Tanjiro llegó en la madrugada, y su esposo estaba afuera de su casa sentado, se veía en sus ojos que había llorado bastante, y que su olor era de una tristeza muy profunda, Tanjiro corrió para abrazarlo, pero Rengoku puso su mano delante de él, prohibiendole el paso

-Kyojuro, que-

-... Se lo que pasa Tanjiro... Y perdóname por no ser lo mejor

-Eh? No... No amor tienes que escucharme!

-Por que? Durante un mes pregunté que es lo que sucedía, y al final de cada conversación me decías que nada... Pero hoy Vi como le abrazaste...

Se sorprendió, ni siquiera había reconocido su olor cerca del lugar, o quizá era porque Kyojuro estaba tan roto en ese momento que parecía otro

-Kyojuro... No saques conclusiones por favor, yo-

-No por favor tú Tanjiro, de verdad, si no hay nada más para con ésto!

-De verdad tu crees que esto es lo que yo haría después de toda una vida juntos? Nos enfrentamos a la muerte! creciste conmigo! superamos lo de tu padre! hicimos toda una vida e inclusive tuvimos hijos!!

-Y a ti eso tampoco te bastó aparentemente!! ...Por qué el?? Porque puede moverse más rápido? No tienes que sobarle la espalda? Que fue lo que pasó!?

-ESTO!!

Le dijo sacando el papel de su bolsillo poniendoselo en su rostro, leyendo el plan de Yushiro, borrando de su cabeza todo lo que había imaginado lentamente, alterandose al pensar que su esposo volvió a pelear

-Nuevos demonios? Que?... Y como explicas que no querías que te tocara? Eh!? Ya ni siquiera te vistes frente a mi!!

Tanjiro se abrió la Yukata mientras lo miraba fijamente, llorando tanto que casi le temblaban los labios, mostrando que tenía moretones y cortes en su cuerpo como en esos tiempos, y los ojos de su esposo se veían horrorizados

-Porque los demonios me golpeaban Kyojuro! ... N-No te culpo por creerlo, no te dije tampoco qué hacía y es razonable que dudaras pero ... Dudar de mi lealtad?... De mi amor?... Después de tantos años cuando lo único que hemos hecho habsido pasar cada día de nuestras vidas junto al otro?...

- ...Si me hubieras dicho desde el principio-

-No me hubieras dejado! y si lo hicieras no hubieras dejado de preocuparte!  Y detesto éso! Verte preocupado! Verte triste! Verte mal por mi culpa! No quería levantar de nuevo una espada, pero que mi amor no.... No ...

-Tanjiro...

-N-No... No puedo ni decirlo...

-Tanjiro... Dios mío mi amor perdóname...

Kyojuro se acercó para abrazarlo y llenarle de besos el rostro, Tanjiro se dejó y devolvió unos cuantos besos empezando a llorar otra vez, Kyojuro también, el saberse metidos en el peor de los malos entendidos, pero estos los estaban sacando de su frialdad momentánea, el amor se extendió como las flamas y muy pronto quemaba como el fuego, Kyojuro tomó a su esposo en sus brazos y con besos lo llevo a la habitación, empezando a dar besos más necesitados y gemidos desesperados mientras le desvestía, Kyojuro besó cada moretón y Tanjiro saltó sobre su cuerpo como si hubiera vuelto a los primeros años de su relación, sin detenerse y con pasión para recompensar cada falta de cariño entre los dos, y probarse nuevamente el por qué habían unido sus vidas

No salieron del cuarto hasta el día sub siguiente y ni sus hijos los molestaron, los escuchaban decirse palabras de amor, disculpas con pequeños sollozos y trataban de salir de casa cuando sabían que los besos iban a subir de intensidad

En el día sub siguiente Kyojuro salió al patio, no podía creer que por algo así su energía saldría como en sus años de juventud, no sabía que con más de 40 años aún podía amar a su esposo con esa intensidad, le dejó durmiendo en su habitación, decidido a hacerlo descansar y consentirlo por lo que había hecho ese último mes, y pensando en eso observó hacía fuera de su hogar cuando vio de lejos a Haganezuka llegar con una Katana, tal como el primer día en que todo sucedió

Al estar cerca, ambos se miraron fijamente antes de decirse nada, era como una guerra fría, sin palabras, solo miradas, hasta que él pelinegro rompió el silencio

-Supongo que... Tanjiro ya te lo explico

-Si... y lamento haber dudado de él, lo amo tanto que me cegó la falta de un poco de su tacto, igual quizá fue irrazonable de mi parte tener celos a éstas alturas del partido

-No, Tanjiro dijo que entendía y si no pasaba, de hecho te traje una carta del mismo Yushiro en caso de que no le hubieras creído, yo tampoco quería romper un matrimonio

-Si...

-... Su Katana, me pidió que la renovara, así que todo está bien ahora

-Claro que si

La tomó y Haganezuka se dió vuelta, dispuesto a irse, hasta que Kyojuro le tocó el hombro

-Hotaru... Admiro lo que hiciste... Vi tu mirada el día que abrazaste a Tanjiro, conmigo no debes mentir, le creo a mi esposo, pero puedo identificar a otro hombre y sus intenciones, si yo no le hubiera creído a Tanjiro, tú-

Hotaru quitó su mano con amabilidad, sonriendole de vuelta

-Tu esposo te ama y también a tus hijos, eso es todo lo que tienes que saber

Hotaru le sonrió y Kyojuro aunque también lo miró serio al principio, devolvió la sonrisa

-Si... Tienes razón

Finalmente el hombre se puso su máscara y se marchó, el rubio negó con la cabeza al hombre de la máscara y vió la carta de Yushiro, ahí contaba con más detalle lo que su esposo le dijo, volvió a su habitación mientras la leía y al acabar miró a su pelirrojo y besó su frente, felíz de que fue solo un malentendido y no lo que su mente había pensado

Y se aseguró de contárselo a un ratoncito de Uzui que amablemente, le había hecho compañía en esa supuesta infidelidad