68. Nico González
LO QUE NOS MERECEMOS
Capítulo dedicado a ilaixftnico
espero que te guste ❤️
Termino mi turno en el hospital y junto a mi compañero Andrés me dirijo a tomar un café y unas tostadas. Nuestro turno comenzó a las 7 de la mañana y hasta ahora que son las doce del mediodía no hemos salido. El hospital aunque no ha estado a rebozar de gente hemos tenido que hacer varias consultas.
- Azahara preguntan por ti - dice Damaris.
- ¿por mi? - pregunto confusa.
- si te esperan en tu consulta.
- pero mi turno ya ha acabado - digo.
- parece ser importante, puedo decirles que esperen unos minutos.
- bueno si es muy importante tendré que ir a ver de que se trata.
- les diré que esperen - me dice ella y asiento.
Unos minutos después voy hacia mi consulta.
- perdonad, ya estoy aquí - digo entrando.
Veo a un chico alto, alto se queda un poco corto, a mi me saca al menos dos cabezas y media y a su lado hay un hombre algo más mayor de aproximadamente unos cuarenta o cincuenta años más bajo que el chico.
- no pasa nada tranquila, te hemos interrumpido nosotros - me dice el chico sonriendo.
- decidme - digo.
El hombre saca unos cuantos de papeles y me lo deja encima de la mesa los leo por encima y veo fractura del quinto metatarsiano del pie izquierdo.
- hemos oído ya varias recomendaciones pero nos han hablado muy bien de ti, y queremos saber que nos recomendarías hacer.
- sinceramente pienso que es mejor una intervención quirúrgica. - digo y los dos asienten.
- ¿cuánto tiempo estaré sin poder jugar? - pregunta el chico.
- depende de tu evolución pero normalmente podría ser entre un mes a tres. - digo.
- ¿podrías realizarme la operación hoy mismo? - pregunta de nuevo.
- ¿quieres que te opere yo? - pregunto alusinada.
- si, hablan muy bien de ti Azahara y no creo que sea casualidad.
- en una hora pasaremos al quirofano - le informó.
- muchas gracias Azahara - dice con una sonrisa.
- es mi trabajo.
- Nico, me llamo Nico.
Hace un par de horas que termine de operar a Nico y ahora justo estoy llegando a la habitación donde se encuentra para darle el alta.
- ¿cómo te encuentras? - pregunto mirándole.
- bien aunque aunque ahora mismo no siento apenas dolor.
- la anestesia - digo y él asiente.
- Azahara - dice ni nombre y giro lo cabeza para mirarlo.
- dime Nico.
- mm, me gustaría quedar algún día contigo si a ti te apetece - dice y yo me muerdo los labios.
- el efecto de la anestesia no se te ha pasado, esta claro - digo riendo.
- lo estoy diciendo enserio - dice Nico frunciendo el ceño.
- ¿no me estas vacilando no?
- ¿vacilarte? ¿En la cama de un hospital? No te vacilaria aquí Azahara.
- ¿me estás pidiendo una especie de cita? - pregunto alzando las cejas.
- si tú quieres si.
- a mí no me importaría - digo y él asiente sonriendo - por cierto, ya tienes el alta.
- ¿y tú ya habías acabado tu turno verdad?
- así es. - afirmó.
- pues tú y yo nos vamos - dice y le miro. - no me mires así, son las cinco de la tarde y ninguno de los dos hemos comido.
- también es verdad.
Conduzco hasta una pizzeria cercana al centro de Valencia y nos metemos en el interior de esta para que Nico este más cómodo.
- ¿de qué quieres la pizza? - pregunta.
- jamón york y queso - digo.
- ¿también es tu favorita?
- por favor, es un clásico. - digo y él sonríe.
Después de la comida, Nico y yo damos una vuelta por el centro de la ciudad y pasamos un rato bastante agradable.
- venga que te llevo a casa, Nicolás - le digo y él me mira mal.
- no me llames Nicolás que me recuerda a cuando mi madre se enfadaba conmigo - dice y yo río.
Suelto a Nico en su casa y antes de que entre se acerca a la ventanilla y la bajo para mirarle.
- te tengo que compensar por operarme cuando tu turno había acabado.
- ¿y cómo pretendes compensarme? - pregunto.
Él baja la mirada a mis labios y se relame los suyos, lo miro a los ojos y me sale la sonrisa tonta.
- ¿por qué sonríes? - pregunta.
- no lo sé.
- te estoy poniendo nerviosa - dice y yo chasqueo la lengua.
- puede ser que si o puede ser que no.
- pues para que te tranquilices - dice y deja un casto beso en mis labios - que tengas buenas noches Azahara.
Unos tres meses después...
- cariño tranquila - me dice Nico y yo niego.
- ¿cómo pretendes que este tranquila? Voy a conocer a tus padres Nico - le digo.
- ni que te fueran a comer - dice y yo niego con la cabeza - eso solo lo puedo hacer yo. - dice y le doy un golpe.
- eres un salido.
- no es mi culpa.
Ruedo los ojos y tomo su mano cuando nos acercamos al timbre.
- les vas a caer muy bien Azahara, a mis padres y a mis hermanas.
- espero.
La puerta se abre por una mujer de pelo moreno y de estatura media, se abalanza sobre Nico abrazadolo con fuerza.
- mama te presentó a Azahara, mi novia.
- que ganas tenía de conocerte Azahara - me dice la madre de Nico - soy Gema - dice abrazandome.
Entramos en la casa y en el salón nos encontramos con el padre y las hermanas de Nico.
- por fin nos la traes Nicolás - dice Macarena, hermana de Nico.
Cenamos entre risas, anécdotas que me cuentan de cuando Nico era pequeño, Gema me enseña algún que otro álbum de fotos de Nico en el que le hago algunas fotos para tenerlas, hablamos un poco de mi trabajo, de como nos conocimos...
- hacéis una pareja preciosa - dice Gema y yo sonrió mirando a Nico que deja un beso en mi frente.
Hace un par de minutos que Nico y yo hemos subido a la habitación, hemos empezado a besarnos y ahora estamos más calientes que el mango de una sartén.
- Nico están tus padres abajo - digo.
- si eres silenciosa no nos van a oír.
- Nico que vergüenza.
- ¿no te da morbo? - pregunta mirándome con una sonrisa traviesa.
La situación nos ha llevado a hacerlos en casa de sus padres pero era inevitable.
- Azahara.
- dime Nico.
- Quérote miña nena
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro