Serie/Película: Origen de los Guardianes, Enredados y CEATD

Shipp: Jackunzel (Jack×Rapunzel)

* Continuación del capítulo "Encierro" de este libro.

Narrador Omnisciente:

El viaje terminó siendo más largo de lo que esperaban, pues luego de ver las luces, y de descubrir que ella era la princesa pérdida, Jack y Rapunzel decidieron seguir explorando el mundo juntos.

Esta vez estaban en la punta de la torre Eiffel, literalmente, pues Jack estaba apoyado en la punta más alta y Rapunzel estaba sentada un poco más abajo, viendo el atardecer mientras comía un Sandwich.

Rapunzel: Bien, siguiente pregunta: ¿Alguién aparte de mi puede verte?

Jack pensó por unos segundos.

Jack: Hay una isla al norte llamada Berk. Es de los pocos lugares donde los dragones aún existen. Y uno de los chicos de la isla está bastante solo, una pequeña brisa fue suficiente para que me viera. Es divertido, te caería bien.

Rapunzel pasó de largo esa información, hasta que la procesó y lo notó.

Rapunzel: Espera, espera. ¿Dragones? ¿De verdad?

Jack: Claro, existen los espíritus. ¿Por qué no?

Rapunzel: Okey, tienes un punto, pero tendré que verlo para creerlo. –al oir eso Jack sonrió.

Jack: Sabes que no hay problema con eso.

Rapunzel terminó su Sandwich y se levantó y lo miró.

Rapunzel: Está bien. ¿Cómo dices que se llama el chico?

Jack: Hipo. Se llama Hipo Abadejo.

Luego de varias horas volando, Jack y Rapunzel "aterrizaron" en una cala que tenía quemaduras en algunas zonas del piso y un laguito.

Rapunzel: Que hermoso lugar.

Jack: Si, aquí fue donde Hipo me vió por primera vez, el viene aquí a estar solo, le gustara nuestra visita.

Lo que a ambos les sorprendió, fue ver al joven entrar a la cala gritando y hablando solo.

Hipo: ¡Nos vamos! Es hora de empacar. Creo que tú y yo nos tomaremos unas vacaciones... Para siempre... Ay, dioses. ¿Qué haré ahora?

Jack: Emm... ¿Hipo?

Hipo: ¡Ay Dios! –levantó la mirada y los vió– Ah, hola Jack, me asustaste. ¿Y ella? –sonaba extrañamente nervioso.

Rapunzel: Soy Rapunzel, solía tener cabello largo y mágico, pero me lo corté y así quedó.

Jack: No debes decirle eso a todos los que conocemos. –Rapunzel se encogió de hombros– En fin. ¿Qué estás haciendo? ¿A quién le hablabas?

Hipo: Ah... Ah... Yo... Estaba...

De repente un rugido se oyó, poniendo en alerta a la chica y al espíritu.

Hipo: Ay no...

Cuando Jack vió detrás de Hipo, un dragón negro se había asomado.

Jack: ¡Rapunzel, detrás de mí! ¡Hipo, al suelo!

El espíritu saltó sobre el Vikingo haciendo que el Dragón rugiera y corra hacia el espíritu mientras rugía.

Jack: ¡Corran!

Jack se levantó del suelo rápidamente y se preparó para lanzarle una ráfaga de viento helado al Dragón que lo mandaría muy muy lejos. Justo cuando la bestia saltó a él, Hipo se tiró sobre el espíritu, sacándole el bastón y tirándolo lejos.

Hipo: ¡Noo! ¡No! ¡Tranquilo! –le dijo al Dragón, quien sorprendentemente no atacaba al joven, pero sí rugía muy enfadado– ¡Tranquilos! –esta vez miró a los jóvenes, y luego volvió a mirar a la bestia– Son amigos.

Eso hizo que el Dragón se calmara un poco, pero seguía gruñendo y queriendo acercarse, aunque Hipo lo detenía.

Hipo: Lo asustaste.

Jack: ¡¿Yo lo asusté a él?! –dijo cuando se levantó, pero notó lo que estaba pasando, tensándose un poco– ¿Quién es "Él"?

El Dragón dejó de rugir, y se sentó justo detrás de Hipo.

Hipo: Ah... Em... Jack, Rapunzel, Chimuelo. –miró a Chimuelo– Chimuelo, ellos son Jack y Rapunzel.

El Dragón Gruñó enfadado, haciendo que Jack tomara su cayado otra vez.

Hipo: ¡No no Jack! ¡No es necesario!

Jack: Pues dile que se calme. –dijo seriamente mientras le apuntaba con él bastón.

Hipo: Ya lo hice, pero no siempre hace lo que le digo.

El dragón lo miró de mala manera antes de volver a gruñirle al espíritu.

Jack: Es extraño, la mayoría de los dragones no me atacan porque soy un espíritu.

Chimuelo resopló, y lo fulminó aún más con la mirada.

Rapunzel: Am... Hola... –finalmente la joven se animó a asomar la cabeza– ¿Puedo intentar...? –le dijo a Hipo, indicándole que quería acariciarlo y Hipo se encogió de hombros– Es hermoso. –la chica se arrodilló y extendió su mano al dragón para que la oliera, corriendo el riesgo de que le arranque el brazo.

Jack: Rapunzel, ten cuidado, no sabes si...

Se interrumpió a sí mismo al ver al dragón oler a la chica y sonreír, para luego dejarla que le acaricie el hocico

Hipo: Wow, solamente yo pude hacer eso.

Rapunzel: Creo que solo esta enojado con Jack por "atacar" a Hipo.

El dragón la miró sorprendido y Jack la miró incrédulo.

Jack: Sí, como sea. Hipo, ¿domesticar a un dragón? Sí que eras diferente al resto. Dime, ¿cómo se lo tomaron los demás?

Hipo: –suspiro– Nadie lo sabe, planeaba huir de la isla en Chimuelo.

Rapunzel: ¿Huir? ¿No tienes familia aquí?

Hipo: Mi padre sería el primero en desterrarme si se entera que tengo un dragón. Además, –miró al dragón y lo acarició, quien le respondió con un mini ronroneo– van a matar a Chimuelo si se enteran.

???: ¡Lo sabía!

Alguien gritó de los arbustos, alertando a todos, pero Hipo reconoció la voz.

Hipo: ¡¿Astrid?! ¡¿Qué haces aquí?!

Astrid: ¡Sabía que no podías ser tan bueno! ¡Espera a que se lo diga a todos! –y se fue corriendo.

Hipo: ¡Espera! ¡No no! Vamos amigo, hay que detenerla. –se subió al dragón pero Jack lo tomó del brazo.

Jack: Hipo, detente. ¿No ibas a huir? Es tu oportunidad, de aquí a que ella llegue al pueblo podemos escapar a otro lugar.

Hipo realmente dudó, quería irse, pero no quería quedar de esta manera con Astrid, pero sabía que Jack tenía razón.

Hipo: Esta bien. Vámonos.

El Fin

Por ahora, es el fin de este libro, el libro CEATD3 (Como Entrenar A Tu Dragón 3) está en pausa por ahora, estoy por empezar de nuevo la escuela y llevo una vida... Complicada

Asique por ahora es un adios!
♡´･ᴗ･'♡