Liam era una persona tímida, nunca fue social, se sentaba en su asiento, siempre en el del rinconcito del salón.
Al principio los niños lo buscaban para jugar, pero él siempre los rechazaba dándoles las espalda.

Pronto comenzaron a molestarlo por ser un antisocial, se metían con él por ser un "rarito". Liam solamente quería que lo dejaran en paz, con su soledad.

Se encontraba sentado en su asiento, esperando a que la profesora llegara, los demás niños aprovechaban su ausencia para lanzar papelitos a Liam que tenían escritos cosas no muy agradables.

Liam optaba por ignorarlos, y tirar los pedazos al suelo. Soltó un suspiro de alivio cuando la profesora apareció, pero no estaba sola, un niño un poco más bajito que Liam, de cabello castaño y ojos azules (probablemente unos pocos años mayor que Liam) estaba a su lado,con una sonrisita.

"Buenas tardes alumnos" saludó la mayor "Hoy tenemos un nuevo compañero que se unirá a nosotros,¿Te gustaría presentarte?"

El pequeño asintió entusiasmado.

"Hola! Soy Louis Tomlinson, y estaré encantado de estar con ustedes!" Se presentó con una voz chillona.

Liam bajó la vista a su libro cuando se presentó, no quería ver a su posible futuro bulli, a éstas alturas no confiaba en nadie, era un pequeño muy desconfiado.

"Muy buen Louis,puedes elegir dónde sentarte"

Louis miró a todos los lugares, unas niñas le hacían señas para que fuera con ellas, pero Louis solamente hizo una pequeña mueca, su vista cayó en Liam, quien estaba solo, distrayendose en hacer garabatos en su libreta.

Sonrió y decidió tomar asiento a su lado, colocando su mochila en el suelo. Miró al niño y tocó su hombro, tratando de llamar su atención.

Liam volteó confundido y pegó un pequeño saltito cuando se dió cuenta que el niño nuevo se encontraba a su lado, dándole una sonrisa muy bonita.

"Hola! Soy Louis! ¿Cómo te llamas?"preguntó mientras examinaba los rasgos de Liam.

Liam dudaba si responder o no, ¿Debería confiar en él? En sus lindos ojos no se veía maldad, su sonrisa era sincera y Liam decidió por primera vez dar una oportunidad a alguien,por más miedo que le diera.

"Liam" murmuró tímidamente,mirando sus llamativos ojos azules.

"Qué lindo nombre!" Exclamó emocionado. Pero la maestra les llamó la atención, así que Louis se cubrió su boquita con las manos,reteniendo una sonrisa "¿Quieres unirte a mi en el descanso?" Dijo en un susurro.

Liam asintió levemente, dando una pequeña mueca parecida a una sonrisa,que hizo que la sonrisa de Louis se ampliara más antes eso.

-

La campana sonó, sacando gritos emocionados a los niños porque la clase acabó. Todos tomaron sus loncheras y salieron al patio a jugar.

Liam miró como todos se iban, dejando casi vacío el salón, y digo casi porque Louis se encontraba esperándolo para salir al patio.
El corazón de Liam dio un pálpito ante eso.

"Liam, vas a quedarte de nuevo-" la maestra llegó justo en el momento en que los niños estaban en la puerta, a punto de salir "Oh hola, veo que tienes compañía, ahora sí saldrás?"

Liam asintió tímidamente, mientras Louis lo miraba con una sonrisita feliz.
La maestra notó ésto y no puedo evitar emocionarse un poco.

Antes de que Louis llegara Liam siempre se quedaba en el salón solo, comiendo el sándwich que su madre le empacaba, mientras garabateaba en su libreta. Tenía miedo de salir por los niños malos que lo molestaban.

"Muy bien! Espero que se diviertan los dos" les dió una sonrisa y entró al salón.

Los dos pequeños comenzaron a caminar hacia una banca, pero Louis vió a los niños jugando fútbol y no pudo evitar que sus ojitos se iluminaran al verlos jugar.

Tomó la manita de Liam, sin saber que éste no era muy fan del contacto físico, y lo arrastró a la cancha donde estaban los niños.

"Hola! Podemos jugar?" Saltaba arriba y hacia abajo el pequeño Louis, emocionado.

Los demás niños los miraron con caras de disgusto, pero no dirigidas a Louis, si no a Liam, quién se escondía detrás del pequeño cuerpo del castaño.

"Puedes unirte tú, pero no el rarito detrás de ti" todos los demás rieron ante lo dicho por el niño.

Louis frunció el ceño y dejó de rebotar, viendo con furia a los niños que se burlaban de su amigo.

"Hey! Son unos tontos! Aquí los únicos raritos son ustedes por no dejar que juegue Liam!" Gritó mientras se acercaba a los niños que ahora veían con miedo al más bajito.

Liam sin pensarlo tomó la manita del castaño y lo alejó de ahí,llevándolo a la banca que más se alejara de la cancha.

"¿Qué haces Liam? Esos niños se reían de ti!" La aguda voz de Louis se oía enojada "Iré a darles una lección!"

"No!" Tomó más fuerte la mano de Louis, jalándolo hacia él "Déjalos,no valen la pena, todos los días es lo mismo." Susurró con tristeza.

Louis abrió los ojos como platos ante eso. Louis odiaba que los demás trataran mal a una persona por como es, le gustaba meterse a defender a la gente porque se le hacía injusto que les dieran ese trato.
Y menos a su amigo Liam!

"Bueno!" Soltó de repente "Ahora que estoy aquí, nadie te tratará mal de nuevo! Porque yo te protegeré!" Sonrió triunfalmente.

Liam miró con asombro al otro niño, ¿Lo decía en serio? ¿Debería creer en sus palabras?

La escena donde lo defendía demostraba que hablaba en serio, se sintió protegido y querido por primera vez. Y decidió dar otra oportunidad.

"Está bien" le dió una sonrisa sincera.

Louis sonrió lo más que lo dejaron sus mejillas, sonrosadas al ver la bella sonrisa de su amigo.

"De ahora en adelante estaremos juntos para siempre, te protegeré y nunca nos separaremos!"

"Promesa?" Susurró Liam, tímido.

Louis le dió otra amplia sonrisa "Promesa!"

Y juntó sus meñiques,sellando aquella sincera promesa.

Corto,lo sé. Pero tendrá dos o tres partes, supongo, ya que tampoco me llegaron las ideas para éste One-Shot :c

Pero prometo actualizar la próxima semana. (Nunca crean mis promesas *llora*)

En fin, los amo <3.