—Okay, es la fiesta anual de disfraces, esperemos que todo salga bien.— Decía Jason.

—Tranquilo. Se va a descontrolar, de la buena manera.— Lo calmaba Leo.

—Bueno Jason y yo hicimos una lista de cosas que queremos que cada uno evite.— Decía Annabeth mientras le pasaba la lista a Nico.

Di Angelo la estaba leyendo cuando pone una mueca, y dice..

—¿No despertar a los zombies? Ay por favor, como si-

[En esa misma noche ]

—Nico, ¿qué fue lo único que te pedí que no hicieras?— Decía Jason.

—Despertar a los zombies.

— ¿Y qué fue lo que hiciste?— Le seguía Percy.

— Desperté a los zombies. Pero eso no es lo peor.— Admitía Nico.

— ¿Qué podría ser peor?— Preguntaba el hijo de Júpiter.

Entra Leo zombi.

— Los demás son zombies ahora.— Decía Nico.

— Oh…¡Corran!— Grito Percy.

Después de correr, se subieron al techo de la Casa Grande.

—¿Cómo resolvemos esto?— Preguntaba el romano.

— Puede resolverse de dos formas, o los matamos, o podemos sacarlos del trance con una frecuencia determinada de ruido.— Explicaba Nico.

—Oh, tengo una idea. Jason, ¿tienes el karaoke que te regale?— Decía Percy.

— ¿Dices el karaoke que me regalaste pero que solo tú usas?—

—Si ese mismo, ahora vamos a resolver esto.

[Unos minutos después]

—Creo que todos en el campamento son zombies para este punto.— Admitía Nico.

—Entonces que bueno que traemos bocinas —Decia Percy mientras toca el micrófono para comprobar el audio — ¿Hola? ¿Hola?

Los zombies comienzan acercarse a la Casa Grande.

— Mmm Will de zombie tampoco se ve tan mal…—Admitia Nico.

— ¡Soy Percy, y ellos son Jason y Nico, y somos La Patrulla Alfa del Amor! —

—Yo nunca acepté ese nombre.— Decía Jason.

—¡Música!— Dijo Percy.

La música comienza a tocar.

— Ah Percy, nuestras vidas no valen tanto. — Dice Nico, después de ver la letra de la canción.

— 🎶Viernes y yo bailaré a mi antojo, me siento linda, ¿con mi vestido rojo?🎶 Percy esto es absurdo.— Decía Jason algo incómodo.

—🎶Llegamos a la fiesta nos miran los muchachos, bailemos chicas, a pasar el rato🎶 ¡Chicos tenemos que cantar todos o no servirá!— Cantaba Percy.

—🎶Ya me aburrí, nos vamos de aquí…🎶—Cantaba Nico.

—🎶La reina soy…🎶—Iniciaba Jason.

—🎶De este baile…🎶— Terminaba Percy.

—🎶¡OHHHH! ¡Las chicas solas! ¡Oh, la pista es mía toda!🎶— Cantaban al mismo tiempo los tres chicos.

Los zombies comienzan a volver a la normalidad.

—¿Qué pasó?—Preguntaba Annabeth.

—¿Por qué se me antoja algo desagradable?—Admitia Will.

—¿Quién puso esa horrible canción?—Decia Thalia.

—🎶¡Reinas de la disco! ¡Oh, las chicas solas! ¡La pista es mía toda!🎶— Cantaban los tres hijos de los tres grandes.

— 🎶¡Sí es mía toda!🎶—Canto Jason.

—...Lo voy a desheredar.—Dijo Thalia.

— Al menos nos salvaron.—Dijo Hazel, encogiéndose de hombros.

— Y la canción es algo pegadiza.— Admitía Frank.

—¡Eso mamones!—Grito Piper.

— ¡Su música horrible me salvó! —Grito Leo, mientras estaba grabando con una cámara, para chantajear más tarde a Nico.

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Si la canción la leyeron con la voz de Mabel, Dipper y el tío Stan, me deben una estrellita y un comentario.

Espero que les haya gustado.

Besos Mágicos y Abrazos Peligrosos
La Autora