-Callizo-
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La ciudad está a oscuras debido al cielo nocturno que está encima de los techos y cabezas de las personas que caminan por las calles, regresando del trabajo o escuela a sus hogares para relajarse y descansar de otro arduo día.
El sonar de una campana se escucha tras una puerta ser abierta, viniendo de una tienda de consumibles como también el causante del accionar de la campanada.
Se podía escuchar un caminar tranquilo, unos tennis verdes junto con calcetines negros dando ligeros pasos por la acera de piedra, ofreciendo un ritmo sonoro suave ante el casi silencio de la calle, siendo un acompañante al sonido de la misma noche.
Se veía un joven casi adulto, de complexión delgada y alta, como también una piel clara, ese chico es el causante de ese ritmo, observando con firmeza al frente con una mirada serena y sería, balanceando por su caminar una bolsa con una marca de alguna tienda de abarrotes marcada con un color distinto al color de la bolsa para poder distinguirse al observarlo.
Su cuerpo reacciona también a su caminar, siendo reflejado por el movimiento de su pelo largo color gris, este en particular rozando su cuello, hombros y hasta el inicio de su espalda por el viento que iba contra su paso.
El joven se detiene por un momento para acomodar su suéter verde oscuro puesto que este estaba algo arrugado y mojado como también su short color gris que también estaba en las mismas condiciones /Tenía que dejar que secaran/ El chico bufea bajo su mascarilla negra el cual tapaba su mandíbula como signo de molestia.
El peligris niega con su cabeza después de terminar de acomodar su sueter y short, para retomar su caminar, mirando de reojo el contenido de la bolsa que este poseía en su mano derecha, siendo latas de consumo adolescente refiriéndose a refrescos de alto nivel de azúcar como bebidas con bajo porcentaje de licor, así como una que otra bolsa de frituras oculta entre las latas.
El chico suspira cansado, girando 90 grados a la izquierda entrando a un callejón, comenzando a toser debido a la pequeña cantidad de humo que se estaba juntando por todo el callejón -Me pregunto...- Comienza a hablar con un tono tenue -Cuando dejaras de fumar- Termina la oración con un tono sarcástico a su vez que da a entender la existencia de otra persona en ese lugar.
-Me pregunto...- Una voz rasposa y fria que por lo que aparenta proviene de una mujer se hace presente -Cuando dejaras de molestar con eso- La chica responde en un tono arrogante y a la defensiva así con un ligero toque sarcástico contestando su pregunta con otra pregunta, siendo que los dos hablan en un tono sarcástico ambos ríen falsamente.
-Ja...ja...tsk ya ni se para que pregunto- El joven rechista ante la actitud fría y arrogante de su "amiga", recargando su cuerpo y cabeza sobre la pared.
-Y lo sigues haciendo- La chica menciona con su mismo tono frio, camina al lado de el mostrando su apariencia, está siendo una chica algo más baja que el peligris, parece ser ya adulta, con una mirada neutra inclinándose por una sería y de piel clara, su ropaje esta algo descolorido ya que solo tiene un short de mezclilla corto, una chamarra con capucha color vino tinto dónde se apreciaba que en su época dorada era de color morado y por último su calzado que solo eran unos calcetines, aunque lo que más se podía apreciar era su afro enorme llegando incluso a rozar el suelo de un color morado intenso, a la vista se podía apreciar que no era una persona muy higiénica.
-Asi me tratas cuando yo soy quien se molesta en traerte tu..."adicción"- El chico muestra la bolsa con las bebidas.
La pelimorada observa de reojo la bolsa y con molestia levanta su mirada hacia el rostro del peligris -No me trates como alguien que reclama como bebe su biberón y necesita ayuda...Javik- Su voz molesta incrementa de timbre y sonríe con burla al decir su nombre real.
-Deja de llamarme así es Jv...- El chico menciona rápidamente molesto el apodo que el mismo se colocó por comodidad -Aun así, y... entonces porque la otra vez te irritaste solo por no tomar por un día una botella de cerveza?...Natasha- El joven pregunta con sequedad y sonríe devolviendo la broma que la chica le hizo, comentado su nombre real.
-Tsk ni pienso contestar eso...y...es...Talia tonto- La joven comento molesta mientras se recarga a la pared usando todo su pelo como almohada para su cuerpo y cabeza.
El chico deja sus burlas de lado suspirando, cierra sus ojos por un rato para después abrirlos de vuelta observandola nuevamente con comprension -Mira...yo...- El joven se queda callado, tratando de buscar las siguientes palabras que va a decir.
-Mmh?...- La chica no lo voltea a ver a pesar de eso aún lo escucha -Te escucho- La pelimorada saca de su chamarra una cajetilla de cigarros.
El peligris vuelve a suspirar encontrando las palabras al fin -Yo...bueno, todos nosotros nos preocupamos por ti, por eso nuestra insistencia en que dejes ese vicio atrás- El joven observa de reojo un cigarro que ya estaba colocado en la boca de la chica -En verdad...nos preocupamos mucho por ti...- El chico termina la última oración mirando el suelo.
La peliafro observa al joven con algo de sorpresa en su rostro -Y...porque me comentas eso ahora?- Se quita el cerillo de la boca para inclinar su cabeza en confusión, a su vez que su tono de voz deja de estar molesta -Porque los demás no vienen conmigo a simplemente saludar?- Vuelve a preguntar.
-Es...complicado- El peligris menciona con cierta duda -En verdad los demás quieren estar contigo pero por motivos personales no pueden...como también que siempre te vas de callejón en callejón y no te encuentran dónde piensan que estás- El chico finaliza su diálogo, sentandose en el suelo dejando la bolsa cerca a la peliafro.
La pelimorada se queda pensativa observando fijamente la bolsa que yacia en el suelo -...- Su cuerpo se desliza por la pared hasta también sentarse al suelo -Bueno...una llamada por lo menos podrían dar- La chica mete su mano a la bolsa sacando una lata de refresco -Pero ni eso pueden hacer- Abre la lata formando el sonido característico del gas siendo expulsado como bala.
El pelilargo observa la acción que hizo la peliafro -Y creeme...lo han hecho, pero tú no contestabas las llamadas- Se queda observando la bolsa para que al momento su visión notará la lata que ella sostenía en su dirección -Uhm...gracias- Con duda toma la lata de refresco.
-Espera...- La chica toma de su chamarra su teléfono, prendiendo lo y entrando a la aplicación de llamadas notando más de cincuenta llamadas perdidas -Uhm...parece que...- Tose de la incomodidad -Tenia el teléfono en silencio y por eso no contestaba...- Una gota de sudor pasaba por su mejilla cayendo al suelo.
El grisáceo suspira con fastidio -Teníamos que haberte enseñado a usar un telefono- Niega con su cabeza en forma de decepción.
-Tampoco me tomes como una anciana, tengo veintitres años apenas- La chica golpea su hombro con algo de fuerza.
El peligrisáceo se queja ante el golpe recibido -Pues perdón señorita- Menciono en un tono sarcástico.
-Ya basta de eso quieres, okay fue mi culpa ya lo admito- La pelimorada menciona resignada, toma de la bolsa otra lata está siendo de licor, la abre rápidamente dándole un gran trago.
El chico rie ante su comentario -Esta bien- Enfocando su vista a su propia lata, levantando ligeramente su mascarilla para darle un ligero sorbo. -Solo no te pases con eso-
La peliafro deja de tomar su bebida -No prometo nada, pero si quieres que no me pase diría que tomarás las latas de licor para que sean menos las que tome- Dice para volver a tomar.
El peligris suspira resignado -Bueno...una no creo que haga daño- Deja de lado la lata de refresco para tomar otra de licor de la bolsa, la abre y con duda ve el líquido dentro de el.
La chica ve de reojo la duda del joven dejando su lata ya terminada de lado -Que pasa? Te acobardaste?- Sonrie con malicia y viendolo fijamente.
-Tsk...no, no lo estoy- El chico le da un gran trago a su lata para rápidamente escupirlo -Que asco...- Menciona con asquedad con unas gotas de ese líquido cayendo por su boca -Porque tomas esto sin sentirte asqueada?- Toma la botella de refresco que dejó a la mitad para quitarse el sabor amargo que tenía en la boca.
La peliafro al verlo escupir el contenido de la lata solo se ríe a carcajadas -Me esperaba todo menos eso, enserio por una bebida que no tiene casi ni alcohol y te pones así- Menciona aún riéndose, su diálogo se escuchaba entrecortada por su risa que se volvía más afónica después de terminar de decir su última palabra.
-No me río, no da risa- El peligrisáceo se termina su lata de refresco, aún teniendo una expresión de disgusto gracias al sabor amargo de la anterior bebida.
-Pues a mi si me dió risa- La pelimorada deja de reír para recomponer su habla inhalando y exhalando para luego solo sonreír ahora de manera genuina -Ya te iba a ofrecer esto...- Saca un cigarro de la caja -Pero viendo eso...mejor no- Coloca ese mismo cigarro en su boca.
-Si,...dejalo así- El chico bufea molesto -No quiero saber el sabor que tendrá eso-
La chica saca un encendedor -Te quieres quedar aquí?- Pregunta para después encender el cigarro y comenzar a fumarlo.
-Como siempre- El joven menciona rápidamente, recibiendo un rodeo de ojos de parte de la chica, el toma otra lata de refresco para comenzar a beberla.
La peliafro saca su cigarro de su boca para expulsar el humo en dirección a el, causando que este tosiera, haciendo que ella ría -Como gustes-
El chico se acomoda su mascarilla, rodando sus ojos observando el oscuro cielo, recargando su cabeza sobre la pared -Solo no me escupas humo de nuevo- El chico guarda la lata en su suéter.
La chica termina su cigarro tirandolo fuera de su alcance, para recargar su cabeza y hacer lo mismo que su acompañante. -Es gracioso hacerlo-
-No, no lo es- El joven dice secamente.
-Si, lo es- La chica lo contradice.
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