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Troll#2

Habían logrado calmarse en algún punto, con aquella extraña mujer aterrizando en una zona muy apartada y todos bajando de aquella extraña ave, pudieron reconocerla como un búho de tonalidades oscuras y rojas, con brillantes ojos amarillos.

El menor de ellos parecía estar desidido a no soltar a Creek, ahora sentado en su regazo mientras el mayor se mantenía de piernas cruzadas en el suelo, acariciando con aire ausente la cabeza del chico, aún está algo imprecionado por el hecho de que su cabello es tan largo que cae sobre sus hombros y más alla de su cintura, nunca había visto un troll con el cabello tan largo.

La extraña troll se había ido a buscar unas ramas para crear una fogata, lo último que pudo ver de ella fue que se fue trotando hasta adentrarse en el bosque.

Es extraño estar siendo cuidado por un plumifero de más de cuatro metros, al menos en medida troll, pero ninguno se puede quejar, ambos sienten un aura peligrosa y protectora emanar de aquel búho.

–Hey pequeño– Creek es el primer en hablar después de quién sabe cuánto tiempo, llamando la atención del pequeño gris que levanta la cabeza para verlo, sus grandes ojos grises y opacos sentrados en los morados que le devuelven la mirada –¿Cual es tu nombre?– ahora que se daba cuenta, ninguno se había presentado.

–Soy Branch, ¿Usted es Creek?– había oído muchas veces a los padres de ese chico repetir su nombre en intentos de detenerlo, pero ninguno parecía dispuesto a moverse un centimetro de sus lugares.

–Sí, ese soy yo– sonrió ligeramente, su cola moviéndose un poco ante los ojos curiosos del niño.

–... Si no le molesta, ¿Le importaría decirme cuántos años tiene?– sabía que eso podía llegar a ser ofencibo para ciertos troll, aunque aún no entendía porque, pero no quería problemas, en especial con el único que se arriesgo a salvarlo.

–No es ninguna molestia, tengo quince ¿Cuántos tienes tú?– es un poco curioso, no puede negarlo.

–Tengo cinco– hay una punsada en el corazón del mayor, cinco años y está tan sólo, encerio ¿Quien demonios podía ser tan hijo de perra para abandonar a un pequeño niño de solo cinco años? Sabía lo de su abuela Rossiepuff, pero tambien tenía en claro que ese pequeño había tenido hermanos, aunque no sabía quiénes eran.

–... Eres muy pequeño– murmura con el ceño fruncido, evitando hacer una mueca ante ese hecho, tan pequeño y sin nadie, eso era terrible.

–Sí, lo sé, pero estaba pensando en construir un búnker para mantenerme protegido– Branch se acomoda un poco, mirándolo con una leve sonrisa como si esperara que eso lo hiciera sentir mejor.

Creek parpadea, repentinamente curioso ante eso.

–¿Un búnker?– ladea la cabeza.

–Sí– el menor asiente con la cabeza, aliviado de ya no ver esa tristeza en los ojos ajenos.

... ¿Te importaría contarme más sobre eso?– Branch se anima notoriamente, luciendo una sonrisa más grande y su cola moviéndose constantemente.

¡Sí! Estaba pensando en que fuera muy profundo, así podría guardar muchas cosas, ¡Ho, ho! Tengo dibujos sobre eso– había dibujado todas sus ideas, así que se dispuso a rebuscar en el bolso y sacar todos los papeles, explicando cada detalle e idea que representaban sus dibujos.

Estuvieron unos cuantos minutos más, con el violeta escuchando atentamente e impresionado con la imaginación y divagaciones ajenas, era impresionante lo bien calculado que tenía todo, pensaba en cada detalle, y aunque aún tenía algunos errores estaba dispuesto a repasarlo y arreglarlo todo.

Al cabo de un rato la extraña troll volvió, cargando en su espalda una gran cantidad de leña que Creek está seguro que ni siquiera su padre con la gran fuerza que tiene podría levantar.

–Disculpen la tardanza, me tope con un imprevisto– dejo caer las ramas al suelo, no hay mucha iluminación ya que es de noche, pero estás mismas siempre fueron brillantes, así que podian ver un poco y ambos notaron la gran herida en su brazo izquierdo, estaba sangrando aunque no había mucha cantidad de sangre , probablemente fue hace tan solo un minuto.

Esta muy herida, no debería tardar mucho en curarse– Branch hablo, luciendo preocupado y algo horrorizado por la herida.

–No te preocupes, se lo que hago– sonrió ella, revelando unos pequeños colmillos mientras su cola se movía con despreocupación. –Deverian curarse ustedes también– se acerco a ellos con despreocupación, el búho moviéndose para luego agacharse a su lado.

Incluso agachado aquella ave era muy grande, pero no pareció ser problema para ella, puesto que la trepó con facilidad y rebuscó en el poco equipaje que llevaba, soltando un sonido de victoria al elevar una gran bolsa de aspecto ligeramente pesado y muy llena.

Se bajo de un salto, sentándose serca de ambos y enfrentados, rebusco en la bolsa antes de sacar lo necesario y curarse con mucha rapidez, casi como si siempre tubiera que hacerlo y eso creaba preguntas en ambos chicos, quienes podían ver con claridad la sicatris en forma de “X” en su hombro derecho.

–Bien, termine. ¿Quien quiere que lo cure primero?– sonrió, mostrando con algo de tranquilidad el rollo de vendas.

–Creo que sería mejor con Branch, él está más herido que yo– opino el adolescente, mirando las heridas que ambos habían ignorado hasta el momento, estaban sucios y con muchas heridas, pero el pequeño gris parecía ser el más herido.

Branch hace una mueca, pero es la verdad, necesita curarse porque sus heridas pueden infectarse, así que se mueve para bajar del regazo ajeno aunque no quiera y se sienta serca de ella, extendiendo sus brazos y dejándose limpiar.

Agradece que sea cuidadosa y gentil, porque siente su piel muy sensible en esos momentos, ella es rápido en venderlo y curarlo, tardanso tan solo unos minutos en dejarlo completamente curado y seguir con Creek, quien está sorprendido de la rapidez y agilidad.

–Perfecto, ambos están mejor. ¿Tienen habre? Estoy por cocinar– Se levanta, guardando las cosas y sacando otras.

{•••}

Hay mayormente silencio salvó la conversación a media voz de ambos chicos, quienes aún están un poco metidos en el tema del búnker, hay que admitirlo, era interesante como una pequeña mente tenía tanto conocimiento, incluso más que él, es extraño, pero así es.

–Eso sí es interesante– parece ser que ella logro escuchar algo, adelantándose unos pasos mientras se limpiaba las manos y sonreía hacia el par –¿Has pensado en agregar un elevador? Sería más conveniente y rápido– Branch parpadea sorprendido, no esperaba que se uniera pero está intrigado y fascinado por esa idea.

–Eso sería de buena utilidad, pero no estoy seguro de cómo podría hacerlo– su mente está trabajando para haberiguar las posibles vareantes del como hacer un ascensor.

–Oh, yo puedo ayudarte en eso– los ojos de ambos se abren sorprendidos, llenos de preguntas que aún no están seguros si hacer. –De hecho no es realmente muy complejo, al menos no el que yo se hacer– se sienta a su lado, empezando a explicar el cómo podría hacer tal cosa, con el menor escuchado atento y anotando en una pequeña libreta que tenía entre sus pocas cosas.

Ella parece ser alguien con chistes escondidos entre frases, porque ambos rien ante algunos comentarios o ejemplos que hace, es divertida y amable, sin rastro de maldad o estar dispuesta a burlarse de la falta de color ajena, de echo parece ignorarlo y tratarlo como si fuera otro troll más y el pequeño lo agradece profundamente.

En algún momento llega la hora de comer, así que todos se satisfacen con un delicioso estofado, mientras que él búho, (que mayormente se mantiene alejado y alerta) come unos pedazos de carne que los trolls más jóvenes están dispuestos a no preguntar de donde salio.

–Esto es delicioso– el pequeño gris murmura, su cola moviéndose con gusto mientras está sentado en el regazo de Creek, este mismo asintiendo mientras sigue comiendo.

–Gracias Branch– ella sonríe, su cola moviéndose con ternura y felicidad ante lo gustoso que se ven ambos. –Hey chico, ¿Tú nombre?– El violeta termina de tragar para poder hablar.

–Soy Creek, ¿Usted?–

–Halia– ella sonrió, comiendo lo que le quedaba de su estofado Y él es Nestor– señaló con la cabeza al inmenso búho, quién se giró apenas y hululo, volviendo a su comida –Aunque prefiere que le digan Evan– ambos jóvenes ladearon la cabeza.

–¿Por qué?– a pesar de sus años de aislamiento y abandono su curiosidad nunca lo había abandonado.

–Por su significado, sus nombres son de origen griego, Nestor se le llama a un troll viajera, con ganas de conocer el mundo, algo que lo representa muy bien– ella sonríe, su búho hululando algo que solo Halia pudo entender –Pero su otro nombre, Evan, significa “guerrero” y...– su sonrisa se apaga un poco, convirtiéndose en una mueca que ninguno pasa desapersibido –Bueno... Las tribus alguna veces suelen tener peleas que... Se vuelven guerras–  los menores se miran entre ellos, compartiendo muecas de preocupación.

–Lo siento, no debí preguntar– dijo el pequeño Branch, mirándola con tristesa, pero ella ríe de pronto, divertida y enternesidos ante aquella disculpa.

–Nha, no te preocupes por nada– su sonrisa avitual vuelve, su cola moviéndose con tranquilidad mientras miraba la fogata frente a ella.

–... Tú...– Creek parece notar algo en las anteriores palabras de Halia, inclinando la cabeza curioso –Mencionaste algo sobre tribus– la mira expectante y lleno de preguntas que no está seguro si hacer, pero Halia sonríe abiertamente.

Hay muchas tribus a lo largo del mundo, las más conosidas son las del Contry, el Pop, el Funk, el Techno, el Rock y el Clásico, aunque también están los subjeneros, como el K-Pop, el Hip-hop, el Reggaeton, el Jazz y muchos otros– ella se permite divagar un poco sobre ese tema, explicando con detalles cada uno de los géneros lo mejor posible, contestando las preguntas de ambos e incluso contando algunas historias sobre cada tribu.

Ambos se enteran de la existencia de las cuerdas, su magia tan poderosa que puede controlar la mente de los troll y hacerlos actuar como zombis del género musical.

Se enteraron del antepasado Pop, quién intento hacer que su música fuera la única que se escuchará, quién intento que todos fueran Zombies-Pop.

Al principio estaban horrorizados por lo que aquel troll hizo, por el hecho de que utilizo su música para controlar a todos, ¿Que había de malo con los demás géneros? ¿Que había de malo con las diferencias? ¿Que había de malo en tener distintos gustos?.

“¿Que había de malo con ser diferente?”

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No saben cuánto tiempo están escuchando y compartiendo pensamientos y opiniones, pero en algún punto la conversación se torna divertida y animada, con risas y muchas anécdotas, incluso el pequeño Branch se divierte.

Ninguno de los troll más jóvenes sabe que será de ellos en los siguientes días, pero están dispuestos a pasarlos con ella y seguir conociéndose, seguir conociendo el mundo que los rodea, quieren saber que hay más allá de los bosques y selvas, quieren saber que es lo que se siente al oír todos esos estilos de música diferentes.

Sinseramente, ambos tienen verdaderas ganas de acompañarla en su vida de aventuras y conosimiento.

¿Quien sabe? Quizás lo hagan.


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¿Quieren otro cap de esto? Tengo algunas ideas :3, si es así, ¿Que tribu quieren que conozcan primero? ¿Que casa recompemzas queren que aparezca primero? Los leo en los comentarios, nos vemoooos~

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