Eran las 4 de la mañana y ya como de costumbre Inosuke se había levantado de golpe apuntando con sus katanas hacia la nada.

Su esposa o como el llamaba "Mi reina" con el temperamento que tenía, siempre terminaba por regañarlo.

-Inosuke, mi amor ¿que pasa? - preguntó la oji azul

-Debo estar alerta, quizá puedan atacarnos

-Pero la guerra ya terminó, Muzan fue derrotado, los demonios ya no existen. ¿Eran de nuevo esas pesadillas verdad?

-Debo protegerte Aoi, eres una de las cosas que más aprecio en este mundo además de nuestro hijo

-Lo sé y por eso debas de estar tranquilo, trata de descansar. Mañana prepararé comida empanizada ¿está bien?

-Está bien

Justo cuando ambos iban a acostarse escucharon la voz de cierto niño.

-¿Mamá, papá? ¿Están bien? - abrió la puerta un niño

-Oh cariño, lamentamos despertarte - habló la oji azul

-¿Que pasó? - preguntó el niño

-Lo que pasa es que tu madre no tiene miedo de morir - gritó Inosuke

-¿Que? - se sorprendió Aoba

-Tu mamá insiste en que no debemos estar alerta por si nos ataca alguien - dijo el oji verde

-Según lo que me contó la Tía Nezuko, derrotaste a todos los demonios papá - dijo el niño sujetando su mentón

-Obviamente, soy el rey de la montaña - gritó Inosuke

-Ustedes 2, si es que no se acuestan ahora mismo mañana no comerán nada - dijo Aoi con una vena sobre salida de su cien

-¿Ehhh? - se preguntaron ambos

-Ya dije - dijo casi en un grito la chica

Acto seguido el hijo de ambos salió prácticamente volando y Inosuke se acostó dándole la espalda a Aoi

-Mujer gruñona - dijo entre dientes

-Vamos cariño no te molestes conmigo, mañana hay muchas cosas que hacer, vendrán los Kamado de visita, incluso Zenitsu vendrá con su familia, debemos descansar

-El rey de la montaña no necesita descansar mujer - dijo sin mirarla

-Ya veo, entonces no te molestaría abrazarme hasta que me duerma ¿verdad? - preguntó de una manera muy coqueta la oji azul

-Ya te dije que eres lo que más aprecio mujer, si quieres que te abrace pues así será - dijo Inosuke dándose vuelta encontrando la mirada de quien el daría la vida si fuese necesario

Ambos "durmieron" plácidamente.

~

Amaneció y Inosuke ya se encontraba entrenando junto con su primogénito.

Aoi quien recién despertaba vio como su esposo y su hijo se parecían tanto.

Ambos con una energía envidiable y con el entusiasmo digno de un Hashibira.

~

Mientras la mujer de coletas cocinaba, vio por la puerta entrar a su hijo todo exhausto y sudado.

-Aoba, no deberías descansar - dijo la oji azul

-Debo seguir entrenando, debo superar a Papá

-Tal y como lo esperé de mi hijo - dijo orgullosa

-Mamá, no olvides que en la noche prometiste enseñarme sobre medicina y las flores de glicina

-Lo sé, cuando se vaya la visita comenzaremos a estudiar - dijo Aoi sonriendo

~

Inosuke que esperaba tranquilo en la puerta trasera de su casa la llegada de sus viejos amigos, notó algo inusual.

Sintió esas viejas precencias.

-Respiración de la bestia, 4 colmillo, cortar y desgarrar

-Respiración del rayo, 1era postura, destello de relámpago

-Danza del dios del fuego, bals del fuego

Los 3 ex's cazadores de demonios chocaron sus katanas haciendo un sonido hermoso para sus oídos.

-Inosuke, siempre tan atento

-Gonpanchiro, Monitsu, ya los esperaba

Ambos al aterrizar se saludaron como los hermanos que eran.

-Por fin llegaron - dijo Aoi

-Me pregunto si es que siempre harán eso, cuando se encuentren - habló Kanao entrando con sus hijos por la puerta

-Lo hacen en cualquier lado, no sólo acá - dijo Nezuko cayendo de cielo con sus hijos

-No tienen remedio - dijo Aoi saludando a las esposas de sus amigos

-Dejemoslos que se entretengan - terminó por decir Aoi sonriendo, viendo como su esposo le sonreía a sus 2 viejos amigos

Pues al fin y al cabo ya todo había terminado.

Pues hasta donde sé, Aoba es el descendiente de Inosuke y Aoi.
La verdad el final del manga no me gustó tanto, pero si fue aceptable.
Nos leemos en la próxima.