El mejor de todos
Solía siempre hacer mis cosas rápido para que de alguna manera pudiera al menos observar por un instante a aquel trío de tontos entrenar, porque para ser sincera a veces extrañaba el sonido de la katana al desenvainarla.
Sin lugar a dudas los 3 tenían personalidades muy diferentes, aún no comprendo cómo es que podían llevarse tan bien. Aunque sí me pongo a pensar bien, Tanjiro-san era quien los mantenía unidos.
~
El entrenamiento terminó a lo que yo los observabade lejos, tendiendo unas sábanas de manera muy pero muy lenta.
-Sin lugar a dudas si me pudieras dar al menos un rasguño con esa espada, estaría derrotado Inosuke - dijo Tanjiro-san
-Es que soy el jefe y todo lo que corta el jefe lo aniquila - dijo casi en un grito Inosuke-san
-A ver si en algún momento logran al menos tocarme - dijo el rubio que era el más pervertido de los 3
-Eres demasiado rápido Monitsu... Pero no lo suficientemente fuerte - dijo Inosuke-san golpeandolo en la cabeza
Y de nuevo comenzó aquellas peleas en las que siempre peleaban hasta por que comida iban a comer ese día.
-Aoi-san, ten cuidado por favor, no vaya a ser que salgas herida por las katanas de Inosuke y Zenitsu - dijo el pelirrojo haciendo lo que siempre hace al acercarse a mi
Volverme loca.
Siempre pensé que Tanjiro era una persona demasiado amable para este mundo, era como el sol, estar cerca de él, hacia que me sienta más cálida y me sentía mas protegida.
-D-descuida Tanjiro-san - titubee
-Dejame te ayudo a terminar - dijo mientras me ayudaba con las sábanas
Era sin lugar a dudas el chico por el cual yo suspiraba.
~
Pasaron muchas cosas en estos 2 meses, en los cuales los pilares ya habían encontrado la guarida donde Muzan y las lunas superiores se ocultaban, así que mi trabajo como ayudante de mi hermana mayor subió a grandes escalas puesto que se perdieron muchas vidas y se produjo una gran cantidad de heridos al conseguir aquella información.
Así que solo opte por trabajar y dar mi mejor esfuerzo.
~
Las cosas en la central, iban de una manera algo alterada. Los pilares discutían como iban a entrar a la guarida de Muzan, que si era necesario llevar a los Mizunotos o si solo debíamos esperar a que Muzan haga su aparición.
Lo discutieron aproximadamente casi toda una noche, llegando a la conclusión que teníamos el factor sorpresa de nuestro lado y que era una oportunidad única en la vida. Así que en unos 2 días como máximo, teníamos que emboscar a la pesadailla que ha estado atormentandonos durante mucho tiempo.
~
Al siguiente día todo mundo fue informado de que iremos todos sin excepción y que los ayudantes de enfermería como yo, iba a estar en la retaguardia para ayudar a los pilares en caso alguno salga lastimado.
Yo estaba segura que posiblemente iba a morir en el cumplimiento de mi deber, así que no podía desaprovechar la oportunidad de oro que tenía.
Iba a confesarle mis sentimientos a Tanjiro-san.
Lo busque durante unos 20 minutos y no lo encontré por ningún lado. Incluso pensé que estaba con el Pilar del agua entrenando o algo, pero sólo encontré a mi hermana mayor con Tomioka-sama en una plática que parecía algo intensa.
Era mi oportunidad así que por nada del mundo la iba a perder, así que me alejé un poco de las fincas para buscarlo y pues lo encontré.
Estaba sentando comiendo una bola de arroz. Al principio pensé que estaba con sus 2 amigos, pero tal fue mi error que no soporté las lágrimas y salí huyendo del lugar.
Estaba con mi hermana Kanao y ella le daba muchos besos en el rostro, algo que claramente no era cosa de compañeros.
Corrí y corrí sin mirar atrás, quise que la tierra me tragase, porque jamás me había sentido tan humillada.
Hasta que choqué con aquel tipo.
-¿Que te pasa enana? - preguntó casi en un grito
-No puedes tener más cuidado, maldito idiota - sin lugar a dudas había explotado
El sólo se quedó callado, supongo que nadie en su vida le había hablado así.
-No llores delante del jefe - dijo de una manera serena y pacífica
Incluso se sacó la máscara y se agachó a darme la mano para que yo pudiera levantarme.
-Yo lo siento - dije tratando de ocultar mis lágrimas
-¿Dime que te pasó? - me preguntó.
No me consideraba una buena amiga de Inosuke-san, pero a veces me preguntaba cómo es que era un hombre tan hermoso debajo de aquella máscara.
-No es algo que te importe - dije en un puchero
-Vamos enana... Ya acabé de alistar mis cosas para la batalla y no tengo nada que hacer - dijo quejándose como un niño
Quizás no era muy delicado o sereno, pero sin lugar a dudas era muy divertido.
-Pues... Estoy enamorada - dije en un tono muy bajo como si de una travesura se tratase
Él solo se quedó estático y en sus ojos percibí confusión. Creí que era por el hecho de que el jamás se había enamorado o al menos siquiera sabía lo que significase eso.
-Pero si estas enamorada, ¿porque lloras? - me preguntó, pregunta que no esperaba para nada del mundo
Lo invité a sentarse conmigo en el suelo, algo que el aceptó de inmediato.
-Lloro porque él ama a alguien mas... - dije con en corazón en la mano y a punto de romper en llanto de nuevo
-No entiendo... - dijo sin chistar
-Osea que él no podría amarme a mi jamas - dije sin darme cuenta que ya había empezado a llorar
-Eso si lo entendí, lo que no entiendo es como alguien no podría amarte a ti... - dijo mirándome fijamente
Al instante quedé completamente confundida, eso era un halago ¿verdad? Porque si eso no lo era, pues Inosuke-san estaba con una fiebre muy alta.
-¿Eh?
-Piénsalo... Eres muy linda con tus coletas, además que cocinas muy bien... Dime, ¿quien es ese idiota que no puede amarte a ti? - preguntó
No sabía que responder, si le decía que era su mejor amigo, quizá lo tome a mal, o peor aún quiza de burlaria de mi.
Por donde lo viese era una mala idea decirle la verdad. Pero ahí iba yo y mi manía de darle la contraria a todo.
-Es Tanjiro-san... - dije mirando hacia abajo
Esperé un grito o una risa, esperé cualquier cosa. Pero jamás unas palabras que me había dejado más confundida de lo que ya estaba.
-Entiendo... - solo dijo eso y se fue con un semblante muy depresivo
Era un mar de confusiones.
~
Había pasado un día y desde que le confesé mis sentimientos por Tanjiro-san a Inosuke-san, él no volvió a dirigirme la palabra, todo se había vuelto extraño. Incluso él no comió la tempura que había preparado especialmente para él.
Pregunté por él a Zenitsu-san pero dijo que él sólo les dijo que se sentía indispuesto.
Algo raro en el, porque era el hombre con más entusiasmo y energía que ningún otro.
~
Me puse a pensar y quizá Tanjiro-san quería a mí hermana por su habilidad en la katana así que ¿porque no intentarlo?
Busqué a mi hermana mayor para preguntarle si podía ir como espadachín y no como enfermera a lo cual ella se negó rotundamente.
-Aoi-chan, tu deber es ayudar a los heridos - dijo con aquella sonrisa de siempre
-Pero Nee-san, yo puedo pelear, no es como si estuviera ciega, sé que puedo hacerlo
-Hace años que no usas una katana Aoi-chan, lo siento pero mi respuesta es no - dijo dejándome sola
Sabía que era una mala idea, pero quise al menos intentarlo.
~
Al momento de partir a la guarida de Muzan, nos dijeron que por nada del mundo actuaramos si no estábamos seguros que todos los demonios habían sido derrotados.
~
Entramos todos de una manera algo rápida, nosotros en la retaguardia teníamos nuestras cosas listas por si alguien necesitaba ayuda.
El pilar de la flama era quien estaba en nuestra ofensiva y tenía la tarea de protegernos en caso recibieramos algún ataque.
-Por aquí! Manténganse alerta - dijo mientras eliminaba algunos demonios
Parecía que todo iba bien, hasta que apareció un demonio que tenía el número 3 en sus ojos.
Sin lugar a dudas era una luna demoníaca.
-Kioyuro... - dijo mientras caminaba hacia nosotros
-Atrás! - grito el pilar de la flama
Acto seguido todos fuimos hacia un cuarto que parecía vacío.
-Te dije que si no te volvías demonio, te iba a hacer un agujero en el pecho ¿verdad? - preguntó la luna demoníaca
-Ya te dije que jamás lo haré - respondió casi al instante Rengoku-sama
Todos los que éramos enfermeros escuchabamos la katana de Rengoku-sama mientras luchaba con la luna demoníaca.
Era sin lugar a dudas una pelea impresionante.
-Retrocedan - gritó de nuevo
A lo que retrocedimos lo más que pudimos.
-No vamos a morir, me oyeron - dijo alguien
-He venido a morir aquí y lo haré cumpliendo mi deber - dijo otro
No éramos buenos usando las katanas, pero sin lugar a dudas teníamos la misma fortaleza que los cazadores de demonios.
Pero todo cambió cuando aparecieron 4 demonios. Todos, incluida yo, nos asustamos mucho, sobre todo porque 2 de esos demonios botaban una especie de estacas de sus cuerpos.
Me desespere, sabía que posiblemente iba a morir en aquella guerra, pero tenía la esperanza al menos de poder vivir y llegar a ser una adulta.
Y por esa misma esperanza, fue que me armé de valor y desenvainé mi katana y luche con todo el miedo del mundo.
La batalla no fue para nada fácil, siempre esperaba que Rengoku-sama apareciera y me salvase pero no sucedía. Corte la cabeza de 2 demonios, pero me lastimé mucho al hacerlo. Sinceramente ya no tenía fuerzas para pelear y por defender mi rostro mi katana fue destruida.
Era mi fin.
-Respiración de la bestia, 4to colmillo cortar y desgarrar
~
Al abrir los ojos pensé que aún seguía en la guerra, pero tal cosa ya había pasado. Traté de levantarme de golpe y sentí un dolor muy agobiante en el pecho, cuando miré hacia un costado vi a mi hermana aun dormida, y a mi otro costado estaba Tanjiro-san casi con el cuerpo totalmente vendado.
-Debo irme, que hago acá, necesitan de mi ayuda - dije tratando de bajarme de la cama
Algo que no pude hacer en lo absoluto, porque unas manos me regresaron casi a la fuerza.
-Ara ara Aoi-chan, será mejor que aun sigas en cama - dijo mi hermana mayor
-¿Shinobu nee-san?
-Tranquila mi niña, ya todo esta bien - dijo con una voz llena de paz
Algo que me hizo llorar tal cual niña cuando le quitaban su dulce.
-No me abraces muy fuerte Aoi-chan, tengo muchas heridas en la espalda - dijo quejándose de mi abrazo a lo que yo hice un puchero
-¿Como fue que llegué hasta aquí? , ¿como sobreviví? , si ya me había desmayado y aún habían 2 demonios que estaban por asesinarme - pregunté
-Pues la razón por la que sobreviviste esta ahí, mira... - se hizo a un lado y vi como Inosuke-san estaba en la camilla de al frente totalmente vendado, casi hasta los ojos
-Inosuke te salvó a ti y al personal médico... Aunque no está así por eso, sino porque en la batalla contra Muzan fue herido gravemente y a pesar de eso aún seguía peleando - explicó mi hermana mayor
-Ese tonto... - murmuré
-Trata de descansar, esas heridas que tienes no sanaran si no descansas - dijo saliendo de la habitación
Aproveché que Shinobu-nee san se había ido y con mucha dificultad me baje de la cama.
Estaba dispuesta a ir hacia Inosuke-san, pero el dolor hacía me vaya cada vez más lento. Cuando por fin llegué me di cuenta de lo mucho que apreciaba a mi paciente más molesto y ruidoso de todos.
Así que en señal de agradecimiento besé levemente su mejilla, pero vi como esbozó una sonrisa ladina.
Gesto que me hizo sentir con culpa y también me hizo sonrojarme desde la punta de la cabeza hasta los pies
-Aoi... - dijo entre sueños haciendo de nuevo que me pusiera nerviosa y muy acalorada
~
Paso unos 2 meses y casi todo volvió a la normalidad. Algunos pilares se quedaron en sus fincas y otros simplemente vivieron sus vidas.
Lo que me pareció extraño es que el Pilar del agua se fue a vivir a nuestra finca y más extraño aún fue que dormía con mi hermana mayor.
Ocasionalmente siempre solía preguntarles sobre sí eran esposos o algo por el estilo, pero ambos decían que NO casi en coro.
Cosa de ellos supongo.
~
Llevaba una vida tranquila, traté de olvidar mis sentimientos por Tanjiro-san, cosa que no conseguí, y pues me decidí a ser una enfermera en su totalidad.
Un día saliendo a recoger algunas hiervas para crear medicamentos, encontré de nuevo a mi hermana y a Tanjiro-san besándose muy apasionadamente. Traté de ser fuerte y solo terminar mis cosas y salir de ahí, pero las lágrimas me traicionaron y comenzaron a salir sin que yo lo quisiese.
Salí huyendo y de repente choque contra algo parecido a una roca.
Al levantar la mirada me encontré con Inosuke-san y lo vi con el rostro cubierto de lágrimas.
Cosa que me asustó porque jamás lo había visto derramar alguna.
-¿Porqué lloras? - le pregunté
El sólo se quedó en silencio.
Luego de unos interminables segundos de silencio incómodo, él sólo me levantó en su hombro y me llevó corriendo hacia lo desconocido.
-Bajame por favor, ¿a donde me llevas? - pregunté en gritos, pero no obtenía alguna respuesta por parte del él
Llegamos a una especie de arrollo donde el me bajó como si fuera un pajaro herido y con lágrimas en todo en rostro
-¡Porque tienes que amarlo a él y no a mí? ¿Dime porqué? - me preguntó entre lágrimas
-¿Eh?
-No entiendo que tiene de bueno él que yo no tenga... También soy reconocido como casi un pilar, ¿porque él? - seguía llorando
-¿De qué hablas? - pregunté
-Yo te amo Aoi - dijo mirando hacia abajo - jamás en la vida me había sentido así por alguien, tu eres esa mujer de la cual tu hermana mayor me habló "La mujer por la cual arriesgaras tu vida sin siquiera pensarlo" - dijo imitando su voz
Yo quedé muy desconcertada, era obvio que Inosuke tenía un gran apego hacia mí, pero siempre creí que era por el hecho que le cocinaba lo que él queria.
-Lamento mucho si te incomoda esto, quizá ya deba irme - dijo y comenzó a regresar hacia la finca mariposa
Y de pronto vinieron a mi todos los recuerdos que tenía junto con aquel chico de máscara de jabali.
Como cuando fue en mi lugar con el Pilar del sonido, cuando me ayudó a recolectar hiervas para el tratamiento de mi hermana o cuando me salvo la vida hace poco.
Finalmente lo entendí, Inosuke-san siempre estuvo ahí para mí y tan solo no me había dado cuenta.
-No te vayas - lo sujete fuerte del brazo
-...
-Por favor no te vayas - dije sin mirarlo
-No lo hagas por lástima, no te podría perdonar eso - dijo eso y trató de safarse
-Jamás lo haría - dije y lo abracé por la cintura
A lo que él solo se quedó inmóvil como una piedra.
-Quedate por favor - le supliqué
Y el solo se volteó y me sujetó de las manos.
-Dejame demostrarte que puedo ser mejor para ti que el Gompanchiro - dijo sacándome una sonrisa
-Ahora sé que lo eres - dije sujetandolo del rostro y uniendo mis labios con los suyos
-Eres el mejor de todos - finalicé diciendo y volviendolo a besar dejándolo con cara de tonto
Siempre quise actualizar estos one shot's pero no tenia inspiración, pero ahora que sé que el InoAoi es canon pues las ideas me han venido como mis deudas :'v
Nos leemos en la próxima.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro