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Go-Toubun No Hanayome


Comenzando de una manera poco común, durante el trayecto hacia un tejado, fue que Fuutarou había tomado su decisión. Después de todo lo que había pasado junto a ella en los dos últimos años, el brote de un sentimiento que considero impropio, se había vuelto puro y bello, haciéndolo comprender que el amor no era algo que se debía negar u ocultar.

Incluso después de todas las adversidades que tuvo que pasar para llegar hasta donde estaba ahora mismo, quieto como una estatua, en frente de una puerta, Fuutarou sabía que su verdadera aventura comenzaría el día de hoy.

Acercando su mano hasta la perilla de la puerta, un enorme nerviosismo comenzó a recorrer todo el cuerpo del pelinegro, provocando si realmente debía hacerlo o no. Y, a pesar de saber lo que tenía que hacer, el miedo no disminuía. Fuutarou aun con eso, sus intenciones no habían disminuido ni un poco. La persona con la que yacía detrás, lo estaba esperando.

Y fue así. Girando de manera torpe la perilla, Fuutarou había logrado abrir la puerta, quedando con una pequeña vista al exterior. Era hermosa incluso en esos momentos.

Viendo como era que los fuegos artificiales de su último festival escolar eran expulsados al amplio cielo, en el cual se formaba un espectáculo memorable, la joven Nakano ******** era testigo de cómo era que esos hermosos fuegos se dispersaban, al igual que había quedado con la guardia baja.

- En estos dos años sí que no has cambiado nada. - pensó el pelinegro abriendo la puerta por completo - Yo tampoco he cambiado. Sigo siendo el mismo arrogante y orgulloso tutor el cual se enamoró de ti. - Acercándose lentamente mientras que la Nakano estaba distraída -

- Entrelazando sus dedos - Si supieras realmente lo que pasó aquel día, ¿Qué cara pondrías al saberlo? Me provoca nostalgia y tristeza.

- Bueno, no es tan relevante si lo piensas más de dos o tres veces. - Tocando el hombro de la chica - Nunca pensé que cambiarías de lugar para no encontrarte. Me la pusiste difícil.

- *******.... - apartándose unos pasos - ¿Por qué? - sorprendida por la repentina presencia del pelinegro -

- Creo que es muy obvia la razón de la del porqué estoy aquí. Ya tome mi decisión, *******.

- Jeje. Creo que cometiste un error, ******. Miku no está aquí para recibirte. Pareciera ser que ella era tu segunda opción. Sí que eres alguien despreciable. - Reponiendo su postura - Esta vez quisiera saber a quién.... - siendo callada por el pelinegro -

- Vi la foto.... *****, logre ver la foto ese día. No me lo puedes ocultar más. Sé quién eres. - poniendo una expresión seria -

- No. No sabes quién soy. Todavía te falta mucho para diferenciarnos. Así que es mejor que te vayas con la que elegiste ahora mismo. Puede que lo malinterprete si sigues perdiendo el tiempo.

- (¿Por qué sigues actuando así? Es molesto a veces. Pero, no está nada mal.) - guardando silencio ante lo que decía la Nakano -

- Te quedaste callado. ¿Ves? A esto me refería con que todavía te falta....

- Es Yotsuba quien está en la foto, ¿verdad? - Mirándola a los ojos - ¿Ahora a quien le falta para identificarlas?

- ¿Cómo es que tu...?

- No fue fácil, para que te miento. Pero una vez que tuve la mente clara y sabía a quién le pertenecía mi corazón - sonrojándose - no había forma de no reconocerla. ¡Queda aclarar que llevo dos años con ustedes! Era obvio que en algún punto las podría reconocer.... Si, exactamente eso.... - exagerando sus movimientos de manera ridícula -

- ¿Y por qué no Yotsuba? Digo... ella es quien te cambio. ¡Ella es la persona con la que tanto anhelabas estar! ¡¿Por qué yo?!

- No es tan fácil.... Pero si pudiera decirlo de alguna manera... fue amor ¿a primera vista? Creo. Sí, creo que fue eso. - sonando poco convincente -

- Estás realmente mal de la cabeza, ¿No te lo han dicho?

- Tampoco es para que me estés hiriendo de esa forma. Puedo sentir como todos mis esfuerzos de dejar de temblar se están desbordando. - captando la atención de la chica -

- (Espera, ¿Qué dijo? ¿**** estaba nervioso? ¡¿Él?!) - poniendo una expresión difícil de describir -

- ¿Qué se supone que diga con esa cara que tienes en este momento, ****? - acercándose peligrosamente al rostro de la quintilliza -

- Alterándose con un leve sonrojo - ¡¿Q-q-q-q-qué...?! ¡No te acerques! - preparando su mano para bofetear al pelinegro -

En una reacción veloz por parte de Fuutarou, este había podido evitar el golpe que de seguro lo habría dejado inconsciente, quedando con el brazo de la chica en el aire y agarrada por este mismo.

- No me lo pongas más difícil que al principio. Solo quiero saber tu respuesta en este instante.

- E-eso debería decirlo yo. No sé porque sigues perdiendo el tiempo conmigo. ¿Acaso eres ese tipo de persona? Ya me imagino los problemas que le darás a mi hermana. - Intentando zafarse del agarre del pelinegro - En cualquier caso, ¿Podrías soltarme ahora mismo? Gritare tan fuerte que todos allá abajo te escucharan.

- No me quiero arriesgar demasiado. - Soltándola - Pero tampoco quiero que escapes de mí. Simplemente paso y llegue hasta donde estoy. No pude evitar encontrarme contigo.

- Sigues con eso. ¿No te aburres repitiendo lo mismo siempre? (Vete por favor). Escúchame solo esta vez y vete de acá (por favor). No quiero provocar más problemas de los que ya tienes, así que apresúrate.

- No seas tan persistente con eso.

- Digo lo mismo.

Viendo que el ambiente no podía llegar a ningún lado, Fuutarou sabía que si seguía como estaba, nada pasaría, y sus esfuerzos por decir esas palabras que tanto quería decir, se esfumarían.

Tomando como vista los fuegos artificiales que todavía seguían saliendo, era increíble ver la forma en la que se lucieron todos los estudiantes en tener una gran variedad. Ya se estaba acercando el final y Fuutarou no pudo evitar mostrar una expresión que radiaba melancolía y felicidad, sorprendiendo a la Nakano.

- Por lo menos, antes de que todo esto termine. Antes de que nos graduemos y separemos caminos, ¿puedo decirte lo que siento? (Fue divertido mientras duró).

- ****, tu.... - viendo el espectáculo de fondo mientras que destacaba la presencia de Fuutarou -

- Sabes, me costó al principio saber que era Yotsuba la chica de la foto y la persona con la que tanto quería estar. Pero cuando pude lograrlo, simplemente no lo pude asimilar. Cuando llegue hasta ese punto, ya me había enamorado de ti, Itsuki. ¿Qué más puedo decir? No lo pude evitar.

- Uesugi-kun. - Bajando la mirada - ¿Cómo puedes llegar tan lejos por alguien? Ese no eres tú. Solo eres un tutor el cual enamoro sin darse cuenta a mis hermanas, además de saber sobre eso, nunca tomaste la responsabilidad cuando se debía. Eres un completo irresponsable, Uesugi-kun.

- ¿Y eso por eso que cambiaste de lugar con Miku?, ¿Querías probarme? Itsuki, la foto... donde aparecemos Raiha, tú, yo. Nunca olvidare ese día, ni los que viene en adelante.

- Eres un estúpido.

- Lo sé.

- Puede que me olvide de ti durante mi carrera.

- Estás en tu derecho.

- Puede que encuentres defectos en mi persona.

- No hay problema.

- Solo seré una carga para ti.

- Ya estoy acostumbrado.

- Acabaré con todo tu dinero en comida.

- No me importa.

- Puedo perder el control de mis emociones.

- Está bien.

- Yo.... Yo.... No quiero romperles el corazón a mis hermanas.

- Yo tampoco. - Acercándose - (Se acerca el final).

- No puedo asimilarlo. Tengo mal carácter. No puedo organizarme por mi cuenta. Me cuesta aprender. Dependeré mucho de ti. Te detendré muchas veces. Diré que estas mal en varias cosas. Presumiré de ti con todos... - derramando una lágrima - Simplemente no quiero esto. No podré soportar ver sus rostros. Tengo miedo.

- Itsuki... - levantando su brazo hasta la cabellera de la peli rosa -

- Uesugi-kun... s-soy muy celosa. No te dejare entablar con ninguna chica.

- Eso es lo de menos.

- Por favor, nunca... nunca te separes de mí.

- Es una promesa.

- Soy una estúpida.

- Oye...tu voz, tu presencia, tu actitud, tu forma de ser, todo tu ser me ha salvado. Y los cálidos sentimientos que me diste... nunca cambiaron desde aquel día, y nunca cambiaran. No importa lo que pase en el futuro, no huiré, si estoy contigo.

- ¿Puedes decírmelo una vez más?

- Sí. Itsuki, tu a mí, me gustas.

- Ni se te ocurra romper nuestra promesa. - derramando lágrimas -

- Tenlo por seguro.

Aunque no había necesidad de decirlo, el último fuego artificial, fue sin duda el mejor de todos. Cerrando una etapa al final, el final de un viaje de dos años, por fin se puede decir que valió la pena la espera. Valio cada maldito segundo :'D

- Creo que puedo decirlo también, Uesugi-kun.

- Te escucho.

- Me gustas.













¡Buenas! Esta vez será corto el mensaje. Para hacerlo simple, ya tengo dos capitulos de Interés Momentáneo, pero el último no me convence, así que tendrán que esperar un poco más.

Lo único que quiero decir respecto a esto, es que después de terminar esos dos capítulos, me sentí vacío, incluso ahora me sigo sintiendo vacío y sin ganas. En otras palabras, esto es más bien una prueba para saber si aun puedo seguir escribiendo o no. Puede que me tome un descanso indefinido por esto, o tal vez no.

Solo era eso cracks

Hasta la próximaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

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