Un Tiempo Para Nosotros
Ese día habían tenido juntos una sesión de fotos para Gucci, aunque eran fotos que se publicarían por separado para hacer pensar que se hicieron en momentos diferentes, aunque conociendo a las fans estás encontrarían similitudes y descubrirían que en efecto habían estado juntos en el mismo espacio.
Cada día se hacía más difícil poder despistarlas de lo que realmente ocurría con ellos en la vida real, eran como detectives buscando cosas que unieran sus fotos o vídeos colocándolos en evidencia, pero ya no les daban importancia a esas cosas, habían decidido vivir su relación como mejor les pareciera contando con el apoyo de las personas más cercanas a ellos.
La sesión de fotos fue algo cansada, él termino primero y por eso ya podía retirarse, cosa que hizo para no seguir llamando la atención, a Gulf todavía le quedaba hacer algunas tomas más e ir a otro sitio para grabar un vídeo promocional, se despidió de su girasol y se fue al condominio de este, en donde planearia una sorpresa para relajarlo después de un cansado día de trabajo.
Pero antes de llegar se detuvo a comprar las cosas que necesitaría para poder consentir a su hermoso novio, una vez tuvo consigo todo lo que necesitaba se fue rumbo al condominio en donde pudo ingresar gracias a la copia de su llave.
Allí se ocupó de limpiar y acomodar todo de la manera que necesitaba para cuando su girasol por fin llegará, quería que se sintiera relajado y querido ese día, había sido una semana muy ocupada para ambos y quería compensarlo por el poco tiempo que se habían dedicado.
Tres horas después por fin hizo su entrada Gulf al departamento, dejo las llaves en la mesa de al lado de la puerta y tiro su bolso sin ningún cuidado sobre el sofá de la sala, para luego proceder a quitarse los zapatos y suspirar algo cansado, cuando lo hizo percibió un olor a vainilla en el ambiente y venía del pasillo que daba a su habitación.
Cuando llegó allí no vio a nadie, pero se fijo que la puerta de su baño estaba entreabierta, así que se acercó y el vapor lo golpeó intensamente llenando sus pulmones del delicado aroma de la vainilla nuevamente, allí estaba su hermoso sol sin camisa, sirviendo dos copas de vino, el olor provenía de las velas encendidas alrededor de la estancia.
-Hola mi hermoso girasol- lo saludo Mew acercándose para entregarle su copa -¿Porque tardaste tanto?
-El fotógrafo no estaba conforme con las tomas- se pasó una mano por su cabello.
-Nunca se conforma, menos mal que yo no tuve problemas con él.
-Si, pero tú no estabas distraído pensando en lo que tú novio estaba haciendo mientras trabajabas- le hizo un puchero Gulf, porque la verdad es que él había tenido la culpa de que algunas tomas no hubieran salido de la manera que el hombre quería, por estar pensando en que sorpresa encontraría cuando llegará a casa.
El mayor solo pudo reír ante eso, le encantaba que su adorado novio siempre lo tuviera en sus pensamientos, porque a él le pasaba exactamente lo mismo, el solo tenerlo allí ya era un deleite para sus ojos, Gulf se llevó la copa a sus labios y tomo un sorbo del vino para luego dársela y comenzar a desvestirse.
Con sumo cuidado y de una manera lenta comenzó a desabrocharse cada uno de los botones de su camisa dejándola caer al suelo, las pupilas de Mew ya estaban dilatadas por el espectáculo que estaba recibiendo, y así se lo hizo saber a su novio.
-Me estás matando bebé- se mordió el labio inferior con lujuria.
Mew no soportando la idea de seguir quieto solo observando, dejo las copas sobre mostrador del baño y se arrodilló frente a su hombre, para con una seña pedirle su pie y comenzar a quitarle los calcetines que fueron arrojados a alguna parte del baño, luego levantó su vista y llevo sus manos hacia el botón de los pantalones, los cuales abrió lentamente con una mirada ardiente.
Con varios movimientos bien practicados, logro terminar de quitarselos junto con la ropa interior para arrojarlos a cualquier parte sin ninguna importancia, seguidamente lo ayudo a meterse en la bañera para que sintiera como el agua tibia comenzaba a relajar sus músculos.
-Aqui tienes mi Bii- le tendió nuevamente la copa de vino.
Gulf saco su mano del agua y la recibió con gusto para tomar un nuevo sorbo y colocarla en una mesita que su muy previsor novio había puesto cerca de la bañera, el agua y el olor a vainilla estaban comenzando hacer su efecto en él, se estaba relajando por completo, así que se apoyo en el borde de la misma y cerro los ojos para disfrutar de la situación, solo para escuchar las notas de una canción que su adorado novio había comenzado a reproducir.
-No te duermas, esto apenas está comenzando - le pidió mientras que con su mano lo hacía levantar un poco la cabeza.
Lentamente hizo lo que le pidió, para luego sentir como el agua comenzaba a caer por sus cabellos, las manos de Mew apartaron la mayor cantidad de ella de su cara, todo estaba siendo tan placentero y relajante que solo se podía dejar hacer sin poner ningún tipo de protesta, de pronto un nuevo aroma se había unido a la mezcla la fresa, el olor de su shampoo.
El pelinegro suspiro cuando él frescor del agua y el producto tocaron su cuero cabelludo, sintiendo como las manos de su novio comenzaban a esparcir la espuma por toda su cabeza, adormeciendolo un poco, pero Mew no estaba teniendo nada de eso enjuagó todo el shampoo para luego proceder a enjabonar su cuerpo e invitarlo a salir de la bañera rumbo a la habitación.
En donde con mucha paciencia comenzó a secarlo con la toalla hasta que no hubo ni una gota sobre su piel, después colocó varias toallas sobre la cama y lo ayudo a acostarse boca abajo, era tiempo de la segunda parte de su sorpresa esa noche, saco de la mesita de noche una botella de aceite con olor a vainilla, y se colocó un poco en sus manos para luego comenzar a frotarlas hasta que considero que estaba suficientemente tibio.
De allí comenzó a extenderlo por los hombros de Gulf en forma de caricia, le encantaba tocar esa piel que lo dejaba completamente hipnotizado, siguió pasando sus manos a lo largo de su espalda en suaves movimientos haciendo solo un poco de presión, era un masaje lento y delicado, pero placentero que había ocasionado que el pelinegro comenzará a soltar uno que otro gemido bajo.
Cuando Mew observó su cara pudo notar que esté ya estaba con los ojos cerrados y su respiración era lenta, indicativo de que lo estaba disfrutando, siguió masajeando hasta llegar a la parte media de su espalda y comenzar aplicar más fuerza, Gulf volvió a suspirar y subió las manos desde su costado para apoyarlas debajo de la almohada y darle más acceso.
-Boo un poco más fuerte - pidió en medio de un gemido, las manos de su novio se sentían tan bien sobre su cuerpo, cuando llegó a casa ni siquiera se había imaginado que este hubiera preparado todo eso.
El castaño decidio complacerlo y aplicar más fuerza llegando a la parte baja de la espalda, en donde se esmero en sacar cada uno de los nudos que tenía en esa parte, logrando que se relajara cada vez más, tanto así que permitió que siguiera bajando con sus manos hasta llegar a su trasero acariciándolo suavemente, para ese momento ya estaba completamente excitado, después de todo era un hombre y tenía debajo suyo a su novio completamente desnudo.
Tomo un poco más de aceite y masajeó la zona con ganas, metiendo sus manos entre sus mejillas blancas y comenzar a preparar ese lindo agujero que lo llenaría de placer unos momentos más tarde, metió su dedo y comenzó a prepararlo a conciencia en un mete y saca lento, estirandolo, ese movimiento lo estaba llevando a la locura como a su girasol que ya no escondía sus gemidos, pero aún no era tiempo, dejo su labor y continuo con su masaje a pesar de las protestas de su Bii.
Bajos lentamente por sus piernas, masajeando cada músculo de estás, quitándoles la tensión de haber estado parado todo el día posando para el fotógrafo, llegó hasta sus pies y comenzó a frotarlos con sumo cuidado, haciendo que olvidará que lo había dejado a medias en su casi orgasmo cuando estuvo tocando su entrada.
-Bebé volteate, ahora le toca a tu parte delantera- le pidió Mew mientras lo ayudaba acomodarse.
Este lo hizo lentamente, abriendo los ojos un poco después de haber estado algo adormecido, sin ningún miramiento comenzó nuevamente con los masajes recorriendo ahora su pecho, demorándose un poco en sus tetillas, las cuales pellizco y aprisiono entre sus dedos sacándole placenteros gemidos.
Su cara estaba completamente roja y tenía la boca ligeramente abierta, a Mew le encantaba verlo de esa manera, así que con más bríos siguió sus masajes, hasta que vio como su hermoso novio bajaba una de sus manos listo para tocar su propia intimidad, lo detuvo antes de que alcanzara su objetivo, lo cual hizo que abriera completamente los ojos mirándolo con ojos necesitados.
-Por favor... Ya no aguanto más, te necesito- suplico mirándolo fijamente.
Ante eso el castaño solo sonrió, había logrado lo que quería, así que sin hacerlo esperar se separo de su cuerpo y se quitó las prendas que aún tenía puesta, para luego volver a la cama y tomar la erección de Gulf en sus manos y comenzar a masturbarlo lentamente, su propio miembro estaba completamente erguido y muy necesitado, así que se acaricio unas cuantas veces hasta que ya no pudo más y se acomodo entre sus piernas para ir introduciendose en su interior.
Logrando que el otro soltara más gemidos de placer, el vaivén de caderas comenzó de una manera lenta sintiéndose, el cuerpo de Gulf estaba muy sensible por los masajes, así que las sensaciones se habían amplificado, si a eso le sumabas que Mew seguía acariciando su piel sin ningún tipo de restricción.
-Ah, Mew se siente tan bien- dijo mientras enredaba sus piernas en las caderas del mayor, para que entrara cada vez más profundo en su interior.
Estiró sus brazos y atrajo al castaño en un beso apasionado, en donde se transmitieron todo el amor que sentían el uno por el otro, vivían por momentos como ese, con su trabajo muy pocas veces tenían tiempo para ellos, por lo cual apreciaban y aprovechaban al máximo ese tiempo juntos.
Los besos y caricias se fueron intensificando a medida que los embistes aumentaban el ritmo, ambos estaban completamente perdidos en el placer del momento, sentían que pronto iban a llegar al paraíso y querían prolongar cada vez más el momento, por lo cual Mew salió de su interior y se colocó de espaldas en la cama para hacer que ahora Gulf fuera el que lo montará.
Esté ni corto ni perezoso asumió su nueva posición y comenzó a introducirse el palpitante miembro en su interior, soltando un sonoro gemido, para inmediatamente comenzar a moverse a un placentero ritmo para ambos, por su parte el castaño había tomado el pene de Gulf y había comenzado a masturbarlo al ritmo de sus embestidas, estaban en el cielo.
Volvieron a cambiar de posiciones al cabo de un rato, con Mew dándole un beso ardiente y enterándose cada vez más profundo, hasta que por fin los dos llegaron al tan anhelado orgasmo pronunciando el nombre del otro entre gemidos y jadeos.
Mew cayó encima de su novio pesadamente, este lo recibió con los brazos abiertos, los dos estaban cansados después de ese acto desenfrenado pero con una sonrisa en sus labios, se habían entregado una vez más demostrando la profundidad de sus sentimientos.
-Te amo- dijo de la nada Gulf acurrucandose en el pecho de su novio.
El cual ya se había ocupado de ambos y los había limpiado para meterse debajo de las sábanas y abrazarse.
-Yo también te amo mi girasol- lo beso en sus cabellos, para luego tomar su barbilla y darle un tierno beso en los labios.
Esa noche Mew se quedó en el condominio del menor e hicieron el amor dos veces más, antes de por fin quedarse dormidos con una sonrisa en sus labios, felices de pasar tiempo juntos, ya al día siguiente podían seguir fingiendo que no se veían, por ahora lo único que importaba era estar en los brazos de la persona amada, de la manera que siempre habían querido.
¿Que no darían ellos por ser libres? Ellos querían gritar a los cuatro vientos que se amaban, pero no podían hacerlo, en ese medio en cual se desenvolvían aún no había cabida para su verdad, así que se tendrían que seguir conformando con momentos robados aquí y allá,seguir jugando a las escondidas, haciéndose los desentendidos de un secreto a voces que todos sabían.
Hola a todos ese fue un pequeño escrito que se me ocurrió el día de ayer y que tenía que dejar salir de mi sistema espero que !es haya gustado 🥰 🥰
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