Atsuko Kagari Pov

Mi relación...Termino ese día, sabía que pasaría...pero no quise aceptarlo, mi mente imaginaba un futuro donde ella pudiera ser feliz a mi lado...es una Cavendish, no soy digna para ser su pareja, solo soy una extranjera con bajos recursos económicos, después de graduarnos ella me llamo y hablamos alejadas de las demás que celebraran el fin de año en Luna Nova. Esas palabras que sonaron muy frías y sin sentimiento, me dolieron...pero, le sonreí y le respondí con cariño.

Lo entiendo. Sabes que una parte de mi imaginaba que sucedería esto pero, estoy tan enamorada de ti que no quise aceptarlo, si eso es lo que tienes que hacer para tu familia, está bien.

No pude mirarla a los ojos después de decirlo, si lo hubiera hecho me pondría a llorar y rogarle que se quede conmigo. Fueron tres años que nuestra relación se mantuvo estable en la academia, pero su tía y su apellido la separaron de mí, a veces deseo haber nacido con un apellido importante también y quien sabría que siguiéramos juntas si fuera así. Pero las cosas no se dieron y ya no estamos unidas. Nuestros cuerpos compartieron calidez, y la última vez que nos entregamos mutuamente, ocurrió cinco días atrás antes de la graduación, fue hermoso y ella es una mujer magnifica...yo soy solo una simple chica...No tengo conocimientos avanzados, mi magia no es tan alto de aprendizaje como los de Diana, nunca pude superarla y el añorar su compañía a mi lado se convirtió en un sueño inalcanzable.

Cavendish es perfecta y una muy buena pareja, el amor no falto en nuestra relación, ni los besos y abrazos, mis amigas estaban muy felices por nosotras y nos desearon lo mejor, pero, mis sentimientos eran más fuertes que los de Diana, porque...hubo muchas razones para que ella me dejara, pero al revés, jamás lo hubiera hecho.

Después de un mes de la graduación volví a la casa de mis padres y conseguí un trabajo, pero comencé a vomitar y perder el apetito, tenía nauseas continuas y mareos. Le conté a mis amigas lo que me sucedía por un grupo que hicimos para nosotras y ellas me hicieron un montón de preguntas respecto a mi última vez de relaciones que tuve. Yo les conteste que fue con Diana y ellas se quedaron más confundidas con ese detalle, pero me recomendaron comprar una prueba de embarazo.

Tome en cuentas sus palabras y cuando salí de mi trabajo a las siete de la noche camine hacia a una farmacia, compre uno de esos test de embarazo y lo guarde en mi bolso. Al llegar a casa me hice la prueba y resulto ser positiva...sentí en ese momento que el mundo se me vino arriba, muchas preguntas rondaron en mi mente sobre la última vez que estuve con ella en su habitación, no hicimos ningún hechizo para que una de las dos quedara embarazada, además Diana no tiene parte masculina y las tijeras no embarazan.

Agarré mi celular y les comenté la noticia a mis amigas, más una foto de prueba del test, ellas me preguntaron si no me acosté con un hombre antes y yo se los negué. Hannah y Barbara son las más cercanas a la familia Cavendish y les dije de inmediato que no le dijeran nada a Diana.

Seguí trabajando con un poco de esfuerzo, tenía que disimular mis ganas de vomitar y el cansancio de mi cuerpo. Tuve que enfrentarme a mis padres cara a cara y decirles lo que me pasaba, ellos le desagrado la idea que estuviera embarazada de una mujer y me echaron de la casa con todas mis pertenecías.

El jefe donde trabaje me apoyo cuando noto que mi barriga se comenzaba a agrandar, dijo que lo tomara como un favor por salvar el mundo el día del misil...ese día fue mi primer beso con ella. Me dejo seguir trabajando con un horario especial, mi sueldo subió y me consiguió un departamento chico para que pudiera vivir como una persona y no en las calles. En ese tiempo no tenía el dinero suficiente para viajar de nuevo a Londres y poder quedarme en casa de una de mis amigas que se ofreció a ayudarme. Solo recibía algo de dinero por parte de ellas, les dije que no era necesario, pero igual lo hicieron.

Los meses que tuve embarazada fueron los peores para mí, el dolor, el cansancio, las náuseas, los antojos, fue todo muy difícil de manejar y sin ayuda física era complicado, pero, cuando ella nació, mi dulce niña...La ame desde el momento que la vi cuando me la entregaron, me prometí siempre cuidar de ella y estar para lo que necesite, pero, las complicaciones subieron, no podía ir a trabajar con un bebe recién nacido y necesitaba pagar una niñera.

Seguía sin dormir en las noches por los llantos del bebe, pero logre en poco tiempo conseguir a alguien que la cuidara mientras yo trabajaba y pagaba las cuentas del departamento, compraba su leche, sus cobijas, pañales, biberón y todo lo demás. En las noches cuando llegaba del trabajo me quedaba con mi niña y la cuidaba, sus ojos son del mismo color que los de ella, su cabello castaño igual que el mío y sus rasgos faciales parecido a los de Diana, es una hermosa bebe.

A los doce meses de haber nacido camino por su cuenta, me sentí tan feliz de verla caminar hacia mis brazos que no dude en darle muchos besos y felicitaciones por su gran logro. Después de un año más me ascendieron en mi trabajo y pude conseguir el dinero suficiente para viajar a Londres y comprar una pequeña vivienda en ese país.

Volví a ver a todas mis amigas y ellas por fin conocieron a mi hija Melody Kagari. Mis amigas le regalaron muchos regalos y ella sonrió complacida, sus buenos modales resaltaron y su poco hablar también, diciendo un ''grashias'' que les pareció muy tierno.

Conseguí un trabajo en Londres gracias a Amanda. Hannah y Barbara me dijeron que debería decirle esto a Diana, pero sus palabras fueron muy claras ese día en la graduación...Ellas no lo sabían porque solo les dije que terminamos y eso fue todo, cuando se los conté con detalle callaron respecto a ese tema. En resumen, Cavendish me dijo que no quiere verme nuevamente por que sus decisiones o planes se irían a bajo solo por mí y eso es muy malo al parecer.

El color de los ojos de mi hija le quitaron las dudas a mis amigas sobre que me acosté con un hombre o estuve con alguien más después de estar con Diana, ella ese día jugo con todos los regalos que le dieron y miro sus cómicas en la televisión, mientras yo hablaba con las demás. Lotte se ofreció a cuidarla cuando yo trabajo ya que ella abandono su puesto, por que el dinero que gana su novio es suficiente para que viva sin problemas.

En este trabajo salía más temprano y recogía a mi hija después de acabar, mi sueldo es confortable y es mejor que antes, compre poco a poco las cosas necesarias para la casa, como un colchón para mi cuarto, ya que dormía en el suelo y ese dato mis amigas no lo sabían, mi hija, si dormía en su cama y hubo veces que me insistió a que durmiera con ella, pero, siempre ganaba esas pequeñas batallas.

Lotte le comenzó a dar clases en casa y aprendió muchas cosas siendo una niña de cinco años ahora, descubrió un nuevo hobby. Dejo sus juguetes aun lado cuando se enteró sobre el mundo de la lectura, en su tiempo libre aparte de pasar nuestro momento de madre e hija, se pone a leer.

Cuando no tengo que trabajar salimos a diferentes lugares a comer y divertirnos, su aprendizaje es increíble para una niña de su edad y presiento que los profesores se sorprenderán por su gran capacidad mental, solo le falta un año y esta emocionada por conocer a otros niños que no sea su prima Laila, hija de Lotte. Ella nació cuando Melody tenía solo tres años de edad y ahora tiene dos años. Mi hija le lleva tres años por delante; Laila es una bonita niña de cabello color rubio y ojos azules con pecas en sus mejillas, se parece mucho a Lotte.

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6 años de edad

Primer día de escuela para Melody, en mi trabajo me va bastante bien y cuando salga la pasare a recoger, tengo veinte y cuatro años de edad, y aun no estoy interesada en tener a alguien en mi vida, quiero tiempo para mi hija y no deprimirme por un amor no correspondido o solo un enamoramiento a medias que lo dejan al cumplir un año o meses. Estoy bien como vivo.

Recogí a Melody después de salir de mi trabajo, mañana tengo libre y hoy comeremos por fuera.

— ¿Que te gustaría comer? — digo estando las dos en el bus.

—Algodones de azúcar— juntas sus manos.

—Eso no es comida Melody.

—Pero podría ser el postre— aclara.

—Sonrió— tienes razón, pero, primero piensa en una comida saludable.

—Entonces...vamos al restaurante que queda cerca del parque, quiero enseñarte mis notas de hoy en la actividad que hicimos.

—Arqueo una ceja— ¿Enserio? Estoy ansiosa por verlas.

Llegamos al parque y camino hacia el restaurante más cercano, para cruzar la calle le agarre su mano, ella esta sonriente y feliz, tengo suerte que nunca haya preguntado por su padre, pero, sé que algún día lo tendré que decir. Mientras caminamos agarradas de la mano conversamos de diferentes temas fuera del trabajo o escuela.

—Estás haciendo nuevos amigos, me alegra mucho.

—Si, ellos son muy buenos conmigo y me ayudaron cuando uno de mis compañeros me molesto.

— ¿De qué manera?

—Me dijo fea— infla sus mejillas.

—Paro de caminar y me agacho para estar a su altura— no eres fea, tienes unos ojos muy bonitos y tu cabello es hermoso— acaricio su cabeza.

Al levantarme empezamos a caminar nuevamente, no me fije al frente por está viendo las expresiones de Melody cada vez que cuenta algo nuevo y choque con una persona.

—D-disculpa— dije apenada.

Alce la mirada y me tope con unos ojos color azules como el océano, los reconocí de inmediato y apreté la mano de mi niña, mis nervios se apoderaron de mi cuerpo y comencé a sudar, es ella...Y esta con un hombre agarrados de la mano, sacudí mi cabeza y me disculpe otra vez tratando de esconder mi rostro con mi mano libre, para después pasar por un lado y seguir con mi camino.

—Ten más cuidado— dice Melody.

—L-lo tendré— pongo mi mano en mi cabeza.

— ¿Estas bien?

—S-si— la miro y le sonrió— estamos cerca.

Llegamos al restaurante y pedimos nuestra comida, el aroma de este lugar y las personas comiendo tranquilamente mientras tienen una charla amistosa, es bonito y confortable, nada incómodo.

—Saca dos hojas de su maleta—aquí están— los pone en la mesa.

Agarro los papeles y lo veo detalladamente, uno se trata del abecedario y el otro un dibujo con números que tienen diferentes colores, en los dos saco diez. Estas actividades son simples y fácil de hacer, pero para ella que esta aun aprendiendo es un buen inicio.

—Felicidades Melody, estoy orgullosa de ti— digo regalando una de mis sinceras sonrisas.

—Sonríe alegremente— gracias mama.

La comida fue servida en la mesa y jugamos un poco haciendo dibujos con los macarrones y arroz en el plato. En mi mente aun aparece el rostro de Diana, espero no haya visto los ojos de Melody, no quiero que se entere que es su hija, menos si está en una relación con ese hombre y son felices...lo último que nunca querría es que venga a mí por compromiso de la niña, no quiero una relación forzosa y tampoco obligada, esa es una de las muchas razones por lo que le dije a Hannah y Barbara que no le dijeran nada.

Salimos con nuestros estómagos llenos del restaurante y fuimos al parque a reposar. Nos sentamos en una de las bancas y miramos el hermoso atardecer juntas, pasaron solo unos treinta minutos y Melody se fue a jugar después de explicarme las tareas que le mandaron a hacer. Miré como habla con una niña y suben las dos al tobogán, me sentí relajada y calmada con este panorama, mi hija es lo único que necesito en mi vida.

— Hola.

Volteé a ver de dónde provino el saludo y me sorprendí de verla otra vez, su ropa elegante que consiste en una camisa manga larga color blanco y pantalones largos azules, tiene un reloj en su muñeca y unos lentes puestos también, su cabello sigue igual de largo y no carga maquillaje. Deje de observarla e ignore su saludo volviendo a ver como Melody juega.

—Se sienta en la banca— pensé que te habías ido a vivir con tus padres.

Hannah y Barbara le debieron comentar ese dato.

—Me sorprendió verte en Londres.

—Suspiro— está bien.

— ¿Sigues molesta conmigo por lo de esa vez?

—No...— cruzo mis brazos.

Nunca me molesté porque la entendí, pero, ¿Ella sabrá cómo nació Melody? Lo dudo, porque si fuera así me hubiera mandado un mensaje hace mucho tiempo atrás, mi teoría siempre ha sido que fue un regalo de los nueves brujas.

—¡Mama mírame! — alza sus manos estando cerca de la bandera del castillo.

—Alzo mi mano saludando y sonrió— ¡Ten cuidado!

—Asiente con la cabeza—

—¿M-mama? — dice Diana asombrada.

—Si, soy madre— digo sin verla.

—¿C-cómo? Q-quiero decir, ¿T-te casaste?

—La miro de reojo— no.

¿Qué clase de reacción es esa?

—Pone su mano en la cabeza analizando—

—Arqueo una ceja confundida— ¿Te afecta?

—Recupera su postura firme— no, solo me tomo por sorpresa.

—Vuelvo a mirar al frente— está bien.

—Me mira— ¿Y qué haces en Londres?

—Trabajo y estoy aquí desde hace cuatro años, me fui de la casa de mis padres cuando tuve a Melody.

Mentira, ellos me botaron.

— ¿Por qué? Ellos te pudieron haber ayudado con la niña.

—No quería ayuda.

— ¿Y el papa de la niña?

—Suspiro nuevamente— no está, solo soy yo y ella— la miro— no me molesta, soy feliz como vivo y ¿Tu? ¿Como te ha ido en la vida?

—Normal, el apellido Cavendish se mantiene, mucho trabajo por delante— se ruboriza por verme a los ojos.

—Quito la mirada— entiendo.

Melody llego corriendo a mi dirección sudada y cansada, le di el dinero suficiente para que fuera a comprar una botella de agua, luego de tenerla volvió a la banca y se sentó en el medio.

— Mira a Diana— ¡Hola!

—H-hola.

Que no note el color de sus ojos...

— ¿Eres una nueva amiga de mama? — abre la botella.

—No...—la mira a los ojos— soy una vieja a-amiga.

Si claro...Melody dejo la botella aun lado y saco unas toallas húmedas de su maleta, se limpió las manos y extendió una cerca de Diana.

—Mucho gusto, soy Melody Kagari.

—Estrella su mano— D-diana Cavendish.

— ¿Me tienes miedo? — aleja su mano.

—N-no— dice con una expresión de con función y sorpresa en su rostro.

Lo noto...

— ¿Segura? — inclina un poco su cabeza quitando su flequillo aun lado.

—S-si...

—Agarra la botella de agua y la bebe un poco— ¡Esta bien! — se limpia la boca con la manga de su camisa y se levanta de la banca— ¡Es un placer Diana! ¡Cuida de mi mama mientras juego! — se retira corriendo.

Silencio...Cada segundo que pasa me siento más nerviosa, no quiero que vuelva...Quiero que mi vida siga como está ahora, no la necesito y puedo sola con mi hija.

— ¿Que le paso al papa de la niña? — dijo con un tono de voz molesto.

—Y-ya te lo dije, no está— respondo nerviosa.

— ¡No me mientas! — dice entre dientes.

—Aprieto la falda de mi vestido asustada—

Se dio cuenta, no puedo ocultarlo y yo pensé que lo haría todo este tiempo...Pero seguiré intentando.

— ¡Akko! — se levanta.

—N-no está...— dije débilmente.

Duele recordar que todo este tiempo estuve luchando sola con Melody, duele recordar los momentos felices que pasamos en la academia, duele tenerla de frente otra vez después de sus palabras frías...Ella nunca estuvo en el nacimiento de nuestra hija, ni cuando cumplió su primer año o cuando dio sus primeros pasos o cuando dijo mama por primera vez...No esta...su padre nunca estuvo...

—¿Esta segura? —baja la voz, pero estando aun molesta.

—Hago una sonrisa amargada y me levanto— muy segura— digo mirando directamente sus ojos.

La estoy confrontando después de tanto tiempo.

— ¿Y quién era su padre?

— Arque una ceja— ¿Eso ya lo sabes no? — dije dando a entender lo obvio que es.

—Frunce el ceño— n-no es p-posible— agacha la cabeza— ¡No hice ningún hechizo para que quedaras embarazada de mi Atsuko! — aprieta sus puños.

—Yo tampoco, sabes que era inexperta en la magia, no sé cómo sucedi-

—¡Por qué no la abor! — tapa su boca.

— Cambio mi expresión a una de enojada— ¿Por qué no la que, Diana? — pregunto entre dientes tratando de no gritar— ¿Crees que sería capaz de hacer algo como eso?

—Desvía la mirada nerviosa—

—Muerdo mis labios— puedo sola...

—Me mira nuevamente—

—No necesite tu ayuda desde un comienzo— la apunto con mi dedo índice— no la necesito para cuidar y criar a mi hija correctamente.

—Abre sus ojos sorprendida por mis palabras—

—No te he molestado en estos seis años y seguiré sin hacerlo— miro el parque— ¡Melody nos vamos!

— ¡Ya voy!

—E-espera—agarra mi mano.

— ¿Qué quieres? — digo aun molesta por sus palabras.

—Lo siento...— suelta el agarre.

—Espero que te vaya bien en tu vida.

Melody llego a mi lado y Diana la miro atentamente, mi hija agarro su maleta y yo mi bolso.

—¡Adiós señorita Diana! — dice con una sonrisa en su rostro.

—A-adiós...

Quiero llorar...de enojo y dolor, ¡Como se atreve decir que la abortara! ¡Maldición! Llegamos a casa y me di un baño para calmar mi enojo notorio, Melody no me dijo ni una sola palabra en el camino, ella sabe que cuando me encuentro en este estado es mejor no hablarme. Termine de alistarme con mi pijama y camine a la sala donde encontré a mi hija viendo sus cómicas. Agarre mi celular y revise los mensajes que tengo, muchos son de Amanda, otros de Lotte y algunos del grupo, el que más me llamo la atención fue del número desconocido.

Le escribí respondiendo su saludo y hablamos por unos cortos minutos, es un trabajador de la misma empresa, me dijo que Amanda le dio mi número para hablar sobre el siguiente proyecto que está al pendiente y si tengo algunas ideas para compartir. Le comenté mi opinión sobre ese tipo de proyecto y luego entre al mensaje del grupo.

Dos meses después

Sigo con mi rutina diaria de trabajo, recojo a Melody todos los días de semana en la escuela y se queda sola en la casa solo los sábados hasta que llegue del trabajo, siempre le digo que no le habrá a ningún desconocido y le he enseñado a preparar cosas básicas, aunque ella prefiere solo la comida para calentar.

Comencé un ahorro hace dos años cuando inicie mi trabajo en Londres, antes solo depositaba pequeñas cantidades en la tarjeta de débito, pero, ahora lo que tengo es mucho más, pronto podre comprar una casa propia y dejar de alquilar en la que estoy, será más confortable y cómodo. Desde ese día que vi a Diana no la he vuelto a ver, pero, tengo un sentimiento de culpa por no contarle sobre su hija, a la vez siento que la extraño, esos momentos bonitos que pase con ella los guarde muy bien en mi corazón roto.

FlashBack

—Akko.

— ¿Si? — la miro.

— ¿Tienes sueño?

Esa noche nos encontrábamos en su habitación terminando la tarea de la profesora Ursula.

— Algo.

Ella me miro con ternura y se levantó de su silla, la mire confundida para luego obligarme a pararme de la mía, me guio hasta su cama donde me mando a acostarme.

— ¿Quieres que duerma?

—Si, pero si aún no estas cansada, podemos jugar unos minutos.

En mi mente se me ocurrieron muchas cosas pervertidas, pensé que se refería a ese tipo de juegos, pero me sorprendió que comenzara a hacerme cosquillas, tape mi boca con mis dos manos para que no se escuchara mi risa en la habitación, ya que Hannah y Barbara estaban durmiendo, se me salieron algunas lágrimas y ella paro quitando mis manos de mi boca, mi respiración estaba agitada y trataba de recomponerme por tanto reír, Diana se acercó y me beso. Siempre considere esos labios como los de un ángel, ella besa bien y te hace llegar al cielo con tan solo ver sus ojos. Cuando nos separamos sonreímos mutuamente diciéndonos un *te amo* puro y verdadero.

Fin del FlashBack

Una sonrisa escurridiza se dibujó en mis labios sin notarlo, escuche claramente como una taza de café se quebró en el suelo. Parpadee varias veces volviendo al mundo donde estoy, mire de donde provino ese sonido y me levante de mi puesto a ayudar.

—Gracias señorita Akko.

—Esa taza la pagas Larry y limpia antes de volver a tu lugar— dijo el jefe viendo el desastre.

—S-sí señor no se preocupe— dice nervioso.

—Fue un placer ayudar—sonrió y me levanto— ten más cuidado a la próxima.

—A-akko— se levanta con los pedazos de vidrio en sus manos.

— ¿Sí? — lo miro con curiosidad.

— ¿Te gustaría salir después del trabajo?

—Lo siento, tengo que ir a recoger a mi hija.

—Me mira sorprendido— ¿Tienes una niña?

—Así es, su nombre es Melody—alzo mi mano en forma de despedida— nos vemos después.

—S-si— hace una pausa corta— ¡O-oye! ¡Me gustaría conocerla algún día!

—Lo miro de reojo confundida— está bien.

Larry...Ese nombre es tierno, parece un chico de veinte y un años, nada mal para trabajar en esta empresa, pero no es muy precavido, eso lo note por lo que paso con lo del café. Me senté en mi silla y seguí con mi trabajo en el computador, agarré algunos papeles, mis lentes y una pluma. Aún falta un montón de hojas que deben ser verificadas, más sumar algunas cuentas de los gastos que hay en los alimentos.

Después de salir de mi trabajo, agarré el bus de siempre a la misma hora para ir a recoger a Melody, sus notas siguen mejorando y en la reunión familiar que estuve me dijeron que están sorprendidos por su gran capacidad de aprendizaje; sabía que pasaría, eso lo heredo de Diana, mi mente es muy lenta para captar algunas cosas, sigo pensando cómo fue que Melody llego a este mundo, ¿Sera verdad que es un regalo de las nueves brujas? Si es así ¿Por qué lo hicieron? Si al final me separe de ella. No estoy molesta por tener a mi hija, al contrario, lleno mi vida de felicidad y una que otras dificultades, tengo que admitirlo, al comienzo no fue fácil.

Llegue a la escuela y Melody está debajo del árbol de siempre esperándome mientras habla con sus amigas. Cuando me vio se despidió de ellas y se acercó a mí, la recibí con un abrazo y un beso en la mejilla, agarre su mano y caminamos juntas a la parada del bus.

— ¿Como te fue? — pregunto sonriendo.

—Bien, la escuela es fácil mama—inclina un poco su cabeza— merezco estar en unos años más adelante que mis amigas, se más cosas de lo que enseñan las profesoras.

—Jaja, tal vez sepas esas cosas que dices porque no te están dando clases avanzadas, pero, algún día estarás donde quieres estar.

— ¡Si! ¡Seré la mejor en mi escuela, después en el colegio y por último la universidad! — dice entusiasmada.

— ¿No te gustaría ir a una academia de magia?

Al llegar el autobús la ayude a subirse para después seguirla y sentarnos en los asientos libres.

—Podría ir, ¿Sabías que en los hospitales usan magia curativa?

—Si— la sigo mirando recostando mi cabeza en mi mano que se apoya en la ventana.

—Me gustaría aprender ese tipo de magia y ayudar a los demás— mira sus manos— quiero ser capaz de salvar vidas.

—Sonrió— entonces, ¿Tu carrera profesional es ser doctora?

— ¡Si!

Escogió el mismo camino que Diana...pero, si eso quiere ser no la obligare a hacer algo más.

—Arqueo una ceja— podrás entrar a la academia cuando tengas quince años, por ahora, tratare de conseguirte unos libros para que te vayas preparando antes de entrar, lo malo, es que tendrás que usar la varita de tu tía Lotte, recuerda que la mía la deje en-

—La casa de los abuelos, lo se mama, si mi tía Lotte acepta prestármela, practicare y te haré sentir más orgullosa de lo que estas ahora de mí.

Sonreí complacida por sus palabras, ojalá tuviera mi varita, sería de gran ayuda, Melody nunca me ha visto hacer magia y es una total lastima, como pude olvidar algo tan importante en esa casa, debió ser por el apuro y los gritos resonando en cada pared. Les mande un mensaje diciendo que, si pueden mandar mi varita por correo, pero, eso fue hace dos años, sigo sin tener respuesta y aún tengo la conversación archivada por si algún día contestan.

Llegamos a la casa e hice lo de siempre, darme un baño primero para cambiar mi ropa de trabajo, después de asearme Melody entra para darse su baño y mientras ella hace eso, yo saco los alimentos de la nevera para preparar el almuerzo, puse el pollo a descongelar y saque un par de galletas con leche, serví la leche en un vaso y las galletas las puse en el pequeño comedor, el almuerzo demorara en estar listo y no quiero que mi hija aguante hambre.

Un pequeño golpe en la puerta me hizo ver hacia esa dirección, debe ser un pájaro, dije para mí misma, luego de un minuto se escuchó otro golpe pequeño, me acerqué y abrí la puerta para averiguar qué es lo que está provocando ese sonido. Diana... ¿Qué hace aquí? ¿Como sabe dónde vivo? ¿Algunas de mis amigas le habrá dicho?

— H-hola...— dice con unas rosas en sus manos.

Esta vestida con ropa de hospital y carga unos lentes de ver puestos, más la bata larga que usa un doctor, me ruborice un poco al darme cuenta lo linda que se ve, Diana Cavendish sigue siendo hermosa. Ignoré mis mejillas ruborizadas y salí de la casa cerrando la puerta, Melody esta aun dándose un baño.

—Cruzo mis brazos— ¿Qué haces aquí? —pregunto en susurro.

—Vine a disculparme, y que me dejes ver a la niña—extiende su mano que sostiene el ramo de rosas— son para ti.

Eso es extraño, ¿Por qué quiere verla después de lo que dijo? ¿Cuáles son sus verdaderas intenciones?

—Suspiro y sostengo las rosas— gracias, acepto tus disculpas, pero quiero saber tus intenciones Diana— dije sin despegar mis ojos de las rosas.

Son rosas echas con magia, no compradas.

—Estuve pensando y analizando lo que paso ese día en el parque, cometí un error muy grande en decirte esas palabras, estaba confundida y enojada, lo siento.

—Alzo mi vista un poco y mire sus ojos— son idénticos...—susurro.

— ¿Que dijiste?

— Nada— me doy la vuelta— puedes entrar, pero, no le digas nada a Melody sobre que eres su otra madre.

— ¿Ella no lo sabe?

— Por supuesto que no— abro la puerta.

Diana entro a mi hogar pidiendo permiso, observo las fotos que están en la pared y todo lo demás, caminé hacia la cocina agarrando el mantel para después ponérmelo, puse las rosas en agua y ella se sentó en el sillón quitando sus lentes y guardándolos en el bolsillo de su bata. La puerta del baño se abrió dejándome ver a Melody vestida con su ropa de casa, una camisa blanca con dibujos animados de sus cómicas y pantalón largo.

—En la mesa hay galletas y leche— dije sacando la cebolla de la nevera.

—Gracias mama— camina a la mesa— ¡Señorita Diana! — dijo al verla.

—Hola Melody— sonríe.

— ¿Que hace aquí? — agarra una galleta y el vaso de leche.

—Vine a verte.

— ¿Por qué? — le da un mordisco a su galleta.

—Quiero conocer más de ti.

—Hace una mueca insegura— ¿No eres otra de los interesados que tiene mama verdad?

—Se sonroja— n-no...

—Resopla— eso espero, esos amigos de mama me molestan, piensan que ganando mi confianza se acercaran a ella— toma un poco de leche— y tampoco me gustan los regalos que me dan, una vez vino un tal Mark y me regalo una muñeca, ¿Acaso el me ve cara de niña de dos años?, el otro se llama Steve y-

—Melody no hables de esos temas— digo interrumpiendo su charla.

Qué vergüenza.

—Lo siento mama— se acerca un poco a Diana— pero ninguno ha logrado tener una relación con ella—susurra.

—Te escuche.

—¡Lo siento!

—Sonríe— ¿Y qué cosas te gustan Melody? — pregunta Diana.

—Los libros que me presta la tía Lotte, me gusta mi cumpleaños por que la tía Amanda me lleva comer ¡Muchos dulces!

— ¿Te gusta la lectura?

— Si— termina de comer la galleta y deja el vaso de leche vació en la mesa.

— ¿Qué clase de libros te gusta leer?

—¡Espera! Lamento esquivar tu pregunta, pero, ¿Eres doctora o trabajas como asistente?

—Soy doctora.

— ¡Eso es genial! ¡Yo también quiero ser doctora!

—Arquea una ceja— ¿Enserio? — pregunta sorprendida.

— ¡Si! — se sienta en el mueble que esta frente a Diana— ¡Quiero salvar vidas como lo haces tú!

—Me alegra escucharlo—se quita la bata— ¿Quieres ponértela?

—Se levanta emocionada— ¿¡Puedo!?

—Adelante.

Mire la escena donde Diana le pone la bata y sonríe complacida, es tierno...Termine con los ingredientes y los lave, puse el pollo en la tablilla y lo pique quitando el pellejo, una vez listo, lo puse en agua y comencé a hervirlo.

— ¿Como me veo?

—Como toda una profesional, pero te queda grande.

—Hace un puchero—

Diana Cavendish Pov

Esa personalidad es la misma que tiene Akko, tan alegre y energética, cuando inflo sus mejillas me pareció muy gracioso, pero tierno a la vez, estoy sorprendida por el camino que escogió de ser doctora, me alegro mucho de verla y también de haber elegido esta decisión. Tuve una discusión en la mansión con mi tía, compre una casa aparte y me fui de ese lugar, eso ocurrió hace un mes y quede viviendo sola, estuve el otro mes que paso entero rogándole a Hannah que me diera la dirección de la casa de Akko. Me sentí muy arrepentida después de lo que dije en el parque, tenía tiempo sin verla y pensé que tendríamos una charla normal, pero lo de la niña me tomo por sorpresa.

El día en que termine nuestra relación y los días que continuaron, fueron una tortura, mi tía me exigía tantas cosas que quede con ganas de suicidarme por el peso que tenía en mi espalda, literalmente, no estaba con el amor de mi vida para que me apoyara y ayudara a salir de ese mundo, pero, debía hacerlo, por el bien de mi familia y apellido.

Al pasar los años mi tía me presento muchos hombres con los cuales tuve que salir y conocerlos, pero nunca acepte un compromiso, mi corazón aún seguía herido por los errores que cometí y mi mente no dejaba de pensar en la hermosa relación que rompí por mi estupidez.

Cuando la vi en ese momento todas mis decisiones se aclararon en mi mente y pensé que es tiempo de buscar mi felicidad, que es ella y solamente ella. Cumplí con mi familia y heredé todas las pertenencias de mi madre. Ahora... ¿Ella me aceptara? De todos los errores que he cometido el peor fue dejarla... Si hubiera sabido desde un comienzo que estaba embarazada de mi...no...No la aceptaría, en ese tiempo estaba cumpliendo con tantas responsabilidades que no tenía momentos libres para mí misma, mis días se llenaron de mucho estrés y trabajo.

Termine con los hospitales y las otras empresas, todo está estable en la mansión y el dinero aumenta. Le conté a mi tía sobre mi ex relación anterior y del por qué no quiero comprometerme con un hombre, sus palabras fueron muy duras, pero las acepté y le dije lo que voy a hacer de ahora en adelante, Ana me apoyo en mi decisión y me ayudo a empacar mis cosas, ella me dirá si algo malo pasa en la mansión.

La mayoría de mis años la pase encerrada en la mansión, cuando comencé a trabajar en el hospital, salí más seguido y agradecí mucho escapar de ese encierro, pero en mi mente aun divagaba esa sonrisa que me volvía loca y sus caricias, la primera vez que nos entregamos físicamente fue hermoso...me sentí amada y deseada. Los labios de Akko siempre fueron perfecto para mí, antes de comenzar mi relación la veía como algo inalcanzable, por lo muy despistada que era en el amor, Lotte fue la que le ayudo a descubrir sus sentimientos, si no fuera por ella, Akko seguiría pensando que las mariposas que sentía en su estómago eran causadas por mi magia.

Los ojos que tiene Melody son únicos en la familia Cavendish por el brillo que ocultan, ella es especial y tome mi decisión de cuidarla, no solo a ella, también a Akko, intentare arreglar nuestra relación, pero, si ella no lo acepta, lo comprenderé, no me merezco su amor después del daño que le hice.

Mire como Melody le muestra la bata a Akko, ella sonrió y dijo que tuviera cuidado de no ensuciarla, después siguió cocinado. Su físico y personalidad cambio, es atractiva y aún posee esa hermosa sonrisa, el embarazo no le hizo daño como algunas mujeres en el hospital que quedan muy feas después que pasara un mes de tener a su hijo, se veían como desgastadas y con mucha grasa acumulada en su cuerpo.

—Señorita Diana, ¿Como se usa la magia en el hospital?

—La miro sorprendida por la pregunta— los hechizos que son realizadas a la hora de curar una herida no tan grande, son fáciles, pero en las operaciones tienen ser expertos que digan esos hechizos para que todo salga bien.

— ¿Puedes enseñarme uno?

—Puedo enseñarte otros tipos de hechizos, porque no te veo lastimada en algún lugar.

—Me parece bien.

Saqué mi varita de mi bolsillo y la puse al frente de ella.

—Shuryal Muryuelle

La casa completa por dentro fue rodeada de agua creando una fuente en el centro de la sala, el hechizo hace que podamos respirar sin dificultad.

—Criatura de melena sagrada, absorbe la luz de las estrellas y surge de esta efusiva fuente, ¡Tiphillie Lirullianae!

Unos unicornios pequeños salieron de la fuente saltando de felicidad alrededor de Melody, otro se escapó corriendo hacia la cocina donde esta Akko, subiéndose en su hombro para después acariciar su bello pelaje en la mejilla, ella lo acaricio sin despegar su mirada en la comida que prepara. El agua es alumbrada por estrellas pequeñas que están por toda la casa, es una bella vista. Melody jugo con los unicornios saltarines y los vio desaparecer en el agua, retire el hechizo volviendo a la normalidad el hogar.

— ¡Eso fue impresionante! ¡Usaste dos hechizos a la vez!

—Es algo sencillo que se puede aprender— le entrego la varita— repite después de mí.

—Agarra la varita y afirma con la cabeza— Metamor...

—Metamor...

— Phie Faciesse.

— ¡Phie Faciesse!

Unas lindas orejas de conejo salieron de su cabeza incluyendo también la nariz y la cola esponjada. El hechizo debió convertirla en un animal completo, esto me recuerda mucha a Akko cuando no le salían bien los hechizos.

— ¡Genial! — toca sus orejas— ¿Lo hice bien?

—Un poco—pongo mi mano en mi mentón— debes practicar la pronunciación para que el hechizo haga su función correctamente.

— ¿Puedes enseñarme más hechizos?

—Después— dijo Akko llegando a su lado— la comida está servida.

—Hace un puchero— está bien, toma, gracias por dejarme usarla—me entrega la varita.

—Retiro el hechizo quitando su apariencia de coneja— de nada.

Su talento puede crecer si le enseño muchas cosas, ella se emociona con la magia y quiere ser doctora, eso significa que también debe querer ir a una academia de magia, posiblemente será Luna Nova.

—Diana— chasquea sus dedos al frente de mis ojos.

—La miro saliendo de mis pensamientos—

— ¿Quieres comer? — sonríe de lado.

—Pongo mi mano en la cabeza— s-si gracias— dije avergonzada por no prestar atención a su llamado anterior.

Akko se dio la vuelta regresando a la cocina, mire el suelo una vez más, sin meterme tanto en mis pensamientos, me pregunto... ¿Como haré para enamorarla nuevamente? Quiero unir mis lazos otra vez con ella y que viva conmigo. Se siente muy solo llegar a casa y pensar que nadie te está esperando.

Después de servir la comida en el plato me lo entrego y se quitó el mantén de cocina, la ropa que lleva puesta consiste en un pantalón algo corto color rojo y una camisa normal color blanco, su figura aun me sorprende, sus senos crecieron, al igual que sus glúteos, esto me hace arrepentirme más por dejarla.

Comí con mucha educación como siempre suelo hacerlo, Akko se sirvió y comió en la mesa alado de nuestra hija. Termine de comer y Melody también, me levante y camine a la cocina, me ofrecí a limpiar los platos de todas, Akko sonrió y dijo que ella lo haría, no discutí ese tema y me volví a sentar. Quiero hablar a solas con Akko sobre el tema de nosotras y aclarar ciertos puntos del rompimiento de la relación.

—Señorita Diana.

— ¿Si Melody?

— ¿P-porque nuestros ojos se parecen mucho?

Rayos...Ella también nota esos puntos.

—Melody a dormir— dijo Akko fregando los platos.

—Pero aún no termino de hablar.

—Cuando te levantes tendrás que hacer la tarea—seca sus manos— te ayudare, recompone energía— se acerca— y otro día hablas con Diana— sonríe.

—Hace una mueca insegura cruzando sus brazos— está bien, pero ¿Luego que termine mi tarea me dejaras ver televisión?

—Por supuesto, haré tu cena favorita también.

— ¡Si! —me mira— hablamos después señorita Diana— se despide y camina hacia lo que es su habitación.

Una vez que entro Akko se sentó en el mueble de alado, mis nervios se hicieron presentes al darme cuenta que estamos completamente solas. Quería esto y ahora no se cómo comenzar la conversa-

—Diana.

— ¿S-sí?

—Se que tus motivos no eran solo de ver a Melody y disculparte— dijo sin mirarme.

¿Como lo sabe?

—Por que aun sigues aquí— dice completando su oración.

Fui muy obvia.

—A-akko.

—Suspira— esperemos que Melody se duerma primero—me mira— ¿Cómo va el trabajo?

Sus ojos...no puedo evitar sonrojarme al verlos, son muy hermosos, ella es muy hermosa.

—Desvió la mirada—lo normal, mucho papeleo de los pacientes que deben ser organizados, pero, todo sigue bien.

—Me alegro.

— ¿Y cómo te va a ti?

—Bien, trabajo y después de salir de ese lugar, recojo a Melody en la escuela— mira la puerta del cuarto de Melody— ¿Me prestas tu varita?

—La miro confundida y se la entrego—

—Apunta la varita hacia la puerta de la habitación de Melody— silentium placet— susurra.

Un hechizo silenciador...ahora la niña no podrá escuchar lo que hablamos.

—Es para asegurarme, a veces no logra conciliar el sueño— me entrega la varita y mira sus manos.

— ¿Ocurre algo?

—N-no es nada— me mira— es solo que tenía tiempo sin usar magia.

— ¿Donde esta tu varita?

—En la casa de mis padres, la deje por accidente.

—Puedes mandar a pedir una en Luna nova con los papeles de ingreso y graduación.

— ¿A-así? N-no lo sabía— dijo nerviosa.

Tan desinformada como siempre...me gusta.

—Sonrió con nostalgia— te extrañe...

—Agacha la cabeza—

—A-akko, me disculpo contigo por...L-lo que te d-dije y h-hice ese día— aclaro mi garganta calmando mis nervios— quiero arreglar las cosas contigo, entiendo si estas enojada conmigo después de tantos años que no me has visto y vengo con estas intenciones...—aprieto mis puños y bajo mi cabeza— mi mayor error fue dejarte...cada palabra que te dije...me dolió...No quería hacerlo, en verdad, nunca quise hacerlo, pero...Mi familia y mi apellido...

—Lo entiendo.

—Levanto mi cabeza mirándola con sorpresa—

—Nunca me enoje porque me dejaras Diana— pone su mano en su pecho— recuerda lo que te dije— me mira con sus ojos a punto de derramar lágrimas— sabía que pasaría— sonríe dulcemente.

—Akko— me levanto.

—Limpia sus ojos— por favor, no te acerques.

Quede parada frente a ella esperando lo peor, me dije a mi misma que debería aceptar un rechazo de su parte, pero, cuando vives ese momento quieres hacer lo que sea para que esa persona quiera estar contigo o en esta ocasión arreglar las cosas.

—P-podemos...—dije en un tono muy bajo que logro oír.

— ¿No crees que es demasiado tarde para eso Diana? — levanta su cabeza.

No...no, no, no ¡No! Maldición, como duelen esas palabras, debo conservar mi orgullo y estar firme para estas situaciones, pero, la amo mucho, no quiero que se vaya, no otra vez. Hice lo que nunca he hecho antes con otra persona, me arrodillé...Y escondí mi rostro en sus piernas.

—Por favor...no quiero alejarme de ti— aprieto un poco sus muslos— te amo.

Lagrimas comenzaron a salir de mis ojos y un pequeño llanto de mi parte se escuchó.

—D-diana no hagas esto, te estas avergonzando—dice sorprendida.

Es cierto, estoy quedando en vergüenza, pero, no me importa si es por ella, me arrodillare cuantas veces quiera pidiendo una oportunidad, si esto no logra convencerla de mi arrepentimiento por mi error y me aleja completamente de su vida, no tendré otra opción que dejarla ir. Es sorprendente esto, la gran Diana Cavendish postrada ante una mujer.

—No respondo—

—L-levántate.

—Me quedo quieta—

Escuche claramente su suspirar para después apartarme un poco y sentarse en el suelo, la mire a los ojos aun con lágrimas recorriendo mis mejillas, ella me abrazo y acaricio mi cabeza, la enrolle entre mis brazos y le devolví el abrazo con más fuerza. El aroma de su cabello y la calidez de su cuerpo calmo mi tristeza, deje de llorar apreciando este hermoso gesto de su parte, nos quedamos en silencio disfrutando el acercamiento de nuestros cuerpos.

—Diana, mírame.

El abrazo fue separo un poco, mire sus ojos con mucho detenimiento amando su color rojo escarlata, puse mi mano en mi mejilla y la acaricie con mi dedo pulgar, la extrañe mucho...

—Sonríe— vamos a intentarlo otra vez.

Esas palabras llenaron de felicidad mi corazón, mi vida se siente más alumbrada y no apagada, me acaba de dar una oportunidad para arreglar las cosas, ella también pondrá de su parte, pero, debo poner más de la mía porque fui yo quien cometió ese error.

—Me ruborizo y entrelazo sus dedos con las míos— gracias Akko.

—Arquea una ceja y sonríe juguetona— tengo reglas— pone su dedo índice cerca de mis labios— nada de besos o algo más que eso—se sonroja un poco— quiero que las cosas avancen poco a poco.

—Está bien, lo que desees.

Vendré mañana a verla y la invitare salir junto a la niña, puedo comprarle un auto como agradecimiento.

—Y otra cosa más, no quiero regalos exagerados para Melody, ni para mí.

Adiós idea.

—A veces los pequeños detalles son mejor— se levanta.

—Comprendo...— dije no muy convencida.

Pequeños detalles...Tengo que pedir ayuda a Hannah y Barbara para saber exactamente a lo que se refiere con eso, tal vez... ¿Cartas hechas a mano? o ¿Un collar de oro con piedras pequeñas echas de diamante?, mi celular comenzó a sonar sacándome de mis pensamientos, lo conteste y las palabras del doctor de mi hospital dijo que necesita mi ayuda urgente para una operación; tengo que llegar rápido.

—Me pongo de pie— tengo que volver al hospital.

—Está bien, le pediré a Hannah que te pase mi número para estar en contacto.

—Sonrió— gracias.

Me acerque y le di un abrazo, me deje llevar por mis impulsos y le di un beso en la mejilla, deseo besar sus labios, pero debo ser paciente. Salí de la casa despidiéndome de mi... ¿Novia? ¿Lo somos? Aun no lo sé, tengo que llegar rápido al hospital, saque las llaves de mi auto y me subí. Ahora que me doy cuenta no tengo mi bata, debí quitársela a Melody antes de que fuera a dormir, eso fue un descuido grande de mi parte, ahí cargo mis lentes y mi cartera, luego las buscare, al menos tengo la licencia en mi carro.

Atsuko Kagari Pov

Estuve hablando con Diana estos últimos cinco meses y las cosas andan bien, pero, me preocupa que trabaje mucho, ella nos invita a almorzar cada vez que tiene libre, eso me hace preguntar si come a la horas de vida, tal vez ni desayune y posiblemente se salta la cena, me contó varias cosas de su familia y lo que hizo a lo largo de estos años que estuvimos separadas, mi gran sorpresa fue que no vive en la mansión y tiene casa propia. Mis amigas están felices que las cosas estén bien y que Diana haya regresado para comenzar una nueva vida familiar con nosotras, pero, aun Melody no sabe que ella es su otra madre, estoy lista para decirlo y hoy cuando la recoja de la escuela lo haré.

Como Diana me contó sobre su vida, yo lo hice con la mía, sin omitir algún detalle, no quería que se sintiera mal por lo que pase en los primeros años de vida con Melody, pero es algo que no se puede evitar sentir tristeza y arrepentimiento, le dije que eso quedo en el pasado, quiero concentrarme en el presente y las cosas que tengo. Solo me faltan unos meses y comprare mi casa.

Llegue a la escuela de Melody y la busque con la mirada, ella siempre está debajo de ese árbol hablando con sus amigas, unas niñas pequeñas que son las amigas se acercaron a donde me encuentro, me miraron asustadas y las madres de las niñas me explicaron lo que paso. Sentí mi sangre fría y mi espada también, no podía estar pasándome esto, ¿¡Acaso la escuela no tiene seguridad!? ¡Carajo! Mi celular comenzó a sonar con un número desconocido, lo conteste de inmediato y escuche la voz de un hombre.

Tienes tres horas para conseguir una suma de cincuenta mil dólares, te hemos visto saliendo con Cavendish, así que no será un problema que lo consigas, otra cosa más, deja tu celular antes de llegar.

Iré al banco, ¿Dónde se lo entrego?

Cerca del parque ****** ven sola, te estaremos esperando con tu hija.

Un grito de Melody llamando me hizo correr directo al banco más cercano, el dinero que usare será el que tengo ahorrado, no puedo pedírselo a Diana, aunque sea su hija también, debe estar ocupada trabajando. Al llegar a uno de los bancos más cercanos hice la fila demostrando mi desesperación por ser atendida. Cuando tuve todo el dinero lo metí en mi bolso, mi celular comenzó a sonar nuevamente, lo contesté sin dejar de correr hacia la parada de un transporte.

¿¡Que coños pasos Akko!? ¡Acabo de ver la televisión y aparece que Melody ha sido secuestrada! ¿¡Donde mierda esta Diana!?

A-amanda, me topare con e-ellos y le entregare el dinero, t-tengo que colgar.

Antes de apagar mi celular y arrojarlo a un basurero le envié la ubicación de donde estaré a Hannah, si están pasando la noticia por televisión espero que Diana se dé cuenta.

Diana Cavendish Pov

Me encuentro en mi oficina del hospital arreglando unos papeles, casi termino de acomodarlos todos, la mayoría de los pacientes internados en el hospital sufren de una enfermedad sin cura, pero, seguimos tratando de encontrar una solución para que vivan y no mueran. Recosté mi espalda en la silla y sobe mi frente quitándome los lentes, estoy cansada...Agarre mi celular que esta en mi escritorio y me extrañe al tener muchos mensajes de mis amigas en el grupo.

Las imparables

Amanda

¡Diana tienes que buscar a Akko!

Hannah

Recibí un mensaje de Akko mandándome una dirección, es esta:

*Manda una captura*

¿Qué paso? Estoy trabajando.

Amanda

¿¡Acaso en tu hospital no hay una maldita televisión!?

En mi oficina no.

Barbara

¡Mujer! ¡Tu hija ha sido secuestrada en la propia escuela!

Amanda

¡Levanta tu culo de esa silla y ve a buscarla!

—Da unos toques en la puerta—doctora Cavendish— entra a la habitación— su presencia es requerida en la sala ciento quince.

—Ahora no puedo.

Me levanto de mi asiento y agarre mi cartera con las llaves del auto, guarde mi celular en el bolsillo de mi bata y salí de la oficina, poniendo a un encargado en mi puesto mientras no estoy. Me siento asustada, alterada y molesta, ¿Como es posible que roben a una niña de la misma escuela? Y lo más importante es ¿¡Porque Akko no me aviso!? ¡Melody también es mi hija!

Estoy conduciendo hacia la dirección que dio Hannah por el grupo, llame muchas veces a Akko y me manda al buzón de voz, tiene el celular apagado ¡Mierda! Eso solo hace que mis nervios aumenten, agarre firme el volante cuando comenzó a llover, puse el parabrisas a moverse para ver bien el camino y encendí el aire acondicionado, un semáforo en rojo me detuvo, aproveche para llamar a los policías y mandarlos a la dirección en la que voy.

Saque mi varita estando cerca del lugar, baje la velocidad del auto y a lo lejos visualice a dos hombres, junto con Akko y Melody, luego un fuego debajo de una cubeta comenzó a crecer. Al ellos reconocer mi auto empezaron a correr, eso me hizo acelerar y perseguirlos haciendo que las llantas de mi auto hicieran ruido por los giros bruscos que hice, cuando me encontré cerca, baje del carro y ellos sacaron sus armas comenzando a dispararme, puse un hechizo de protección en mi cuerpo y dije otro hechizo atrapándolos en una barrera circular, hice la barrera les hiciera daño dándole choques de descargas eléctricas que los dejo inconscientes.

Me estoy mojando bajo esta lluvia, se escucharon a lo lejos las sirenas de los policías, quite el hechizo dejando sus cuerpos en la hierba mojada, mire a Akko que esta empapada junto a la niña, le hice una seña con mi mano de que entraran al auto, ellas obedecieron y la policía llego donde me encuentro parada observando los cuerpos de los secuestradores, hicieron preguntas y después felicitaron mi valentía al detenerlos, tuve suerte de tener mi varita en mano, necesito que Akko pida la suya, no me gusta que este desprotegida.

Camine hacia mi auto y antes de subir me quite la bata abriendo el maletero, al estar sentada en la parte del copiloto mire hacia atrás viéndolas, están aún asustadas, Melody aferrada al cuerpo de su madre y ella mirando la ventana acariciando con su mano la cabeza de la niña tratando de calmarla.

— ¿Están bien?

—Si...gracias— dijo Akko con un tono de voz muy apagado.

—Las llevare a mi casa hasta que pase todo este alboroto.

Comencé a conducir directo a mi hogar, me daré un baño y cambiare mi ropa mojada, esta será primera vez que Akko estará en mi casa, es emocionante y me siento aliviada que esto acabara en buenas condiciones, no tengo por qué decir una excusa en mi hospital porque faltare el día de hoy, pero, es necesario para quitar sus preocupaciones.

Atsuko Kagari Pov

Lo quemaron, ellos quemaron todo el esfuerzo que hice para ahorrar ese dinero, hubiera preferido que lo usaran en vez de desperdiciarlo de esa manera, tal vez pensaron que le pertenecía a Diana esa cantidad y lo hicieron por eso, pero...mis ánimos están muy bajos, Melody está bien y me alegro mucho que lo este, pienso...que mañana no tendré para la comida, con ese dinero iba a hacer unas comprar de alimentos y pagar las cuentas de la casa, tampoco tengo pasaje y no soy el tipo de persona que pide dinero, esto se complicó mucho y eso solo me causa más estrés.

La manera en que pudieron llegar a Melody fue porque la convencieron con palabras, ella creyó que esas personas fueron enviadas por Diana para llevarla a casa, pero al tenerla cerca del auto la agarraron y la metieron a la fuerza. Siento que es mi culpa que pasara, siempre soy de llegar diez minutos después que ella sale de la escuela, si hubiera salido más temprano del trabajo no pasaría esto.

—Abre la puerta— Akko.

Mire a Diana y me percate que Melody no se encuentra a mi lado ¿Cuándo se fue?

—Melody acaba de entrar al baño y le di una ropa para que se cambiara, necesitas quitarte esa ropa mojada también, vamos.

¿Tanto tiempo quede pensando? Diana se apartó y salí del auto, luego camine dentro de su casa acompañada, me abrace a mí misma y mire a mi alrededor al encontrarme dentro. Es linda y grande, vi a Melody salir del baño con una camisa grande que tapa completamente su cuerpo, ella se acercó sonriente y tímida, me agache para estar a su altura y acaricie su mejilla; en verdad me alegra mucho que este bien.

Diana me entrego una muda de ropa seca y me dijo que usara el baño de su habitación, ella agarro otra ropa y se fue al otro baño, hay dos baños aquí en esta casa, Melody se fue a ver televisión. Termine de ponerme la ropa que me presto y me queda algo grande, pero por el día de hoy está bien, mire por la ventana y el sol se comienza a ocultar, mi bolso con mis cosas también fue quemadas, tengo que sacar una cédula nueva, más pasaporte...debería dejar de pensar estas cosas que me están causando mucho estrés. Diana entro a su habitación y se sonrojo al verme con su ropa puesta, le agradecí por todo lo que está haciendo, ella se acercó y me abrazo.

—Me alegro que estén bien— sube sus manos por mi espalda— Akko, ¿Cuánto dinero diste para eso? — se separó del abrazo.

—No importa...—hago una sonrisa forzosa— preparare la cena— doy palmadas pequeñas en su pecho y salgo de la habitación.

.

.

.

.

Diana Cavendish Pov

Siento muchos nervios...Ella esta acostada a mi lado y durante estos meses no la he besado, quiero hacerlo, pero, tengo miedo que se moleste, no cometeré un error en esta oportunidad que me dio, es hora de dormir y no logro conciliar el sueño. Escuché un sollozo ahogado de parte de Akko, me di la vuelta y puse mi mano en su hombro llamándole la atención.

— ¿Pasa algo?

—Se da la vuelta quedando boca arriba— l-lo siento— tapa su rostro con sus manos— s-solo es el estrés.

—La abrazo—

—Corresponde el abrazo—

Quedamos unos segundos en silencio, su llanto paro y se aferró más a mi cuerpo, mala idea, mi mente comenzó a imaginar cosas lujuriosas y pervertidas; necesito controlarme.

—Me separo un poco— ¿Estas mejor? —la miro directamente a sus hermosos ojos.

—Si—limpia sus ojos— g-gracias.

Lo único que puedo hacer para ayudarla es que acepte lo que estoy a punto de proponer.

—Akko—acaricio su mejilla— vive conmigo.

—Me mira sorprendida—

—Por favor, puedo darte muchas cosas y quiero ayudarte—agarro su mano y le deposito un beso pequeño, para después acercarme a su labios.

—Diana...

—Dime...

Nuestros rostros están muy cercas, puedo sentir la calentura de mis mejillas aumentar poco a poco, no llevamos tanto tiempo juntas desde que comenzamos, pero, si contamos los años atrás de la relación, es suficiente para mí, tal vez su personalidad, físico y mentalidad hayan cambiado, pero su corazón sigue siendo el mismo. Al rosar nuestros labios cerré mi ojos, probé después de tanto tiempo sus labios nuevamente, los míos se movieron ansiosos y los de ella siguen el ritmo, sus dedos jugaron con los mechones de mi cabello, mis manos sostuvieron firmemente su cintura, lentamente la introduje debajo de su camisa acariciando su abdomen, Akko no me detuvo y siguió besándome, pero, el beso se convirtió a uno tierno, a uno apasionado y necesitado por las dos, su cuerpo se movió separando nuestros labios, ella me acostó y se subió arriba de mí, sentándose en mi entrepierna, sus mejillas están sonrojadas; la necesito más cerca.

Me levante sentándome en la cama teniendo aun su cuerpo encima de mí, la volví a besar con desesperación introduciendo mi lengua, Akko me abrazo y arrugo mi ropa, me separe para dejarla respirar, antes de besar y morder su cuello, la mire, conozco esa mirada...esta deseosa a que siga tocando su cuerpo. Mis dientes mordieron la suave piel de su cuello, después de morderla lamí la parte donde lo hice y baje mi mano derecha hasta su pantalón, metí mi mano sin dejar besar y lamer su cuello, escuche sus suspirar y gemidos entre cortados, mis dedos acariciaron su parte intimida y con suma delicadeza moví su ropa interior, Akko me separo de su cuello y sostuvo mi rostro con sus dos manos, acerco sus labios a mi oreja y la mordió con cuidado.

—Hazlo~

Introduje lentamente dos dedos en su interior, sus gemidos se hicieron más audibles y su respiración se agito más, moví mis dedos despacio amando la suavidad de adentro, ella con mi rostro aun sujeto comenzó a gemir cerca de mi oreja...eso me encanto y me excito.

—Muerde sus labios— ~ummm D-diana~

Subí la velocidad de mis dedos repentinamente y un grito se escapó de esos hermosos labios, ella me miro y aprecie cada gesto de su bello rostro, levante mis piernas y se recostó en ellas, mi mano libre subió dentro de su camisa tocando uno de sus pezones, los apreté y manosee su seno a la vez, Akko con su mano derecha agarro mi brazo que tiene mis dedos abajo en su interior y con su otra mano mordió su dedo índice cerrando también sus ojos, su pecho sube y baja. Sus caderas comenzaron a hacer un movimiento lento hacia delante y hacia atrás, mi cuerpo está caliente y quiero hacerla gritar más, pare de mover mis dedos y saque mi mano, la acosté con cuidado besando sus labios, ella enrollo sus piernas alrededor de mi cintura y sus brazos en mi cuello. Con mi mano comencé a desabrochar mi pantalón y con la otra subí su camisa lentamente.

Esa noche la atesore con todo mi corazón, los gemidos combinados con palabras de amor, diciéndonos muchos te amo y marcando nuestros cuerpos, deseo repetir este momento muchas veces...

.

.

.

.

El sol está comenzando a salir, puse mi mano arriba de mi rostro para acostumbrarme poco a poco a la luz, mi cuerpo está completamente desnudo y encima de mi esta Akko con su cuerpo también desnudo, pero las dos estamos arropadas por las sabanas. Ella se despertó unos tres minutos después, no recuerdo exactamente cuantas veces lo hicimos, pero solo dormimos cinco horas. Akko se levantó restregando sus ojos y tapando su cuerpo con las sabanas, estando aun sentada la volví a acostar, ella soltó un grito pequeño pero luego sonrió al verme.

—Buenos días—deposita un beso en mi mejilla.

—Buenos días—sonrió.

Nos miramos mutuamente a los ojos apreciándolos...Unos golpes pequeños en la puerta interrumpieron el momento preciado.

—En un momento salgo— dijo viendo hacia la puerta.

—Akko.

—Me mira—

—Me sonrojo un poco— quiero volver a hacerlo contigo...

—Se acerca y me da un beso en la comisura de mis labios— lo harás, todas las noches~— susurra cerca de mi oreja— pero ahora—acaricia mi mejilla— tengo que hacer el desayuno y te tienes que presentar a Melody—se separa.

— ¿Que quieres decir? — pregunto confundida.

—Sabes lo que digo— arregla su cabello y se sienta en la cama.

Enserio tengo que decirle que soy... ¿Su madre? Pensé que ella lo haría.

.

.

.

.

Me encuentro en la sala de mi casa mirando como Melody mira la televisión y sigue comiendo un cereal después de desayunar, Akko está a mi lado y agarro el control del televisor bajando el volumen.

—Melody, Diana tiene algo que decirte.

— Me mira y sigue comiendo—

—B-bueno...

¿Como comienzo?...

—Pongo mi mano encima de la de Akko— Tu madre y y-yo-

—Son parejas, lo es— dijo con simpleza.

¿Q-que?

—Me di de cuenta por lo juntas que están y las veces que nos invitó a comer señorita Diana, me caíste bien, así que puedes quedarte con mama—alza su cuchara acercándola a su boca.

—Rasco mi mejilla nerviosa— g-gracias, p-pero, aparte de eso...quiero que sepas...que yo...—suspiro— soy tu otra madre...p-por eso nuestro color de ojos son iguales.

—Deja caer la cuchara en el plato mirándome con asombro—

Espere pacientemente su respuesta, pero, ella se quedó muda, luego miro a Akko y esta afirmo con la cabeza dando más seguridad a mis palabras, luego volvió a verme y dejo en plato en el suelo, se acercó y me miro directamente a los ojos, el brillo que tiene es especial...única de una Cavendish, sus ojos se pusieron muy cristalinos y antes que derramara sus lágrimas me abrazo...

—M-mama...—dijo con su voz quebrada.

Al escuchar esas palabras la abrace con fuerza comenzando a derramar lágrimas de felicidad y alivio, pensé que no me aceptaría después de estos seis años que estuve alejada y aislada de todos...

Melody se separó del abrazo y junto nuestras frentes con sus ojos cerrados mientras sonríe. Miré a Akko de reojo y ella está apreciando el hermoso momento de reconciliación, le sonreí y sostuve su mano... De ahora en adelante, serán Melody Kagari Cavendish y Atsuko Kagari Cavendish.

He recuperado mi felicidad.

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Fin.

Uf uf uf, ¿Qué es esto? ¿Dos One shot en un solo día?

⛄Feliz navidad⛄ Espero la estén pasando muy bien y comiendo hasta explotar.

Ahora vamos con los datos y las ideas eliminadas.

⛄Datos e Ideas⛄

1- La primera idea eliminada es que...En la historia Akko estuviera en una relación con Amanda y que cuando volviera Diana a la vida de Akko hubiera un conflicto de sentimientos, pero, preferí dejar a Akko como mama luchona xd.

2- Esta historia me hispiré en la canción... ♪Y la culpa no era mía ni dond- xd na mentira, fue de la que vieron al comienzo, me imagine algo como un reencuentro, pero no solo de ellas dos y como siempre antes de dormir se me ocurren muchas ideas.

3- Este One shot ya saben que es parte del boom navideño, lo llame así por los fuegos artificiales que explotan cerca de mi casa y no me dejan dormir.

4- La segunda idea eliminada, es que Melody le abriera la puerta a las amigas de Akko, incluyendo a Diana mientras Akko cocinaba, en esta escena iba a ver música donde Melody cantaría para que su madre la siguiera y las dos comenzaran a bailar y cantar a la vez la canción de Lady Gaga- Applause, mientras eran observadas por ya saben quién.

5- No explique mucho la vida que paso Diana mientras no estuvo con Akko, no se me hizo muy relevante para la historia, tampoco relate muy bien el FlashBack donde Diana termina su relación.

6- La idea principal de la historia no se cambió, desde un comienzo este One shot terminaría con un final feliz y emotivo.

7- Y la última idea eliminada es que Akko atacara a los secuestradores con la varita que obtuvo por lo que le dijo Diana sobre los papeles de Luna nova.

8-Esta historia acabo feliz para aliviar un poco su corazón, por el One shot anterior.

🎁Regalo🎁

⛄¡Sorpresa!⛄

Una historia inspirada en seres mágico (obviamente), y la imagen es una comisión que he pedido.

¿Alguna vez deseaste conocer que hay más allá de lo desconocido? 

¿No has tenido al menos un mínimo interés en comprobar esos antiguos rumores de las personas?

¿Quieres conocer ese mundo mágico del que todos hablaban, pero que nadie ha podido ver?

Leyendas son leyendas... Mitos son solamente mitos... Nadie va a creerte si ves algo fuera de la normalidad del mundo donde convives. Las personas de ahora dejaron de creer en cuentos de hadas, pero había algunas... muy ancianas que hablaban del maravilloso lugar que alguna vez... fue visto.

 Algunos ancianos y ancianas especulaban haber sentido a alguien con vida andar por los senderos del bosque, pero... ¿Cómo? Si lo que ven son simples arboles moviendo sus hojas al compás de la suave brisa. 

¿Cómo es posible que alguien pudiera caminar por esos lugares? 

Actualmente nunca nadie ha visto aquel Bosque Mágico que beneficio a muchas personas moribundas. Sin embargo, existió... Y esas... son los que cuentan las historias. Esto es, Bosque Mágico. ¿Quieres conocer sus secretos?

Ahora les dejare imágenes y algunos memes que me gustaron, pásenla bien este día uwu o coman mucho, por mi parte estoy escuchando música en mi cuarto tomando un vino. Bye bye.