Ochako se levantó jadeando, de nuevo había soñado con aquellos ojos verdes, aquellos que la hacían sentir mil sentimientos, negó y se levantó. Sacudió su blanco vestido, tomó su báculo y antes de salir de aquella cueva se puso su rosada capucha. Atravesó el bosque tranquilamente, tarareando una suave melodía que habían aprendido de los pájaros, se sentó en una roca, un pequeño conejito apareció de entre los arbustos, sonrió y se acercó a él.

- Hola chiquito - Le dijo acariciando con cuidado su cabecita, el pequeño animal movió su nariz dándole ternura a Ochako- Eres increíblemente tierno...Tienes hambre pequeñín?- lo tomó entre sus brazos, creó una zanahoria y se la dio-

Un ruido proveniente de los arbustos alertó a la bruja, quien protegió al animal entre sus brazos y tomó su báculo. De allí salió un chico pecoso de pelo y ojos verdes, quien portaba en su mano derecha una espada, la castaña lo miró se arriba a abajo.

- Ah! Lo atrapaste - Dijo el joven volviendo a guardar su espada y extendiendo su mano hacia la bruja -

- ¿Que?  -

- El conejo -

- ¿Es tuyo? -

- Es mi almuerzo -

Ochako frunció el ceño, resguardando al asustado animal entre sus brazos.

- No vas a comerte a esta dulce criatura - El suspiro y se rascó la mejilla-

- Es el o soy yo...así son las cosas - Dijo levantando los hombros-

- No vas a comerte a este precioso animal - Le dijo protegiéndose con su báculo - No se si sabes pero de donde yo vengo matar a una criatura inocente es un delito

- De donde yo vengo el conejo asado es delicioso -Le dijo sacando su espada, si ella iba a ponerse a la defensiva el también-

- Te propongo algo...si no te comes a este dulce conejito yo te prepararé algo mejor - Dijo poniendo su báculo a su lado-

El volvió a guardar su espada, suspiró rendídio la verdad tenía hambre y si no comía algo pronto seguramente iba a desmayarse.

- Esta bien - Dijo sonriente le tendió la mano a la muchacha- Soy Izuku

- Ochako -Dijo ella bajando al conejito y estrechando su mano- ¿Estás solo? -pregunto levantando una ceja, el asintió melancólico- Ven busquemos los ingredientes

Comenzaron a caminar por todo el bosque, Ochako recolectaba los ingredientes, mientras Izuku los sostenía, cuando tuvieron todo se sentaron junto al río, el pecoso hizo una fogata y recolectó agua en el caldero que la castaña había creado. Para el medio día ambos comían tranquilamente mientras hablaban, tenían más cosas en comun de las que pensaban, su charla era amena y disfrutaban la compañía del otro.

- ...Entonces eres una bruja - Dijo el de pelo verde-

- ¿Nunca viste una bruja en tu vida o que? - Pregunto Ochako con una sonrisa-

- En realidad no...-se rascó la nuca- Vivi siempre encerrado en mi pueblo, donde la gente era muy aburrida...

- Pero tu no eres aburrido - Dijo sonriente, se acercó un poco al pecoso, quien en respuesta también se acercó un poco más a ella-

- Sabes...tu caldo de verduras es mil veces mejor que el conejo asado - Admitió con una sonrisa-

- ¿Entonces basta de matar animales? - Pregunto con una sonrisa-

- Si me das la receta por supuesto - Dijo recostándose en el suelo, la castaña se recostó a su lado-

- ¿Porque estas aquí ? - le pregunto de nuevo haciendo que el soltara un suspiro- ¿Los caballeros no tendrían que estar en castillos cuidando princesas y cosas así? -El rio ente lo dicho-

- Estoy buscando una cosa...-Dijo mirando el cielo que estaba algo nublado de repente se levantó saco su espada mirando hacia todos lados-

- ¿Que sucede? - Dijo tomando su báculo y poniéndose a su lado-

- La cosa que busco...esta cerca -dijo tensando a Ochako, un rugido extraño hizo despistar a la castaña haciendo que aquella extraña criatura se posara detrás de ella para atacar- ¡Ochako! - Grito y empujó a la castaña justo antes de que la bestia la intentara calcinar quedando encima de ella- ¿Estas bien?

- ¡No dijiste que la cosa era un demonio clase F¡ - Le dijo sonrojada creando un campo de fuerza frenando los múltiples ataques de la bestia-

- ¡Bueno yo no sabía que era un demonio! - Le dijo levantándose empuñando su espada en dirección a la bestia-

- ¡¿Que haces?! ¡Debemos huir! - Le dijo manteniendo la barrera-

- ¡No! ¡Necesito matarlo! - Grito viéndola- ¡Quita la barrera!

- ¡No! - Dijo y la bestia comenzó a ejercer más fuerza- ¡Va a matarte!

- ¡No voy a morir!...te lo prometo...- Dijo suavizando su mirada-

- Bien...¡pero te mueres y te mato! - Dijo con una sonrisa partió la barrera, alejando a la bestia, la cual enfurecida intentó atacar a la bruja-

- ¡Ah no! - Dijo el de pelo verde, corrió hacia la bestia y le hizo un corte en una de sus alas- ¡Ven por mi!

El demonio siseo, comenzó a atacar físicamente al pecoso, quien se defendía perfectamente, cosa que sorprendió a la de ojos avellana, quien sacudió la cabeza, creó un campo de fuerza al rededor de ellos y el demonio. Alejando a todo animal o persona que estuviera cerca, se apoyó en su báculo cansada apenas y podía continuar. El demonio pareció notarlo, dejando a Izuku y concentrándose en ella.

- Oh mierda...- Dijo el de pelo verde corriendo hacia ella, pero algo raro sucedió, en vez de atacar, el demonio also vuelo, golpeó a la bruja con su cola alejándola de su báculo, lo que hizo que la barrera se rompiera y pudiera salir- ¡¿Ochako estas bien?! - dijo acercándose a ella, la cargó estilo nupcial con cuidado y la llevó hasta el río para tratar sus heridas- Estás bien gracias a Dios...-dijo limpiando con cuidado su mejilla con un pañuelo-

- Gracias...-Dijo sonrojada, also la mano haciendo que su báculo llegara a sus manos e hizo aparecer un kit pequeño- Déjame curarte luego si? -Le dijo con una sonrisa-

- Por supuesto - Le sonrió y siguió con su labor-

Al terminar, dejó que ella lo curara con ungüentos de diferentes olores y colores. Mientras ella acariciaba con sus suaves manos llenas de aquellas sustancias propias de su mundo, sentía muchas cosas, menos dolor, miró su carita, estaba concentrada en su labor lo que hizo que el corazón del caballero se acelerara, sintiendo como la observaban la bruja levantó mirada, haciendo latir aún más fuerte el corazón de el pecoso.

- ¿Pasa algo? -Pregunto moviendo un poco la cabeza-

- No...es solo...que es raro...me enseñaron que las brujas son seres malignos...-Ella levantó la mirada algo triste- ...Pero tu eres muy...dulce

- Bueno...no todas somos iguales supongo...- termino de vendar su mano y corrió uno de sus mechones de su cara-...A mi me dijeron que los caballeros cazan brujas...pero me defendiste contra ese demonio...eres una gran persona Izuku...

- No soy tan buena persona cómo crees -Miro a otro lado, su mirada reflejaba tristeza-

- Tu pasado no es lo que te hace bueno o malo...lo importante es que tipo de persona eres en el futuro - Acarició su mejilla y ambos le sonrieron al otro-

- Y así niños...fue como nos conocimos -Dijo sonriente una Ochako mas grande a dos pequeñitos, uno de ellos tenía una larga melena verde y el otro con una mata castaña-

- Wow...y qué pasó con el demonio mami? -Le pregunto el niño con sus ojos verdes brillando de la emoción-

- Esa es una historia para mañana cielo -Le dio un beso en la frente y agarró a la niña de pelo verde entre sus brazos, luego la arropó en su cama- Buenas noches niños

- ¿Papa no nos dará las buenas noches? -Pregunto la de pelo verde-

- Si mi amor...no te preocupes - Apago la vela con su magia y cerró la puerta detrás de si-

Bajo la escaleras con cuidado, camino hasta la sala y apoyo una mano en el hombro de su esposo.

- Los niños te reclaman Izuku -Dijo con un poco de burla-

- Lo se...es que...quiero golpear a esa maldita cosa cada vez que la mencionan -Dijo apretando su puño y miró la leña que se consumía poco a poco-

- Ya cariño...algún día la encontrarás...- Tomo su mano, haciendo que se relajara y se besaron con ternura- ¿Antes de irte a dormir no olvides apagar el fuego si?

Volvíeron a compartir un beso, esta vez un poco más largo, Ochako se levantó y se fue a dormir. Mientras Izuku miraba el fuego pensando como aquel demonio de clase F le había arrebatado a su mejor amigo, agarró la jarra con agua y apagó el fuego. Miró su espada que estaba colgada en la pared junto al báculo de su castaña, se dio la vuelta, subió las escaleras y se encontró con su hija.

- ¿Que sucede cielo? -Le pregunto cariñosamente arrodillándose a su altura-

- No nos diste nuestro beso de buenas noches...-Dijo con algo de pena, el río suavemente, la cargo-

- Lo siento...pensaba en otras cosas -La arropo en su cama y besó su frente-

- ¿El demonio de la historia de mamá? -Pregunto abrazando su peluche de conejo-

- No...en que si no te duermes mami se va a enojar -Dijo con una sonrisa paternal-

- Buenas noche cariño

- Buenas noche papi

Besó la frente de su hijo antes de irse, volvió a cerrar la puerta, saltó de susto al ver a su esposa apoyada en la pared.

- Casi me matas del susto -Se apoyo la mano en el corazón mientras la miraba-

- Lo siento...es que la cama está muy fría -Dijo haciendo un adorable puchero-

El soltó una suave carcajada, la agarró de forma nupcial haciendo que riera bajito para no despertar a sus hijos, entró a la habitación que compartían, se quitó las botas y la dejó en la cama. Luego de ponerse el pillama la abrazo con cuidado.

- ¿Mejor? -Pregunto besando su frente-

- Mucho mejor -

~

Hola :D

Sisi, le prometí un Lemon, estoy trabajando en eso en realidad...

Denle gracias a mi novio que me está dando una gran cantidad de inspiración para el Lemon rechazadome :u

No es sarcasmo en serio :u

Ejem -tos falsa-

Gracias por leer dulzuras ❤️

Espero que les haya gustado

Quédense en su casita y lávense las manos

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