"You Will be my girl"

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Otoño. La época favorita de un chico peculiar de 16 años, no importaba que, amaba esa estación, por múltiples razones:

El aire fresco que del ambiente, ni tan frío ni tan caluroso, tibio y perfecto. Los colores brillantes desde tono rojos, amarillentos e incluso marrones que se marcaban en las hojas que poco a poco caían de los árboles. Gracias a la localización geográfica de su pais, Canada, esto era mas visible.

Pero más que nada, un ambiente acogedor para estar en familia y con los amigos, con algún café o te en una taza, para mayor comodidad. Por alguna razon esta época era la más tranquila desde su punto de vista.

Esas serian las razones más obvias para amar el otoño, pero para Nefel Elliot, había una razón especial, una que a hecho adorar esta estación del año como otro no lo a hecho.

Fue hace unos 2 años, en Octubre. No recuerda que día en específico fue, pero si que estaba paseando a su Golden retriver llamado Copper, en el parque donde desde ese momento y siempre, va junto a su leal compañero. Siempre caminaba junto a él canino sin correa, era un perro bien portado, aunque en casa solía ser travieso. Copper escuchaba cada orden de su dueño, siempre leal y protegiendo a lo que sea a este.

Volviendo al tema, ese día Nefel quizo encontrar un nuevo lugar para llevar a Copper, estar en su vecindario no era malo, pero tampoco lo era explorar e intentar nuevas cosas. A Copper no le pareció nada mal este cambio, es mas, emocionado corria en el pasto recién cortado del parque, feliz ladrandole a su dueño para que lo alcanzará.

¿Esa podría ser la razón del porque este adolescente amaba el otoño? ¿Descubrió este parque justo en Otoño? No del todo.

Copper ese mismo día salto entre los arbustos y choco con otro perro, uno más pequeño. Nefel había perdido de vista el gran Golden retriver momentos atras, algo que lo alarmó y empezó a llamarlo, hasta encontrarlo peleando con otro perro, aunque parecía ser más una competencia, un tipo de juego, ya que el perro más pequeño trataba de quitarle una rama al más grande.

El perro se notaba que era un mestizo, con colores de un Husky, pero del tamaño de un Corgi, pero ligeramente más grande, además de tener la cola como la de un pastor alemán, larga y peluda. No había porque negarlo, el canino era hermoso.

Nefel el principio penso que era uno callejero, algo que se le hacia extraño, ya que en su ciudad habían muchos refugios; además de organizaciones dedicadas a cuidar a animales de la calle. A los segundos su pequeña teoría fue descartada al notar un collar en el cuello del perro más pequeño y una correa atada.

Los dos perros seguian en lo suyo, hasta que empezaron a moverse, persiguiendose entre sí. El de pelo blanco parpadeo un poco en ese momento, y empezó a seguirlos. Ambos caninos seguian ladrandose, aun seguian en lo mismo: quitarle la rama al otro.

Fue un pequeño rato, pero el tanto correr canso al adolescente. Llamaba a su mascota una y otra vez para que dejara de hacer eso, como se dijo, era bien portado, pero travieso de vez en cuando. Realmente ya no le importaba, su perro estaba feliz, aunque empezó a preocuparse por el otro, porque si este tenía un collar puesto, entonces tendría un dueño, del cual podría estar preocupado.

Otra vez perdió de vista a Copper, pero solo un segundo, porque justo escucho el ladrido de este, dirigiendo su mirada de inmediato a donde escucho el ruido, su expresión nerviosa y asustada al ver lo que estaba viendo.

Copper había chocado con alguien, tirando a esta, pero comos siempre, al ser tan amigable, empezó a lamer la cara de esta.

Nefel solo corrió y agarro desde el collar a su perro, sentándolo y dándole la orden para que se quedara quieto. Miró de nuevo hacia el frente, solo para ver a una chica tirada en el piso. Él le ofreció ayuda, pero la otra dio una queja. El albino solo empezó a sentir pena.

—"¡¡Lo lamento tanto!!"—. Rogo en ese momento después de escuchar un "Mierda" de parte de la chica.

La chica se paro y vio a al adolescente, sacudiendose algo del polvo y suciedad que tenía su abrigo tras la caída. El mismo perro mestizo de hace rato se acercó, poniendo a un lado a esta, oliendola mientras tenía las orejas bajas.

Nefel aprovecho la oportunidad para ver mejor a esta. Se veia de igual manera como alguien joven, a lo mejor de su edad, solo que de menor tamaño, con la piel morena, pero le llamaba mucho la atención ese color de pelo que tenía, un morado llamativo pero que no saturaba tampoco.

Antes de que el canino pudiera hacer otra cosa, la de piel morena agarro la correa para que no se escapar.—"¡Si te vuelves a escapar te juro que-!"—. Dejo de hablar al ver a un chico frente suyo, casualmente siendo muy alto, o ella muy pequeña.

—"Lo vuelvo a decir ¡Lo siento mucho! ¡Mi perro se me fue de las manos!"—. Volvió a disculparse.

—"No te... preocupes..."—. Respondió la contraria de cabello morado con un tono tranquilo.

Ambos adolescentes se vieron fijamente, leyendo cada expresión del otro. Un pequeño silencio se creó en el ambiente, donde estaba el sonido del viento chocando contra sus cuerpos, en conjunto con el de las hojas moviéndose.

La chica solo miró hacia otro lado, antes de agarrar de manera correcta la correa del perro de menor tamaño. Apunto de irse, pero fue cuando escucho al albino hablar.

—"Lindo perro"—. Hablo suavemente. No quería cagarla como lo hizo hace menos de 5 minutos.

—"¿Gracias?".

—"¿Que raza es?"—. Trato de iniciar una conversación.

La de cabello morado lo miro al confundida ante esa pregunta, quería irse y no volver a encontrarlo, de por si lo insulto, pero no fue en sí uno, solo lo mando al aire y ya esta.

Pero esa pregunta seria el inicio de algo.

—"Ni si quiera yo se..."—. Respondió algo incrédula, mirando a su perro, que estaba aún sentando y con las orejas bajas.—"¿El tuyo es... un Golden retriver?"—. Trato de seguir la conversación.

Nefel sonrió un poco al notar el intento de la contraria, ahí respondiendo con un asentamiento, platicandole algunas curiosidades sobre este.

Los dos empezaron a caminar por el parque a los pocos minutos, platicando e intercambiando algunas ideas, contando anécdotas; ignorando el momento vergonzoso que habían vivido minutos atrás. No se estaban dando cuenta de lo bien que se la estaban pasando.

Nefel en esa conversación descubrió su nombre, Uzi, no era uno común, y el suyo tampoco lo era, asique...estaban a mano.

Podría parecer que ese único día se encontraron, y que nunca mas se volverian a ver, pero eso no pasó. Al parecer tenía la misma rutina de llevar a sus perros a pasear al mismo parque, mismos días, solo que como Nefel antes no iba ahí, es por eso que nunca se encontraban o veian.

Esto se volvió recurrente, hasta se ponían de acuerdo para llegar a un mismo lugar a hacer lo mismo, ponerse al corriente con el otro sobre lo que pasaba. Hasta ese punto ya eran buenos amigos, no cercanos, pero si lo eran.

Tras unos meses parecía todo igual, pero inevitablemente crearon una conexión profunda. Solo se veian máximo 4 veces a la semana, pero era suficiente para conversar, expresar lo que sucedía tras lo que veian más haya del otro.

Uzi contaba una que otra cosa que vivía en su casa. Su madre y padre estaban divorciados, y este último trabajaba duro para que su pequeña tuviera lo necesario para ser feliz, pero estar así provocaba un distanciamiento entre ambos. La ausencia de su padre dolía.

Nunca expreso esto, pero fue en una conversación que estaba teniendo con Nefel, donde no quería platicar. Escuchaba atentamente como él hablaba de cada uno de sus miembros, su madre, padre, hermanas, abuelos e incluso tíos, contaba todo, positivo y negativo y seguía sonriendo y optimista. Esto le sorprendía mucho.

Pero era tiempo para que ella liberará ese sentimiento abrumador.

Desde ahí, cada momento que pasaba con él se volvía más y más entusiasmante, no sabía que pasaría la próxima vez que lo vería, pero a esta adolescente que en ese tiempo tenía 14 años, no quería pasar un día sin Nefel.

Las pijamadas comenzaron. Salidas a diferentes lugares, al cine o incluso a las ferias que ponían alrededor del año. No importaba que, todo era emocionante y unica, a la manera de ambos.

La vida de los dos cambio de diferentes maneras.

Uzi desde un principio era cerrada, pero en realidad mostraba una personalidad tímida e incluso tierno desde los ojos de Nefel, con un humor algo negro, él obvio luego no le gustaba esto, pero sabía que no hablaba en serio.

Nefel por su parte no hubo un cambio en su actitud, si no el simple hecho de conocer a esta chica de ojos color morado, como una bella piedra amatista. Lo hacia feliz estar con quien sea de sus familiares y amigos, pero con ella era el doble o incluso en triple de lo que podía sentir a diario.

La pregunta inicial ¿Porque este chico amaba el Otoño?

Fácil y sencillamente: La conocio a ella. A Uzi Doorman, una adolescente completamente diferente a él, pero que lo hacía sentir feliz.

2 años después de conocerla, se sentía profundamente enamorado de esta. No podía negar que no sólo era su actitud tímida, era todo de ella. Todos la vieron una vez como alguien normal, pero para él era única.

¿Y Uzi? La bien penosa sentía lo mismo. Eran sentimientos correspondidos, pero ella no sabía esto. Habían en su mente dudas sobre la verdad que aún no era revelada, trataba de verse llamativa, pero todo esto siempre se desvanecía con cualquier cosa que Nefel hacia.

29 de Octubre. A diferencia de Nefel, Uzi recordaba la fecha en la que se conocieron. Hoy era esa fecha, y comos siempre, estaban en ese mismo parque, solo que ahora en una pequeña colina sentados para ver el atardecer, mientras Copper, y el perro de Uzi llamado Skull, jugaban como siempre cerca suyo, solo que esta vez no se peleaban por una rama.

Uzi veía a los dos amigos caninos, corriendo y tratando de quitarse una carnaza, ladrandose como si se estuvieran comunicando. A su izquierda estaba el albino de ojos amarillos, viendo de reojo de vez en cuando a su amiga mientras mensajeaba con su madre, avisando que llegaría más tarde a casa.

Rato después el chico dejo el teléfono a un lado suyo, respirando así el aire fresco que lo rodeaba, como asi cerrandi sus ojos, con una tranquilidad y felicidad que siempre a mostraba cada que llegaba su época favorita.

—"Como amo el otoño"—. Murmuró Nefel mientras abría los ojos una vez más, dirigiéndo su atención a su mascota y a la de su amiga.

—"¿Porque tanto amor por el otoño?"—. Río un poco al terminar, pero en realidad se percibia un tono con algo de ironía.

El de cabello blanco ahora se centro en ver a Uzi, que esperaba una respuesta, lo más seguro esque la curiosidad la mataba. Él solo soltó un risita pequeña, pensando en cómo explicárselo, ya que quería transmitirle la importancia que a tomado esto a lo largo del tiempo.

—"Es simple..."—. Empezó como suavidad, además de acercarse un poco más a la pelimorada, y así abrazarla contra él.—"...Es porque... te conocí en Octubre ¿No es así?"

Sus palabras sinceras llegaron a los oídos de ella, aunque al principio se quedó congelada ante el abrazo (que hasta lo considero innecesario), después de escuchar eso solo relajo su agarre. Sus manos naturalmente terminaron el la espalda de su amigo, aferrándose a él, ya esperándose lo que le diría, o más bien confesaria.

—"No es solo el ambiente y los colores vibrantes que tiene, también eres tu"—. Comenzo de nuevo, mientras colocaba su mentón contra la parte superior de la cabeza de ella, acomodándose un poco mejor en la posición.—"Puede sonar cursi pero jeje... por ti es porque amo el Otoño, el simple hecho de estar contigo me hace feliz. Eres lo que necesitaba, lo mejor que me haya pasado hasta el momento..."

Uzi terminó por aferrarse por completo al cuerpo de su amigo, presionando su mejilla contra el pecho de este, sonrojandose ante sus palabras, conmovida. Nunca se imagino que haría hacerle creer tal cosa a alguien ¿Eso significaba que la consideraba importante?

Nefel esperaba cualquier respuesta, algún tipo de queja, pero al estilo "No seas tan cursi", pero terminó siendo un silencio absoluto, solo sintiendo el cuerpo de Uzi aferrado al suyo. Él no rompió el abrazo, y la mantuvo cerca suyo.

Si pudiera, la abrazaría toda la vida.

—"T-t-te..."—. No pudo terminar la frase la más baja, algo avergonzada por decir esas palabras, pero no era necesario.

Nefel río un poco ante su comportamiento tímido, viendo con un cariño profundo.—"Tranquila... yo también..."—. Respondió, mientras sentía su cara calentarse levemente, un sentimiento cálido en su pecho.

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"You Will be my world..."

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Palabras: 2003

CASI EXACTO-

Chambeando desde hace unas dos semanas, tenía planeado terminar el One-shot la semana pasado, pero los controles parentales se pasan de lanza <3👹. Desde la web no podía editar mis historias, asique nimodo-

En fin, esta canción es de lesbianas, pero no pude evitar relacionar a N y a Uzi con esta canción ¿Porque? Es fácil.

El piloto de la serie salió un 29 de Octubre del 2021 ¿Y que dice la canción? "Nos enamoramos en Octubre" y la ideota me llego XD.

Aunque para aquellos que vieron el título de la historia, si, este va ser un tipo de colección de one-shots que haré cuando me aburra, ya tengo unos 4 en mente: Uno siendo un NxDoll, otros dos Nuzi y por último uno Vuzi. Pero quiero hacer más variedad y no solo del Nuzi, son mis papis (pero no saben🗿) pero hay que darle más oportunidad a los demás.

Si quieren denme sugerencias, porque luego esta loca se queda sin ideas, solo aviso que habrá ships que no aceptaré, ya que sean que incluyan ped0f-lia, o inciesto, eso no niños 👹

Si ven alguna falta de ortografía, avísenme, que luego el tener los dedos fríos no ayuda a que pique la tecla correcta XD

Bueno acá me despido skibidis.💃💃💃

Tengan acá otro memazo

Y un dibujo ñam