Título: Ojos

Personaje: Finn Mertens x Tú

De: Hora de Aventura

Finn y Jake habían ido a la montaña de la muerte en busca del tesoro que te podía convertir en lo que querías ser. Pero lo que en realidad habían conseguido fue que a Finn se le transfirieran unos ojos que convertía a quién mirara en como él los percibía.

Jake, BMO y Shelby fueron víctimas de aquello y el heroe de OoO no quería que le pasara esto a nadie más, pero tuvo que atender la llamada de la princesa e ir al Dulce Reino.

La Dulce Princesa los llamó en busca de ayuda para averiguar qué tramaba el Rey Helado, que estaba actuando sospechoso el día en que daría un discurso importante.

Por tu parte, te encontraste al susodicho en tu caminata por el Dulce Reino y lo viste sobre un árbol con unos minuculares.

Habías conocido a su versión real, a Simon, en las pocas veces donde recuperaba la cordura y te pareció una gran persona a la que de inmediato quisiste ayudar, a pesar de que como el Rey Helado no simpatizabas mucho con él. Ahora que conocías quién ya no te caía mal y le tenías cariño.

—Hey, Simon, ¿Qué haces?

—¿Ah? Hola lindura, ¿estás espiandome?—te miró con una sonrisa.

—Más bien tú a quién estás espiando.

—No estoy haciendo nada malo, solo viendo a las chicas.

—Eso es exactamente espiar, y sí es malo. —frunciste el ceño.

—Hola ______, ¿el Rey Helado te está molestando?—preguntó Finn, quien portaba unos lentes oscuros, acercándose junto a Jake.

—No, solo a las chicas a quienes espía. —cerraste tu puño derecho y lo apuntaste con tu pulgar.

—¡Que no estoy haciendo nada malo!—se cayó del árbol y por accidente le lanzó un rayo de hielo al héroe que causó que se le cayeran los lentes.

Cuando este lo miró, el Rey Helado se transformó en su versión original.

—¿¡Simon!?—cuestionaste sorprendida.

—¿¡Dónde quedaron mis músculos!? ¡Soy un perdedor de brazos flacos!

—¿Así es como lo ves? Es bellísimo. —dijo Jake.

—Sí, es difícil no verlo así a veces...

—¿Simon? ¿No recuerdas nada?—preguntaste acercándose a él para tocar su rostro.

—No sé de qué hablas. Pero sigue, nena... Quizás me hagas recordar. —contestó tomando tus manos.

—¡Oye, no te aproveches, Simon!—exclamó Finn molesto acercándose a ambos.

Volteaste y te encontraste con la mirada de Finn, que de inmediato te transformó, o más bien cambió de vestimenta; a un vestido, una corona y un bastón.

—¿Pero qué...?—mumuraste mirándote.

Finn te observó con un gran sonrojo en su rostro.

—¿¡Eres una princesa!? Por eso me estabas espiando, ¿no? Quieres casarte conmigo. —dijo juguetón, pero tú lo ignoraste aún confundida por la situación.

—¡Silencio, Simon!—gritó Finn. Increíble como seguía viéndolo de la misma forma y no otra desagradable tomando en cuanto lo molesto, o más bien celoso, que estaba.

—Finn, ¿qué está pasando?—preguntaste llamando su atención, pero éste se volvió a ruborizar al verte.

Buscó con la mirada sus lentes y los encontró en manos de cierto dulce, luego de convertirlo en ladrón con un trasero en lugar de cabeza, una voz interrumpido aquél alboroto.

—¿Qué está pasando aquí? ¿Pueden explicarme esto?—Bonnibel llegó a escena, solo para terminar con otra vestimenta también que no le favorecía bien.

Ante la presión Jake tomó a Finn y se marcharon de allí.

—Adolescente mal vestido será...—habló refiriéndose a su apariencia.

—Tengo que ir a buscar a Finn, algo malo está pasando con él y tengo que ayudarlo. —dijiste decidida mirando por donde huyeron.

—Alto nena, creo que es mejor dejar que esos dos lo resuelvan solos, las cosas suelen pasar más rápido cuando no te entrometes.

—Eso no tiene sentido. ¿En serio no recuerdas nada, Simon? ¿Esto solo afecta tu apariencia pero no tus recuerdos?

—No sé de que hablas, pero sí se quién eres tú; ¡Una preciosa princesa!—te guiñó el ojo.

Tú rodeaste los ojos y lo dejaste ahí para ir a la casa del árbol. Una vez ahí te encontraste a Jake, que al parecer estaba por buscarte junto a los demás para ayudar Finn. Te explicó que aquellos ojos convertían a quien mirará en como los percibía.

—¿Entonces por qué yo soy una princesa? ¿Por qué Finn me ve como una?

—No me corresponde decirlo, pero por favor, ______, une los hilos. Es muy obvio.

Te quedaste confundida. ¿Podría llegar a ser lo que pensabas y que te ilusionaba? ¿Por qué otra razón uno de tus mejores amigos podría verte como algo que era catalogado como hermoso y perfecto?

Con solo esas dos preguntas quedabas más confundida, y no había tiempo para eso.

Jake reunió a todos a quienes cambió con esos ojos, incluyendo a Simon y la Dulce Princesa, para ayudar a Finn con unas palabras ya que el parecía verse como un monstruo por los cambios que causó. Tú te sentiste mal, y al ser tu turno te acercaste a él para que te viera.

—Finn, eres la persona más maravillosa que he conocido. No tienes por qué dudar de la increíble persona que eres. Eres nuestro héroe, tú eres mi héroe. —terminaste dándole un abrazo.

Aquellas palabras consiguieron que volviera a su aspecto normal. Sus falsos ojos cayeron y los reales te observaron con un brillo.

—Gracias chicos. Gracias, ______. —te sonrió y te devolvió el abrazo.

—¡Aytelas! ¡Ya me la ganaron!—se quejó el Rey Helado.

—Hay que deshacernos de esos ojos, si sigo viendo al Rey Helado como Simon perderé el respeto que tengo por él.

Luego de que las cosas se resolvieran y los demás se fueran, ______ y Finn se quedaron a solas. Él te agradeció por las cosas que dijiste y por ayudarlo, fue cuando aprovechaste el momento para preguntarle sobre cómo te veía a ti.

—Finn, hay algo que no entiendo, ¿Por qué me veías como una princesa? Porque creo que puedo ser cualquier cosa menos una princesa...

Él desvío la mirada ruborizandose y suspiró.

—¡Por supuesto que puedes! Es decir,  no necesitas un título para serlo, porque eres muy agradable, amable y h-hermosa... Ay, esto lo hable con Jake y pensé que sería más fácil decírtelo. —golpeó su frente con su puño.

—Tú... ¿En serio piensas eso de mí?—preguntaste con las mejillas rojas.

—Pienso eso y mucho más cosas increíble de ti porque eres asombrosa. Tú también eres la persona más maravillosa que he conocido...—confesó sonrojado y tomó aire para lo que diría a continuación; — ¡Y por eso me gustas muchísimo!

Abriste los ojos con sorpresa. Aún con tu confusión, sabías a lo que refería Jake, pero escuchar tú misma lo que creíste que jamás pasaría era igual de sorprendente. Porque sí, llevabas tiempo enamorada de Finn, pero al creer que nunca te vería como algo más que una amiga y que no estabas a su nivel para estar con él te hizo perder la esperanza y no intentar nada para no perder su amistad.

Y ahora él mismo te había confesado sus sentimientos, parecía sacado de un sueño, y sí lo era no querías despertar jamás.

—Tú también me gustas muchísimo, Finn. Me encantas. —admitiste avergonzando al muchacho. Te acercaste a él y pasaste tus manos por su gorro. — ¿Puedo? —preguntaste inclinandote hacía su rostro.

Aún con el rostro rojo no respondió y en su lugar te beso mientras te atraía a él con un abrazo. Cuando se apartaron te observó con una sonrisa enamorada.

—No necesito unos ojos mágicos para saber que eres mi princesa.

Me estuve re viendo Hora de Aventura y al llegar al episodio con esta trama se me ocurrió este os, que me sirvió para escribir del crush que muchxs que vimos la serie tuvimos alguna vez 🤓☝️

En fin, los quiero mucho Finn y Jake 💙💛