-Dejame!

Otro latigazo llegó a su espalda ya ardiente para soltar más gritos y lágrimas. Ese ángel se había convertido en su peor pesadilla, no sabia bien que quería. Solo sabia que quería irse de ese lugar rápido.

El lugar donde esta? El mundo de los ángeles, fue atrapado por uno y ahora: sus alas estaban rotas, una de sus "antenas" estaba también rota, tenia los pies y brasos agarrados por una especie de soga purificadora, ya que además de quemarle la piel hacia que poco a poco esa capa negra de maldad dejara de envolverlo, debería estar agradecido por eso.

Ya que para los demonios es muerte súbita el entrar a territorio de los Angeles debía estar agradecido de solo estar siendo castigado constantemente, Un demonio no moría Si no era por falta de alimento (Cada 7 años) o falta de Energía(Cada tres años). Aunque no le agradara, el castigo era mejor que la muerte.

Su manto de maldad no se quitaba, eso le dificultaba el trabajo al Ángel, el cual se desesperaba y comenzaba a golpearlo con ese látigo purificante. Dolía mucho y lloraba en silencio, pero tal parecía que aquel Ángel era peor que un demonio (sin sentimientos) Estaba cansado, luego de tanto. Habían descansado un poco (o almenos el) y no se sentía bien, En poco presentía que se desmayaria.. pero para siempre..

Antes de cerrar sus ojos sintió un fuerte dolor en su esplada que lo hizo abrir sus ojos y gritar fuertemente de dolor, le habían clavado una Inyección de Agua bendita que para ellos era un tipo de Adrenalina. El demonio se quedó con los ojos en blancos mientras en su garganta se escuchaba un pequeño sonido de gríto.

El ángel tuvo que revisarlo en un momento, ya que después de colocarle la inyección El demonio no había hecho ningún sonido de queja a alguno de los otros tratos pero simplemente se había quedado bloqueado, vivo, pero sin reaccionar. Había logrado algo ese ángel, su manto de maldad ya casi no estaba, le quedaba una pequeña parte (cerca del corazón), aprovechó el tiempo de silencio para cortarle las alas junto a la cola y arrancarle los cuernos. lo único que quedaba era cambiar su forma de pensar y el pequeño manto de maldad.

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-QUE LE HICISTE?!

abrió sus ojos lentamente escuchando a alguien gritar.

-Demostrar que no hace falta demorar 1 año para que la cosas sucedan.

-ESTO NO ES POSIBLE!

el demonio simplemente estaba perdido, no sabia cuanto llevaba en esa jaula, pero sabía que se manto de maldad no se alejaba de él sino que volvía, lo que provocaba cada vez una tarde llena de golpes en los que siempre perdía la conciencia.
Ya no sentía esa burla hacia los ángeles que una vez llegó a sentir, Sentía miedo, Angustia y terror con solo ver un pequeño brillo de algún ángel. Sobre todo tenía miedo de aquel que ya lo tenía desde hacía mucho en esa jaula.

La jaula era enorme, Como si fuera una prisión, pero simplemente se mantenía en una esquina abrazando sus piernas mientras temblaban de miedo y frío. Miedo de seguir pasando tiempo en ese lugar y Frío de que sin su manto de maldad su cuerpo dejó de acostumbrarse al calor del Infierno, de las almas en pena y además el ángel había cerrado cualquier ventana cercana a su jaula y abierto unos conductos que solo dejaban pasar aire.

Quería morir, Ya no le importaba más, Solo quería morir e irse de ese lugar, Renaceria? No, que sucedería? Simplemente dejaría de existir en el mundo Físico como en el mundo del más allá(De alguna manera sus otros  "Yo" Morirían en el mundo Físico). Unos brasos lo alsaron y le proporcionaron el suficiente calor corporal que necesitaba para caer desmayado gracias al cambio repentino del Clima afuera y la debilidad en su cuerpo.

Cuando despertó no podía moverse sentía su cuerpo pesado, o inmovilizado, intentó moverse pero recibió un golpe por lo que soltó un pequeño quejido y dejó de moverse. No podía abrir bien sus ojos porque se sentía muy cansado. Pero si sentía que estaba en un territorio más malo del de antes. Que mal presentimiento, no?

Cuando pudo abrir los ojos se sorprendió al ver que alrededores suyo habían Ángeles intentando experimentar con él. El miedo lo invadió cuando intentaron tocarle el rostro, Se movió como pudo evitando la mano, los Ángeles alrededor de él se sorprendieron, ya que Ningún Demonio le tenía miedo a los Ángeles, él era todo lo contrario. Hecho un manojo de nervios y miedo al ver a cualquier ángel.

Lo sacaron de ese lugar y lo llevaron a un cuarto especial, Este impedía que utilice sus poderes y lo debilitaba al punto de que los demonio no podían hacer nada más que esperar. Cuando lo soltaron a aquel Demonio simplemente se alejo de todos los Ángeles y se fue hacia una pequeña esquina abrazando sus piernas y haciéndose una bolita en el suelo.

Ninguno podía acercarse, El demonio estaba traumado. Ahora tenían un problema grande, necesitaban examinarlo, por cualquier cosa que llegara a necesitar. Necesitaban ayuda..

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-Hey~

el demonio levantó un poco la mirada y se asustó al ver a un Ángel en frente suyo, rápidamente corrió y se escondió bajo la cama que había en el cuarto sorprendiendo al Ángel, El cual suspiro y se sentó en el lugar el cual estaba.

-No te haré daño~ Tampoco volvería a permitir que te hagan daño~

El demonio no se movió, siquiera volteo a verlo, el ángel solo sintió un pequeño sollozo de donde estaba el demonio.

-"Un gatito asustado"- Es lo que pensó el Ángel al recordar que los gatitos se escondían y maullaban por su "amo", su "salvación". El Pequeño demonio le recordaba lo mismo.

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-.. Quien eres?..

El ángel algo sorprendido se volteo hacia la cama, en donde el demonio de sorpresa había asomado un poco la cabeza, no mucho, pero dejaba ver sus ojos almenos. Eso no le importó mucho y le sonrió levemente, hacia cinco días que llevaba en ese cuarto con el demonio, él había esperado pacientemente para que le hablara.

 -Me presento, Soy Karamatsu.

No quiso decir nada más, y tal pareció que el demonio no quería saber nada más que eso ya que simplemente volvió a esconderse. El Ángel solo sonrió levemente por el pequeño avance.

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-Quieres un poco?

Aquel Ángel sabía que debía empezar de a poco a convivir con el demonio, pero lo había atrapado observándolo mientras el Ángel degustaba una de las comidas que le llevaban mañana, tarde y noche.

El demonio no comía, muchas cocineras del lugar cocinaban día y noche intentando hacer algo para el demonio, Habían sentido algo de ternura por ese demonio que tenia miedo ya que a los demás demonios que tenían en ese lugar le daban una vez al mes de comer. Pero ese pequeño demonio, que no parecía sobrepasar los 17, no queria, o no podía, ingerir nada.

El demonio simplemente desvío la mirada cuando el Ángel le habló, Karamatsu se levantó y se acercó a la cama con el plato de comida en manos, se sentó en el suelo a un lado de la cama y dejó el plato delante suyo, corto un pedazo y lo pincho con el tenedor para extenderselo al demonio diciendo "Ten" logrando que este volteara.

El demonio lo miro raro un momento pero luego miro el tenedor por un rato, Karamatsu solo espero, podía esperar toda la vida por el. Se sorprendió un poco y sonrió levemente cuando vio al pequeño Morder la comida del tenedor y alejarse.

Karamatsu comió rápidamente dos mordiscos más de su comida para volver a repetir lo mismo con el Demonio, quien tardó menos esta vez en aceptar la comida. El Ángel alcanzó a ver los colmillos del demonio mientras comía, estos parecían picudos y filosos, como los colmillos de un gato, y eso solo le daba al ángel más razones de decirle gatito.

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-Quieres salir?

El demonio asintió levemente.

-Oh, Puedes hacerlo Kitty, Yo me quedaré en la esquina sin molestar.

como dijo el Ángel este se fue hacia la esquina más alejada y dejó que el demonio saliera de abajo de la cama, se sentó y esperó.

Tardó más de 15 minutos pero el demonio al final salió de abajo de la cama, El demonio tuvo que tallar un poco sus ojos ante la luz del cuarto que era fuerte para sus ojos.

-Puedo acercarme kitty?

El demonio solo lo miro en silencio por un rato. Karamatsu estaba sonriendole levemente con confianza.

El pequeño asintió levemente provocando una sonrisa en Karamatsu.
Este se levantó despacio y camino lentamente hasta quedar en frente del pequeño demonio, ahora lo comprobaba, El demonio era más pequeño que el. Acercó una mano hacia el chico pero este se hizo para atrás con un poco de miedo.

-Tranquilo, Te lo dije cuando llegué, no permitiría que te hagan daño y yo no te lastimaria.

Volvió a acercar su mano pero esta vez la dejó tan solo cerca de la cabeza del demonio, el pequeño estaba mirando la mano quieta y tambien la cara del Ángel en busca de respuestas, pero Karamatsu había volteado a ver otro lado. Tardó unos minutos pero el demonio se movió colocando su cabeza bajo la mano del Kara haciendo que este le acaricie la cabeza suavemente y causando que voltee a verlo.

-Eres hermoso.

Hablo el ángel y bajó su mano hasta la mejilla del pequeño para acariciarla un poco.

-Cual es tu nombre, pequeño?

El demonio no respondió inmediatamente sino que se quedó pensando.

-Lo recuerdas?..

El demonio suspiró pero luego de un momento asintió.

-Soy.. Ichimatsu..

Karamatsu sonrió levemente y le acaricio la cabeza al menor calmadamente aprovechando que el demonio no lo odiaba y le tenía confianza.

-Hey, se que llevas mucho aquí y no vas a poder salir si unos Angeles especiales no te revisan, ¿Puedes dejar que unos Angeles te examinen?

El demonio ante la pregunta comenzó a Temblar con miedo Negando y sentándose en el suelo haciéndose bolita.

-Hey, hey, hey! Tranquilo!

Karamatsu se agacho igualmente y lo envolvió en sus brasos mientras Ichimatsu se escondía en su pecho aferrándose a sus ropas con miedo. El pequeño no quería a nadie más que kara, No queria a nadie más que su salvador.

-Hey~ ¿Y si estoy a tu lado durante la revisión?~ ¿Así los dejarías?~

El demonio lo pensó un momento pero luego asintió, Ichi se sentía muy seguro con Kara a su lado.

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-Mira esto!~ Unas plumas blancas~

Ichimatsu sonrió levemente ante las chicas que tocaban sus alas (Crecidas nuevamente) con cuidado o le revisaban un poco el cuerpo. Le habían dado lo que él consideraba un vestido blanco, Que tuvieron que ayudarlo a colocarselo.

Ichimatsu era muy tierno, parecía un niño sin esa aura de maldad a su alrededor o su mentalidad de asesino y más parecía un gatito Amanzado al lado de Kara Quien lo trataba super bien.

-Vamos, Ichi, es lo ultimo, deja de te saquen eso y terminaremos todo.

Luego de la caricia en el cabello del Ángel hacia el Nuevo "Angelito" Ichimatsu se quedó quieto haciendo un pequeño puchero pero asintiendo y obedeciendolo. Las chicas comenzaron a sacar con una máquina especial los rastros de maldad que habían quedado en su cuerpo.

Ichimatsu soltaba unos quejidos cuando le sacaban algunos que intentaban volver a colarse en su alma, Si vieron los dientes en puntas cuando se los sacaban o los recuerdan al menos es un buen ejemplo.

Cuando las chicas terminaron Karamatsu Abrazó al pequeño angelito que buscaba cariñitos ante el dolor que había sentido y el Ángel se los daba sin problema. Las Chicas rieron levemente y también le acariciaron la cabeza Dejandole al pequeño una paleta de Uva por "Ser un buen niño"

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-Irme?..

-Si.. Ya estas mejor, No tienes miedo, Te convertiste en un mitad ángel y puedes hacer una buena vida. Ahora es momento de que me valla.

Aunque le doliera a Karamatsu No podía quedarse con Ichimatsu, tenia más trabajo y siempre hacia lo mismo con todos los Ángeles, Se quedaba mucho tiempo en esos lugares hasta convencerlos y a veces se perdía de cumpleaños, fechas especiales o cuando salía se olvidaba de que es lo que hacía en su tiempo libre lo que lo ponía en una mala situación a veces.

-..Mentiroso..

Kara volteó rápidamente hacia Ichi cuando lo escuchó, este estaba abrazando sus piernas y ocultando su cara entre entras pero se le veía temblar y tener espasmos mientras lágrimas golpeaban contra la base de donde estaba sentado.

-..Dijiste que no te irías... Mentiroso..

Karamatsu se acercó al pequeño y lo abrazo fuertemente sintiendo que este lo abrazaba y le clavaba las pequeñas uñas que ahora tenía, sollozando en su hombro desconsoladamente, no había conocido antes a algún mitad demonios que lo quisiera tanto o simplemente que lo soportara, ya que la mayoría le despedía con una mala palabra en plan "Enemigos-Amigos"... Pero Ichimatsu... Era diferente..

Karamatsu suspiró algo frustrado e inseguro por lo que tenia en mente pero sonrió levemente y abrazó a Ichi un poco más.

-Bien.. Me dejas sin opción~

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-Q-Quienes son ustedes?!

El demonio en ese cuarto estaba enfadado, ya no sabia que querían esos ángeles.

-Oh, Good day, Soy Karamatsu y el Ichimatsu

El mayor tenía agarrada la mano del menor mientras los dos miraban al demonio en una forma amigable.

-No molestaremos, Venimos aquí a ayudar, no a lastimar, Hablanos cuando te sientas seguro, venimos a protegerte.

Ichimatsu no sabia si estaba listo para ayudar a Karamatsu en esto, tenia un poco de nervios, pero bueno, esta era su primera misión no podemos culparlo. Karamatsu había decidido llevarse a Ichi a su casa, con el trato de que lo ayudara con sus pacientes, el menor aceptó rápidamente sabiendo hasta donde era capaz de llevar el tratamiento. No le molestaba, le agradaba la forma en la que lo hacía porque demostraba una inusual confianza en los demonios que, por lo que le había contado, le arrebataron a muchos de su familia.

Unos meses después tuvieron algo parecido a una pelea, fue por un error del menor en atender a uno de los pacientes, que terminó en el suicidio de aquel y un pequeño trauma para el pequeño.

-Porque no lo vigilaste mejor?!

- Y-Yo no lo se! S-Simplemente me descuide!

-Tenemos ya mucho tiempo de esto, cuando vas a aprender?!

Ichimatsu bajo la cabeza soltando lágrimas mientras seguía escuchando los gritos del mayor, hasta que llegó a ese punto sin retorno.

-jamás debi ayudarte! pareces solo un estúpido niño de 2 años olvidandote de lo más simple! Eres un Imbe-

Karamatsu tapó su boca asustado de sus propias palabras al ver la cara shockeada del menor e intentó acercarse para retractarse rápidamente, pero solo logró que el menor corriera hasta su cuarto llorando para encerrarse de un portazo.

fue después de dos meses que el mitad ángel y mitad demonios logró volver a confíar en Kara, Despues de que este le prometiera cuidarlo y amarlo por siempre. Ichimatsu aceptó sus disculpas sintiéndose algo avergonzado por sus palabras mientras se abrazaban.

-Ichimatsu, no se que haría sin ti. Te volviste mi vida, mi luz..mi estrella... La que brilla a pesar de la oscuridad a su alrededor. Te amo, ok? te cuidaré y amaré por siempre, mi pequeño angelito.

Ichimatsu aseguró un poco más su abrazo encima de los hombros del mayor escondiéndose un poco por la vergüenza, pero no tardó en responder.

-Te amo..

"Su pequeño angelito que buscaba cariñitos fue todo lo que Karamatsu necesitaba para estar  feliz"

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WEY, PENSÉ QUE NUNCA MÁS TERMINARÍA ESTO, EL DOBLE DE PALABRAS QUE LAS DEMÁS HISTORIAS, APRECIENLO Y AMENLO.
ahre, xd creo que llevaré mi imaginación hacia un punto de vista diferente y haré otra historia de Phineas y Ferb, but de perry y doff jsjs xd me enamore de la versión humana de Perry ♡. Asi que yo lo dejo en esto y lamento haberles hecho esperar tanto tiempo :"v