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Un Nuevo Mundo.

Oh, el planeta Tierra, nuestro hogar, fuente de inconmensurable belleza y misterios que aún no descubrimos. El hogar de miles de especies incluyendonos, pero hoy, el planeta recibiría la visita de una nueva especie.

Cerca de la atmósfera, lo que parece ser un cometa pasa muy cerca de la Tierra, llamando la atención de cada persona en el mundo, pero sobretodo, la de cierto lagarto que siente la presencia de ese cometa... Bastante familiar. Ese "cometa" entra en la atmósfera de la Tierra, cayendo de lleno en una enorme pradera, pasarían varios minutos en los que solo habría silencio, el cual sería interrumpido cuando una enorme presencia se empezaría a levantar.
Lo que parecía ser una criatura alada, de tres cabezas con cuernos dorados cada una, con escamas tan blancas como la nieve se pondría de pie; mirando a todos lados, como si estuviese en busca de algo.

Moonhidora, así es como se hace llamar la hydra, inmediatamente emprendió vuelo hasta lo más alto para empezar su búsqueda, la búsqueda de su amado, o al menos para una de sus cabezas, para las otras solo era un amigo. Buscó día y noche durante semanas, buscó hasta en el más recóndito escondite del planeta, pero seguía sin hallar nada. Hasta ahora...




Hace días, mientras esto pasaba, un "joven" lagarto se hallaba intranquilo. Habían pasado algunos meses desde aquella brutal batalla contra su nemesis. Sin embargo... podía sentir una energía extraña, similar a la de rival, parece que alguien acudió a su llamado, decidido a darle un incentivo a ese visitante; tomó la cabeza restante de su rival, la cual conservó como trofeo. Y se dirigió hacia esa señal que sentía, Godzilla le aclararía un par de cosas al visitante, o más bien, a la visitante.

El encuentro entre ambos solo no se hacía, Moonhidora iba de un lado a otro, mientras que Godzilla trataba de mantener el ritmo; pero mientras más avanzaba, Moonhidora aprendía más de ese nuevo mundo, se maravillaba con el mar azul.

Deleitaba sus ojos con el cielo, con una perspectiva que jamás esperó ver.

Y su curiosidad la invadía al ver a lo lejos cientos de luces en movimiento.

Hasta que llegó el día, Godzilla estaba harto de tener que seguirle el rastro a ese Titan misterioso y escurridizo, así que pensó, porqué ir hacia el? Cuando el puede venir hacia ti? Usando la cabeza de su rival como carnada, Godzilla espero en la costa durante horas, escondido bajo las olas. Hasta que sintió la presencia de nuevo. Esperó unos segundos después de la llegada del Titán, para asomar un poco su cabeza, cuando quedó asombrado; era un ejemplar de la especie de Ghidorah, totalmente blanco, más esbelto y "atractivo"? Pensaba Godzilla, sin embargo este no se dejó distraer por la apariencia del visitante, por lo que decidido, salió del agua para confrontarlo.



Antes de que Godzilla se escondiera en el mar, Moon sintió una sensación familiar, la sensación y presencia de aquel que estaba buscando; siguiente aquel presentimiento se dirigió a toda velocidad hacia el. Solo para llegar a una costa desierta.

Moon buscó con la mirada a Ghidorah, buscando algún indicio de el, hasta que...

Lo vió.

Moonhidora quedó totalmente impactada y asqueada, al ver una de las tres cabezas de Ghidorah... completamente cercenada e inerte en el suelo. Miles de preguntas pasaban por si cabeza, "que paso!?" "Quien pudo haber hecho eso!?" "Quien siquiera pudo haber logrado algo así!?", Hasta que sintió que algo surgía detrás de ella, el responsable de la muerte de Ghidorah. Moon se le quedó viendo fijamente, jamás había visto una criatura como esa, hasta que un gruñido de ese ser la sacó de sus pensamientos.

Parecía querer explicaciones, pero ella no tenía que dárselas. Más bien, ella quería explicaciones, el lagarto se limitó a mirar de forma arrogante la cabeza de Ghidorah, para seguido ver a Moon; parecía que daba a entender que el fue el causante de eso, Moon se llenó de ira, y se preparó para pelear contra ese extraño ser, mientras que Godzilla se propuso da darle una lección, sobre los visitantes extraños que querían amenazarlo a él o a su planeta.





Jajaja, quien diría que en un inicio, ambos se odiaban a muerte. Para que ambos terminaran en términos bastante sorpresivos.

Sin dudas ese Nuevo Mundo le aguardaba grandes aventuras a la Hydra.

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