De: Toriel

Para: Asgore

Ha pasado mucho tiempo y eso solo hizo que te empiece a extrañar aún más y más, ¡Que mi amor este por las nubes es debido a ti!

Se que no quieres verme a la cara, pero yo si quiero, al menos ven a visitarme algunas veces, amor, te extraño y no me cansaré de decirlo.

Aún no entiendo por qué envías guardias reales para mi, Pero si lo haces es porque aún te importo un poco, ¿Si lo hago por que aún no vienes a verme?

También se que no quieres hablar de eso, pero todo es culpa de ese maldito niño, ¿Era nesesario otro hijo? ¿No estabas feliz con uno? Podíamos tener otro, pero adotar un humano... fue la peor idea.

Y no entiendo el porque de todo el amor e importancia que le dieron al niño, no entiendo, ¡No entiendo!

Me siento sola aquí.

No tengo a nadie con quien hablar más que con aquellos guardas que envías, algunos me caen bien, pero me miran con ojos que juzgan y critican.

Te contaré algunas cosas que han pasado por aquí...

Desde que me enviaste aquí, he estado pensando mucho en todo, leyendo libros y cocinando, nada fuera del otro mundo.

He hablado con muchos monstruos también, pero aún así no me entienden y sigo sintiendo ese sentimiento de no tener a nadie con quien expresarme, todos me miran de la misma manera y yo aún te amo, te quiero aquí conmigo como no sabes, siempre que puedo intento saber lo que te está pasando pero no acostumbras a responder mis cartas.

Nunca se agotará mi amor, cuando pueda salir de aquí te lo mostraré.

Por otro lado, aveces cuando estoy aburrida voy a buscar caramelos a un boul que hay cerca del largo pasillo en las ruinas, por alguna razón no se acaban.

Me he encariñado con una de las arañas de una tal Muffet, aveces hablamos, aún que ellas no me respondan, siento que me escuchan.

Se que tal vez sea forzado, pero no quiero que te aburras leyendo esto.

He tenido pesadillas, presentimientos malvados, siento presencias que siento de cerca, se me hacen familiares, solo puedo ver a una niña oscura, una niña que sostiene un cuchillo, una niña con un buzo... parecido al de Asriel.

Ya recordé quién es, desearía no haberlo hecho.

A medida que escribo esta carta mis lágrimas caen, solo por sentirte en mis manos, sentirte con mis huellas, darte abrazos, tenerte siempre conmigo, nunca dejarte, ¿Acaso no sientes lo mismo? ¿Acaso no quieres que estemos juntos sin nadie más? Solo seríamos nosotros dos, nadie nos molestaría y nunca más nadie me trataría por loca.

Piensalo, mientras lo haces, yo pensaré en ti todos los días, todas las horas, todos los segundos.

Con mucho amor, Toriel.