.Milk.

Decir que era muy atractivo era poco, oh por dios, todo él era perfecto, me atrevo a decir que sus nalgas son más redondas que las mías, muerdo mi labio inferior ante la imaginación de probar sus labios rosados y húmedos presionando los míos, sus manos explorando cada rincón de mi cuerpo.

Oh mi imaginación me lleva a una tentación placentera y deliciosa.

— Señorita Kistell pase al frente a resolver esta ecuación —Escuchar mi apellido provenir de su boca no provoca nada santo en mí.

Mi profesor es la reencarnación de la perfección. En mi mente, hemos tenido sexo muchas veces, en la realidad, siquiera hemos avanzado a un beso.

Sus ojos grises penetran cada particula de mi ser— Por supuesto —respondo, después de un minuto en silencio en todo el salón.

Murmullos se escuchan en todo el salón,  uno de mis tantos ex-s me da una palmada en el trasero al cruzar por su asiento, y antes de ponerlo en su lugar mi amor platónico habla.

— Joven Stochs resuelva los ejercicios en el pizarron, usted señorita vuelva a su lugar —Asiento, vuelvo a mi lugar sacándole el dedo de en medio a mi ex y él solo pone los ojos en blanco y hace caso al profesor.

En fin.
Estoy en primer año en la universidad, iniciando mi carrera de medicina y decir que llegar hasta aqui fue difícil es poco, tuve que aceptar ser novia de Kakarotto Son, no es un mal tipo, es hermoso y sexi como su hermano mi sensual profesor, sí, son hermanos. Trabaje de limpieza en su domicilio hasta que en una borrachera mia me acosté con Kakarotto, y luego él me ayudo a ingresar a esta universidad.

Ambos hermanos son hermosos, y maravillosos, aunque diferentes.

— Hola cariño —Hablando del rey de roma. Me besa con fiereza hasta quitarme hasta el más minimo aire de mis pulmones.

— Oye, tranquilo campeón —Rio entre sus labios, caminamos agarrados de la manos hasta el estacionamiento.

Las clases terminaron por hoy, y como siempre él venía a recogerme.

— ¿Lo pensaste? —Me detengo, muerdo mis labios al recordar la noche de la semana pasada.

Sexo, sexo salvaje es lo que describo esa noche, no una donde me propuso matrimonio, por dios, no estaba lista para casarme y se lo deje en claro pero vaya que mi novio era testarudo.

— Kakarotto, solo —Tomo un suspiro— ¿como te fue con Rina?

Cambie tema, genial.

— Perfecto, lo hicimos bastante intenso —Su sarcasmo me sacaba de quicio.

Rina, una nerd que le pidió que tomara su virginidad, en mi opinión; una fácil, pero conozco a mi novio, y se que no me engañaría, ni con una mosca.

— Si como no, y yo me acuesto con tu hermano —En mi mente.

Chasquea sus labios, sabiendo que vendria, me dispongo a pensar de que color es mi ropa interior.

— Hola muchachos —Oh por todos los cielos, su sexi voz casi me hace derretir hasta el suelo— ¿Irán a casa? —su pelo negro plateado esta desordenado, mantengo la mirada en sus manos cuando saca una liga de su bolsillo y se amarra el pelo.

La impotente mirada de Kakarotto casi me calcina, sus ojos azules arden en celos, él sabe mi obsesión con su hermano, no obstante, solo aumentó su instinto de "perro con rabia".

— Ibamos a un motel para...—coloco una mano sobre su boca y doy un paso hacia adelante.

— Si, iremos a casa, ¿vendras con nosotros, Goku? —Asiente, ambos ignorando el aura de molestia de Kakarotto detrás.

— Soy cinco años mayor que ustedes así que yo manejo —Mi novio recrimina y se va tras suyo.

Respiro hondo, los dos son una maravilla. Uno es fuego y hielo el otro es tan reconfortante como el agua y el aire. Mantener mis piernas sin desiquilibrarse es un misterio al tener el privilegio de estar con tremenda sensualidad.

— Por cierto, ya pensaron en el baile de esta noche —Goku silencia a su hermano, Kakarotto y yo intercambiamos miradas con un signo de interrogación sobre nosotros.

Oh por dios, mis suegros llegan esta noche.

.Kakarotto.

Su escote baja hasta su ombligo cubriendo con una tela oscura con decoraciones de flores del mismo color, su hermoso vestido hasta los muslo, sus medias transparentes hasta sus rodillas, sus tacones que la hacen ver más alta y ese poco maquillaje la hace ver un poco más hermosa, en mi opinión, no necesita maquillaje, su pelo recogido a un lado con unos ondulados en las puntas.

Conclusión: mi novia se me muy hermosa y sexi.

— No, arruinaras mi labial —Me aleja divertida, provocándome, camino hacia ella rempujandola sobre la cama.

Mis padres pueden esperar.

Beso su cuello y reparto besos por sus pechos y vientre, abro sus piernas, ella apreta las sábanas pero no impide que continue. Muerdo su pierna y lamo hasta por encima de sus bragas, suspendo su vestido, acaricio sus caderas y deslizo sus bragas.

— Me torturas —Suspira, curvo una sonrisa y me inclino sujetandome de sus pechos y apretarlos, lamo su clítoris sintiendo su cuerpo tensarse— continua~

Mi lengua saborea su excitación, penetrándola ocasionando que curvara la espalda y jalara mi pelo.

— Hmm~

Su cuerpo arde, sus gemidos son motivos para continuar, la tortura, más rápido, más, más, más.

— Go-Goku~

— Hermano, nuestros padres llegan en quince minutos, debe... —Sus mejillas se vuelven rojas.

Traga su propia saliva, apreté los dientes y me separo de mi chica, quizás ella no sea para mí, me rechazo bastantes veces pero mi testarudez me impide dejarla.

— Kakarotto —Sus manos en mi rostro, me obliga a verla a los ojos, curvo una sonrisa y me separo de su cercanía.

Joder, maldición, esto es una locura.

— Hagamoslo, hermano —Se que me arrepentiré.

Milk queda sorpredida y confundida, Goku pasa por mi lado, y se arrodilla frente a ella, acaricia sus mejillas y veo en los ojos de mi novia que esta por desvanecerse ante su cercanía.

Mi hermano relame sus labios sosteniendo una de sus piernas deslizando sus medias transparentes repartiendo besos sobre la piel de sus rodillas y muslos. Ella guía hacia atrás su rostros, soltando suspiros agitados de sus deliciosos labios.

Desabotono mi camisa y camino hacia ellos, su mirada se pega en mi abdomen y se que ella admira mi cuerpo, como yo el suyo, me coloco atrás jalando la tira de su vestido cayendo este por sus pechos hasta su vientre, Goku toma la orilla del vestido por debajo y termina por quitárselo, beso su cuello y al no tener brasier juego con sus senos.

La apreté contra mi erección gimiendo abiertamente, aprovechando la ocasión él prisiona sus labios contra los de ella y la besa cruelmente lento, sintiendo sus pezones erectarse y su piel erizarse.

Muerdo parte de su hombro y doy masajes por su espalda para relajarla, gime y no se cual de los dos esta en su mente.

.Goku.

Jala mi corbata y la desamarra, quito mi chaqueta y polera hasta quedar con el torso desnudo, desabrocho mis pantalones y veo que mi hermano hace lo mismo, al instante ambos estamos desnudos, frente a la mujer que nos tiene loco.

Ella se merece todo.
Estuvo ahí para nosotros, cuando estabamos por tirar todo a la borda.

Mis fantasías en esta noche se hacen realidad, tenerla como alumna es lo mejor, admirar sus expresiones a la hora del examen, sus jeans ajustado que acostumbra a llevar deja mucho que ver y desear.

— Esto es un sueño —Nos miramos cómplice con mi hermano, lamo su mejilla izquierda y él la derecha para susurrarla al oido.

— No lo es, nena —Ella muerde su labio, provocándome de todas las maneras posibles, y no soy el unico que lo disfruta.

Kakarotto la obliga a sentarse sobre sus piernas jalando su cabello de manera provocativa ocasionando que su rostro se vea de manera sensual y apreciable para mí.

En esta ocasión— Eres nuestra —Le digo, dejando un casto beso sobre sus labios al instante gime y solo me quedo ahí, admirando su rostro y gestos con cada penetración por parte de mi hermano.

— Si, solo suya hmm~

Sus manos acarician mi abdomen, me acerco lo suficiente para sentir sus dientes clavarse en mi pecho, lamerme y deslizar hasta mi pene, sin pensarlo dos veces lame la punta, alzo la mirada solo sintiendo como comienza a chuparmela.

Recuerdo el día en que ella comió una banana, sus mejillas rojizas sentada sobre su mesa, lamiendo y mordiendo y tragando, me imagine que me hacia un oral, pero la imaginación es otra a la realidad, y es que la realidad es mas deliciosa.

Se siente rico.

Recordar encontrarlo a ellos dos en pleno acto del sexo fueron innumerables veces, ponerme duro e ir a buscar a una mujer para relajarme, desear a la novia de mi hermano no era nada bueno y no llevaría a un camino formidable.

Pero en esta ocasión, nada nos importa.

— Kakarotto~ Goku~

Lame sus labios y limpia sus mejillas manchadas por mi orgasmo, me alejo unos pasos y los observo, entra y sale, rápido, rápido, rápido y duro sacándole el aire de los pulmones hasta el más mínimo, mis mejillas arden, es como ver porno en vivo y eso no me molesta en absoluto, sólo lo disfruto, sus orgasmos se mezclan y él la deja caer sobre la cama. Esta agotada.

Esperamos unos minutos para reponernos, camino hacia ella tomando su mentón y besarla apasionadamente— Date la vuelta —Ella sonríe pero no se opone y me hace caso, veo su espalda, con chupadas y marcas rojas por parte de Kakarotto.

Me froto contra su trasero y apreto su cadera penetrandola sin medirme, grita entre las sábanas apretándolas con sus manos, oh, es la cama de mi hermano, la de limpieza adivinaría al instante el desorden.

— Me están volviendo loca —Gime.

— Tú nos vuelves dementes, Milk —Le responde Kakarotto, besando su mejilla y alejarse.

Recoje nuestras ropas, y escuchamos la música. Mis padres llegaron y yo estoy dándole duro por atrás a la novia de mi hermano.

Incremento mis entradas, ella jadea y sus gemidos son aprisionados con sus manos. No queremos a ningún intruso ahora.

— Recibire a nuestros padres, ustedes continúen —Guiña un ojo y cierra la puerta.

¿En que momento se vistió para parecer como si nada haya ocurrido? No lo se.

Ella se gira, acaricia mi pecho sujetando mi nuca para atraerme a sus labios.

.Milk.

— Soy la novia de su hijo, Kakarotto, mucho gusto suegros —Saludo formalmente, esforzándome para no caerme.

Ellos me miran, analizando cada facción mia— Eres muy hermosa, mi hijo sabe escoger muy bien con quien estar, tienes mi bendición —El señor Bardock tiene las características de Kakarotto y vaya que es bastante guapo.

— Pronto nos casaremos, ¿Verdad amor? —Me atraganto con mi propia saliva, le miro para responderle. Pero nisiquiera me mira.

— A...bueno, estamos en eso —Los ojos grises de mi suegra me inquietan, y se que no tengo su bendición para estar con su hijo.

Su hijo me obligo a estar con él, pero me enamoré de todas formas pero también estoy enamorada de su otro hijo, que por si acaso, acabamos de tener sexo, entre los tres.

Me guarde esa respuesta.

Comenzó con un baile, una canción que senti que encajaba para nosotros, Goku me da una vuelta alejándome unos pasos y acercarme al instante quedando como en un abrazo entre sus brazos,  sonrió en mis adentros.

Es tan intenso.

“Te amo, Milk”

Kakarotto aparece en mi mente, sus besos, su sonrisa, esa vez que lloro cuando tube un accidente, los malos entendidos por culpa de los demás, sus promesas que aun las mantiene cumpliendo, detengo mis movimientos, hemos pasado por muchas cosas.

— Disculpa — Goku asiente y me deja libre, voy hacia el baño al sentirme mareada y vómito.

Salgo y me lavo las manos y enjuago mi boca, me miro al espejo— Solo ibas a trabajar, solo viniste a eso a esta casa, no para enamorarte de los dos hermanos Son —Me digo a mi mina apuntando mi reflejo.

Me apoyo en la puerta, Goku es paz y Kakarotto es colapso, amo esa combinación de ambos y es lo que me atrae.

Ahora que lo pienso jamás le dije a Kakarotto que lo amaba. Por dios, tampoco estoy segura de lo que siento.

«Si te enamoras de otra persona, significa que no amas lo suficiente a la primera»

Maldita Lazuli y sus frases sacadas de los libros de fantasías.

— ¿Qué hago? —Sus labios sobre mi piel, las caricias y susurros, sus abrazos únicos con sus terribles cambios de humor. Pero pese a todo sus defectos, tiene su lado romántico.

— Ven —Antes de protestar a la de repente aparición de Goku en el baño de damas y secuestrarme, me lleva hasta su biblioteca, cierra la puerta detrás suyo y hace un gesto para que mire adelante.

Kakarotto, licor y una chica. Ouchs, maldito idiota.

— Milk —Olvide mencionar que es muy fácil de emborrachar, una gota de alcohol y dile adiós.

— Soy Erika —Responde ella, sentada sobre el escritorio y él ocultando su rostro en sus piernas, debajo del vestido.

Eso causa escalofrío en todo mi cuerpo.

— Okey guapetón deja de confundirme con una prostituta y ven hacía aca ahora —Rebela su rostro, sonríe tontamente al verme y después su mirada pasa hacia atras cambiando su expresión.

— ¿Se acostaron de nuevo? —Pregunta, mi sexi profesor coloca una mano sobre mi hombro dando un paso hacia adelante.

— No iniciaremos sin el tercio, ¿somos un trio, no? —Pense que diría algo más maduro pero solo hizo que volviera a imaginarme cosas que de seguro se haran realidad en unos minutos.

— Nop, estoy con mi amiga, ustedes diviertanse —Vuelve a ocultar su rostro debajo de ese vestido y la muy descarada solo opto por acariciarlo.

— ¿Donde están mis hijos? —Me sobresalto, me hizo recordar a la llorona.

Mi suegra abre la puerta, las llaves en sus manos siendo prueba suficiente de que la puerta tenia seguro, su expresión no es nada bonito ni queda en el pequeño cuerpo bien formado que posee.

— Ustedes dos están en graves problemas —Apunta a los hermanos Son, Kakarotto se levanta y le susurra algo a la chica para después besarla la mejilla, primero sale mi hermoso profesor y luego él.

— Niña, no soy de las que se meten en la vida de sus hijos pero tienes que decidirte, al final, uno de ellos saldra lastimado —Trago fuerte mi propia saliva.

Así que mi suegra lo sabía, genial, gracias cámaras de seguridad. Detesto elegir.

Escogería sin pensarlo dos veces a Goku, ¿por que?, bueno, es el hombre más perfecto que haya conocido, con él me voy al cielo, si nos casáramos, estaríamos siempre bien, apoyarnos reírnos, etc, porque es un hombre de muchos valores y decencia.

Pero, Kakarotto era el "pero" un pero muy sensual debo admitir, el chico malo, él no me llevaria al cielo, no, de ninguna manera, él me traería el cielo y me ardería en un infierno de placer.

Una vez más, Milk, ¿a cuál eliges?.

— Esto es difícil —Murmuro sosteniendome la frente.

— ¿Eres hermana de Kakarotto?

La prostituta descarada sigue aquí, ¿quien la invitó?

— No —abro la puerta y le hago una reverencia para que saliera—, es mi prometido —Le guiño un ojo y sale con una decepción notoria.

.Semanas Después.

— ¿Mio o suyo? —Goku me arrinconó contra la pared, muerdo mis labios y desvío la mirada hacia el escritorio, ahí hemos tenido relaciones cuando todos en la clase se iban.

Ladeo mi cabeza, golpeo mis mejillas volviendo a la realidad.

— Hay cámaras de seguridad ahora, se vería muy mal que te grabaran con una de tus universitarias —Beso la punta de mi dedo y lo paso por sus labios— nos vemos cariño.

Si, él y yo iniciamos una relación.

Kakarotto se fue al día siguiente de la llegada de sus padres y lo único que me dijo fue: «Nunca nos conocimos», no me a llamado ni enviado un mensaje y siendo sincera, lo extraño.

Al parecer necesito un poco de dolor de cabeza en mi vida para disfrutar de la paz, apenas tengo veintiún años y ya estoy complicando mi vida.

Salgo del campus y voy en bicicleta hacia la tienda comercial, ingreso y lo primero que veo son las revistas nuevas de la familia Son, Kakarotto era modelo y lucia bastante bien, esperen, ¡ese es un tatuaje!, aunque le queda muy bien.

— Señorita, ¿comprara esa revista? —Él de la tienda me saca de mis gruños internos, me doy cuenta de mis acciones, sostengo la revista y me dirijo hacia él.

— Lo llevo —Maldición.

La desventaja número una de ser ex de Kakarotto; que el chocolate te hace recordar a él.

¡No tenias que ser tan delicioso chocolate!. Pero igual te amo.

— Oh, es la insecta —Recibo un tick en mi mente, maldito enano abortado.

— Insecta tu abuela

— Igual es tu abuela

— Gran punto

Él y yo somos hermanos, nos amamos mucho, noten el mismo sarcasmo en mi narración.

— En fin, ¿que haces comprando revistas porno?

— ¡No es porno!, es tu mejor amigo posando semidesnudo para las marginadas virgensuelas para que tengan una imagen para dedearse —Golpea mi frente con su dedo.

— De todas formas solo vengo por un test de embarazo —Abro mis ojos, él nota mi asombro—, no grites o te mato con insecticida —amenaza, hago un cierre en mi boca y dejo que prosiga— Bulma esta con retraso.

— Al fin hermano, tienes cuarenta y ya. era hora que me hagas tía —Me hecha un poco de insecticida y yo toso recuperando la postura.

— Tengo treinta —Corrige, aunque su edad es lo de menos, mi hermano es lindo, a su manera.

— Bueno, pero ¿el test no se compra en la farmacia? —Nos miramos por tres segundos y el se golpea la frente, se siente un idiota, y lo es, mi idiota hermano favorito.

— Esta bien, nos vemos —Gira y avanza.

Apretó la revista y camino hacía él deteniéndolo— Oye, Vegeta...

Pedir consejos sobre amor a mi hermano no era lo principal que iba a pedir de favor.

.Goku.

Limpia su boca, murmura que vomitar es lo peor que podria pasarle a cualquier persona.

— Te hiciste la prueba, ¿verdad? —Se tensa, mira fijamente a la fogata y se abraza a si misma.

— Kakarotto y yo hablabamos de esto cuando teniamos diecisiete, yo iba a ser una excelente doctora y él un gran empresario, nos casáriamos y al llegar a casa, haríamos el amor varias veces, la verdad esto me apena pero en nuestros planes no estaba esto —Acaricia su vientre.

Un mes y medio de embarazo, y cuando tuvimos sexo los tres ella ya estaba en cinta. Sujeto su mano y entrelazamos nuestros dedos.

— Tener sexo implica el riesgo de traer a un bebé al mundo.

— Lo se, lo has explicado varias veces en tus clases pero aun no estaba lista —Esconde su rostro en mi pecho, acaricio su pelo y beso su frente— le cortare el pene a tu hermano —Reimos ante lo que dice.

— Debería reportar esto para que vean que clase de profesor eres —Las manos en sus bolsillos con un nuevo corte de pelo, su camisa no tiene botones asi que se le ve todo el torso desnudo.

Milk cae sobre la arena y retrocede, sus mejillas rojizas y su boca abierta, adoro sus expresiones salidas de comics.

— Se que no lo harás

— ¿Por que lo dices?

— Porque si me delatas, ella también tendria problemas y aqui entre nosotros no nos conviene que eso ocurra ¿no? —Suspiro disponiéndome de pie e inclinarme para ayudarla a levantarse.

— ¿Lo llamaste?

— Se que no lo harías, pero él tiene el derecho a saber —Esta nerviosa, lo deduzco al ver que se quedo en silencio. Relame sus labios, los acaricio con mi pulgar— aun no le he dicho sobre esto —toco su vientre.

Sus mejillas arden, escuchamos un chasquido y el fuego de la fogata incrementar— Ups, por equivocación le heche alcohol —Ella razca su nuca y sus miradas se conectan y puedo sentir la tensión en el ambiente.

— Nos vemos —Sujeto su cintura y acaricio su mejilla, apenas un tope de labios y la siento alejarse.

— Esta vez no lo permitiré —La apreta contra su pecho, sus ojos azules me miran fríamente, suspiro y mi celular suena.

— Lo se —Les doy la espalda, los escucho un poco criticarse de mil maneras hasta que se silenciaron, sonrió de lado, oh, el amor bipolar.

Miro mi celular, deslizó el color verde y contesto— No se porque no me sorprende tu llamada, Mía.

.Kakarotto.

— Si vas a besarme a menos trata de que no termine en sexo ¿okey? —Refunfuña con humitos sobre su cabeza,  acaricio su pelo y me inclino para besar sus labios, me corresponde y vuelvo a acostarme encima, deslizando mis manos por su cintura hasta sus glúteos.

Reparto besos por su cuerpo— Necesito borrar cada rastro de él en ti, eres mía, solo mía —Llego hasta su vientre y sus manos desordenan mi cabello— tu también eres mío —Beso su vientre y escucho su risa tan tierna que se escucha en toda la playa.

— Es niña —Dice, me arraso hasta quedar frente a frente, levanto una ceja y ella se acerca mordiendo mi mejilla— aun no se si es niño o niña pero es nuestro bebé aunque esta muy pequeño ahora.

— ¿Dudaste que lo aceptaría? —Se muerde el labio inferior, me acuesto a su lado y me alegro haber comprado una cabaña cerca de la playa.

— Un poco —Se muenta encima sobre mi abdomen y las sabanas caen de su cuerpo, su cuerpo hermoso pronto estaria cambiando—, como eres Kakarotto dude que lo aceptarías.

— Por dios Milk, ese día no encontre condón y siempre pensé en "si queda embarazada sera solo mía" —Golpea mi hombro y nos sonreímos— si dices que es mío, es porque es mío, creo en ti ciegamente Milk.

— Me gusta tu nuevo corte, queda con tu caracter de mierda —Eso dolió— y tu nuevo tatuaje, mi hijo tendra un padre que parece actriz porno

— Sabes que esa palabra suena horrible, no se porque te deje ese día ver mi carpeta prohibida —sus manos en mis mejillas me relajan, por dios— te extrañe tanto.

— Yo también, eres mi karma Son Kakarotto —Muerde mi labio de manera lenta, chupo su labio y nuevamente terminamos por casi devorarnos en un beso apasionado.

.Milk.

— Deja de mirar Shingeki No Kyojin y ayudame con las compras —Él esta en el carrito de compra con una revista del nuevo tomo de ese anime.

— Solo paseame, esto es importante —Continua con lo suyo.

Suspiro pesadamente y rempujo el carrito muy lejos de mi alcance hasta ver que se estrella con otro loco en carrito.

— Cuñada hola —Bulma, es todo lo que diré.

— Fuera de mi alcance enano abortado —Le echo un spray de insecticida a mi hermano, tengo una antena que me avisa si mi hermano esta cerca.

— Oye Milk te dare una lección

— ¡Grr! Yo le dare una lección a mi hermana

— Ella es mi novia, punto.

— Ella es mi hermana, la vi cuando nació y limpie su trasero cuando se ensuciaba, cien puntos.

Okey, eso es vergonzoso.

— Mucha información por hoy querido, nos vemos cuñada —Agradezco a la peliazul que se llevara a mi hermano, cuando ellos dos se encontraban nada terminaba bien.

Compramos lo necesario y regresamos a la cabaña, nuestro hogar, iniciamos con la independencia y mis estudios aun las continuaba aunque no iba a clases pero estaba al día con las tareas y prácticas, bueno, las prácticas no podia realizarlas por mi embarazo estos ultimos meses.

La señora Gine, mi suegra, me contó su historia con su esposo, aunque ella tenia la elección de elegir a tres, aunque su corazón solo le pertenecía al señor Bardock, algo similar a mi caso.

Goku fue promovido a otra universidad más avanzada, vaya que es un excelente profesor, sigo deseándolo pero con ver a mi esposo se me pasa. Y si, nos casamos al siguiente día de contarles a nuestros padres sobre mi embarazo, un matrimonio algo cómico.

— Esta pateando —Susurra, arrodillado frente a mi con el oido en mi bulto, en uno de estos días nacerá nuestro hijo.

— ¿Suficiente?

— No —Conectamos miradas, sujeta mi vestido y las eleva hasta quedar ahí y ocultar su rostro con mi vestido— necesitamos privacidad de padre e hijo

— Sabes que no puedo dejarlos —me palmea los glúteos— no en presencia del bebé —Reimos al unísono.

— ¿Una nueva sirvienta?, genial un saco de basura nuevo, solo no te acerques a mí —La primera impresión que tubo hacia mí fue de molestia.

Se eleva y me mira a los ojos— Pídeme

— ¿Que cosa?

— Que me quede a tu lado.

— Te quedarás a mi lado de todas maneras —toma mi mentón y besa mis labios, trago saliva pesadamente y mi pobre corazón esta por salirse de mi pecho— ¿Te quedarás a mi lado, Kakarotto?

El ambiente era caluroso y húmedo, estar debajo suyo y sentir sus labios sobre mi piel— Tuviste que venir a mi habitación en ese estado, sabes que estas en la cueva del lobo ¿no?

— Lo se muy bien, estoy borracha pero estoy conciente —Apreto su trasero—, follame tan duro que no pueda nisiquiera caminar el día de mañana.

— Me quedaré a tu lado, pase lo que pase, es una promesa —Promesa de meñique.

Siento un dolor terrible en mi vientre y mi parte, Kakarotto y yo sabemos la razón, él inmediatamente llama a una ambulancia, me da su mano y la apreto.

— ¿Ser tu novia? Eso de que servirá, podemos acostarnos cuantas veces quieras —Exhala el humo de su boca, la nevada es bastante fria pero también combina con la situación.

— Serás mi novia y punto, lo quieras o no —Nos sonreímos, encojo mis hombros y me rio a carcajadas.

— No durará, seamos realistas.

Al día siguiente, recupero la postura y paso mis brazos por mi vientre, no esta el bulto, me asustó y me siento para luego respirar tranquila.

— Mira, mamá a despertado —Kakarotto carga a nuestro hijo, me recuesto de nuevo y él se sienta a mi lado— buen  trabajo.

— Dolió

— Pero valio la pena

Me mira con tanta ternura que me siento un helado a punto de derretirme por el sol— Te amo —Él me sonríe— le digo al bebé.

Su sonrisa se borra— Oye, eso no es justo.

— No hay condón

— Arruinas el momento sabes, idiota —Muerdo su labio y vuelvo a acostarlo en la cama— mañana tomo una pastilla

— Okey, ahora continuemos.

— Venimos a invadirlos —Entran en la habitación mis padres y los suyos, amigos y hermanos, Goku esta ahí pero ahora solo cruzamos palabras pero nos llevamos bien.

— Tarado lo asustas —Kakarotto coloca a nuestro bebé en mis brazos y va hacia Vegeta que fue el que pateo la puerta y ocasiono que mi hijo llorara.

— Él unico tarado aqui eres tú

— Callate enano abortado

— Hermano, Vegeta, calmense estamos en una ocasión muy importante —Agradeci internamente a Goku por alejarlos y tranquilizar el ambiente.

Después de todo, fue un día divertido y luego de tres días me dieron de alta. Y los días transcurrían.

Mirar mi anillo de boda a sido mi pasatiempo al quedarme sola cuando Gohan se dormía y Kakarotto iba a la universidad, disfrutaba pensar que la yo del pasado no se hubiera imaginado esto, no obstante, es bastante bien.

— Ya llegue —Kakarotto cae como desmayado en la cama— estoy agotado, no mas literatura por favor —Camino hasta la cama y sentarme a su lado.

— No más literatura —Beso su cabello, se gira y el cielo azul de sus ojos se conectan con los míos— ¿Que pasa guapetón? —Jala mi muñeca y en un abrir y cerrar de ojos esta encima mío— despertaremos al bebé —Cierro mis ojos y guió mi rostro a un lado, muerde lentamente mis pezones sobre la tela de mi polera y estas se humedecen.

— Yo también quiero tu leche —Muerdo mi labio, asintiendo dandole permiso para tocarme.

De repente el llanto de nuestro hijo nos interrumpe, él se acuesta en la cama y cubre su erección con la almohada— Enseguida vuelvo —Me levanto de la cama y el me da un golpe en las nalgas.

— Te espero —Me mira de manera provocativa, avanzo hasta la puerta y levanto mi falda mostrándole mi ropa interior por atrás, maldice y continuo avanzando hasta la habitación de mi hijo.

Quedarme a su lado, es la decisión más correcta que he hecho, y que se que seguirá siendo así.

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