Él es terrible bailando, pero eso no hacía que los ojos azules de Louis se desviaran de el lugar exacto en la pista de baile donde él estaba.

Él es la respuesta correcta, a cada duda, a cada pregunta, a todos los problemas que Louis tenía, solo debía pensar en él y podría resolverlo o contestar de inmediato.

Él es un cantante tímido. La mayoría del tiempo cuando sólo eran él y Louis, tal vez fuera el rey del karaoke y su nombre está escrito como ganador del concurso del mismo bar de karaoke, pero realmente era tímido cuando sólo eran ellos dos y Louis amaba eso, ver ambos lados de él.

Él sobre piensa todo, cada aspecto de su relación, cada detalle de la casa, cada línea en el camino y cada momento de su vida, pero Louis está bien con eso y tal vez no funcionaría con nadie más que con él.

Él es fan de los besos lentos, donde puede mover sus manos sobre sus zonas favoritas del cuerpo de Louis, las mismas zonas que a Louis le causan inseguridades, pero Louis amaba esos besos, por que como no amar algo que a él le gustaba tanto.

Él es un pecador encerrado, un santo afuera, todos lo consideraban la mejor persona y siempre le repetían a Louis la misma frase que suerte tienes, la tenía, siempre lo supo, solo era asi a solas con Louis.

Y apretaba sus manos, dos, tres veces, quería que le creyera que lo amaba siempre, siempre. Por que todo lo que Louis hacía durante todo el día era soñar acerca de él, todo lo que hacía desde que lo conoció a él era soñar con él.

Sólo quería pedirle que se quedara a su lado, acostarse a su lado y hablar sobre nada, por que todo lo que hacía era soñar sobre él.

- Iré por comida china ¿quieres?- Louis asintió, él presionó un beso en su cuello y salió de la casa. Era lo que pasaba cuando Louis tenía nuevas ideas para escribir y eso estaba bien.

Antes de conocerlo a él, Louis no vivía sólo escribía acerca de hacerlo, con su cabeza dando vueltas en su antiguo departamento, luchando contra si mismo, solo imaginando lo que podría ser su vida. Los días pasando por la mayor parte del tiempo.

Sintió como recargo su barbilla en su hombro y una mano se desvió del piano a la nuca de él, quien tomó ambas manos de Louis y apretó dos veces, tratando de que Louis volviera al mundo donde ambos se encontraban.

- Te amo- dijo Louis al sentir a Harry besar su clavícula. Su risa pegó contra la piel de Louis- Oh créeme te amo, siempre-

- ¿Siempre?-

- Siempre-

- ¿Qué haces?, no haz tocado nada-

- Estoy soñando- hizo espacio para que Harry se sentara a su lado- Contigo-

- ¿Por qué soñar si estoy aquí?-

- Por que quiero y puedo-

Fueron a la sala a centrar mientras veían infomerciales, por que era algo que ellos hacen cada martes, no le prestaban atención a los infomerciales en si, solo funcionaban de ruido de fondo para las torpes conversaciones y a veces los hacían tener debates sobre el lado bueno y el estúpido de los nuevos productos anunciados en la televisión.

- ¿Puedes quedarte a dormir?- Harry asintió. Y ese salto en su ritmo cardíaco apareció de nuevo.

- Si- lo confirmó con una sílaba.

Harry no podía dormir esa noche, ¿Louis estaría soñando sobre él en ese momento?. Oh tenía tantas preguntas que no tendrían respuesta acerca de ese detalle. Odiaba eso, que todas las preguntas que surgían en su cabeza eran creadas en base a lo que no lograba comprender de su conducta con Louis.

Jamás le había gustado San Francisco, jamás vio lo que los demás amaban acerca de esa ciudad, por supuesto nunca pensó en vivir ahí por que jamás lo considero especial hasta que Louis lo besó en San Francisco. No le gustaban las ciudades ventosas, pero tal vez con Louis a su lado le gustaban todos los lugares del mundo.

Sentía que lo conocía de siempre y con cada día lo conocía mejor, no podía evitar dejarse llevar con Louis a su lado, cosa que no hizo con nadie más, a veces era extraño sentirse tan cómodo a su lado.

Quería un explicación del por que jamás le gustó el tequila y cada vez que veía a Louis sentía la necesidad de tomar un trago.

También quería una del por que aceptaba todo lo que Louis ofrecía tan rápidamente, ni siquiera confiaba en su abuelo tanto como confiaba en Louis. Pero su abuelo fue un prisionero de guerra y sabía guardar secretos, fue básicamente su trabajo, pero Louis no le había dado ninguna razón para confiar en él plenamente y por alguna razón Harry lo seguía haciendo.

Solía verlo tocar en un bar de jazz a unas cuadras de ahí, solía concentrarse en el movimiento de sus manos, las cuales ahora se apoyaban en sus mejillas cuando lo besaba.

Pensándolo bien Louis soñaba con él y él solo necesitaba un minuto para acostumbrarse a eso. Definitivamente.

Harry nunca fue de relaciones serias hasta que él llegó y descubrió que no era malo repetir, pero ahora corría el riesgo de que su corazón sangrara cada vez que Louis le preguntaba si quería pasar ahí la noche. Si, tal vez le tomaría un minuto para acostumbrarse.

Logró dormir, no sabe a qué hora ó como pero lo logró, despertó por la sensación de las yemas de esos dedos en su mejilla y la sensación de otro beso.

- Podría acostumbrarme a esto- susurró Harry al separarse del beso, Louis recargó su frente en la del rizado y ambos cerraron los ojos.

- Puedes quedarte todo lo que quieras para lograr acostumbrarte a mi, a esto, a nosotros-

- Oh que afortunado soy- Louis rió y dejó un beso en la punta de la nariz de Harry antes de alejarse- Dime que soñaste-

- Soñé contigo a mi lado, en un lindo campo abierto..- Louis admiró un par de segundos el modo en como los ojos de Harry se veían un poco mas brillantes en la mañana- ¿Por qué de pronto quieres saber mis sueños querido?- Harry rió por la formalidad con la que Louis habló.

- Por que quiero saber si sueñas conmigo siempre o me mientes-

- Jamás te miento-

- ¿Entonces me dirás?-

- Nop- se levantó de la cama- Por que ahora que lo pienso fue algo vergonzoso decirte eso si le hacemos caso al hecho de que por primera vez en este mes quisiste quedarte a dormir, así que decirte que sueño contigo es algo vergonzoso imagina cuán vergonzoso sería decirte que es lo que sueño-

- Lou-

- Ni siquiera estoy seguro que me quieres aún, no te contaré lo que sueño-

Harry se dejó caer en la cama cuando Louis salió de la habitación, ¿por qué amaba a ese hombre que jamás respondía sus preguntas?, por que tienes muchas, fue la respuesta de Louis cuando Harry preguntó el por que nuca contestaba sus preguntas.

Minutos después bajó las escarelas para encontrarse a Louis sentado con las piernas cruzadas arriba de la encimera tomando jugo de caja, le sonrió y no desvió la mirada hasta que Harry sonrió de regreso.

- Louis- fue diferente de alguna forma. Se detuvo justo frente al ojiazul quien bajó la caja de jugo- Lou-

- ¿Por qué susurras?, ¿alguien entró a la casa?, ¿me matarás?- pronunció en susurros que se ganaron una pequeña risa de parte de Harry.

- ¿No se escucha una diferencia?- Louis ladeó su cabeza un poco al no entender- Jamás susurre de esta forma-

- No sé de que hablas-

- Cuéntame sobre tus sueños- Louis sonrió aún más y negó una vez. ¿Harry soñaria con él?- ¿Por qué no?-

- Ya te lo dije, es tonto- Harry lo besó, por que ninguna palabra que alguna vez salió de la boca de Louis era tonta y no le gustaba que Louis pensará así, quería que Louis no dudará de el mismo, por que él jamás dudo de Harry.

Quería que Harry soñara con él, quería preguntar si eso pasaba, pero Harry aun no sé acostumbraba a él así que entendía si no soñaba con él. Solo le gustaba imaginar que tal vez en un punto llegó a soñar con él.

- Di que sueñas conmigo también ¿puedes?-

- Lou-

- Por favor di que sueñas conmigo también- Harry no quito la vista de Louis quien tenía los ojos cerrados con su mano aún en la mejilla de Harry- Todo lo que hago es soñar contigo, todos los días desde que te conozco, es ridículo y tonto, lo sé pero lo hago-

- He soñado contigo- Louis abrió los ojos- Todo esto es nuevo para mi, ¿recuerdas?, solo dame un minuto para acostumbrarme-

- Deja de pensar-

- No puedo-

- Solo hazlo, dos segundos, no todo tiene sentido, no todo tiene respuesta, a veces solo debes dejarte llevar, al ponerle lógica a todo no queda nada-

- Si-

- Jamás te lastimaria, no quiero sonar presuntuoso pero elegiste al mejor para dejarte llevar- Harry asintió- Déjame amarte, no debes tomar un minuto, solo sueña conmigo Harry-

- Todo el día- dijo en forma de burla, ambos rieron antes de que Harry se inclinara a besar a Louis una vez más.

Un minuto les costó acostumbrarse a soñar juntos, a dejarse llevar, a amar, durante todo el día, todos los días, desde ese momento y se quedarian acostados sin hablar sobre algo específico, sin preocuparse por algo, al final ya soñaban juntos.

Hola

Gracias por leer.

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K.