Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Acto 4: La calma (Final)

El grupo de Takao se dirige al palacio, afortunadamente Veldora tenía energías y estaba curado del ataque del Tyrant, por lo que fueron a gran velocidad, al palacio, aunque tuvieron algunos problemas con la guardia.

Hey, esperen, no pueden entrar. – el dragón da un poderoso rugido.

Takao: ¡Quítate, tenemos que informar algo de la misión que tuvimos en Romalia! – lo empuja, el soldado caído iba a reclamar pero le pisan la cabeza.

Satoshi: No estorbe. – siguen avanzando por los pasillos, hasta llegar a la sala principal ahí estaba Tabitha, Julio, Henrietta y Agnes.

Tabitha: Takao ¿Qué pasó?

Takao: Lamentamos llegar recién.

Julio: Veo que se recuperaron.

Takao: Pues tengo en mente salvar a mi hermano, por lo tanto, tenemos que aportar y mis condolencias, Julio. – extiende su mano y él corresponde el gesto.

Julio: Cumpliré lo que me pidió, seguiré viviendo y luchando.

Takao: Bien dicho camarada. – mira el mapa. - ¿Hay algo que nos perdimos?

Julio: Pues, después de que ordenáramos la retirada, nuestros exploradores, han divisado un gran número de dragones cubriendo el capullo, no se ha movido de ahí por estos días, aunque...perdimos a tres por...ya sabes quién...-dijo con pesar mientras que Louise bajó la cabeza.

Henrietta: Ese dragón caerá, al igual que sus lacayos, ni siquiera ese dragón de apariencia extraña será rival para nuestra armada.

Takao: Le pido que cuide sus palabras, ese dragón de apariencia extraña es mi amigo.

Henrietta: ¿Entonces por qué ayuda a la bestia legendaria? – el peli azul iba a responder, pero alguien más llega.

Saito: El dragón antiguo sacó un tercer ojo, primero controló a Azuro y casi nos mata, pero fue gracias a él quien nos sacó de ahí, sin embargo, el dragón tomó control de su cuerpo y terminó por transformarse en un dragón bajo su control.

Henrietta: ¡Saito-san! – dijo sorprendida y confundida, creyó que iba a ponerse de su lado, lo mismo estaba Takao con una mirada dudosa.

Saito: Perdí a Derflinger y casi muero por la bestia.

Takao: ¿Cuál es tu truco?

Saito: Tienes tus razones, yo sólo estoy mostrando mi agradecimiento por haberme salvado, además, que me lo prometí después de que perdiese a Derf. – la mirada no era como esa vez que fue a la boda, sino una mirada seria.

Takao: Está bien. – mira a Julio. - ¿Decías que sigue encerrado en el capullo, verdad? – el rubio asiente. – Si comió a Su Santidad, entonces lo debe estar asimilando.

Julio: ¿A qué te refieres?

Takao: Esa bestia por alguna razón atacó Aquilea y ya me contaron que el rey Joseph murió en ese lugar, entonces los rastros de la magia del vacío quedaron y lo asimiló, ahora que comió a Vittorio, se quedó como capullo; mi conclusión es que quiere comer a los magos del vació para luego arrasar con todo.

Louise: Así que va tras de Tiffania y de mí. – aprieta los puños. – Pues que lo intente, yo pelearé y haré que Kenichi regrese a la normalidad.

Henrietta: ¿Piensas enfrentarlo? ¡Es una locura! ¡Su Santidad ha caído en batalla y tanto tú como Tiffania son las siguientes! ¡Yo no aceptaré que hagas eso!

Louise: ¿Te recuerdo que dejé de ser tu sirviente?

Henrietta: ¡Tú naciste en Tristain, por lo que perteneces a esta nación y estás bajo mi mandato!

Louise: ¿Quieres que te de otro golpe como aquella vez que quisiste interrumpir la boda de Satoshi e Ingvild? – la peli púrpura estaba algo intimidada, porque la mirada que le dirigía era de alguien que estaba dispuesta a hacerlo pero Takao extiende los brazos entre ambas.

Takao: Louise, basta. – mira a la reina de Tristain. – Lo mismo le digo a usted, deje de comportarse como una inmadura y si vuelve a causar otro problema, le daré una terapia ocular más fuerte. ¿Entiendes? – la peli púrpura retrocedió con temor, aún recordó la tortura ilusoria que el peli azul la metió.

Satoshi: Sí que le dejaste un severo trauma.

Takao: Ella se lo buscó y ahora volvamos al tema por favor. – mira el mapa. -Si el dragón se detuvo aquí, no sabremos cuánto le tomará para que salga de su capullo y siga en su búsqueda de quienes portan el poder del vacío. Habría que atraerlo a un lugar apartado de civiles.

Julio: Tomaría a Romalia, pero la gente está tan asustada por lo de la ciudad destruida y muchos están evacuando, por lo que sería arriesgado.

Tabitha: Podría ofrecer mi territorio como zona de ataque. – el peli azul niega.

Takao: Tu país está en recuperación, que destruya ahí, traería graves consecuencias para tu nación.

Ofrezco mi academia. – todos voltean y notan a Osmond en la entrada.

Louise: Maestro Osmond. – dijo sorprendida.

Osmond: Es un gusto verlos a todos. – se acerca al rubio de ojos heterocromáticos. – Siento mucho por lo que le pasó a Su Santidad. – coloca una mano en su hombro.

Julio: Gracias y por más que me duela su pérdida, terminaré lo que iniciamos, acabaremos con ese dragón, pero ¿Está seguro de ofrecer su academia?

Osmond: Claro, los maestros ayudarían, además que evacuaremos a los estudiantes a tiempo. – Takao mira a Louise.

Louise: Estaría bien, sólo espero que los daños no sean grandes.

Tabitha: Prepararé al ejército para confrontar al dragón. – todos miran a Henrietta, ella no estaba de acuerdo pero Louise y Takao le lanzaron de nuevo la mirada fría.

Henrietta: Yo igual prepararé mi ejército. – dijo resignada.

Takao: Louise ¿Crees poder pedir a Tiffania que haga un encantamiento potente de Olvido? Tal vez así podemos hacerle recuperar la consciencia.

Louise: Podría ser posible.

Satoshi: Pero tenemos otro problema, cuando lo enfrentamos, se movía con ferocidad, ni siquiera con mis cadenas pude retenerlo.

Ingvild: Además que su piel es muy dura con la magia, dado que esa armadura estaba en constante evolución, por lo que su resistencia es alta.

Louise: Podría usar mi magia del vacío, al menos él no recibió ningún hechizo mío de parte mía, por lo que podría ser una posibilidad.

Satoshi: Sería una buena idea, pero según Vittorio, si logras explotar al dragón antiguo en una zona donde no tenga el miasma, puede que lo destruyamos.

Louise: Sí, pero puedo usar una pequeña reserva para ayudar a Kenichi. – respondió con seriedad.

Takao: Podría ser como opción secundaria. Satoshi y yo nos encargaremos de mantenerlo a raya. – mira al rubio, y él entiende el mensaje y se preocupa.

Satoshi. ¿Estás seguro en usar "Eso"?

Takao: No hay de otra.

Tabitha: ¿Qué es lo que vas a usar?

Takao: Mis habilidades oculares no sólo están para anticipar o causar ilusiones, en pocas ocasiones me viste usar unas llamas negras, pero me dolía los ojos luego de usarlo. – la peli celeste asiente. – Pues tengo un as bajo la manga, un as que es un arma de doble filo.

Louise: ¿De qué se trata?

Takao: Ya lo verás cuando llegue el momento, pero si hay algo que te puedo decir, es que sólo tengo un tiempo límite, ya que si lo uso de forma desmedida, podría perder mi vista. – eso abrió los ojos a los presentes, excepto a Satoshi.

Ingvild: ¿Eso es verdad? – tanto el peli azul como el rubio asienten.

Satoshi: Sí, habría una forma para hacer que su vista no se pierda, pero lamentablemente, mi sangre no es compatible, el único que sí era nuestro hermano mayor, pero ahora que está poseído....

Takao: Ahora que él está poseído, no puedo hacer la transfusión, por lo que mi as bajo la manga es disponible de forma temporal y sólo lo usaré cuando Kenichi esté apartado de la bestia.

Julio: Entonces nuestras flotas atraerán la atención del dragón.

Louise: Hablaré con Tiffa y prepararemos nuestra magia para el ataque. – mira a Henrietta. – Más te vale que aportes con ayudar, porque si el plan sale mal, créeme que yo misma haré que pagues por tu rabieta. – dijo mientras le apuntaba con la espada. - ¿Entendido? – ella con temor asiente.

Takao: Saito ¿Crees que puedas pelear?

Saito: Perdí a Derf, pero con un arma puedo pelear.

Takao: Con eso me basta. Sólo es cuestión de tiempo de que la bestia legendaria despierte y siga con el ataque, así que será mejor que preparemos todo. – todos asienten.

Ya habiendo organizado en el palacio, todos proceden a alistarse, Julio volvió a Romalia, Tabitha a Galia, en cuanto Takao y su equipo, junto con Osmond y Saito regresaron a la academia.

Takao: Le agradezco su colaboración director.

Osmond: No hay de qué muchacho y lo bueno es que esto será un bastión cuando lleguen los dragones.

Louise: ¿Y qué hay de la evacuación?

Osmond: Lo hice antes de ir al palacio, no se preocupe señorita Valiére, el personal civil y los estudiantes han sido evacuados. – dijo mientras abría la puerta pero nota a Kirche, Tiffania y a un grupo de estudiantes preparados para la acción. - ¿Eh?

Colbert: Lo siento director, pero ellos dijeron que estarán dispuestos a luchar hasta el final.

Kirche: Y bien Louise ¿Qué es lo que tenemos que hacer? – la peli rosa estaba algo confundida. - ¿Pensaste que te dejaríamos sola? Eres mi amiga y te ayudaré en esto.

Guiche: El escuadrón Ondine también está preparado para pelear. – los demás dan un grito de guerra.

Tiffania: Estaré lista para el siguiente enfrentamiento Louise-san.

Louise: Chicos...

Nosotros también ayudaremos. – Satoshi e Ingvild voltean y notan a Ari y Luctiana, los elfos del desierto. – He contactado con mi tío, así que contamos con su ayuda.

Ari: No dejaremos que esa bestia destruya nuestro hogar.

Espero que podamos tener un poco del pastel. – Louise voltea y se sorprende al ver a tres chicos y una chica, ella ya los conoció antes de la muerte del rey Joseph, los hermanos elementales que habían causado problemas en aquella ocasión.

Takao: Ustedes. – afila su mirada.

Oh Takao-san, nos volvemos a ver. – dijo el rubio con sombrero mientras sonreía.

Louise: ¿Los conocen?

Satoshi: Es una pequeña historia.

Tuvimos un buen duelo en aquella ocasión, pero he mejorado mis golems contra ti Satoshi. - respondió el musculoso.

Hace tiempo que no nos vemos Louise, lo mismo digo de ti Ingvild. – decía la chica gótica con una sonrisa, sacando una gota a ambas.

Ingvild: A decir verdad, no me alegra mucho verte. Jeanette – dijo con algo de incomodidad.

Jeanette: Eso me hiere Ingvild-chan. – dijo con tristeza fingida.

Por cierto ¿Dónde está su amigo pelirrojo? Aún me debe una revancha. – decía con una sonrisa.

Takao: Pues tendrás que esperar, pero no quiero nada de trucos, ¿Escuchaste Damian?

Damian: No te preocupes Takao, si estamos aquí, es porque no queremos que nos destruyan, así que decidimos ayudarlos. – dijo con seriedad.

Takao: Bien. – se dirige con los demás. – No era lo que esperaba, pero supongo que será lo mejor, de por sí, ellos tienen un buen nivel, así que podrían llamar la suficiente atención para eso.

Louise: Sí, incluso tuvimos un enfrentamiento contra ellos. – el peli azul abre los ojos. – Pero si están dispuestos a ayudar, entonces la aceptaremos, es parte de la operación ¿Verdad?

Takao: Es verdad. – ve que la peli rosa miraba su anillo, cosa que él entiende rápidamente y toma su mano. – Tranquila, lo traeremos de vuelta, te lo habíamos prometido.

Louise: Gracias Takao. – le da un abrazo y el peli azul corresponde. – Lo traeremos de vuelta.

Takao: Así se habla. – da unas palmadas en su cabeza y luego se reúne con Satoshi.

Estuvieron haciendo el plan hasta el amanecer, la misión era difícil, separar a las bestias más peligrosas y evitar que se reúnan, además de cuidar tanto de Tiffania como Louise.

Takao: Y esa es toda la operación.

Kirche: Es demasiado complicado, pero dalo por hecho, lo mantendremos alejado para que puedan hacerlo reaccionar.

Takao: Sí, esperemos que las flotas lleguen a tiempo. – de repente todos sienten un fuerte movimiento sísmico, tambaleando a algunos mientras que otros se mantenían firmes.

Satoshi: ¡Ese terremoto...!

Louise: Él...

Takao: Ha despertado.

//==//==//==//==//

Minutos antes, un grupo de soldados de Romalia estaban vigilando el capullo del dragón con cautela y silencio, pero para su sorpresa, el suelo empezó a temblar, los dragones, liderados temporalmente por Tyrant dieron un fuerte rugido, la roca empezaba a elevarse.

¿Qu-Qué está pasando? – dijo uno sorprendido y asustado.

Para su terror, las rocas forman al dragón, primero con magma y al final el miasma lo cubre por completo y extiende sus alas, Tyrant da un fuerte rugido hasta que nota a los invitados.

¡RETIRADA! – pero no llegó a tiempo, el dragón se lanzó al ataque y mató a varios exploradores.

El pánico estaba en casi todos los soldados, pero uno logra divisar a la bestia ancestral extender sus alas y emprender vuelo a Tristain, seguido de los dragones, sólo era cuestión de tiempo que llegara a la ubicación de las magas del vacío.

//==//==//==//==//==//

Unos días pasaron, el ambiente en la academia era tenso, después del movimiento sísmico, muchos estuvieron atentos por si algo o alguien se aproximaba, Malicorne, fue designado para detectarlos, mientras que los demás trataban de mantener la mayor calma posible.

Osmond: Esperemos que los demás lleguen a tiempo, antes de que se aproximen el dragón Antiguo.

Takao: Lo único que podemos hacer es prepararnos y esperar a que llegue la armada, no hay de otra. – decía mientras miraba el mapa y tomaba un poco de su bebida.

Louise: Pues esperemos que lleguen. – dijo algo preocupada.

Satoshi: Llegarán, después de todo, no cometerían el error de dejar que todo sea destruido.

Malicorne: ¡Es la bestia, ya está aquí! - todos abren los ojos.

Osmond: Entonces debemos hacer tiempo. – el peli azul se levanta de la silla mientras se acomodaba su gabardina, para salir por la puerta principal.

https://youtu.be/d2hRTLdvdnk

Satoshi era el siguiente, acomoda sus cadenas en sus antebrazos mientras guardaba las espadas en su espalda y acompañaba a Takao, Ingvild también se preparaba y acompañaba a su esposo, Saito estaba en el patio, y al ver a Takao salir con su equipo, va a acompañarlos.

Takao: Muy bien... - mira a la bestia acercándose a poco a poco. – Ven aquí desgraciado, es momento de ajustar cuentas.

El dragón ancestral se prepara a atacar con un aliento devastador directo al edificio y lo arroja, sin embargo, al momento de impactar con la academia, es repelida por una barrera mágica.

Takao: Esos artilugios sí que funcionan bien. – decía con leve sorpresa mientras salían de la academia y notaban a varios dragones aproximarse. – Que comience la fiesta.

Varios dragones empezaron a arrojar una llamarada, pero Ingvild contrataca con una poderosa corriente de agua, sacando a varios dragones, Satoshi es el siguiente, salta sobre un dragón y entierra sus espadas, sirviéndolo como medio te transporte.

Satoshi: Hey, ¿A dónde crees que vas? La fiesta es por aquí. – desvía la dirección del dragón y ataca a los suyos, ya sea con embestidas o las llamaradas que escupía tratando de liberarse.

Saito por su parte, cortaba a los que estaban a su alcance, perdió a Derf, pero está luchando con una espada estándar, al menos lo que puede aguantar, además de tener cuidado ya que ahora no absorbía los ataques elementales.

Takao toma a un dragón del cuello y lo congela, dejándolo sin posibilidad de expulsar llamas para luego desmayarlo con una fuerte corriente eléctrica.

Takao: Primera oleada repelida. – divisa a la distancia a muchos barcos voladores. – Je, ya llegó la ayuda.

En efecto, allí estaba Tabitha junto con la flota de Galia, Julio, con la flota de Romalia, Henrietta con la flota de Tristain y también las flotas de Albion y Germania, hasta el Ostland estaba preparado para el ataque.

Veldora: Pues sí chico, ahora es momento de contratacar. – decía mientras aterrizaba, él se había ofrecido voluntario en llevar a Julio a Romalia dado que era más rápido.

Takao: Es bueno que hayas regresado. – se sube al dragón.

Veldora: Me das un resumen rápido de tu plan, pero será mejor que sigamos defendiendo el lugar.

Julio: ¡SOLDADOS DE LA ALIANZA DE HALKEGINIA, PREPAREN LOS CAÑONES! – todos los cañones estaban apuntando en dirección al dragón ancestral.

Colbert: Debemos hacer el ataque al mismo tiempo para así poder hacer daño el miasma. – miraba cómo su cañón estaba siendo cargado y listo para disparar.

Julio: ¡FUEGO! - se escuchaba los sonidos de las balas de cañón saliendo y sólo iban a un objetivo, al momento del impacto, se cubrió con una gran cortina de humo, pensando que con eso podrían dañarlo, pero para su sorpresa, el dragón ancestral sale completamente ileso y ahora preparaba un ataque contra ellos, muchos estaban en shock y veían su muerte inminente, pero una barreara mágica frena el ataque del dragón, era la flota de los elfos del desierto, Bidashal había llegado a la ayuda.

Ari: Lord Bidashal llegó. – dijo emocionado.

Luctiana: Sabía que mi tío llegaría. – respondió con una sonrisa.

Takao: Genial, cuantos más, mejor. – ahora nota que los dragones se dirigían contra la flota, en especial el Tyrant quien llegó más rápido y empezó a destruir cada barco, muchos trataron de frenarlo, pero el salvajismo de la bestia era de otro nivel, justo cuando iba a atacar al barco donde estaba Julio, Veldora junto con Takao se interponen en medio y de una embestida, hacen retroceder al dragón. – Tu oponente ahora soy yo. – prepara su ataque. - ¡POLVO DE DIAMANTES!

Una ráfaga de hielo frío se dirige al dragón, quien se cubre con sus alas, congelándolas un poco, sin embargo, el Tyrant extiende sus alas, rompiendo la delgada capa de hielo que lo estaba cubriendo, y ahora se dirigía a Veldora.

Veldora: Eso es, acércate. – se va volando a otra y a alejarlo del dragón antiguo, cosa que funciona ya que habían atraído su atención y daban un rodeo por toda la academia.

Louise: ¡Funciona! – dijo emocionada mientras veía cómo Tyrant seguía a gran velocidad y Satoshi aprovecha para interceptarlo.

Satoshi: Hey dragón ¿por qué no jugamos un rato? - gira sus espadas y las entierra en su pecho, haciéndolo rugir. - Y está vez no te liberarás.

El rubio aleja al Tyrant del dragón antiguo, momento aprovechado por Veladora quien le da una embestida justo cuando Satoshi saca las espadas, enviando al dragón contra el suelo.

¡GRRARRRRR! - Tyrant se levantó pero Veladora cae encima de él, haciéndolo rugir más fuerte. - ¡GROARRWRRR!

Veladora nuevamente se eleva mientras que Tyrant se levantaba, ahora con más furia pero es empujado por una corriente de agua por parte de Ingvild.

Ingvild: Lo siento, pero es para ayudarte. - el dragón se levanta más furioso y trata de atacarla pero Satoshi aterriza y enrolla una garra con las cadenas para desviar el ataque de la garra, pero Tyrant toma la cadena y lo mueve con fuerza.

Satoshi: ¡AHHHHHHH! – dado que era lanzado con fuerza y lo estrella contra el muro de la entrada de la academia, hasta chocar en una de las torres.

Kirche: ¡Satoshi! – el rubio se levantaba y se sujetaba las costillas y el brazo que resultó lastimado por el impacto, pero ignora el dolor y se lo re acomoda.

Takao: ¡RAYO DE AURORA! – baja sus brazos con fuerza, saliendo una corriente helada mucho más fría, empujando al Tyrant contra un muro, congelando parte de su piel, lo malo es que el dragón se mueve con brusquedad y destruye la capa de hielo en su pecho. -. Okey, lo hice enfurecer.

Ingvild: ¡CUIDADO! – el peli azul nota al dragón antiguo aterrizar encima de una torre, la barrea trató de protegerlo pero el efecto del miasma, hizo que la barrera se rompiera como un cristal, Takao estaba debajo de la pata pero Saito lo saca de ahí.

Takao: Gracias Saito.

Saito: De nada. – mira al dragón antiguo. – Se perdió la barrera.

Takao: Por el momento, necesito que llamen la atención, no puedo hacer reaccionar a Kenichi con el dragón ancestral cerca. – unos dragones se acercaban a ellos, pero Saito logra cortarlos.

Saito: Encárgate de eso, yo me haré cargo de los demás y a ver si pueden alejar a esa bestia. – sale corriendo y ataca a los lacayos, en cuanto Ingvild se acerca junto con Satoshi.

Ingvild: ¿Procedemos con la siguiente fase? – el peli azul asiente, haciendo que la peli lila genere un dragón de agua y le de directo a la mandíbula de la bestia ancestral.

Louise: Esa es la señal. – Tiffania asiente al igual que Sylphid, quien se convierte en dragón y se lleva a la semi elfo, haciendo que el dragón la siga, Louise es la siguiente en salir pero rumbo al Tyrant, quien estaba siendo atacado por Satoshi mientras que Veldora se elevaba a lo alto.

Satoshi: ¡Venga, por aquí! – se lo lleva a una zona espaciosa, por más que Tyrant trataba de liberarse, el rubio sujetaba con fuerza sus cadenas.

Veldora: ¿Estás seguro de esto?

Takao: Es la única opción que me queda. – dijo mientras se preparaba para saltar.

Veldora: Suerte chico. – el peli azul levanta el pulgar y salta, el peli azul estaba observando al Tyrant siendo enviado a un punto perfecto, por lo que procede a activar su Sharingan de tres tomoes, para luego pasar al Mangekyou Sharingan y algo empezaba a cubrirlo.

Satoshi seguía sujetando al dragón, cuando en eso, nota una sobra caer sobre ellos, por lo que retira las espadas y salta de ahí, el Tyrant iba a atacarlo con sus garras, pero es golpeado con fuerza, Louise ayuda a Satoshi y al ver a su novio, se sorprende al ver que lo golpeó era un esqueleto gigante, en el centro, estaba Takao, con los ojos rojos

Louise: ¿Qué es eso?

Satoshi. El as bajo la manga de Takao, el Susanoo. – Takao hace que el esqueleto se rellene con tejidos, formando un humanoide de cuerpo semi completo, dado que solo se mostraba una parte del ser, para luego ser cubierto por una especie de capa.

Ingvild: Es tan fuerte como peligroso para él, un arma de doble filo. – la peli rosa la mira. – Esa sería un gran desgaste de energía, además que hacer eso, haría que quede ciego.

Louise: ¡¿CIEGO?!

Ingvild: Sí, pero hay una solución, es que él tenga un cambio ocular, pero dado que no hay alguien que tenga sangre Uchiha, necesita hacer transfusión y esperar que el otro desarrolle esos mismos ojos, así teniendo el Mangekyou Sharingan Eterno y quien era compatible con la sangre, pues... - señala al dragón.

Louise: Ya veo, entonces terminemos con esto antes de que Takao pierda la vista. – todos asienten y se van a sus lugares.

El dragón miraba con furia al peli azul y trata de atacarlo, pero la figura sujeta su brazo y le da un fuerte puñetazo en la mandíbula, pero sigue golpeándolo, Satoshi aprovecha y ataca con sus espadas encadenadas y no suficiente con eso, Ingvild aprovecha un punto ciego para lanzarle fuertes ráfagas de agua, haciéndolo retroceder.

Pero había un detalle, Tyrant no iba a dejarse vencer de esa manera, por lo que da un fuerte rugido y comienza con su contrataque, primero con Takao, quien lo sujeta de los brazos y lo derriba, pero Satoshi entierra sus espadas en los hombros, por lo que evita que le dé puñetazo a la figura humanoide, el dragón reacciona y gira a gran velocidad, para tomar las cadenas.

Satoshi: ¡Mierda! – suelta las cadenas justo a tiempo, pero el dragón retira las espadas y envuelve alrededor del brazo del Susanoo que se estaba levantando, el peli azul iba a soltarse, pero el dragón lo jala con fuerza, acercándolo y coloca la garra en la cara, de la figura, para derribarlo con fuerza.

Takao: Joder. – hace que su Susanoo tome del cuello al dragón y lo derriba, para colocarse encima de él y procede a golpearlo varias veces en la cara. – Duérmete, duérmete, duérmete, duérmete, duérmete.

Los golpes eran más fuertes, pero el dragón logra atrapar el puño, Takao frunce el ceño mientras que el dragón da un gruñido y contrataca con un fuerte puñetazo en la cara y ahora es el Susanoo quien se ha derribado y el dragón procede a dar ataques con las garras, Takao usaba los brazos para protegerse pero cada ataque le quitaba la armadura y llegaba a los tejidos.

Satoshi corre a gran velocidad y atrapa uno de los brazos del dragón, frenando su ataque, el dragón iba a tomar las cadenas, pero es interceptado por el brazo del Susanoo y le da un fuerte puñetazo en la cara, derribándolo, justo cuando el dragón se levantaba, Takao le da un fuerte golpe en la cabeza, enterrándolo contra el suelo, creyendo que lo habían aturdido, pero el dragón se levanta y escupe sangre de su hocico para mirarlo con más furia.

Takao: Esto...perdón. – el dragón lo embiste y lo derriba, para atacarlo con más brutalidad y darle un grito intimidante, Takao trataba de mantenerse calmado, mientras seguía defendiéndose de sus ataques.

Tyrant estaba agrietando la armadura, mientras que el peli azul empezaba a salirle una lágrima de sangre, cuando es apartado por una fuerte corriente de viento y agua, cortesía de Tabitha e Ingvild.

Takao: Qué bueno que hayas venido. – se levantaba mientras se limpiaba los ojos y reforzaba la armadura. - Hay que detenerlo, rápido.

Satoshi: Estamos en eso. – corre a gran velocidad para atacarlo, el dragón iba a golpear el suelo, para detenerlo, pero el rubio da un salto lateral, arroja sus espadas para tratar de cotar al dragón, pero Tyrant se cubre con sus brazos., Satoshi genera unas llamaradas y las arroja para cegar temporalmente al dragón.

Tyrant extiende sus alas y repele las llamas con una fuerte ráfaga de viento, pero para su sorpresa, el rubio había arrojado sus espadas envueltas en llamas y logra darle un corte en el pecho, formando una "X".

¡GROARRRRRRRRRRR! - el grito se hacía más fuerte ya que logró herirlo, pero antes de que contrataque es embestido por un dragón de agua impulsado con viento y hielo, empujándolo contra el muro, Takao aprovecha y le da un fuerte golpe, derribando tanto a la bestia como el muro. Satoshi lanza sus espadas a los restos de la torre que fue destruida por la pisada del dragón ancestral y lo jala con fuerza.

Satoshi: ¡Lo siento amigo! – jala con más fuerza, rompiendo más la torre y los escombros caigan sobre el dragón.

Tyrant se levanta con dolor, ese ataque múltiple logró aturdirlo, pero es sujetado por el Susanoo y lo lanza al campo abierto.

Takao: Tsk.. – se cubre los ojos mientras la armadura se estaba deshaciendo. – Un poco más....vamos. – se levanta mientras abría los ojos y recreaba la armadura.

Satoshi: ¡Terminemos con esto! - Takao asiente y la figura lo toma para arrojarlo contra el dragón, Tyrant trataba de cubrirse, pero el impacto, impulsado por las llamas del rubio, hace que su guardia se rompa, trata de levantarse, pero recibe un triple impacto de agua, viento y hielo, cortesía de Ingvild, Tabitha y Takao. El dragón se cubrió con sus alas, pero terminaron congeladas.

Takao: ¡Ahora!

Louise: Perdóname Kenichi...- le apunta con su varita. - ¡EXPLOSION!

Trató de hacerlo lo más cerca posible, para que el daño sea moderado, empujando a gran distancia al dragón y dejándolo herido, Tiffania, quien estaba sobre Sylphid, aprovecha y le lanza el hechizo de olvido, rompiendo conexión con la bestia antigua y cierre los ojos.

Takao cae de rodillas mientras desaparecía el Susanoo mientras se limpiaba las lágrimas de sangre que le salían, afortunadamente podía ver todavía, porque esto era un gran desgaste.

El grupo se acerca con precaución al dragón, Louise es quien se acerca más y toma el rostro con cuidado, estaba muy preocupada y esperaba que el efecto se fuera.

Satoshi: ¿Crees que eso fuera suficiente? – decía preocupado, cuando notan que el dragón abre los ojos. - ¡WOW! – todos se preparaban para defenderse, pero el dragón parecía no atacar y escucharon una voz familiar.

¿Qué me pasó? – se sujetaba la cabeza, aún estaba aturdido por el último ataque. - ¿Dónde estoy?

Takao: ¡Hermano? – el dragón lo mira.

Kenichi: ¿Ta-Takao? Como que te ves algo pequeño ¿No lo crees? – siente que alguien trata de abrazarlo, gira un poco y se sorprende. - ¿Louise?

Louise: ¡Finalmente...sniff...finalmente despertaste!

Kenichi: Louise ¿Cómo es que...? – iba a abrazarla para calmarla pero nota su brazo algo diferente. - ¿Qué? ¡Mi brazo! – mira el resto de su cuerpo y nota su cambio. - ¿Qué rayos me pasó?

Takao: Usaste la armadura de Incursio en un mal momento, el dragón antiguo tomó control total de tu cuerpo y te convertiste en un dragón.

Kenichi. Oh no... - mira sus garras. - ¿Cuánto tiempo he estado así? – se levanta con algo de dolor, el último ataque lo ha dejado herido.

Takao: Por unos días, pero te lo contaremos después. – el dragón mira sus garras.

Kenichi: ¿Cuántos....a cuántos he lastimado...? - decía en shock, pero la peli rosa toma un dedo y lo baja mientras lo miraba con algunas lágrimas.

Louise: Tú no tuviste la culpa... no la has tenido, fue la bestia quien tomó control de tu cuerpo... - derramaba lágrimas mientras colocaba apoyaba su cabeza en la mano del dragón. – Tranquilo, todo estará bien.

Kenichi: Louise... - baja su cabeza hasta estar a la altura de su rostro. – Perdóname, cometí un error y ahora estoy así.

Louise: Tranquilo, todo se solucionará, te lo prometo. – el dragón junta su cabeza con la de la peli rosa.

Kenichi: Gracias Louise. – en eso escuchan un fuerte estruendo y voltean, el dragón antiguo, había sido atacado varias veces y decidió ir primero hacia los barcos, muchos habían caído mientras que otros resultaban gravemente dañados. – Ese desgraciado.

Takao: ¿Crees poder luchar? – el dragón se levanta y extiende sus alas, haciendo que se rompa la capa de hielo que le quedaba.

Kenichi: Listo para el contrataque. – el peli azul asiente.

Louise: Iré contigo. – se sube al lomo del dragón.

Kenichi. Está bien, sujétate. – extiende las alas y emprende vuelo.

Con la flota, ya habían perdido el 40% debido a los daños causados por el dragón Antiguo, Albion sólo le quedaba uno mientras que Germania unos tres, Tristain tenía unos 7 y los de Romalia 8, en cuanto a los elfos, a pesar de tener una magia avanzada, los daños devastadores, arrasaron con más de la mitad de su flota.

Julio: Maldición, a este paso. – abre los ojos al ver al dragón abrir la boca nuevamente y cargaba otro ataque. – Que el fundador y Su Eminencia nos proteja. – los tripulantes cerraban los ojos, pero para sorpresa del rubio de ojos heterocromáticos, la boca del dragón es cerrada por el Tyrant y hace que el mismo ataque lo dañe.

El dragón da un rugido de dolor mientras se mostraba parte de su rostro con la miasma fuera, había perdido algo de protección por esa explosión, mientras que Tyrant aterriza en el barco donde iba Julio.

Julio: ¿Pero qué...? – ve que Louise salta del dragón. - ¿Cómo es que?

Louise: Logramos sacarlo del control, Kenichi a ha regresado.

Julio. Ya veo, al menos la balanza ahora se inclinará a nuestro favor.

Kenichi: Por ahora, pero tengo que hacer algo primero. – extiende sus alas nuevamente y se lanza contra la bestia, el dragón antiguo iba a usar su tercer ojo, pero justo cuando iba a tornarse de color rojo, la garra del Tyrant perfora el miasma y le destruye el tercer ojo evitando el control. – Eso es por convertirme en un dragón.

La bestia da un rugido de dolor mientras que los demás dragones lacayos se lanzan al ataque, afortunadamente Julio ordena un bombardeo.

Julio: ¡Vamos soldados, ahora tenemos la oportunidad de contratacar. – todos los soldados se impulsan de valor y cargan los cañones, la bestia trata de atacar pero Kenichi le da una fuerte embestida, haciéndolo retroceder un poco y los barcos aprovechan en bombardearlo, haciendo que poco a poco la miasma deje de cubrirlo.

Louise: Bien, está funcionando. – decía mientras acumulaba toda la magia para un solo ataque.

Satoshi, montado en Veldora junto con Takao, genera múltiples llamas, haciendo que empezara a generarse un tornado alrededor de la bestia, dejándolo sin oportunidad para contratacar, la bestia trata de extender sus alas pero Tabitha le arroja varias estacas de hielo y nuevamente recibe otro bombardeo de cañones, haciéndolo rugir más de dolor.

Kenichi es el siguiente en atacar al dragón, dejándole una grieta en la parte de su pecho, pero tanto él como la bestia reciben parte de los cañonazos, todos ven que era de parte de la flota de Tristain.

Satoshi: Maldita sea con esa reina. – no era un impacto accidental, la reina dio la orden antes de tiempo a propósito.

Louise: Esta no entiende. – decía enojada mientras miraba a la reina haciéndose como alguien que daba órdenes de forma madura.

Julio: Después discutes con ella, tenemos que seguir con el ataque. – Louise asiente a regañadientes y sigue concentrando su magia.

Varios dragones eran derribados y otros huyeron debido al borrado de memoria, dejando a la bestia completamente solo, la flota sigue atacando con sus cañones, dejándolo cada vez más vulnerable, una buena parte de su cuerpo no tenía ese miasma y sólo se mostraba el magma.

Louise: Hay una abertura.

Kenichi: No, una explosión ahí, sólo sería en vano, hay que dañarlo un poco más. – ve que el cielo se estaba nublando y se escuchaban sonidos de relámpago, la intención de Satoshi con esa llamarada era que el aire frío y caliente se combinaran, generando una tormenta. – Esto va a doler, todos, retrocedan.

Julio: ¿Por qué?

Kenichi: Pues él usará su mejor carta con los rayos, pero el radio del daño será catastrófico. – el rubio asiente y ordena la retirada.

Muchos barcos empiezan a alejarse mientras que en el lugar donde estaba Veldora, Takao levanta el brazo, acumulando una gran cantidad de rayos encima de él.

Tabitha: Takao... - decía preocupada pero el rubio le da unas palmadas en la espalda.

Satoshi: Tranquila, él estará bien.

Takao: No esperaba utilizar esta técnica, después de haber gastado gran cantidad de mi energía, pero ante esta situación no tengo más opción que usarlo. – mira al cielo. - ¡KIRIN!

Del cielo sal un dragón eléctrico con una apariencia totalmente intimidante, dejando sorprendidos a los presentes.

Takao: Terminen el trabajo chicos. – levanta más el brazo, haciendo que el dragón se eleve, para luego bajar el brazo y hacer que el dragón eléctrico caiga de lleno en la bestia ancestral, provocando una gruesa cortina de polvo y una luz potente, cegando a todos.

Louise: ¡Qué fuerte resplandor! – abría los ojos mientras que las alas del Tyrant dejaban de cubrirla y lo único que veía era una gran cortina de humo y polvo. – Ese fue el ataque más devastador de Takao.

Kenichi: Así es, pero con la energía que gastó. – ve que Takao estaba cayendo, pero es atrapado por Veldora.

Veldora: Te tengo chico, te llevaré a un lugar seguro. – miraba al peli azul totalmente inconsciente.

Poco a poco la cortina de humo desaparecía y el ataque le había dañado mucho más, la miasma no cubría la mitad de su cuerpo, eso hizo que Kenichi tuviera una idea.

Kenichi: Perfecto, Louise, prepara tu hechizo. – la peli rosa asiente y procede a recitar el hechizo de Explosión. – Julio, ordena una ronda más de cañones.

Julio: Es la última ronda de balas de cañón que nos queda.

Kenichi: Perfecto, que todos se preparen, quitar la miasma del pecho será punto clave para la explosión. – extiende sus alas y vuelva por encima del dragón.

Julio: ¡Preparen la última ronda! – los soldados proceden a cargar la última carga de cañón disponible y apuntaban al pecho del dragón y quitar el último rasgo del miasma.

Kenichi: ¡AHORA! – se lanza en picada, mientras que la última ronda impactaban al dragón en el pecho, haciéndolo rugir del dolor, mientras que el Uzumaki da el último ataque con la garra en la miasma restante, aunque se quemó un poco con la magma, estaba a punto de salir, pero aún estaba dentro del rango del fuego, bloqueándolo y para peor, la bestia le da un fuerte golpe, haciéndolo caer contra el suelo.

La peli rosa había terminado de concentrar su magia del Vacío y extiende su varita en dirección a la bestia.

Louise: ¡EXPLOSION! – una pequeña esfera sale de su varita y va a gran velocidad al pecho del dragón, una vez que impactó, empezó a brillar con fuerza mientras que el dragón rugía por última vez, el daño de la explosión fue más devastador y nuevamente se taparon los ojos por el resplandor.

Una vez se disipó la luz, sólo quedaba una versión de roca del dragón antiguo y empezaba a hacerse pedazos, el hechizo había hecho efecto y consiguieron derrotarlo por fin, todos los presentes, al ver esto, gritan de alegría, a pesar de las bajas, pudieron conseguirlo.

Julio: Lo logramos, se acabó. – miraba el cielo. – Lo logramos Su eminencia, pudimos vencer a la bestia. – daba un suspiro de alivio.

Louise: Espera, ¿Dónde está Kenichi? – dado que aún había una gruesa cortina de humo, dado que no se veía nada, salta del barco y Veldora la atrapa en el camino para aterrizar, el polvo era denso y causaba algo de tos, pero la peli rosa se adentra a buscar al dragón. Tabitha, decide ayudar con la poca magia de su reserva, haciendo que el viento lograra disipar un poco, facilitando en la búsqueda de la peli rosa.

Hasta que notó una figura, por un momento creyó que era su novio transformado en dragón, pero para su sorpresa, era el pelirrojo, su ropa estaba rasgada, además que algunas heridas que las recibió transformado, estaban en su piel, la más resaltante es la X en su pecho, la espada la tenía al lado de él, había regresado a la normalidad y el ojo rojo se apagó.

Louise: ¡Kenichi! – casi se cae, había agotado toda su energía pero no le importaba y se acercó muy preocupada, se arrodilla y sacude levemente al pelirrojo. -Kenichi ¡Despierta! ¡Ya hemos derrotado al dragón!

Takao, quien era ayudado por Tabitha y Satoshi, estaban llegando junto con Ingvild y Veldora, Saito también se acercó pero por respeto, luego Julio, los estudiantes, maestros, la peli rosa lo movía pero el pelirrojo no respondía.

Louise: ¡No! ¡NO, POR FAVOR NO! – Lo abraza con fuerza.

Takao y Satoshi estaban sin palabras, tanto tiempo habiendo luchado y ahora el pelirrojo no respondía, Ingvild estaba derramando algunas lágrimas al igual que Veldora.

Louise: ¡No te perdonaré si mueres! - pero el pelirrojo no respondía, haciendo llorar más a la peli rosa y lo abrazara con más fuerza. – Vuelve...vuelve por favor... Hemos luchado mucho para traerte de vuelta. ¡Por favor...POR FAVOR...!

Takao nota que la mano derecha del pelirrojo empezaba a reaccionar, los demás presentes también notaron eso, luego de la mano, empezó a mover su brazo, la pierna y luego el resto del cuerpo, la peli rosa finalmente lo nota, y ve al pelirrojo abriendo los ojos con algo de dificultad.

Kenichi: Mi cuerpo... - la peli rosa lo abraza nuevamente.

Louise: ¡ESTÁS VIVO! ¡NO VUELVAS A PREOCUPARME ASÍ KENICHI! – lloraba mientras seguía abrazándolo, el pelirrojo sólo da una sonrisa débil y corresponde el abrazo, aunque su cuerpo estaba completamente adolorido, además que tenía uno que otro hueso roto debido al último golpe del dragón.

Kenichi: N-No lo haré, pero por favor... ten cuidado.. – le dolía su cuerpo y la peli rosa entiende por lo que deja de abrazarlo con tanta fuerza. - ¿Ganamos?

Takao: Sí hermano, finalmente hemos ganado.

Kenichi: Lamento que tuvieras que utilizar el Susanoo para frenarme.

Takao: No hay problema, somos hermanos de alma así que cuidarnos es una prioridad – el pelirrojo asiente.

Kenichi: En cuanto me recupere tomaré esa transfusión.

Takao: Jeje, está bien.

Satoshi: Es bueno que hayas regresado hermano, nos diste un susto de muerte.

Kenichi: Sí, pero doy gracias por haberme ayudado. – mira la espada. – No tenía idea de lo peligroso que fue usar la espada Incursio.

Julio: Yo quiero disculparme, había acercado mucho a Azuro y terminó siendo controlado, accediste a esa armadura para salvarnos aunque tuvo sus efectos negativos. – da una reverencia.

Kenichi:: Descuida, hice lo mejor que pude, aunque lamento lo que le pasó Su Santidad. – el rubio asiente.

Henrietta: Deberíamos encerrarlo. – dijo mirando de manera despectiva al pelirrojo.

Julio: ¿Disculpe? – levantó una ceja

Henrietta: Según el informe, muchos soldaos fueron asesinados por ese monstruo, entonces hay que encerrarlo. – algunos soldados de Tristain se acercaban pero Satoshi da un corte en el suelo, formando una línea.

Satoshi: Si alguien se atreve a pasar esa línea no respondo.

Henrietta: ¡Soldados, arresten a ese monstruo!

Julio: No permitiré que continúe con esto Su Majestad.

Henrietta: Pero ese monstruo mató a sus soldados ¿No es así? ¡Deberían encerrarlo! – insistía.

Julio: ¡Suficiente! ¡Si sigue con eso cortaremos alianza y que se las arregle con lo que tenga!

Tabitha: Lo mismo digo, romperé nuestra alianza ya que su incompetencia como reina es totalmente evidente.

Kirche: Yo hablaré con mis superiores para que también cancelen la alianza de Germania con usted, ya que a pesar de las explicaciones que le dieron, usted está cometiendo graves errores.

Henrietta: ¡No puede hacer eso! ¡Romper la alianza con nosotros causaría una gran crisis en mi reino!

Louise: Te lo acabas de buscar por tu odio enfermizo, ya sabes que la responsable de la traición eres tú, yo cambié para bien pero sigues en tu estúpida excusa de que yo mi Kenichi me lavó el cerebro y ahora vas a afrontar las consecuencias.

Henrietta: ¡No digas eso Louise, tú eres mi amiga, hemos pasado tiempo juntos, él fue quien te engañó, Saito-san, dígale algo! – las respuestas del peli negro fueron las siguientes.

Saito: ¿Qué voy a decir? Ella ha elegido su camino y cambió, los responsables de eso fuimos nosotros.

Henrietta: ¿Qu-Qué cosas dices Saito-san? ¿Acaso no querías que esto volviera a cómo era antes?

Saito: ¿Qué va a volver como era antes, la amistad? Yo ya lo acepté, un daño así no se va a reparar y lo único que estás haciendo es empeorar.

Henrietta: Cre-Creí que estabas conmigo.

Saito: Lo siento, no seguiré apoyándote en esto, ya no más. – cruza los brazos, dejando sin palabras a la peli púrpura, pero mira a Tiffania había presenciado lo que pasaba.

Henrietta: Tú eres mi prima, po-por favor, ayúdame con esto, has entender a Louise que él es un monstruo que le lavó el cerebro.

Tiffania: No la ayudaré.

Henrietta: ¿Qué?

Tiffania: Usted ya debe ser consciente de que esa amistad se rompió por sus propias acciones. – respondió con una mirada molesta.

Henrietta: ¡ERES MI PRIMA! ¡DEBES APOYARME!

Tiffania: Dejó de serlo después de traicionar a Louise-san y me indigna que se comporte de esa forma a pesar de que la principal responsable de dañar la amistad fue usted y como no quiere aceptarlo, culpa al Kenichi-san.

Henrietta: ¿Me abandonas? ¿Yo, que te he dado un hogar? ¡YO, QUIEN TE HE LLEVADO A ESTA ACADEMIA!

Tiffania: Aprecio ese gesto, pero sus acciones, su forma de actuar y el hecho que no quiera aceptar su error, me ha dado una perspectiva diferente de usted, yo creí que mi prima es de buen corazón, pero ha sido todo lo contrario. - esas palabras fueron dagas en el corazón de la peli violeta.

Henrietta miraba con dolor a Saito, pero a diferencia de esa vez que se besaron y terminaron haciéndolo, mirándose con pasión, ahora el peli negro la miraba con desaprobación, mientras que el ya acepto su error y decidió no molestar más, ella sigue enfocada en recuperar la "amistad" aunque eso ya está más fragmentado. La peli violeta sintió más dolor en su corazón al ver que Saito no la apoyaba, y qué decir de Agnes, ni la miraba, los maestros, el director, ya no le daban miradas de respeto, eran miradas de desaprobación y nuevamente mira a Louise.

Louise: Consecuencias... - fue lo único que dijo para luego abrazar al pelirrojo.

La reina no aguanto, derramó lágrimas, se subió a un barco, ordenó irse al palacio y lo hicieron inmediatamente.

Takao: -viendo cómo se alejaba el barco- Se lo buscó, aunque me entristece ver que el pueblo será afectado debido a su inmadurez en la toma de decisiones.

Louise: No hará falta que corten la alianza, mi problema es con ella, el pueblo no merece tal destino.

Tabitha: La verdad llegará a la luz.

Louise: Lo sé.

Julio: De acuerdo, mantendremos la alianza, pero a la siguiente la romperemos y si la gente desea irse, son bienvenidos en el reino de Romalia. - la peli rosa asiente.

Takao: Al menos ya terminó todo y ahora sí puedes ver bien Kenichi.

Kenichi: ¿Eh? ¿De qué estás hablando? - el peli azul y el rubio se dan una palmada en la cara. - ¿Qué, qué dije?

Veladora: Oh, mi cachorro es tan despistado.

Kenichi: ¿Qué? ¿Por qué dicen eso?

Tabitha: Su mano. - dijo con una sonrisa divertida mientras que el pelirrojo miraba la mano de la peli rosa y abre bien los ojos, al notar el anillo que estuvo diseñando.

Julio: Oh, así que era para eso. - dijo sorprendido.

Kenichi: L-lo tienes puesto...Louise, tú.... - la peli rosa aprieta su mano.

Louise: Kenichi...cuando tú me dijiste esas palabras, ... sentí mucha felicidad, era la mujer más feliz de tener a un chico de buen corazón... Y si lo tengo puesto es que ¡SÍ! ¡SÍ QUIERO CASARME CONTIGO!

Todos gritan de la emoción mientras aplaudían, el pelirrojo toma de la mejilla a Louise y la acerca para besarse.

Takao estaba feliz mientras aplaudía, Satoshi e Ingvild se daban un abrazo mientras veían a la pareja, Veladora derramaba una lágrima y daba un rugido de la emoción.

//==//==//==//==//==//

Dos meses han pasado y las noticias de la derrota del dragón antiguo se hizo pública en toda Halkeginia, la gente estaba emocionada y podía vivir tranquilos una vez, más, los dragones dejaron su lado salvaje y regresaron a sus respectivos territorios, las alianzas entre Galia, Germania, Albion y Romalia se hicieron más fuertes, además que la facción de los elfos, liderados por Bidashal. Con Tristain, las cosas estaban en la cuerda floja, casi se enteran del rompimiento de la alianza con la nación debido a las acciones imprudentes de la reina, la familia Valiere se enteró del motivo y el duque le lanzó un ultimátum a la peli púrpura de que le contará a su madre si volvía a cometer una estupidez así, además que parte de ese secreto le informó a la madre de Henrietta, por lo que ahora tiene a alguien "supervisándola" aunque está muy decepcionada por las decisiones que ha tomado su sucesora.

Ahora, en un día frío, Saito había sido llamado por Colbert a la academia, donde estaban Louise, Kenichi y Takao, el peli negro no se hacía esperanzas, sólo fue a saber cuál fue el motivo de su llamada y listo.

Colbert: Llegaste temprano.

Saito: Sí, supuse que era de algo serio. – ambos se dirigen al patio donde estaban el grupo. – Buenos días.

Takao: Buenos días chico, no esperaba que llegaras temprano, pero supongo que estará bien, Louise, adelante.

Louise: Está bien. – mira al peli negro. – Saito, encontré una forma de que volvieras a casa.

Saito: ¿L-Lo dices de verdad? – la peli rosa asiente.

Louise: Cuando escapamos de los elfos, utilicé una especie de puerta mágica que nos conectó con el barco de Colbert, era lo primero que se me vino a la mente en aquel momento, por lo que, si logro ver tu hogar en tus recuerdos, puedo crear una puerta lo suficientemente grande para que puedas atravesarla, aunque claro, está bajo tu decisión si quieres hacer eso o todavía no.

Saito: Mmmm, ¿Puedes darme unos días? Sinceramente estoy emocionado de que pueda volver a casa, pero ya he pasado mucho tiempo aquí, tener que irme de golpe...

Louise: Está bien. ¿Cómo te ha ido con los demás?

Saito: Hablamos, aunque ya no es como antes y no debería enojarme, fue mi culpa. – mira a la pareja. -Louise, Kenichi, discúlpenme por todo lo que he cometido, Louise, eres especial para mí, pero no supe valorarte y en cuanto a ti Kenichi...he descargado mi furia contigo, sabiendo que el único culpable soy yo.

Ambos lo estaban mirando, notaron signos de mentira, pero se notaba la sinceridad, tanto Louise como Kenichi tenían una leve sorpresa, apenas le dieron las gracias durante el incidente de la batalla final con el dragón y el hecho que él no protegió a la reina en su berrinche.

Kenichi: Cometiste varios errores, aunque tus actos egoístas e infantiles empeoraron, aunque te damos las gracias por ayudarnos en la batalla final y bueno, no apoyar en las decisiones inmaduras de Henrietta, por lo que aceptaré tu disculpas.

Louise: Acepto tus disculpas también, pero eso no quiere decir que podamos ser amigos, los daños están a un punto de no retorno.

Saito: Lo entiendo y lo acepto, no estoy en derecho de reclamar, lo único que pido es unos días, al menos para despedirme de la gente que conocí.

Louise: Está bien, esperaremos. – se levanta. – Hasta luego.

Saito: Hasta luego. – ve a ambos retirarse mientras que él da un suspiro. – Derf, me haces falta, pero haré las cosas correctas. – se levanta y se dirige a la ciudad primero.

Mientras que Louise y Kenichi se iban por otro lado de la academia, a repartir las invitaciones de la boda que se realizaría durante el festival de Adviento o Año nuevo y faltaban menos de 3 semanas

//==//==//==//==//==//==//

Unos días antes de la boda Saito había comunicado a Louise y Kenichi, ya se había despedido de sus conocidos y amigos, había preparado sus cosas y ahora estaba listo para volver y la pareja había ido a la academia junto con Tiffania.

Saito: Buenos días, lamento llamarlos ahora, pero ya he terminado todo, estoy listo Louise.

Louise: Está bien. – se acerca y extiende su mano hacia su cabeza. – Necesito acceder a tus recuerdos, Tiffania, por favor.

Tiffania: Está bien. – recita un conjuro y apunta al par, la peli rosa veía los recuerdo a que él tuvo en su mundo natal y se adquirió de conocimientos, aunque también llegó a ver los momentos que vivió junto al peli negro, una vez terminado eso, retira su mano y procede a hacer el hechizo, era una gran concentración mágica pero logra completarlo y apuntar hacia el patio.

Louise: Puerta del mundo. – se abre un portal frente a ella, mostrando una techo de edificio, no había nadie y eso era satisfactorio. – Listo.

Colbert: Supongo que este es el adiós. – el peli negro asiente. – Aunque espero poder conocer tu mundo.

Saito: No hay problema, son bienvenidos, si pasan por mi mundo, pues, no duden en buscarme, no creo mudarme por un largo tiempo.

Louise: Pues, conocer ese mundo no está mal, lo veremos.

Saito: Hasta luego Colbert-sensei. – da un fuerte apretón de manos.

Louise: Tu mano. – el peli negro ve las runas y asiente por lo que se acerca y Louise. – En el nombre del Fundador Brimir, yo Louise Françoise Le Blanc de la Valiere, te pongo en libertad. – coloca la punta de la varita en la mano izquierda y poco a poco las runas desaparecían, afortunadamente no daba ninguna sensación de dolor. – Ahora eres libre, que te vaya bien, Saito.

Saito: Gracias. – mira al peli rojo. – Cuídala.

Kenichi: Dalo por hecho. – el peli negro sonríe levemente y atraviesa el portal, segundos después se cierra y desaparece. – Al menos se fue con redención, eso es lo bueno.

Louise: Sí, tienes razón.

Kenichi: Me pregunto cómo se lo habrá tomado la niña cuando Saito fue a despedirse de ella. – ella sólo da un bufido.

Louise: Lo más seguro es que se puso a llorar y suplicar, pero de entre los dos, Saito fue el único que se disculpó y aceptó de sus errores.

Kenichi: Eso supongo.

Louise: Venga, vamos a casa, estoy agotada. – no mentía, pese a su entrenamiento, usar hechizos de vacío requiere de una gran carga. – Después veré lo de las runas en ti. – pensaba en su mente con una sonrisa traviesa.

Kenichi: Hasta luego profesor. – el mencionado asiente.

//==//==//==//==//==//==//==//

Los preparativos en la finca de Valiere estaban listos, todos los invitados habían llegado, incluso más que antes.

Takao: ¿Todo listo? – revisaba todos los preparativos.

Satoshi: Sí, Eleonore y Cattleya se hicieron cargo de la supervisión.

Takao: Ten los anillos. – le entrega la caja.

Buenas joven, ¿Podría indicar mi lugar? - el peli azul voltea y asiente.

Takao: Oh, señor Stan Lee, venga por aquí. – se lleva al señor mientras que Satoshi se acerca al pelirrojo.

Satoshi: ¿Ahora quién es el nervioso? – preguntaba burlón mientras el pelirrojo se acomodaba su capa.

Kenichi: Muy gracioso.

Satoshi: Venga, deja de mover tu capa. – el pelirrojo baja su mano izquierda y dato curioso, tenía unas marcas encima.

Kenichi: Vale vale, me calmaré.

Julio: Jejeje, no te había visto tan nervioso Kenichi-san. – decía mientras se acomodaba los guantes, él fue designado como el padre para la boda.

https://youtu.be/9KQJvTV7zVM

En eso se escucha la música, la hora había llegado, todos miran a la entrada y estaban asombrados mientras que el pelirrojo estaba sonrojado, frente a él estaba Louise, siendo llevada por su padre.

Joven Uzumaki, te doy la mano de mi hija, cuídala mucho. – el pelirrojo da un asentimiento, Louise se coloca al lado del pelirrojo mientras que el padre se retira.

Kenichi: Te ves hermosa Louise. – ella se ruboriza y lo mira con timidez.

Louise: Mouuuu... Kenichi, me sonrojas. – el pelirrojo sólo da una sonrisa.

Julio: Queridos hermanos, estamos reunidos para unir a esta pareja en santo matrimonio, Son Kenichi Uzumaki, con la señorita Louise Françoise Le Blanc de la Valiere. – procede a hablar y dar las bendiciones y oraciones para la pareja, tanto Satoshi como Takao estaban derramando lágrimas mientras que sus respectivas parejas le daba un pañuelo y le daba palmadas en la espalda.

Julio: Kenichi Uzumaki ¿Aceptas a Louise como tu esposa, para amarse en la salud en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, en las buenas y en las malas hasta que la muerte los separe?

Kenichi: Sí, acepto. – dijo con una sonrisa.

Julio: Y tú, Louise Valiere ¿Aceptas a Kenichi Uzumaki como su esposo, para amarse en la salud y la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, en las buenas y en las malas hasta que la muerte los separe?

Louise: ¡Acepto! – trataba de no llorar de felicidad.

Satoshi procede a acercarse y entregar la caja de los anillos, el pelirrojo es el primero en tomar con delicadeza la mano de la peli rosa.

Kenichi: Yo...Son Kenichi Uzumaki. – coloca el anillo en el dedo. – Juro amarte y respetarte, permanecer a tu lado en las buenas y las malas, compartir experiencias, formar una familia contigo y vivir juntos hasta que la muerte nos separe.

Louise: Yo...Louise Valiere, juro amarte y respetarte. – toma el otro anillo y lo coloca en el dedo del pelirrojo. – permanecer a tu lado en las buenas y malas, vivir más aventuras contigo y también formar una familia. Estaré contigo hasta que la muerte nos separe. – terminó de decir con una sonrisa.

Ambos se toman de las manos y vuelven a mirar a Julio.

Julio: Si alguien se opone a esta boda, que hable ahora o calle para siempre. – los segundos pasaron pero nadie levantó la mano ni dijo nada. – Bueno, sin más que decir, los declaro, marido y mujer. Puede besar a la esposa.

Kenichi retira lentamente el velo de la peli rosa, quien inmediatamente lo besa con pasión, siendo correspondido por el pelirrojo, la luz del sol iluminaba a ambos y todos proceden a aplaudir, Takao, Satoshi, Ingvild y Tabitha estaban felices.

Ese mismo día estaban celebrando de la fiesta, algunos comían, otros bebía y hablaban, pero Takao estaba algo serio, pues no faltaba uno que otro comentario de algunos "nobles" que sólo fueron a criticar.

Takao. No tolero a esas personas. – decía mientras tomaba su copa de vino.

Tabitha: Siempre hay de esas personas, sólo buscan defectos de los demás cuando ellos tienen los suyos.

Takao: Eso es verdad. – voltea y abre los ojos. - ¿Ella no es la madre de la reina? – la peli celeste voltea y abre los ojos levemente.

Tabitha: Sí, aunque me sorprende, porque normalmente andaría con escolta.

Takao: Sólo fue ella como guardaespaldas. – señala con discreción a Agnes.

Tabitha: Eso explica todo. – Takao asiente.

Luego de que la pareja dejar de bailar y se pusieran a descansar un poco, alguien se acerca a ellos.

Saludos. – Louise abre los ojos y da una reverencia.

Louise: No esperaba su llegada. – el pelirrojo no entendía bien pero se inclina igual.

No hace falta que se inclinen, vine como invitada. – respondió con amabilidad y serenidad.

Louise: Pero usted ha sido la reina, debemos darle respeto, aunque no esperaba que esté aquí.

Bueno, me informó que mi hija había ido la boda anterior a causar problemas, por lo que estoy tomando cartas en el asunto. – ambos abren los ojos levemente.

Louise: ¿Agnes se lo contó?

Agnes: Sí, he sido leal a Henrietta y a la antigua reina, sin embargo, con la primera, empezó los problemas después de su presunta desaparición, Henrietta mentía de forma constante y no aguanté más, por lo que le dije toda la verdad a su madre, desde aquel incidente hasta la casi alianza rota que se iba a dar por su inmadurez.

Le pido disculpas por todos los problemas que ha causado mi hija, no esperé que se comportara de una manera decepcionante, fue mi error cederle el poder si no sabe dirigir. – terminó de decir mientras se inclinaba.

Louise: No se preocupe, no debería cargar con los errores de su hija, ella ya es "madura" así que debe afrontarlos.

Agnes: Pensaba lo mismo, pero desde que se fue Saito, ella ha estado llorando y culpando a ustedes por eso. – dijo con pena.

Louise: -suspirando- No entiende. – decía con molestia pero el pelirrojo la abraza.

Kenichi: No dejes que te afecte.

Louise: Es verdad, es un día importante y no dejaré que ella lo estropee.

Eso es verdad y los felicito, aunque la razón por la que vine personalmente es que para preguntar si podrían venir al palacio una vez regresen de su luna de miel. – ambos se miran por unos segundos y dan un asentimiento.

Louise: No tengo problema con eso.

Kenichi: Yo tampoco.

Muchas gracias por tomar un poco de su tiempo, ahora debo retirarme, tengo deberes pendientes. – ambos asienten. – Cuídense mucho y felicidades por su boda, estaré esperando su visita.

Louise: Muchas gracias Su Majestad, cuídese mucho. – da una reverencia y la mujer da una sonrisa amable y se retira.

Agnes: Felicidades por la boda, pásenla bien. – dijo con una sonrisa mientras acompañaba a la peli violeta.

Louise: No esperaba que tomara su tiempo para que venga a pedirnos eso.

Kenichi: Supongo que era un tema serio, por lo que ir en persona lo resalta más. – Louise asiente. – En todo caso, ya iremos cuando regresemos de la luna de miel.

Louise: Oh, mi Kenichi travieso. – dijo ruborizada.

Kenichi: Descuida, no seré tan rudo como esa vez. – ella lo besa.

Louise: Ten cuidado, ellos no lo saben. – el pelirrojo abre los ojos y da una sonrisa nerviosa ya que era verdad, ellos ya tuvieron su momento íntimo, pero obviamente lo mantuvieron en secreto.

Kenichi: Cierto, disculpa. – la peli rosa se acerca a su oído.

Louise: Espera nomás cuando estemos solos, mi lindo dragoncito. – dijo con una voz sensual, ruborizando al pelirrojo.

Kenichi: Je, de acuerdo, seré paciente. – ella sonríe. - ¿Qué tal si nos reunimos con los demás?

Louise: Claro. – toma su mano y se reúnen con sus amigos.

Takao: Hola chicos, ¿Qué tal la están pasando?

Louise: Lo pasamos bien. – toma el brazo del Uzumaki.. – Este es un gran día. – respondió emocionada.

Takao: Y lo bueno es que hemos conseguido reservación en ese hotel en las montañas, las aguas termales y un ambiente cálido sería bueno para ustedes. – daba un abrazo a ambos. – Espero que sea de su agrado.

Kenichi: Gracias Takao y bueno, cuando tú des el siguiente paso, ahora yo seré quien busque un buen lugar para ustedes. – el peli azul ríe mientras se rasca la mejilla.

Takao: Gracias hermano, disfruten más porque de ahí tienen que viajar.

Louise: Es verdad. Pero ustedes bailen también. – el peli azul sonríe y se lleva a Tabitha, de paso llama a Satoshi con Ingvild para participar en la última función, hasta incluso los padres y hermanas de Louise participaron.

Ya en la tarde, Veldora estaba preparándose para llevar a la pareja de recién casados, habían colocado unas cosas para su luna de miel, mientras tanto Louise como Kenichi estaban despidiéndose de sus amigos y familiares.

Takao: Cuídate mucho hermano.

Kenichi: Tranquilo, estaremos bien en estas tres semanas, como Satoshi e Ingvild lo estuvieron en sus semanas en la playa.

Satoshi: Cierto. – el pelirrojo abraza a ambos.

Kenichi: Gracias chicos. – chocan puños.

Ingvild: Que te vaya bien Louise.

Tabitha: Espero que gocen de las aguas termales.

Louise: Claro que lo disfrutaremos, es más, con lo preparado, no se alejará de mí todo el día. – decía con una sonrisa traviesa. – Y posiblemente venga con algo.

Ingvild. No si yo voy primero.

Tabitha: Suertudas... - dijo roja mientras miraba de reojo al peli azul.

Ingvild: Tranquila, estoy segura que Takao dará el siguiente paso. – se acerca con una sonrisa traviesa. – Y podrías tener también tu momento. – la peli celeste se ruboriza pero da una leve sonrisa al imaginarse a ella junto con el peli azul y un pequeño en sus brazos.

Tabitha: No me quedaré atrás.

Louise: Je, ese es el espíritu. – se dan un abrazo. – Bueno, ya es momento de irme.

Ambas asienten mientras que la peli rosa sube al dragón con ayuda del pelirrojo, se despiden con una sonrisa y el dragón emprende vuelo, ante los gritos y aplausos de los espectadores hasta que desaparecen en las montañas.

Louise disfrutaba de la vista desde las nubes gracias al dragón, además del paisaje que se veía abajo, luego mira al pelirrojo y coloca su cabeza sobre su pecho.

Louise: Kenichi.

Kenichi: ¿Humm? – levanta una ceja mientras cuando es besado por la peli rosa.

Louise: Te amo. – respondió con una sonrisa mientras se acomodaba más en su pecho. Haciendo sonreír al Uzumaki.

Kenichi: Yo también. – la toma de la cintura y siguen viajando.

//==//==//==//

Tres semanas habían pasado, Kenichi y Louise habían regresado a Tristain, tenían asuntos con la madre de Henrietta, al llegar al palacio, Agnes los recibe con amabilidad y se dirigen a la oficina principal, tocan la puerta y les da el permiso para pasar.

Bienvenidos, señorita Louise, lord Uzumaki. – ambos dan una reverencia.

Kenichi: Habíamos regresado anoche, pero necesitábamos descansar y avisar con anticipación.

Entiendo, por favor siéntense. – ambos se sientan. – Verán, el tema que quisiera hablar con ustedes, es muy serio

Louise: ¿De qué se trata?

Mi tiempo como reina debía terminarse, por lo que dejaré la corona nuevamente, sin embargo, no voy a cederle el puesto a Henrietta después de todos sus arrebatos y el hecho de que casi se rompa la alianza. – decía con serenidad.

Louise: Si ella no tendrá permitido asumir el cargo ¿Quién lo será?

Ustedes. – ambos abren las ojos . – Según tengo entendido, mi hermana te otorgó el manto real, haciendo que fuera como una hermana y a la vez, la sucesora del trono.

Louise: Lo recuerdo, pero lo había devuelto, diciéndole a Henrietta que renuncié hace tiempo.

Sí, pero un detalle, no se hizo oficial. – ambos levantan una ceja. – Dado que ella seguía con la idea de que tú no sabías lo que haces y su pecado podía ser perdonada, además de que decía que tú fuiste quien le había controlado la mente y más tonterías.

Kenichi: Por qué no me sorprende.

Louise: En todo caso ¿Mi renuncia no fue oficial?

No, se decía que fuiste de viaje a Galia como medios para reforzar la alianza, es por esa razón, que me gustaría que tomaran el manto de Rey y Reina de Tristain, sin embargo, no es obligatorio, entenderé si dicen que no. – ambos se miran y comienzan a reflexionar.

Kenichi: ¿Tú que dices?

Louise: Pues por un lado, podemos hacer que nuestro matrimonio sea como una relación de alianza Tristain-Galia, haciéndola más sólida.

Kenichi: Sabes que hay gente, en especial los nobles que no aceptarán esto y harán lo que sea para sacarnos. – respondió con seriedad.

Louise: Pasamos por muchos problemas, unos vejetes no serán problema, además, nosotros no seremos sus títeres. – el pelirrojo asiente.

Kenichi: ¿Y qué hay del papeleo? Sabes bien que no soy tan fan de él.

Louise: Tienes tus técnicas para terminar con eso, así que no te hagas problemas. – el pelirrojo levanta los brazos. – A decir verdad, no quisiera que la relaciones entre ambas naciones se rompa por sus actos inmaduros. – mira a la reina. – Acepamos llevar el manto de rey y reina.

Muchas gracias por aceptar, en unos días se llevará a cabo la coronación nuevamente, comunicaré a los guardias para que preparen su habitación principal.

Louise: Gracias, pero ¿Cree que podamos buscar una casa externa también? Quisiéramos pasar un tiempo alejado para... - se acerca a la reina y le susurra algo, haciendo que ella abra los ojos y asiente.

Kenichi: ¿Para?

Louise: Lo sabrás pronto. – le saca la lengua de forma infantil mientras que el pelirrojo sólo le aumentaba la curiosidad. – En todo caso le doy las gracias Su Majestad.

Yo soy quien debo darle las gracias. – se levanta y da una leve inclinación – Futuros reyes de Tristain. – ambos estaban rojos pero dieron un asentimiento.

//==//==//==//==//

Días después se anunció de forma pública, el retiro definitivo de la madre de Henrietta, sin embargo, no le dejó el cargo a su hija, el cargo se lo dio a Louise Valiere ya que oficialmente tenía el manto de hermana Real y el motivo de su ausencia era para reforzar la alianza con Galia, cosa que era una buena excusa.

Por otro lado, cuando Henrietta supo de esto, perdió la cordura, era inaudito que no le cedieran el poder a ella, y su odio ahora no sólo era para Kenichi, ahora también se dirigía a Louise, dejó de ser su amiga ahora que le arrebató el apoyo de su madre, a Saito, quien se fue gracias a la peli rosa y ahora por quitarle el derecho como reina, algo "legítimo" para ella. Ella trató de protestar ese mismo día, pero Agnes y otras soldados la arrestaron y la enviaron a prisión.

Henrietta: ¡NO ES JUSTO! ¿CÓMO DEMONIOS ESA MALDITA SE QUEDÓ CON EL TÍTULO QUE ME PERTENECE POR DERECHO? ¡AGNES, SÁCAME DE AQUÍ, YO SOY LA REINA, NO ESA MALDITA! – pero Agnes sólo la miraba con pena y decepción. - ¡NO ME MIRES ASÍ Y OBEDECE A TU REINA!

Agnes: Lo lamento, pero estará aquí hasta que se decida qué hacer.

Henrietta: ¿CÓMO PUEDES TRAICIONARME? ¡YO TE HE DADO APOYO, TE DI UN HOGAR, UNA CARRERA! ¿Y ASÍ ME LO PAGAS? – exclamaba con furia.

Agnes: ¿Lo dice la mujer que traicionó a Louise? – fue lo único que dijo y se retira.

Henrietta: ¡MALDITA! – golpea con fuerza las rejas. - ¡TRAIDORA!

Segundos después, llega Louise, haciendo que la peli violeta apretara los puños y diera un golpe en los barrotes.

Henrietta: ¡TÚ! - mira con furia a la peli rosa.

Louise: Así que aquí has terminado. -dijo con seriedad.

Henrietta: ¿VIENES A BURLARTE DE MÍ? ¿A DECIRME EN LA CARA QUE TE HAS LLEVADO EL PODER QUE ME PERTENECE POR DERECHO?

Louise: ¿Por derecho? Tus actos imprudentes casi provocan la crisis en Tristain y sólo porque echabas la culpa a mi esposo, hasta quisiste arrestarlo.

Henrietta: ¡CÁLLATE, TE ODIO, TE ODIO POR HABERME QUITADO TODO LO QUE ME PERTENECE, ME QUITASTE MI PUESTO, ME QUITASTE A SAITO, ME QUITASTE A MI MADRE, ME LO QUISTASTE TODO MALDITA, TE ODIO!

Louise: De nada sirve hablar contigo, hablaré con tu madre para ver qué hacer contigo por tu comportamiento. – dijo mientras se daba media vuelta. – Al menos ya no te interpondrás entre mi esposo y yo.

Henrietta: ¡A LA MIERDA TU ESPOSO! ¡A LA MIERDA CONTIGO! ¡JURO QUE ME VOY A VENGAR Y TE MATARÉ POR QUITÁRMELO TODO, INCLUSO SI TIENES HIJOS, YO MATARÉ A ESOS BASTARDOS!

Louise: A mi futuro hijo o hija ni te atrevas a atacarlo. – le lanza un instinto asesino, dejando aturdida a la peli violeta. – Yo ya tengo mi familia y no voy a permitir que trates de dañar a mi familia. – se retira de ahí.

Henrietta: ¡MALDITA! ¡EN CUANDO SALGA DE AQUÍ TE MATARÉ! – golpeaba con fuerza los barrotes pero la peli rosa ni se inmutaba y se retira de ahí.

Pero ella no era la única quien estaba en contra de eso. Varios nobles estaban en desacuerdo y reclamaron a la antigua reina, ya que ella ni siquiera era de sangre, pero la madre de Henrietta había dicho que Louise, aún portaba el manto Real.

Eso no fue del agrado, así que varios hicieron una reunión en secreto y contratar a los más peligrosos sicarios para matar a ambos, cosa que fue interrumpida por Takao, Satoshi e Ingvild, deteniendo el intento de homicidio y siendo juzgados, sus nombres quedaron tachados de deshonra permanente por sus acciones y fueron llevados a la prisión más resguardada, lo mismo con Henrietta debido a sus comportamientos hostiles.

https://youtu.be/sOrvzpIT9CM

//==//EPÍLOGO//==//

Había pasado seis años desde que Louise y Kenichi se hicieron gobernantes del reino de Tristain y solucionaron muchas cosas, además que reforzaron su alianza con las demás naciones, ambos no tenían problemas con el papeleo, ya que lo avanzaban rápidamente para tener tiempo libre para sus hijos, sí, tuvieron dos, resulta que Louise terminó embarazada después de la luna de miel, resultando ser un niño a quien nombraron Ezequiel y un año después tuvieron una hija llamada Elizabeth. Takao y Tabitha no se quedaron atrás, ya que se habían casado después de que Tristain se anunciara de sus nuevos gobernantes.

Kenichi: A ver ¿Qué más falta? – revisa los papeles pero nota que ya no quedaba nada. – Genial, papeleo terminado. – se levanta y estira sus brazos. – En serio, esto es aburrido. – en eso nota que la puerta se abre. – Oh, hola Louise. – los niños se le lanzan encima y lo abrazan. – Y mis pequeños.

Ezequiel: ¿Ya terminaste con el papeleo papá? – el pelirrojo sonríe y le da una palmada en la cabeza.

Kenichi: Sí ya he terminado. Pensaba ver a mis hermanos ahora.

Ezequiel/ Elizabeth: ¡SÍ! ¡PODREMOS VER AL TÍO TAKAO Y AL TÍO SATOSHI!

Louise: Jejeje, están emocionados de ver a los tíos. ¿Verdad? – ambos asienten.

Elizabeth: Sí ya que ellos también nos entrenan.

Louise: Entonces preparen sus cosas, que iremos a reunirnos con ellos. – ambos hijos asienten y se retiran.

Kenichi: Yo los ayudaré. – es el siguiente en seguirlos. - ¿Vamos Louise?

Louise: Sí, vamos. – respondió con una sonrisa mientras el pelirrojo se retira de ahí, la peli rosa mira un cuadro de ella junto a su esposo e hijos de apenas 2 y 3 años y otra de ella junto a su esposo con los demás. – Gracias por darme esta vida feliz al lado de mis seres queridos. – da media vuelta y se retira de ahí.

FIN DE ESTE ONE SHOT.

ESPERO LES HAYA GUSTADO. NO OLVIDEN DEJAR SU COMENTARIO Y ESTRELLITA Y HASTA OTRO ONE SHOT.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro