Conmoción, sorpresa e incredulidad era lo que se presencia a en todos los integrantes del gremio de Fairy Tail, nadie podía creer lo que acababan de ver y escuchar, muchos incluso habían adquirido un tono blanquecino en la piel, una sombra Asus coloreaba sus frentes y una lluvia de sudor caía por su espalda y frentes.

Natsu al escuchar lo que había dicho su hija la vio sorprendido, pero al instante volteo a ver a su rubia esposa y sin decir nada, levanto el pie, haciendo que su sandalia saliera volando hacia arriba, pero está fue tomada rápidamente por la maga celestial.

Lucy:¿Que acabas de decir? -pregunto la rubia mientras una sombra oscura tapaba su mirada.

Su hija, la pequeña y hasta hace pocos minutos la angelical Nashi Dragneel Heartfilia, la niña imperativa y destructiva como su padre, pero amable y amorosa como si madre, acababa de decir sus primeras y malas palabras.

Nashi Dragneel con tan solo 14 años de edad acababa de (específicamente) maldecir a su madre en su cara, mientras  está la estaba regañando por quemar una casa en Magnolia en una pequeña misión.
La joven y madre había tenido que recoger a su hija mientras su (también regañado) esposo pagaba y se disculpaba por la quemada casa.

Lucy sabía que en esa edad su hija estaría más rebelde, ella había pasado por eso, sus amigos, su esposo incluso aún sentía que estaba en esa etapa adolescentes, más nunca pensó que en medio de su regalo, su hija comenzará a bufar cruzada de brazos y rodando sus ojos con molestia a sus palabras y regaños, algo que sin duda molesto mas a la maga celestial quien intensificó su regalo y lo convirtió en castigo.
Castigo de estar sin permiso de hacer misiones por dos meses y en dónde no podría usar su magia de Dragon Slayer y sin poder salir con sus amigos y recién novio Silver.

Ante esto Nashi intento protestar, más su madre no la dejo y le advirtió que entre más renegara más aumentaría el castigo, Natsu solo escuchaba pero se mantenía serio, de acuerdo con su mujer.

Al ver qué su padre no decía nada y apoyaba a su madre, Nashi explotó, grito colérica y apretando los puños solo grito unas palabras a su madre

Nashi:Dije... ¡Maldita sea te odio carajo, ojalá no fueras mi pinche madre! -repirio cegada de furia y en un arrebato de valentía.

Solo dicho esto varios de sus amigos y novio jadearan preocupados por su bienestar. Lucy solo apretó la sandalia de su esposo en su mano y con dolor pero al mismo tiempo furia hizo lo que jamás deseo hacer con su hija, le dio una cachetada en la cara con todo y sandalia.

El golpe hizo que todos en el gremio dieran un jadeo y contuviera la respiración asustados pero más preocupados.

Lucy:Muy bien... Pues te aguantas te guste o no soy TU MADRE y si digo que estás castigada ¡ESTAS CASTIGADA! -grito con furia desbordada y dejando caer la sandalia frente a su esposo se fue de ahí.

Nashi:Te odi...

Natsu:¡NASHI DRAGNEEL! -le grito estampando su puño izquierdo en la barra, deteniendo a su hija-... Retractare ahora de lo que has dicho jovencita -gruño viéndola de forma fija y reprobatoria.

Ahora al ser detenida y confrontada por la expresión seria de su padre, pudo procesar sus palabras palabras, abriendo los ojos asustada, sorprendida y arrepentida.

Nashi:Papá...

Natsu:Papá nada, más vale que te disculpes con tu madre Nashi y si crees que tú castigo solo va de parte de tu madre, te equivocas, ahora yo te duplicó el castigo -sin más que decir se fue de ahí, queriendo ir donde su esposa seguro estaría llorando o gruñendo por las palabras de su hija.

El resto del gremio solo volvieron a lo suyo, pese a que eran una familia sabían que era mejor que Nashi resolviera el problema que causó, algo que demostraron y señalaron los amigos de la pareja y padres de los amigos y novio de Nashi.

Erza y Jellal estando de acuerdo con Lucy y Natsu solo sonrieron conformes al ver qué sus hijos habían entendido que el problema debía resolverlo la pelirosa sola.
Levy suspiró y decidió llamar la atención de su hijo, quien después de pensarlo un momento creyó que lo mejor sería que su amiga lo resolviera sola, en cambio su hermana quiso ir inmediatamente donde su mejor amiga, más fue detenida por su padre, Gajeel solo le dio una mirada para hacerle comprender que no se metiera.

Silver quiso ir donde su novia pero tanto su padre y madre lo detuvieron, Gray solo lo detuvo colocando una mano sobre su hombro y negó con la cabeza, Juvia por su parte lo tomo del brazo y le recomendó mejor dejarla pensar tranquila. Así que a regañadientes Silver les hizo caso.

Nashi ignorando las miradas e intenciones dudosas (sobre si acercarse o no a ayudarla) de todos, salió del gremio pensando y recordando las palabras que le dijo a su madre, recordando su mirada de sorpresa, dolor y luego furia.

Así que con un sentimiento de angustia Nashi se fue a su casa pero sabiendo que sus padres estaban ahí, decidió no entrar por la puerta y mejor entro por la ventana de su habitación.

Una vez ahí dentro, se dejó caer en su cama y lloro, lloro de arrepentimiento, maldiciendo ahora su persona por haber sido tan mala con su madre, madre que la cuidaba, amaba y siempre había hecho lo mejor para ella.
Gracias a su oído, lograba escuchar los pequeños sollozos de su madre y se odio más por eso, la había hecho llorar, su madre lloraba por su culpa.

~•~•~•~•~•~El otra habitación~•~•~•~•~
Natsu se encontraba consolando a su esposa, quien en después de sacar su irá y coraje, ahora tenia un arranque de sollozos.

Lucy:Dios me equivoqué, hice las cosas mal y ahora mi hija me odia -se culpaba la rubia.

Natsu:Tu no has tenido culpa de nada, Nashi se a comportado de una forma rebelde y le has puesto un alto, le has hecho un buen, si no lo hacías ahora seguro sería peor en el futuro -le dijo abrazandola- tú no eres de las que se culpan por dar un regaño merecido, así no es mi Luce

Lucy:Pero... Jamás le había pegado... Y me dolió hacerlo

Natsu:Lo entiendo, pero era tarde o temprano iba a pasar, nos guste o no unos entiende a la mala que hay cosas que no deben hacer, te lo digo yo que fui educado por Erza -dijo y su esposa solo río levemente- ya verás que Nashi recapacitara, y se disculpara sabiendo que lo que dijo solo por su rabieta estuvo mal, además nunca la habíamos castigado tanto tiempo, seguro solo por eso actuó así

Lucy:Y eso por ti, te dije que no le enseñarás o le fueras a heredar tu impulsividad de quemar todo en una misión.

Natsu:¿Pero como pensabas que controlaría los genes que le pasaba?

Así la pareja sigui hablando más tranquilos, más su platica fue detenida por los suaves golpes en la puerta de su habitación, Natsu sabiendo que era su hija se levantó y abrió la puerta serio, del otro lado una Nashi se encontraba con la cabeza baja.

Natsu:¿Que necesitas Nashi? -le pregunto cruzando sus brazos mientras Lucy se acercaba a ellos.

Nashi:Y..Yo... Vengo a disculparme -dijo intentando contener su voz entrecortada- me equivoqué, no era cierto lo que dije, no odio a mamá, no me molesta que sea mi madre, me gusta que ella sea mi mamá... -Lucy sin expresar nada se acercó y levanto el rostro de Nashi, quien al verla unas lágrimas se escaparon de sus ojos- perdoname mami, lo siento -sin soportarlo más, volvió a bajar pa cabeza pero está vez llorando.

Natsu y Lucy solo se vieron y sin siquiera mostrar algo ambos suspiraron

Natsu:Nashi no quiero que vuelvas a decir algo tan malo a tu madre... Después te arrepentirás y créeme que eres afortunada de tener una madre como Lucy -le dijo a su hija serio pero acariciando su cabezas

Nashi: Papá...

Lucy:Se que a esta edad... Uno tiene arranques de ira, rebeldía y tal vez no tengamos derecho a retarte por lo malo que haces... Tu padre nos arrastraba a cosas peores -Natsu solo desvió la mirada apenado- pero quiero que recuerdes que en esa época... No el ni yo teníamos un padre o madre que nos dijera que hacíamos mal, no te hecho nada en cara, solo quiero que entiendas que intentamos hacer las cosas por tu bien, yo por experiencia no quiero que te persigan los del consejo por quemar pueblos -dijo y Nashi dio una muy pequeña risa más no duró mucho.

Nashi:Lo comprendo, gracias mamá... Papá -los abrazo a ambos- les juro que nunca más volveré a ser una hija malcriada, seré mejor lo juro.

Nalu:Lo sabemos hija -asi ambos padres al fin abrazaron a su hija sonrientes y perdonando en silencio su pequeño arranque de rebeldía que en si no paso a mayores.

Y en secreto Nashi admiraba lo increíbles que eran sus padres, ni era mentira las historias del perfecto trabajo en equipo y compañerismo que tenían cuando eran jóvenes, menos ahora que para ella eran el mejor equipo de padres.