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ALERTA SPOILER

Si no han leído las Pruebas de Apolo, habrá un gran Spoiler.

Leer bajo su propio riesgo.
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Era el día de muertos, Hades había liberado todas las almas del campamento Mestizo y Júpiter, solo por ese día.

La mayoría de los campistas estaban felices.

Saludaban a sus hermanos, amigos y compañeros de batalla.

Otros lloraban por la presencia de sus seres amados.

Clariss estaba aguantando sus ganas de llorar mientras estaba enfrente de su mejor amiga Selena.

Thalia y Annabeth estaban llorando enfrente de su antiguo amigo Luke.

Y Percy solo lo saludaba.

Las cazadoras de Artemisa estaban felices de ver a su antigua líder.

Leo estaba conociendo a su hermano quien había muerto al inicio de la guerra contra Cronos.

Pero hay dos personas que no se encuentran en el lugar de la llegada de las almas.

Piper Mcleen estaba en el lago, ella no tenía el valor de volverlo a ver.

—Piper — Decía una voz, que ella conocía a la perfección.

— Jason — Susurro.

Su corazón se aceleró como la primera vez que se encontraron, en un autobús para ir de excursión al Gran Cayón.

— Piper de verdad yo lo sien....

Antes del que el rubio terminará su frase, la chica morena fue corriendo hasta intentar abrazarlo, pero lo único que logró fue atravesarlo.

Ya no podía sentir la calidez de sus brazos, sus caricias.

Ya no podía.

Lágrimas comenzaron a caer por su rostro.

No eran lágrimas de tristeza sino de frustración.

Ya que en vida nunca lo valoro cómo se merecía y aún así él siempre la apoyo, en cada una de sus decisiones.

Incluyendo su ruptura.

— No te disculpes, esto fue mi culpa — Decía la castaña — Nunca de valore como debía y terminé perdiendote.

— Piper no te disculpes, yo entregué mi vida para salvar la tuya y lo haría mil veces más para protegerte, se qué querías tiempo para saber que te pasaba y lo entiendo, no estoy enojado contigo.

Esas palabras solo hacían que la hija de Afrodita llorara más.

Aún muerto él seguia siendo alguien con un gran corazón y muy comprensivo.

— Si tan solo no hubiéramos ido a ayudar a Apolo esto no hubiera pasado.

Jason cambio su sonrisa por una mueca.

— Él no tiene la culpa de que yo hubiera decidido ir ayudarlo, además, había una profecía y aunque quisiera evitarla tarde o temprano se iba a cumplir, sin importar si hubiéramos ayudado o no a Apolo.

Él seguía protegiendo al dios del sol, siendo solo medios hermanos, él consideraba a Lester como un amigo más no como una deidad sino como un camarada.

— Porque... Después de lo que te hice — Decía Piper — NI SIQUIERA TE GUARDE LUTO.

Era cierto, ella no pensó mucho para andar con una chica de su lugar natal.

— No tenías porque guardarme luto, ni siquiera eras viuda o algo así — Decía el hijo de Júpiter con un poco de sarcasmo — Solo quería que fueras feliz sin importar con quién estuvieras.

Piper solo miro a Jason, ya no era su Jason, ahora él era solo uno de sus mejores amigos.

Que ella perdió.

— Entonces, estamos en buenos términos — Río la hija de la diosa del amor, mientras se secaba las lágrimas.

— Estamos en los mejores términos. — Dijo el rubio — Además solo quería decirte Adiós, ya que nunca pude despedirme.

— Te tienes que ir ahora — Decía la chica.

— Tengo que saludar a alguien más, tengo que disculparme por no cumplir nuestra promesa.

— Entonces Adiós Jason.

— Adiós Piper, los esperaré en los Elíseos.

Si más el alma de Jason desapareció.

Desaciendo por fin un peso enorme que Piper traía consigo.

No era un Adiós.

Era un hasta pronto.

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Me disculpo si derramaron un par de lágrimas.

Quien creen que Jason va a saludar y a disculparse.

Quieren saber y tener parte 2, comentén.

Alguien me pidió un capítulo Jasper, y aquí está, se que es triste, pero espero que le haya gustado a esa personita.

Sin más.

Besos Mágicos y Abrazos Peligrosos.
La Autora.