Arissa estaba más que sorprendida por la noticia que Newt le había dado.

Y claramente no estaba feliz por la manera en que dicha noticia había llegado a sus oídos.

La chica vivía en Francia y como ella y Newt era muy buenos amigos, este último había ido a visitarla.

Se encontraban en la casa de ella tomando un poco de té.

-¿Pero qué barbaridades dices, Newt?- preguntó Arissa sin poder creerlo y con un toque burlón en su tono.

-¿Es que no te lo dijo?- preguntó el pelirrojo bastante desconcertado.

Newt hubiese apostado que su hermano Theseus se casaría con Arissa antes que con Leta.

-No... no me lo dijo...- la voz de la rubia reflejaba tristeza.

Newt notó que a su amiga se le enrojecian los ojos, evitaba llorar.

-Lo lamento, no debí decir eso.

Newt estaba verdaderamente arrepentido, sabía lo mucho que Arissa quería a su hermano.

-Mejor háblame de Tina, en tus cartas parecias muy emocionado respecto a ella.

Newt se sonrojo.

Comenzaron a hablar de la gran aventura que había tenido Newt en New York, pese a eso, el pelirrojo hablaba con mayor emoción cuando decía algo sobre Tina.

Arissa estaba muy contenta de que su mejor amigo estuviera así de feliz.

[...]

Para bien o para mal Arissa estaba rumbo al ministerio de magia de Londres ya que debía tratar algunos asuntos.

Cuando terminó sus asuntos e iba para la salida tal vez fue buena o mala suerte que se encontrara con Theseus.

-Arissa- dijo Theseus sorprendido.

La chica no deseaba ver a Theseus por nada del mundo.

-Scamander- dijo con una sonrisa- tiene tiempo que no nos vemos.

-Sí...- Theseus miraba a la chica con un brillo especial.

Siempre había estado enamorado de su mejor amiga, pero nunca tuvo el valor para decirle.

-Felicidades- el pelirrojo la miró sin comprender- por tu boda. Newt me lo dijo.

-Oh... eso. Sí, gracias- miró sus zapatos- No sabía cómo decírtelo. 

-No importa, me tengo que ir.

-Me gustaría salir contigo uno de estos días, antes de que te vayas de Londres.

Arissa lo miró.

-Claro, eso me gustaría.

-Mañana, ¿te parece?

-Claro. Me estoy quedando en casa de mi hermana.

Dio la vuelta y se marchó.

Al dia siguiente se encontraron, Theseus fue a buscarla a casa de la hermana de la chica.

Juntos caminaron por las calles de Londres hasta un lugar donde los muggles venden café, té y algunos dulces*.

-¿Por qué no me lo dijiste?- preguntó Arissa.

-Nos distanciamos, no supe nada de ti después del colegio y la verdad es que...-

-No me buscaste...- completó la frase.

Theseus asintió.

-Y lo lamento.

Se quedaron en un incómodo silencio, donde ninguno estaba seguro de qué decir.

-¿La amas?

-Sí, la amo- dijo sin dudarlo un poco.

Arissa sintió que su corazón se partía por la mitad. Aún así le dedicó una tierna sonrisa.

-Te deseo lo mejor, Theseus.

Tomó la mano de su contrario por arriba de la mesa.

Theseus no tenía palabras. Él realmente amaba a Leta pero su corazón siempre le había pertenecido a Arissa.

La chica se puso de pie. Le dirigió una sonrisa al chico y se marchó.

Theseus deseaba detenerla y pedirle que se quedara, pero una vez más su cobardía se apoderó de él.

*Con dulces me refiero a pasteles/tortas, pan y derivados. 🤭