos como saber cuáles hacen eso y cuáles no. Por eso prefiero no confiar en ellos-
-Entiendo...-
-Deberías tener más cuidado en tus investigaciones-
-Sí... Me advirtieron que la Ruta 16 era peligrosa, pero aún así me metí en problemas...-
-Puedo ayudarte en tus investigaciones, si quieres-
-¡¿En serio?!-
-Sí-
-¡Me encantaría! ¡El que puedas comunicarte con ellos será de mucha ayuda!-
-Ven, preparé el desayuno-
-¿Eh?-
-Vamos-
-Sí-
-(Normalmente me dirían "¿tú estás loca?" "¿Cómo vas a confiar en un tipo al que conociste ayer?" No lo sé, pero siento que puedo confiar en él)-
N te llevó hacia el comedor y se sentaron.
-Tepig me dijo que desayunabas panqueques-
-¿Eh? ¡No era necesario que hicieras todo esto!-
-No importa-
Dijo agarrando su taza de café.
Agarraste el tenedor y pinchaste un panqueque para llevarlo a tu boca.
-¡¡Dios mío!!-
-¿Qué pasa?-
-¡¿Eres un chef o algo?!-
-¿?-
-¡¡Son los mejores panqueques que he probado en mi maldita vida!!-
...
-Lo siento, quizás exageré un poco. Pero en serio, ¡están buenísimos!-
-Gracias-
-¿?-
-Solo cocino para mis Pokémon y a veces como algo, así que no tengo mucha experiencia-
-Esto no parece de alguien con poca experiencia-
-Jaja, si vieras el resto de cosas que he intentado cocinar, terminarías vomitando-
-¿?-
-Me salen terribles, apenas aprendí a cocinar para mis Pokémon-
-Jaja, no importa. Somos dos que necesitamos aprender a cocinar entonces-
-Jajaja-
Sonreíste inconscientemente al ver y escuchar la linda risa de aquel peliverde.
-¿Cuál es tu número?-
-¿?-
-Necesito contactarte de alguna forma, ¿sabes?-
-Oh, claro-
N te pasó su número.
-¿Cuándo vas a comenzar otra investigación?-
-Pueees, creo que voy a tomarme un descanso para que mi pierna mejore-
-Bien, avísame cuando vayas a seguir-
-Sí, ¡lo haré!-
Terminaron de desayunar y N fregó los platos, cubiertos y vasos.
Te diste un baño, te pusiste tu ropa y agarraste tu bolsa.
-¿Ya te vas?-
-Sí, no puedo molestarte por más tiempo-
-Nos vemos-
Te acercaste y lo abrazaste.
-¿?-
-Gracias por todo, N-
-¿De nada?-
Dijo para corresponder tu abrazo.
Unos minutos después se separaron y te fuiste.
-¿Aaark?-
-Lo sé, Zoroark. Estoy tan confuso como tú. Al inicio se negaba y ahora actúa como si fuéramos mejores amigos o algo...-
-Aaark-
-No digas tonterías, apenas me conoce-
-¿Aark? ¿Aark?-
-Lo dudo, no creo que ella se haya enamorado de mí en una noche-

_________________________________________

2450 Palabras.

Lo siento, sé que el capítulo pudo haber quedado mejor pero me dio pereza.
También que tengo bloqueo creativo, no se me ocurre nada interesante.

Nos vemos.
Att: Aoi.