Podría decirse que todo estaba en su contra.

Todo y todos.

Ser una Pilar,demostrar liderazgo y sobre todo parecer poderosa, era algo que la tenía agobiada.

Shinobu por un lado, que nunca admitiría, siempre soñó con una familia.

Familia que tal vez nunca tendría puesto que aquel sueño se le fué junto con su hermana.

Hermana que ella adoraba y que al momento de perderla, la hundió en una sed de venganza que casi acaba con su propia vida.

~

Durante la batalla contra las lunas superiores entendió que la venganza la había consumido. A tal punto que incluso había decidido dar su cuerpo y su vida en batalla, con tal de ver morir al asesino de su hermana.

Algo que claramente no pasó. Puesto que en hombre que ella odiaba la salvó de aquel destino que ella misma se había impuesto.

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Por otro lado Giyuu desde la muerte de su mejor amigo Sabito, se convirtió en un hombre totalmente solitario.

A pesar de lo poderoso y fuerte que se había vuelto, sentía que era injusto que lo llamaran Pilar.

Pero todo eso cambió cuando la salvó.

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Al momento dónde Shinobu sintió que el pecho se le abrió por un corte que le dió Douma con una de sus armas, tal vez fué el momento en dónde más sintió dolor físico. Puesto que la respiración se le cortó y la sangre que perdió en ese instante era digno de una hemorragia que terminaría en una muerte dolorosa.

Más no supo y no entendió como es que su hermana menor junto con Inosuke habían llegado en su rescate.

-Vaya vaya vaya... - dijo la segunda Luna Superior al ver a la pareja de espadachines

Si bien era cierto que ambos con ataques combinados y todo eso, no eran rival para la segunda Luna más poderosa, hicieron todo lo posible por proteger a la hermana mayor de la chica y a la mujer que Inosuke consideraba una segunda madre, así que la pareja jamás se dió por vencido al ver a la Pilar del Insecto luchar por su vida con una respiración entre cortada.

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La batalla era de las más difíciles que ambos habían tenido y podría decirse que estaban a nada de perder la vida.

Hasta que el Pilar del agua junto con Tanjiro cayeron del techo.

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La pelea fue de lo mas agotadora para todos. Incluso con el Pilar luchando a su lado, con suerte pudieron hacerle frente y gracias a todo eso pudieron vencerlo.

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Tras la derrota de Muzan y las Lunas Superiores, Shinobu cayó en una depresión jamás vista. Y a pesar que nunca le reclamó nada a su compañero, lo odió con toda su alma al saber que él fue quien derrotó al asesino de su hermana.

Hasta aquel día.

Tomioka luego de la guerra solo se dedicó a contemplar los cielos y sobre todo tratar de sonreír a la vida. Ya que gracias a su discípulo, entendió que Sabito no hubiera querido que el viva con esa tristeza que siempre lo rodeaba.

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La tarde era tranquila en su solitaria finca. Finca en dónde vivía solo a excepción de su viejo cuervo en dónde ambos disfrutaban la paz.

Con el viento acariciando su rostro mientras le daba de comer a su compañero, sintió como si una hoja hubiera tocado el suelo.

Y cuando reaccionó sintió una daga entrando en su hombro izquierdo.

Fue una estocada limpia, lo suficiente como para que no sangre demasiado.

Sin embargo no pudo evitar sorprenderse y sobre todo hacer un gemido de dolor.

Su cuervo aleteó muy asustado.

-Estoy bien descuida... Ve a dentro - dijo Tomioka acariciando a su fiel amigo

El cuervo lo obedeció.

-Tengo entendido que la guerra pasó hace unos 5 meses... Sin embargo aún tienes el físico y la resistencia de un Pilar - dijo Shinobu en una mirada totalmente vacía

-Tsk - se rió Tomioka

-Sabes... No me cuesta nada jalar la daga hacía abajo y hacerte una herida mortal

-Pues no sé que esperas... - respondió Tomioka como si nada estuviera pasando

-Tomioka! ¿Que carajos te pasa? ¿Es que en serio dejarías que te mate? - preguntó Lady Shinobu

-Si muero a manos de la mujer a quien amo no me importa

A Shinobu se le hinchó una vena de la frente.

-¿Sigues con eso? - preguntó la oji violeta muy molesta

-Ya te lo dije...

-Tomioka no sientes amor por mí... Solo estás impresionado y agradecido por todo lo que e hecho por tí en estos años - dijo la chica sacando la daga que había insertado en el hombre que le acababa de decir que la amaba

-Tu no puedes mandar en lo que yo siento - dijo el oji azul en un claro gemido de dolor al sentir la daga salir de su cuerpo

-Es que yo no te amo y no creo amarte nunca - respondió la mujer sin chistar

-No me interesa. Yo no pido que me ames, solo quiero amarte

Shinobu sonrió ante ese pequeño halago.

-Basta de esas tonterías! ¿Dime porqué me salvaste? Tomioka yo debí morir - comenzó a llorar la mujer

-Yo jamás permitiré que eso pase

-¿Tomioka porqué? Dime ¿Porqué? - su llanto no cesaba

-Esto ya te lo dije y la verdad estoy harto... Sin embargo te lo diré de nuevo. Kocho yo te amo desde la primera vez que te ví. Te amo desde que escuché tu voz por primera vez. Desde la primera vez que sanaste una herida mía. Yo simplemente te amo - dijo tratando de no soltar mucha sangre del hombro

-Debemos parar esto... - respondió Shinobu en pleno llanto sujetando el hombro del Pilar del agua

Fueron hacia dentro de la finca de Giyuu y de inmediato ella comenzó a cocer la herida.

-¿Porqué no me das una oportunidad Kocho? ¿Es que no soy lo suficientemente bueno para ti? - preguntó el usuario de la respiración del agua en medio de un quejido al sentir como Shinobu cocía su herida

-Porque conmigo no hay futuro... O bueno no lo había... Yo quería morir sabes... - respondió la oji violeta totalmente desganada

-Quizá nunca te lo dije... Pero siempre que solía salir de misión junto con tu hermana, ella solía decirme siempre lo mismo

Shinobu simplemente se quedó totalmente sorprendida y podría decirse que hasta en estado de shock.

~Cuida siempre de mi hermana~

Dijo el Pilar sin darse cuenta de lo que había hecho sin querer.

A Shinobu simplemente se le vino de golpe todo los recuerdos de su hermana fallecida.

Recuerdo en donde ella sanaba sus heridas, dónde entrenaba a su lado y sobre todo donde ella solía decirle siempre lo mismo.

~Haz realidad tu sueño Shinobu-chan... ~

Y lloró...

Lloró como si a una bebé le hubieran quitado su dulce, como si jamás hubiera llorado, como si su hermana hubiera muerto en ese instante.

Tomioka por su lado no sabía que era exactamente lo que tenía que hacer, así que quizá en un instante en dónde el nerviosismo le ganó, solo hizo lo más lógico para él.

La abrazó.

Para su suerte el abrazo fue correspondido y Shinobu simplemente se perdió en el cuello de su compañero.

-Kanae... Kanae... - decía mientras sollozaba

Tomioka solo guardó silencio.

El llanto duro aproximadamente unos 3 minutos, minutos en dónde Shinobu soltó todos esos sentimientos que pensó que había asesinado.

-Yo lo lamento... Tomioka

-Descuida... Estaré bien, prácticamente ya lo estás terminando de cocer - respondió la chica

-No por eso idiota... Por lo otro - respondió la Pilar del Insecto con un leve carmín en sus mejillas

-Oh

-Cualquiera en su sano juicio hubiera tirado la toalla conmigo... Pero tú... Jamás lo hiciste

-Y jamás lo haré...

-No sabes lo agradecida que estoy de eso...

Respondió en un abrazo lleno de sentimientos que pensó que jamás tendría por su compañero. Y sobre todo recordando aquel sueño que le confesó a su hermana de pequeña.

~De grande quiero tener una familia muy grande Kanae nee-san

~Y lo lograrás Shinobu-chan. De seguro un hombre hará todo lo posible por estar a tu lado...

Ante aquel recuerdo Shinobu solo se aferró más al pecho de Giyuu en una muy cálida y tranquila sonrisa.

Fin

Shinobu me recuerda mucho a cierta chica que me hacía perder la paciencia. Era terca como una mula y sobre todo era muy testaruda.
Gracias por leer, nos vemos en la próxima