Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

españa | luces de bohemia


—¡No puede ser! —exclamó un joven madrileño mientras paseaba del brazo con su amiga no madrileña, y esperaba que futura prometida y esposa—. ¿A quien me encuentro por aquí? El mismísimo Max Estrella y Don Latino de Hispalis.

—¿Es esa la voz de Antonio? ¿Fernández Carriedo? —preguntó el poeta.

—Así es —confirmó su perro guía—, pero no viene solo, viene acompañado de una dama.

—Ya decía yo que olía a perfume de mujer, y dudo mucho que mi joven amigo perdiese la cordura y se perfumase con tal fragancia.

—Encantada de conocerles, soy _______. No me creo que esté ante mí el primer poeta de España.

—¡Pero que dama tan ilustre! Además de bien perfumada y con una bella voz. Seguro que también lo es de rostro, una pena que no lo pueda contemplar.

—No lo sé, ¿lo soy, Antonio? ¿Puedes hacerle el favor a tu amigo ciego de describirle mi belleza? —todos rieron.

—Tu belleza es indescriptible, necesitaría mucho tiempo para describirla con justicia y sospecho que mis amigos tienen prisa.

—Así es, nos dirigimos al Pretil de los Consejos a negociar con Zaratustra —informó Don Latino y Max asintió.

—Pues que vayan bien los negocios —deseó Antonio.

—¿A dónde vais vosotros? —preguntó Max.

—Al Café Colón —informó Antonio.

—¡Salud a Rubén Darío de nuestra parte si allí está! —dijo Max.

—Así haremos maestro —dijo Antonio despidiéndose de ellos, echando cada uno a andar en dirección contraria.

—Adiós —dijo ella—. Que increíble casualidad —le dijo a ella en bajo cuando se alejaron de ellos, caminando hasta el café.

—¡Bienvenida a Madrid! Es normal cruzarse a personajes así por aquí. Y que no te extrañe que nos los volvamos a cruzar más tarde en la taberna de Pica Lagartos, aunque a su esposa no le gusta que vaya allí. Está casado con una francesa —informó él—, Madame Collete.

—Que poco patriótico por su parte —bromeó ella.

—¿Verdad?

—Y tendran hijos, supongo.

—Solo una hija de nuestra edad, Claudinita.

—Sangre española y francesa, que confusas estarán sus venas.

—Seguro que se sentiría más cómoda en Andorra.

—Ni que fuese catalana.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro