₄. Isᴀᴀᴄ Lᴀʜᴇʏ
Para: lovelxhey
Tipo: celos - cute
Título: He quedado como un completo idiota
El timbre de última hora suena en el insti, miras tu teléfono, tienes un mensaje de Brett. Habéis quedado después del insti.
"Me quedan quince minutos más de calentamiento, si te acercas al Davenford vamos juntos al centro comercial"
Mientras lees el mensaje, alguien llega por detrás y te hace cosquillas en el costado, es Isaac. Te abrazas a él y reís juntos.
–Oye Jenna, ya que es viernes y no tienes que estudiar. . . ¿Qué te parece escaparte conmigo un rato?–. Dice con una encantadora sonrisa, la parte negativa es que ya has quedado y no puedes.
–Amor. . . Me encantaría pero no puedo, he quedado con alguien. . . ¿Qué te parece si quedamos mañana después del partido?–. Frunce el ceño con una sonrisa desconcertada.
–Ah, eh. . . Vale, mañana entonces–. Dice dándote un beso. Camináis por el pasillo agarrados de la mano mientras charláis de cómo os ha ido el día. Entonces Liam te encuentra y va hacia ti.
–¡Jenna! Al fin te encuentro, tengo prisa, entrenamiento. ¿Puedes devolverle esta sudadera a Brett? La última vez se la dejó en casa y sé que habéis quedado así que. . . Dásela de mi parte ¡gracias! ¡Adiós Isaac!–. Dice alejándose con prisa por el pasillo. Guardas la sudadera en tu bolso, cuando te quieres dar cuenta, ya no vais caminando cogidos de la mano.
–Oye yo. . . Acabo de acordarme de que tengo algo que hacer, nos vemos mañana ¿vale?–. Dice él.
–Esto. . . Está bien. . . Oye espérate ¿No te despides de mí?–. Dices mirándole con una sonrisa. Se acerca y te da un beso en la cabeza, sin mirarte a los ojos tras hacerlo, y se va. Te deja desconcertada, ¿quién demonios se despide así?
–"Sí, Isaac, eres más alto que yo, pero no te despides de una cría a la que dejas en la guardería"–. Piensas.
Brett conduce hasta el centro comercial, allí han abierto una cafetería retro, con estilo de los años 80, es un lugar calmado dónde podéis charlar.
–Por cierto, esta sudadera es tuya, te la dejaste en casa, Liam me la ha dado.
– La idea era que él me la trajera o al menos me llamara, pero nada-. Dice riendo.
-Oh vamos, sabes que es super tímido con esto. Además, el tema Brett Talbot le pone nervioso.
–Oye nosotros deberíamos confesarnos esas cosas, tú no deberías contarme esto, mala hermana–. Dice riendo.
–¿Enserio? Eres un estúpido ¿Lo sabías? ¿Qué si yo también le cuento lo que tú sientes?
– Me apuesto lo que sea a que no te ha hablado ni una sola vez de mí–. Dice con una sonrisa irritante.
–Agh, cómo odio que lleves la razón.
-Dulce niña ingenua. Bueno, dejemos de hablar de mí ¿qué tal Isaac y tú?–. Se te pasan muchas cosas bonitas por la cabeza, pero lo que ha ocurrido hoy te ha dejado bastante descolocada.
–A decir verdad es un cielo conmigo, pero de ti. . ., eres el único de mis amigo al que creo que no traga.
–¡Vaya, no me digas! Solo hace falta estar con él en el campo de lacrosse para darse cuenta de lo mal que le caigo. Admito que es muy, muy bueno jugando, pero es un cabrón. Me partiría una pierna "accidentalmente" con el stick. Estoy seguro–. Dice entre risas. No puedes dejar de reír, en el fondo sabes que tiene razón, Brett no le gusta absolutamente nada.
–Al final os acabaréis llevando bien, es solo que está algo celoso. Llevamos prácticamente toda la vida juntos, y sigues siendo mi mejor amigo aunque no estemos en el mismo insti.
–Además soy un partidazo–. Bromea, niegas con la cabeza mientras ries.
Al día siguiente, vuestro insti juega un partido de lacrosse contra el instituto rival, el Davenford. Estás junto a Isaac en las gradas, los estudiantes empiezan a llegar y sentarse, el estadio se llena.
-Los chicos del lacrosse lo están petando, llenando estadios enteros.
–Esta temporada pinta bastante bien, Scott es un gran capitán.
–Te estaré animando desde aquí, no tengo pancartas ni pompones, pero tienes a tu animadora personal–. Dices guiñándole un ojo. Él ríe y pone sus dos manos sobre tu cara.
–Te voy a dedicar todos mis goles–. Dice.
–Dedícame esto–. Dices, atrevida, besándole en los labios pasionalmente.
– Eso también te lo voy a dedicar, pero después del partido, esta noche–. Dice con su encantadora sonrisa pícara, colocando un mechón de pelo tras tu oreja.
De repente Brett llega corriendo.
–Espero no interrumpir nada, Jenna ¿Puedes escucharme un momento?–. Isaac le mira de arriba a abajo y se pone el casco.
–Me voy con el equipo–. Dice molesto.
–Isaac, espe... da igual–. Dices cuando te das por vencida.
–Oye tienes que dejarle claro que no soy una amenaza, que estoy enamorado de tu hermano y que se lo voy a confesar.
–Espera ¿Qué? ¿Se lo vas a decir? ¡Brett!–. Exclamas contenta mientras le das un abrazo, sabías que Liam y él hacían muy buena pareja y que tu amigo es alguien muy bueno para Liam, además de que ahora tiene el problema de ser un hombre lobo y que Brett está experimentado en ello.
–Se lo diré después del partido, vamos a empezar ya y... gracias, enserio, muchas gracias. No creo que hubiera sido posible de no ser por ti–. Dice dulcemente. Le agarras de las manos
-Aww... pero que mono eres. Anda, sal ahí a jugar. No debería desearte suerte pero... ¡Suerte!—. Le dices, con una amable sonrisa se va.
El partido comienza y te sientas junto a unas amigas. Los rivales ganan por un punto, está muy reñido, aún tienes fé en tu insti.
Las cosas empiezan a ir mal cuando uno de los dos choca con el otro, pero ninguno se aparta. Te acercas al campo.
–¿De qué cojones vas, Lahey?–. Dice Brett con una risa sarcástica.
–¿Y tú, Talbot?-. Responde, avanzando y dándole un empujón con el hombro a Brett.
Y ya empiezan los dos a discutir, el entrenador pita con el silbato pero estos no se detienen. Vas hacia allí, sabes qué pasará si los dos se descontrolan mucho. Liam se acerca y un par de chicos del equipo también para separarlos.
–¡Ya basta, los dos!–. Gritas. Isaac se da la vuelta rápidamente y te mira, decepcionado consigo mismo.
–¿No podéis simplemente llevaros bien?–. Les dices.
–No–. Responde Isaac cortante.
–Claro que podríamos, pero tiene que dejar de verme como una amenaza–. Responde Brett.
–¿Que tú eres una amenaza?–. Dice irónicamente.
–Sí, me ves una amenaza porque piensas que intento arrebatarte a Jenna pero ¿Sabes qué? Jenna es mi mejor amiga y es su hermano quien es mi interés–. Termina riendo, miras a Isaac, observa perplejo, al igual que Liam, que sonríe y se aleja, Brett corre tras él.
–¿Brett es...?–. Murmura Isaac perplejo.
–Sí, amor, sí ¿Te quedas más tranquilo?
–Dios, joder Jenna ahora he quedado como un completo idiota.
–Un poquito– Dices frunciendo los labios. – Pero eres mi pequeño idiota–. Dices dándole un beso.
Vale, la cosa se nos va de las manos cada vez más, pero en ocasiones hay que contar muchas cosas.
Espero que te guste y que lo disfrutes mucho.
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