~~Solo Tienes que Dejar de Temer~~

Luego de que Nico nos dejara, el pequeño chico de gafas y yo nos dirigimos hacia un Café que quedaba cerca. Supuse que él debía estar aún asustado, a mi ya se me había pasado el miedo del automóvil... Pero el chico parecía nervioso ya que apretaba su libro contra su pecho, seré yo el culpable?

-Yo... Te agradezco que me hayas salvado- Rompió el silencio aquella vocesita proviniente de mi acompañante-

-No te preocupes- Reí relajado en lo que posaba mi vista en su rostro el cual estaba escondido entre varios de sus cabellos- Por cierto pequeñin... Cual es tu nombre?- Pregunté al mirar al frente, ya casi llegabamos y cada vez el momento se volvía menos tenso-

-M-Me llamo Samuel- Titubeó el azabache al mirarme por primera vez mientras caminabamos- Y... Tu?- Preguntó como un niño pequeño, nervioso y curioso-

-Jaja yo soy Josep, un placer, pequeñin- Me presenté con alegría ante sus oscuros ojitos, luego despeiné su cabellera lacia, ya estando a un paso del Café-

-No soy tan pequeño...- Murmuró al hacer un puchero, estando a punto de chocar con un joven que salía del local de ricas comidas-

Reí al agarrarlo por el brazo y halarlo hacia mi, eso hizo que tropezara y pegara contra mi pecho... Creo que soy poco disimulado para decir lo mucho que me atrae este niño.

-Si lo eres...-Me burle con voz suave y nos encamine a una mesa vacía que había en uno de los rincones del lindo lugar-

-Bueno... No te burles- Concluyó con timidez al acomodar sus lentes y mostrarme una ligera sonrisa... Muy cautivadora y adorable-

Le sonreí con ánimo al sentarnos en la mesa. Samuel dejó sus cosas a un lado y acomodó sus manos sobre su regazo, con la mirada en el mismo lugar, es decir, su mirada estaba baja.

-Qué vas a querer comer?- Le pregunté con serenidad. Vi como vio su menú y luego desvió la mirada- Pide lo que quieras, yo pago- Comenté en lo que también le echaba una ojeada al menú lleno de toda clase de comidas y postres-

-Un vaso de agua estaría bien... No como mucho- Contestó apenas audible en lo que echaba a un lado el menú-

-Jm...- Soné dudoso, capturando su atención y poniéndolo nervioso- Ya comiste?- Pregunté al recargar mi rostro en mi mano derecha-

Su silencio y nerviosismo me dijo todo, tenía pena de pedir algo de comer. Estaba seguro que estaba mirando la imágen de la marqueza de chocolate del menú. Fue entonces que el joven mesero llegó a nuestra mesa para tomar nuestra orden...

-Un vaso...- Comenzó el pequeñin a pedir, pero le interrumpí antes de que el chico anotara-

-Para él, un número 3 de pollo con papas fritas y salsa de tomate. Para mi un número 8 de carne guisada con papas y arroz, por favor- Pedí con una sonrisa triunfante ante mi compañero, luego sonreí amablemente para el joven-

-Muy bien joven. Para tomar, que desean?- Preguntó el mesero al terminar de anotar en su libreta-

-Eh... Jugo de fresa... Por favor- Pidió con timidez Samuel al mirar al muchacho que nos atendía-

-Y yo una soda, por favor- Dije por último al cerrar el menú- el camarero sonrió al asentir y agarró los menús para luego retirarse-

Miré con una sonrisa al niño frente a mi, este estaba mirándome acusadoramente en lo que acomodaba sus gafas. Luego suspiro y volvió a bajar su mirada...

-No quiero que gastes tanto dinero en un desconocido- Comentó con su suave voz y, antes de que siguiera hablando, su estómago gruñó, haciendo que sus mejillas se enrojecieran totalmente- Dis-Disculpa-

Reí leve y noté como se tensaba al oirme, quizá temiendo de que me estuviera burlando de él... Que chico tan dulce pero tengo la gran misión de alegrarle los días, presiento que haberlo visto no fue por casualidad, sé que algo esconden esos lentes..., y lo voy a descubrir.

-A partir de hoy, ya somos amigos- Declaré de repente con una sonrisa triunfante y ganándome la mirada curiosa de Samuel- Te parece?- Comenté al fijar mis ojos en los suyos-

Luego de un par de segundos, una risita salió de labios del pequeño azabache y luego acomodó sus gafas sobre el puente de su nariz para mirarme, esta vez con una sonrisa estable solo para mí. Eso me alegró, aparte del asentimiento de su cabeza con emoción lo cual casi me provoca un derrame nasal... Es demasiado tierno!

-Cuantos años tienes?- Pregunté al calmarme un poco, empezando con la ronda de preguntas para conocerle más-

-Tengo 16... Los cumplí este año- Contestó con tranquilidad mientras veíamos como el mesero nos entregaba las bebidas-

-Gracias- Agradecimos al mismo tiempo- Eres mayor que yo- Reí leve- Yo cumplo los 16 en unos cuantos meses- Confesé al probar de mi soda en lo que él disfrutaba de su jugo-

-Jeje- Rió esta vez él con cierto brillo cómico en los ojos-

-Pero sigues siendo más pequeño que yo- Finalice luego de sus risitas, su mirada se posó en mi y, en ese momento, despeiné sus cabellos-

Y así paso nuestra tarde, creo que me sirve comenzar por ser su amigo, noto que necesita salir para conocer más esta zona. Amé cuando sus ojos se iluminaron en lo que me declaraba su amigo, y como estoy pensando, desde ahora agregaré alegría a su vida.

Le pedí el número y, con mucha pena y tristeza, me dijo que no tenía un celular, que no le dejan tener uno. Al principió lo dude pero se veía un chico que no sabía mentir, por lo que termine creyéndole; Le di mi dirección y así podriamos hablar por cartas. Con solo saber que Samuel no tenía celular, supuse que nada que tuviera que ver con internet.

-De verdad... Cuando tenga teléfono, serás el primero en tener mi número- Me dijo con timidez, dándome explicaciones innecesarias-

-No te preocupes, Topi- Comenté con una sonrisa leve, esa frase me pareció muy tierna de su parte... Soy un As al hacer amigos, no creen?-

-Topi?- Puntualizó al mirarme con una ceja alzada en lo que metía una papa frita a su boca-

-Sip. Tus lentes son grandes para tu rostro y te hacen ver como un lindo topo... Por eso Topi- Explique su nuevo apodo con alegría, aparte que el apodo también tenía que ver con un topin de dulce... Como esos que se les ponen a los helados-

-Tienes mucha imaginación para los apodos, Josep- Comentó con un poco de gracia al acomodar sus lentes. Luego, al terminar con su almuerzo, tomó de su bebida de fresa con las mejillas mostrando un ligero color rosa-

-Tengo mucha imaginación- Reconfirmé al dejar mi plato vacio a un lado para terminar mi soda-

Al reírnos un poco más, pague la cuenta antes de que Samy sacara dinero a lo cual él hizo un tierno puchero y frunció su ceño ligeramente por mi acción; también le compre una pieza de la marqueza de chocolate que había en la vitrina. Entre risas y algunas bromas, salimos del local con ánimo, estaba dispuesto a acompañar a Topi a su casa pero, de repente, su paso se detuvo a apenas un paso afuera del local, eso me preocupó.

Iba a preguntarle que ocurría pero, en un movimiento rápido, se escondió detrás mio; fruncí mi ceño y me guie por su mirada la cual apuntaba a un muchacho vestido de negro y con una cadena alrededor del cuello que estaba cruzando la calle en dirección a la que nosotros estabamos, realmente se veía amenazante pero no tanto como los tipos con los que hacia un tiempo había peleado.

Disimuladamente volteé un poco mi cabeza e hice un ademán con esta para indicarle a Samuel que volviera a entrar al local; él me obedeció y a paso rápido se devolvió, siendo seguido por mi.

-Quién es ese chico?- Pregunté con un poco de seriedad, pero con una voz suave para no poner más nervioso a mi nuevo amigo... Se le notaba asustado-

-Ya se debió enterar- Murmuró mientras sus manos temblaban con el libro entre sus brazos- É-Él no te de-debe ver conmigo- Comentó con un hilo de voz al mirarme... Cada vez entendía menos-

-Es tu novio?- Pregunté incrédulo y tratando de que mi voz no cambiara, esa frase me resultó auto-desanimadora-

-N-No- Contestó con una cara de impresión, mostrando quizá un poco de desagrado- Él...me está buscando para llevarme a...casa- Dudó en la última palabra y desvió su mirada de la mía, cada vez esto se pone más raro y ese tipo que está afuera ya me empezaba a dar mala espina-

-Te va a lastimar?! Mira que yo si le parto...- Me estaba ilusionando con pelear pero Samy me interrumpió al jalarme el brazo-

-No!- Gritó con temor, eso hizo que algunas personas voltearan y que Samy se sonrojara intensamente- Él te puede hacer algo... No quiero que te lastime- Murmuró al bajar su rostro sin soltar mi camisa-

Admito que se veía extremadamente tierno, pero no quería pensar en que ese tipo le pudiera hacer algo a Topi. Suspiré, rindiéndome ante su suplica, y me volví a él para despeinarlo.

-Vamos a salir por la puerta trasera... No nos verá- Terminé comentando y noté como sus ojos se iluminaban por mi sugerencia-

Sin esperar mucho, asintió rápidamente, y dejó que le guiara entre la gente del lugar y las mesas; él no soltaba el borde de mi camisa, eso me indicaba que tenía miedo de perderse. Le pedí permiso a uno de los meseros, el que nos atendió para especificar, y salimos por la puerta trasera. Llegamos a un callejón, estaba oscuro, y daba a la calle que estaba detrás del local por lo que estabamos lejos del chico que buscaba a Samy.

-Por donde vives? Te acompaño a tu casa- Dije al sentir una gotita de agua en mi cabeza, pronto comenzaría a llover y el frío le daba la bienvenida-

-Muchas gracias por el día de hoy, Josep- Sonrió sincero- Pero desde aquí me voy solo. No quisiera meterte en problemas- Dijo con un cierto tono de voz apagado-

-Pero...-Traté de bufar al dar un paso hacia él y fijar mi mirada en sus grandes ojos-

-Nada- Sonrió nuevamente solo para mi- Espero volver a verte- Confesó con timidez y apretó el libro que llevaba, sin dañar la bolsita en la que llevaba el postre-

-Bueno...- Rasque mi nuca por ser mi segunda derrota frente a sus palabras- Pero toma esto, solo vas con un libro y no sirve de nada que te enfermes- Comenté al sacar mi abrigo del bolso y ponerlo sobre los hombros de Topi, luego subí la capucha y se la puse sobre la cabeza... Moriré de un derrame nasal... Mierda, se veía extremadamente lindo con mi saco-

Él sonrio, me agradeció y luego con un ademán de mano, se fue corriendo para cruzar la calle, allí tomó un bus y desapareció de mi vista con una linda sonrisa en sus labios.

Me quedé realmente embobado con su adorabilidad, nunca había visto tanta hermosura en un solo cuerpo... Espero de verdad volver a verle, no quiero que esto sea pasajero, quiero ser su amigo... Presiento que me necesita... Quizá solo un segundo para amar me bastaría.

Cuando por fin salí de mi idiotez gracias a la lluvia que empezó a caer, me dispuse a irme. Al salir del callejón, un muchacho pasó por enfrente mío... Era el chico que seguía a Samuel. Por un segundo nos miramos, en ese segundo me transmitió el desprecio que me tenía y yo, pues yo lo miré con arrogancia.

Este juego lo gano yo, solo para que Samy deje de tener miedo.

-7 Meses después...-

Después de tanto pensarlo, de aguantarme las ganas de besarlo, de golpear al imbécil de Logan, ese chico que le vigila; tantas cosas que pasé con él, hoy estaba dispuesto a declararme. No se si me acepte, pero sé que aun así seguiré estando a su lado para alejarlo del dichoso vigilante.

"-Es un joven que mi padre contrató para que me vigilara, no me deja comunicarme con nadie... No me deja salir-"

"-Mi padre? Pues... Es dueño de una gran empresa, pero es alcohólico y desde que mi hermano mayor consiguió un pequeño doncel de pareja, se volvió homofóbico-"

"-Estar contigo se me volvió una necesidad... No soporto estar en casa-"

"-Mi abuelito es la mejor persona que hay! Gracias a él he podido verte, él me ayuda a escabullirme-"

"-Me da miedo que Logan te vea conmigo. Puede llegar a hacer cosas horribles y no quiero que te pase nada...-"

Creo que he hecho tan poco para lo que Samy ha vivido, siento que debería hacer algo más y no sé qué es... Pero lo único de lo que estoy seguro es que, desde que nos conocimos, su sonrisa empezó a volverse más luminosa y yo me enamoro cada segundo de su actitud. Pero, aún presiento que algo me oculta, cómo lo sé? Ni idea. Solo sé que me da miedo que un día no lo pueda ver sin razón, últimamente he tenido esa opresión en el pecho que me dice que debo luchar contra bestias para que Samuel sea libre, para que esté conmigo.

-Disculpa la demora!- Me disculpe al llegar corriendo a una de las bancas del parque donde se encontraba Topi sentado tranquilamente-

-Hola Josep- Saludó alegre mi pequeño niño. A pesar de que tiene unos meses más que yo, siempre será mi pequeño Samy-

-Llevas mucho tiempo aquí? Pregunté preocupado al enderezarme, viendo como Topi se colocaba de pie enfrente mío con un libro diferente al de ayer en la mano-

-No, acabo de llegar- Dijo lo mejor que pudo. Sus orejas se coloraron lo que quería decir que estaba mintiendo-

-Mentiroso, mentirosín- Canté al agarrar una de sus orejas para moverla un poco, indicándole que no había logrado mentirme. Un ligero quejido salió de sus labios y solté una risita debido a cierto sonido-

-Bueno... Llevo como 15 minutos y me puse a leer este libro- Confesó al mostrar el libro que estaba entre sus brazos, ahora sus orejas estaban de su color natural... Es lindo verlo así-

-A la próxima llegaré más temprano, trataré de hacerlo- Dije con cierta vergüenza por haberle hecho esperar- Ahora, te invito a unos helados- Mencioné con emoción e imaginándome el sin fin de sabores que hay en esa vitrina-

-Josep, desde que somos amigos has gastado mucho por mi- Murmuró con timidez al desviar su mirada- No deberías mimarme tanto...-

-Para mi es un placer, así que apresurate- Somreí al alzarle la mirada hacia mi y, sin querer queriendo, me acerqué lo suficiente como para sentir su aliento-

Sus mejillas se coloraron con tal acercamiento, yo me limité a sonreir ya que tal vez pronto pueda acercarme más. Me alejé y él no despegó su mirada de la mía, aun poseía ese color carmesí en sus mejillas cuando una sonrisa tierna aparecía en su rostro. Samy asintió y se encaminó a mi lado hacia la heladería que quedaba a una cuadra del bonito parque.

-De qué vas a querer tu helado?- Pregunté al entrar al local pintado de verde con rosado, viendo a las personas que ocupaban las mesitas o compraban sus helados-

-Tu ya sabes...- Rió el azabache ligeramente por mi pregunta, hasta él sabe lo mucho que lo conozco-

-Tienes razón. Ve a sentarte por allá y yo ahorita voy- Sugerí con mi extrovertida sonrisa al señalarle con la mirada una mesa vacía-

Samy asintió y rápidamente se dirigió a la mesa para apartarla. Al ver que estaba sentado, me encaminé a la caja para comprar un vaso y un cono de helado.

-Buenas tardes, joven. Como y de qué desea su helado?- Preguntó la alegre muchacha-

-Buenas!- Saludé- Un cono de helado con oreo y un vaso con helado de fresa y limón, por favor- Pedí amablemente al sacar mi billetera-

-Muy bien, joven. Hoy tenemos una nueva promoción para nuestros clientes. Desea en el vaso algún mensaje de chocolate?- Preguntó la muchacha mientras escribía en la computadora... Un mensajito no estaría mal, quizá me ayude con Topi-

-Como se poné el mensaje?- Pregunté animado por dicho extra para el helado, aparte de que era de chocolate-

-En el fondo del vaso, con un pincel de chocolate, se pone un mensajito corto para que la persona que termine el helado, lo lea. Es para dar sorpresas a los seres queridos- Explicó la chica con cierta emoción, contagiándome tal sentimiento para sorprender a mi amigo-

-Lo pido- Dije casi al segundo de que ella terminara de hablar-

-Muy bien joven! Qué quiere que diga?- Preguntó ella al agarrar un lapicero y un papel-

-Que diga... Quieres ser mi novio?- Dije con seguridad. La muchacha sonrió más, pero no escribió el mensajito-

-Nina! Cambiame el lugar!- Pidió la rubia a su compañera y me dió la factura de toda la compra hecha, luego me guió hasta los sabores- Yo escribiré el mensaje. Llevo poco tiempo en este trabajo y ver este tipo de momentos es algo especial... Me encanta- Comentó mientras escribía el mensaje con un pincel de chocolate, mostrando una hermosa letra cursiva y agregándole un par de corazones-

-Gracias- Dije con cierto sentimiento de alivio al ver el mensaje-

La chica me dio el cono y luego puso dos grandes cucharadas de helado en el vasito: una de fresa y la otra de limon. Agradecido y un poco nervioso me encaminé hacia la mesita; Topi leía su libro y acomodaba sus lentes hasta que me vio llegar, cerró el libro y me sonrió. Le dí su heladito y me sente frente a él para empezar a comermer mi helado; él agarró la cucharita y también empezó a picotear su helado, primero el de fresa y luego el de limon, así sucesivamente.

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Entre sus adorables risitas por las idioteces que yo decía, pasó nuestra tarde. Ya por fin se estaba acabando su helado y la comisura de su labio estaba pintado de verde... De un momento a otro, su mirada se quedó clavada en el vaso, luego me miró a mi y su nariz se empezó a colorar... Yo solo le miraba con una sonrisa ligera.

-Dímelo tu...- Masculló en un hilo de voz, noté como sus ojitos se cristalizaban y como aguantaba la respiración por varios segundos-

-Samuel...- Me agarró por sorpresa que me pidiera tal cosa; respire profundo y agarre una de sus manos, esta temblaba y Topi dio un respingón por mi toque-

"Quieres ser mi novio?"

Propuse con seguridad y con mi tono alegre pero grave, dirigiendo mi mirada a la de él. Contuve mi respiración, apenas lo había dicho y una lágrima se deslizó por la mejilla rosada de mi pequeño Topi... Sonrió y apretó mi mano, después asintió tranquilamente y sentí como mi corazón se detenía en ese segundo de emoción... Me levanté e hice que él hiciera lo mismo; como una pared tapaba un poco la mesa, lo pegué a esta y él aferró sus manos a mi camisa. Lentamente me fui acercando, sus ojos no se despegaban de mis ojos ni los mios de los suyos...

Hasta que uní mis labios con los suyos. Esos pequeños labios carnosos y mordisqueables, tan adictivos como me los imaginaba y tan inexpertos como lo deseaba. Fue un suave beso que se fue intensificando, Samy trataba de copiar el mover de labios que yo hacía, eso hacía que el beso fuera cada vez mejor.

-Gracias por esta oportunidad- Murmuré sobre sus labios al finalizar su primer beso, espero ser su primer beso-

-Gracias por enamorarte de un chico tan insignificante y problemático como yo- Dijo en un hilo de voz igual sobre mis labios, sus ojos seguían cristalizados y sus mejillas rojas, y esa hermosa y adorable sonrisa adornando su rostro...-

Creo saber qué siente Narúl cada vez que ve a Nicolas... Sí, ya sé que el perrito de mi mejor amigo se volvió humano y que le da duro contra el muro. Nicolas me lo dijo hace un tiempo, lo que más me impresiona es que sea el que recibe, eso nadie se lo cree.

El punto es que, ahora tengo novio y le voy a restregar en la cara a Nicolas que lo logré, aunque siempre me apoyo y se volvió amigo de mi Topi también... La noticia es que tengo novio!! Ahora tengo que cuidarlo y ahora si podré romperle la cara a Logan.

-Prométeme que no te meteras con Logan.- Me sacó de mis pensamientos mi pequeña pareja... Un momento, qué dijo?!-

-Qué?! Por qué!?- Me quejé al fruncir un poco mi ceño-

-Es una persona mala... No quiero perderte cuando apenas empezamos a ser novios- Dijo con un tono de preocupación, pero adoré que dijera que ya éramos novios-

-Déjame romperle la cara, él ni siquiera sabe que somos algo- Traté de evadir su intentó al poner mis manos a cada lado de su rostro, haciéndolo parecer más cachetón de lo que era-

-Entiende que no quiero que te lastime- Me regañó Samuel al fruncir un poco su ceño y agarrarme también de las mejillas-

Su rostro se veía tan...tan... Es algo indescriptible. Sus ojitos oscuros mostraban tanto miedo a lo que yo quería hacer, no quiero que esté así, pero tampoco quiero que él vaya a salir lastimado. Me comentó que su abuelito se había empezado a sentir mal y que no soportaría quedarse sin él... No me imagino lo solo que se quedara si el señor se muere... Pero aun así, haré lo que sea para que Samy no se sienta solo.

Luchare contra las bestias.

-Te prometo que me contendré... Pero no dejare que sufras por querer protegerme- Dije un poco más serio y frote mi mejilla contra una de sus manos-

-Eres un idiota, lo sabes?- Murmuró con cierto tono de tristeza. Sé que se puso a pensar en lo que, según él, sucedería-

-Que hay de malo con serlo? Todo idiota tiene su motivo- Comenté al volverme a acercar a sus labios, nuevamente lo besé y rodeé su pequeña cintura con mis brazos, así él rodeó mi cuello con los suyos-

Nuestros días pasaron así, la única diferencia entre ser novios era que podía besarle cada vez que quisiera, que podía gritarle lo mucho que lo amo y que podía presumirlo ante mi madre, a la cual le encantó la idea de que Samy fuera mi novio y que me dijo que lo cuidara.

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Hoy salí un poco más temprano del colegio; Nicolas le mandó saludos a Samuel y yo se los envie a Narúl, a lo cual Nico se sonrojó un poco... De verdad se nota que está enamorado, nunca había permanecido en una relación con una chica por más de dos semanas, eso quiere decir, que solo necesitaba a un chico aparte de mi que lo entendiera... Ahora yo también tengo a mi pulga.

Me encaminé feliz hacia el parque en busca de mi Topi, hoy ya cumpliamos un mes de novios y mi madre hermosa se tomó el día para hacernos una cita en la casa, luego nos dejaría a solas hasta que terminara su turno... De verdad está animada por que salga con un uke como Samy, así le dice ella.

Al llegar a la banca de siempre, se me hizo extraño que Samuel aún no llegara, quizá ocurrió algo con su abuelo... En un rato llegará, tal vez llegué muy temprano. Dejé los malos pensamientos de lado y me fije en un señor que vendía globos al otro lado de la calle, comprar un globo en forma de corazón no estaría mal por lo que mejor encamine hacia el señor pero, en un abrir y cerrar de ojos, estaba siendo pegado contra la pared de un callejón por... Logan? Mierda.

-Hola, hola, Josep Rooney- Dijo con un tono de voz frío ese chico que tanto odio y que acosa a mi pequeño Topi... Logan-

-Disculpa, pero quién eres y quién te crees para tratarme así?- Pregunté con un toque de molestia en mi voz, aguantándome las ganas de estrellarlo contra la pared-

-No te hagas el imbécil. Tu eres el noviecito de Samuel- Me acusó con seriedad al apretar su agarre al cuello de mi camisa... Esto cada vez me da más risa-

-Vuelvo a preguntar... Quién te crees?- Pregunté al empujarle, haciendo que soltara su agarre a mi camisa para mostrarle una sonrisa arrogante-

-Quizá tu peor pesadilla. Te vengo a advertir que dejes a Samuel, ese niñato será mio- Amenazó al mirarme a los ojos con ese brillo de maldad en ellos. Ahora si que me hizo enojar-

-Que buen uso de palabras pero...- Hice una pequeña pausa, buscaba palabras en mi diccionario mental- Cómo le voy a tener miedo a un brabucón que se quiere meter con mi novio, eh?- Termine afirmando con mi semblante serio-

El tipo sonrió, ahora que lo veía mejor, se notaba que era mayor que yo, quizá unos veinte... Pero eso no me detendría para partirle las gafas de sol que llevaba. Sí, le prometí a Samuel que no me metería con Logan, pero él fue quien comenzó, no? Este iba a volver a hablar, pero se vio interrumpido por mi puño el cual choqué contra su mejilla; hice que su labio sangrara y que volteara su cabeza por el impacto.

-Oh niño... No debiste hacer eso- Masculló al limpiar su labio, luego me pegó en la mejilla para pegarme con la rodilla en el estómago-

Iba a volver a pegar cuando sentí que algo se adentró en mi estómago, era pequeño pero filoso... Me quedé estático por un momento, lentamente baje mi vista y era una pequeña navaja que me había enterrado Logan.

-No vine a pelear, solo a advertirte que te alejes de Samuel- Me susurró al oído y luego me mostró su estúpida sonrisa de victoria-

Afincó un poco más la navaja para sacarla de un solo golpe... Logré mentener mi boca cerrada para no quejarme pero enserio dolía. Me mantuve un momento apoyado en la pared mientras veía como el vigilante se iba del callejón...

*Narra Samuel*

Hoy ya cumplía un mes de noviazgo con Josep, aun no puedo creer que ese chico sea mi novio, es tan lindo conmigo, se me hizo una necesidad verlo todos los días. Iba camino al parque pero me detuve a comprar un pequeño absequio, no estaría mal llevarle algo: le compré a Fueguitos un collar largo que de símbolo una lengueta de fuego y unos lentes al lado, creo que fue el mas descriptivo para nosotros.

Seguí mi camino por la acera cuando vi a un muchacho salir de un callejón, era Logan. Rápidamente me escondí detrás de un par de chicos que caminaban a mi lado, no le tomaron importancia a mi actitud. Al ver que Logan estaba mucho más lejos, un inexplicable temor me recorrió el cuerpo; caminé rápido hacia el callejón y mi vista se quedo fija en el chico que sangraba el cual se sostenía de la pared...

-Jo... Josep...-Titubeé en lo que me acercaba a paso lento hacia el chico que es mi novio-

Él me miró por un momento y luego bajó su mirada con cierta frustración. Logan le había hecho eso y todo había sido mi culpa...

-No... No...- Negaba en lo que me posicionaba frente a él. Su mirada seguía caída y baje mi vista para ver como una de sus manos tapaba una herida-

-No es nada, Topi- Dijo en un hilo de voz Josep al volver a mirarme, dejándome ver una sonrisa en sus labios y una delgada hilera de sangre bajar desde ellos-

-Me prometiste que no lo harías...- Dije con la voz quebrada al poner mi mano sobre la de él-

Respire profundo e intente no llorar, no debía en este momento. Busqué en los bolsillos de mi pelirrojo mientras él desviaba su mirada, encontré su celular y rápidamente busque el número de Nicolas...

-No tienes que llorar...- Escuché la voz de Josep mientras acariciaba mi mejilla, ahí sentí la humedad en mi rostro, no sabía que ya había empezado a llorar-

-Cállate, estoy molesto contigo- Sollocé con mi ceño fruncido. Por fin había encontrado el número de Nicolas y le dí a la tecla de llamar, agarrando una bocanada de aire antes de hablar-

Nicolas me contestó y le dije que Josep estaba herido. El mejor amigo de mi novio, sin pensarlo mucho, me contestó que ya vendría por lo que le dije donde nos encontrabamos.

-Eres un imbécil. Lo prometiste!- Regañé cuando colgué la llamada; su mano seguía en mi mejilla y note como mi mano también empezaba a humedecerse de sangre-

-Él se metió conmigo... No me iba a quedar callado- Se excusó antes de hacer una mueca para quejarse del dolor-

Sentía como mi respiración se aceleraba, me estaba dando un ataque de pánico... Pasaron unos minutos hasta que escuche que alguien me llamaba, era la voz de Nicolas.

-Aquí...!- Alcé la voz y sentí la sombra se alguien acercándose, volteé y vi a Nicolas junto a Narúl a mi lado, un poco más atrás venía la madre de Josep-

La señora Rooney me calmó en lo que Narúl y Nicolas ayudaban a Josep a caminar; su casa estaba cerca por lo que no fue mucho camino, pero fue un sufrimiento para Josep ya que estaba herido... Al llegar a la casa, mi suegra se encerró con su hijo al cuarto, dijo que lo curaría, y me dejó en la sala con Nicolas y Narúl.

-Estás bien?- Preguntó Nico al poner su mano en mi cabeza, tratando de que levantara la mirada que en todo momento estuvo caída-

Yo me limité a asentir y pasé disimuladamente mi mano por uno de mis ojos, ya me estaban ardiendo un poco.

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La señora Rooney nos dejó almuerzo y Nico se fue junto a Narúl. Ya eran como las 08:15pm y Josep aún no había despertado, no quiero comer mientras Josep no despierta. Desde un principio debí alejarme, nunca debía aceptar ser alguien en su vida... Ahora, por ser mi novio, Logan lo ha lastimado.

-Lo siento mucho, Josep- Susurré al bajar mi mirada, me encontraba sentado al lado de su cama y en estos momentos no podía dejarle solo-

Su madre me dijo que le cuidara, hoy trabajaría toda la noche ya que en el día estuvo aquí. Me comentó que había hecho un delicioso almuerzo para que su hijo y yo celebraramos nuestro aniversario...

-Todo idiota tiene...su motivo- Escuché de los labios de mi pelirrojo y por ello alcé mi mirada, viendo como él me miraba con ternura-

No supe como reaccionar, solo sabía que debía abrazarlo pero me daba miedo lastimarlo, no sabía si estaba del todo bien... Solo me quede mirándolo, sintiendo como nuevamente los ojos se me aguaban.

-Ven aquí, pequeñin- Escuché su voz llamarme y estiró sus brazos para abrazarme, lo cual no tarde un segundo en hacer... Nunca me había sentido tan feliz de abrazarlo-

Una risita salió de sus labios en cuanto lo abracé y completó por rodearme la cintura con sus grandes brazos...

-No iras a terminar conmigo, verdad?- Preguntó al cambiar de posición conmigo, dejándome bajo su torso desnudo- Por eso si podría morir- Murmuró con dramatismo sobre mis labios-

-Por qué quieres estar conmigo?- Pregunté con nerviosismo y la voz temblada sin alejar mi mirada de la suya-

-Porque te amo- Cantureó segundos antes de besarme- Feliz Aniversario- Me recordó al volver a besarme pero, esta vez, adentró su lengua en mi boca, rozando la mía con suma astucia-

Eso me había agarrado desprevenido pero no quise dejar aquel roce de bocas, era una sensación que no quería dejar a un lado. Sin embargo, el aire se hizo necesitar y terminé el beso de forma suave, notando como la sonrisa extrovertida de mi novio se hacia presente.

-Vamos nene, tenemos que bañarnos- Me dijo con esa sonrisa hermosa que tiene, luego se puso de rodillas con facilidad, haciendo que me levantara también-

Un poco confundido le miré con una de mis cejas alzadas, no sabía que quería decir con eso de ir a bañarnos, sería peligroso para su herida, inevitablemente miré aquellas vendas alrededor de su torso...

-Estaré bien... No aguanto el calor, quisiera bañarme- Me susurró sobre los labios en lo que agarraba mi mano, mostrando que la suya era más grande que la mía-

-Pe-Pero...- Titubeé un tanto nervioso, la señora Rooney no me dio puntos para cuidar a Josep, solo me dijo que le vigilara-

*Narra Josep*

Mi madre, antes de salir del cuarto, me dijo que estaba bien, que solo había sido una herida dramática, mucha sangre y mucho dolor, pero poco daño físico. Sé que luego de eso se fue y yo me quedé dormido, estaba feliz porque no había sido nada grave, aparte de que mi Topi y yo tendriamos nuestra cita.

Al despertar, vi a mi pequeño angelito sentado al lado de mi cama. No me miraba, estaba murmurando cosas a las que no le veía sentido, hasta que por fin hablé para llamar su atención...

-Todo idiota tiene...su motivo- Susurré al tragar un poco de saliva para humederme la garganta-

Los lindos ojos de Samy me miraron y así fue por un rato, se le veía feliz y triste a la vez, creo que esto le afectó más de lo que me afectó a mi. Tranquilamente estiré mis brazos hacia él en señal de que quería un abrazo, en ese instante los ojos de Topi se humedecieron y mi corazón se estremeció debido a esa imagén de Topi.

-Ven aquí, pequeñin- Le llame con un tono tranquilo y ligeramente ronco, aún mi garganta estaba un poco seca-

Y así rodeé su pequeña cintura después de reirme por su tierna actitud; me abrazaba como si nunca me fuera a soltar, ese gesto me pareció bastante adorable.

-No iras a terminar conmigo, verdad?- Pregunté con un toque de sarcasmo en mi voz- Eso si me mataría- Dije con un toque de dramatismo en mi voz en lo que cambiaba de lugar con Samy, dejándolo debajo de mi. Lentamente me acerqué a sus pequeños labios, era mi oportunidad para besarle-

Nuevamente tenía entre mis brazos a la pulga que más quería. Rápidamente le besé, eso le aclararía las dudas de lo mucho que lo amo, sus labios ya se estaban volviendo expertos en bersar pero, como buen dominante de este pitufo, sé besar mejor que él. Mi lengua agilmente se adentro a su boca, rocé su lengua y eso hizo que Samy se sobresaltara.

-Vamos a bañarnos, nene- Le invité con un inocente propósito escondido y me apoye en mis rodillas sobre la cama, así hice que Topi también se levantara al agarrar su pequeña mano-

Él me miró confundido, quizá mi mamá no le dijo lo de la herida. Reí ante su gesto de interrogación para después pararme de la cama.

-No es...- Comenzó él al momento en que lo pegué a mi torso desnudo, sus mejillas rosadas lo volvían tan indefenso... Cada vez me recuerda lo mucho que tengo que cuidarlo de las garras pervertidas de los demás-

-Estoy bien, solo fue una herida dramática. Me puedo bañar- Aseguré con tranquilidad al momento en que Topi bajó su mirada con ciertos aires de inseguridad-

El silencio estuvo presente por un momento en lo que deslizaba mis manos por la espalda de Topi. Su rostro estaba oculto en mi pecho y lograba sentir su tranquila respiración...

-Vamos, tengo calor- Me quejé con un poco de seducción en su oído, pero un gesto de su parte me robo el aliento-

En medio de aquel silencio, Samuel se puso en puntillas y se apoyó en mi pecho, luego besó mi mejilla con sus pequeños labios... Un roce de sus labios en mi rostro tan inocente y tierno que no pude evitar sonrojarme. Me quedé embobado ante dicha acción hasta que esos labios se despegaron de mi cachete, luego vi una sonrisa en ojos de Samy, una sonrisa de alivio y cariño.

-Te amo- Dijo con sus mejillas rosas y los ojos fijos en mi... No lo soporto-

Bufé al desviar mi vista y, antes de que Topi preguntara por mi bufido, lo cargué sobre mi hombro para encaminarme con tranquilidad hacia el baño de mi habitación. Mi propósito seguía siendo "puro e inocente" cuando senté a mi Topi en el borde de la bañera y abrí el grifo del agua para empezar a llenarla... Ahora si que no soportaba tenerlo "tan cerca y tan lejos".

-E-Ey...!- Se quejó él al instante en que empecé a quitarle la ropa con total naturalidad- Qu-Qué haces?- Preguntó Samy mientras yo desabotonada su camisa con cierta rapidez-

-Dije que nos bañariamos, no?- Recordé al mirarle a los ojos con una de mis sonrisas seductoras-

-Pe-Pero...-Titubeó con nerviosismo en lo que le quitaba la camisa hacia atrás, liberando así sus brazos y desnudando su torso-

Sonreí ante el niño que tenía enfrente mio, Samy no hallaba cómo huir de mi mirada, simplemente bajo su vista, mostrando sus orejas rojas y el ligero temblor de su cuerpo descubierto ante mis atentos ojos...

-Ey- Llamé su atención con un tono frío, obviamente fingido-

En lo que Samuel levantó su vista con rapidez para mirarme, robé sus labios ansiosamente mientras rodeaba su cintura y lo ponía nuevamente de pie. El beso se fue haciendo más lento y apasionado, fue entonces que sentí como sus manos se posicionaban en mis hombros, así me apegó un poco más a su cuerpo. Disimuladamente fui desabrochando sus pantalones, sentía como Samy aferraba sus manos a mis hombros; fue fácil quitarsélos, la tela de su blue jean se deslizó suavemente por sus muslos y... me abría el hambre. Pronto me comería un pequeño niñito de lentes grandes.

Una sonrisa se dibujo en mis labios en cuanto el beso finalizó, luego besé suavemente su sien, ese fue motivo para que Topi riera levemente. Lo solté por un instante en lo que me despojaba de la poca ropa que llevaba; al voltear, Samuel ya estaba metido en la bañera y se hundió hasta que el agua le llegaba hasta la boca. Me adentré en la tina con serenidad, sentándome detrás de mi novio con su espalda pegada a mi pecho.

Sus mejillas aun poseían ese hermoso color rojo y sus ojos se veían un poco pequeños ya que se había quitado los lentes...

---Continuará---

Disculpen TnT De verdad he querido hacer un cap solito pero se me ocurre escribir mas y no es la idea llegarlo tan lejos... Mi limite de un cap es de 6500 y si lo llego y me hace falta, lo divido...

Besos! Los quiero mucho! Se que no se acuerdan que día es hoy! Aun así, disfruten del cap y mueran de intriga... Wuajajajajaja!! 😝😝😝😝😝

No les gustó el cap anterior? Nadie comentó 😭😭😭😭😭