El Merry navegaba en dirección a la Red Line mientras Nami veía el mapa bajo la lluvia hasta que Luffy gritó desde su asiento favorito:

-¡Oh, no! ¡Es terrible, Nami! ¡Se fue la luz! ¿Qué vamos a hacer? Esa era nuestra “luz guia”- 

Nami se rió un poco al escucharlo ya que le encantaba su actitud infantil y le dijo con dulzura:

-Tranquilo, Luffy. Es un faro y ellos se apagan en algunos momentos. Por eso estoy aquí. No te preocupes, que yo se adonde ir.-

Luffy se subió al asiento y la miró con ojos brillosos mientras decía:

-¡Eres genial, Nami! ¡Estoy tan feliz de tenerte cómo mi navegante y cómo mi futura reina!-

-Oh, eres tan lindo cuando dices eso.- le dijo Nami enternecida.

-Oye, Nami. ¿Quieres subir a mi asiento especial? Te lo permitiré a ti porque eres muy especial para mí.- le dijo Luffy palmeando la cabeza del Merry.

-Tal vez después, por ahora debo asegurar la ruta. Debemos hablar con los demás.- dijo Nami con seriedad mientras miraba el mapa.

Luffy la miró confundido y luego la siguió hacia la cocina del Merry donde encontraron a los demás comiendo una sopa para calentarse. Nami puso el mapa en la mesa y dijo con seriedad:

-Cómo sabrán algunos, la entrada al “Grand Line” es una montaña.-

Los viajeros la miraron con tranquilidad ya que sabían esto, pero los nuevos nakamas estaban algo confundidos.

-¿Una montaña?- preguntó Kaya sin entender.

-Lo que dice Nami es cierto. La entrada es la Red Line y existe una abertura por la cual se puede entrar en cada uno de los cuatro mares. Mi familia podía subir por la Red Line usando los barcos especiales del reino y de ese modo era cómo llegábamos a Maria Joa.- explicó Reiju con seriedad.

-Reiju tiene razón. El lugar al que apunta la “Luz guía” es justo en este punto de la Red Line: La Reverse Mountain.- explicó Nami apuntando a la montaña roja del mapa.

-¿Qué quieres decir? ¿Que tenemos que atravesar la montaña?- preguntó Kuina con seriedad.

-No, existen unos canales cómo dijo Reiju-san. Hay cuatro canales correspondientes a los cuatro mares y uno donde se puede salir al Grand Line.- explicó Robin mientras bebía café.

-¿Canales? ¡Debe ser una broma! ¡Aunque haya un canal, no hay manera de que el barco pueda subir una montaña!- dijo Nojiko incrédula.

-Pues la verdad sería más imposible subir una cascada con sólo unos peces gigantes, pero yo he visto que se pudo hacer.- dijo Nami mirando a Luffy con una sonrisa.

-Ese es el mapa que le robaste a ese tal Buggy, ¿verdad? ¿Podemos confiarnos en eso?- preguntó Uta con seriedad.

-¿Vamos a subir una montaña con nuestro barco? ¡Bieeeeeen! ¿Es una montaña misteriosa o algo así?- gritó Luffy emocionado.

-Jejejeje, si. Es una montaña misteriosa que debemos subir para poder llegar al Grand Line.- le dijo Nami acariciando su cabello negro.

-¡Entonces vamos a subirla!- gritó Luffy emocionado.

Los viajeros rieron al verlo con esa actitud infantil nuevamente y de ese modo, se pusieron manos a la obra para llegar a la reverse Mountain. No querían cometer el mismo error de la otra vez al caer en el Calm Belt y estar rodeados de Reyes Marinos por lo que pusieron  rumbo directo al canal del East Blue. Cuando llegaron, Luffy gritó con pura emoción:

-¡Veo la montaña misteriosa!-

-¿Eso es la Red Line?- preguntó Kaya con asombro.

-¡Las nubes cubren la cima!- gritó Nojiko sin poder creerlo.

Pero sintieron cómo la corriente los estaba llevando con fuerza hacia el canal y Nami grito:

-¡Estamos siendo absorbidos! ¡Tomen el timón ahora!-

Sanji y Usopp fueron a maniobrar el timón y el rubio le dijo a Usopp:

-Esta vez no dejes que se rompa.-

-¡Por supuesto que no!- le gritó Usopp enojado.

Entonces, todos vieron cómo llegaban a la entrada al canal, la cual tenía unas especies de umbrales que mostraban el camino.

-¡Esa es la entrada al canal!- gritó Nami con una sonrisa.

-¡El mar de verdad está subiendo la maldita montaña!- gritó Kuina mirando el agua.

-¡Estamos saliendonos! ¡Un poco a la derecha!- gritó Uta con seriedad.

Sanji la escuchó y le hizo una seña a Usopp para que hicieran eso mismo. Juntos, maniobraron el timón hasta que el Merry logró posicionarse justo en el medio de la entrada y fueron subiendo por el canal.

-¡Lo conseguimos!- gritaron todos con pura alegría.

El Merry siguió subiendo por el canal hasta que llegó a lo más alto y luego empezó a bajar por el canal de salida hacia el Grand Line.

-¡Puedo ver el Grand Line!- gritó Luffy en su asiento favorito.

-¡Lo logramos, Luffy! ¡Hemos llegado al Grand Line y podremos avanzar en nuestros sueños!- le dijo Nami sentada detrás de él y dándole un amoroso beso.

Todos podían ver las aguas del Grand Line delante de ellos y los nuevos estaban impresionados por lo que veían.

-¡Este es el mar más grande del mundo!- gritó Kaya sin poder creer estar allí.

Pero escucharon un sonido que venía de la parte delantera y Reiju dijo:

-¿Escucharon eso?- 

-¿A quién le importa? ¡Vamooooos!- gritó Luffy emocionado.

Pero los viajeros sabían muy bien lo que era y Nami grito:

-¡Todos prepárense! ¡Sanji-kun, Zoro, vayan al timón para poder dirigir el barco en el momento preciso!-

-¡Por supuesto!- dijeron ambos dirigiéndose al timón.

-¿Qué pasa, Nami? ¿Por qué debemos prepararnos?- le preguntó Nojiko preocupada.

-¡Oigan! ¡Veo una montaña delante de nosotros!- gritó Kuina encima de la vela.

-¿Una montaña? ¡No debería haber ninguna! Después de las Twin Capes no debería haber nada más que mar, ¿Estás segura de lo que ves, espadachina?- le gritó Reiju enojada.

-¡Sólo digo lo que veo, rosadita!- le gritó Kuina furiosa.

Pero al avanzar más en el canal pudieron ver mejor lo que era y Uta gritó sin poder creerlo:

-¡Eso no es una montaña! ¡Es una ballena gigante!-

Y en efecto, una enorme ballena estaba delante de la salida del canal y rugía hacia el cielo en un lastimoso lamento. Los viajeros la vieron con mucha tristeza al recordar que Brook estaba en Thriller Bark sin poder salir y que deseaba volver a verla. 

-¿Qué hacemos?- gritó Nojiko algo asustada.

-¡Luchemos contra ella!- gritó Kuina sacando sus espadas.

-¡Idiota, no esta en un nivel contra el que podamos luchar!- le grito Reiju enojada.

-¡Pero nos está bloqueando el camino!- gritó Uta con seriedad.

-¡Nami-san! ¿Qué hacemos? ¿La rodeamos o dejamos que nos trague para ver al anciano?- gritó Sanji serio.

Nami veía la ballena con una expresión seria y gritó:

-¡Tenemos que atacarla para que nos trague!-

-¿Estás loca?- le gritaron todas las chicas con dientes de tiburón.

-¡Cómo digas, Nami!- gritó Luffy con una sonrisa.

Al momento siguiente, el cañón de la parte delantera fue disparado hacia la gran ballena y el barco empezó a detenerse antes de chocar con ella.

-¡Listo, Nami! ¡Ya la ataque!- gritó Luffy con una sonrisa.

Pero con el choque, la cabeza del Merry chocó con el cuerpo de la ballena y se rompió hasta terminar en el suelo el barco donde Luffy la vio con los ojos bien abiertos.

-¡El asiento donde nos sentamos yo y Nami! ¡Nuestro asiento favorito!-

Nami también veía la cabeza del Merry con ojos vacíos y luego todos vieron cómo la ballena permanecía en su lugar.

-¡Corramos!- gritó Uta asustada.

-¿Acaso no sintió la bala?- gritó Reiju sin entender.

-¿A quién le importa eso? ¡Sólo sigue remando, estúpida!- le gritó Kuina enojada.

Pero todos vieron cómo Luffy y Nami se pararon delante de la ballena y le gritaron con extrema furia:

-¿Qué le hiciste… A NUESTRO ASIENTO FAVORITO?-

Y dicho eso, Luffy le lanzó un puño a su ojo mientras que Nami le lanzó un rayo a su mandíbula.

-¡IDIOTAS!- les gritaron todos con dientes de tiburón.

En ese momento, el ojo de la ballena los miro finalmente y esto asustó a los nuevos en gran manera

-¡NOS ESTÁ MIRANDO!- gritaron las chicas nuevas con terror.

-¡Ven aquí, cabrona!- le gritó Luffy furioso.

-¡Si, te vamos a hacer sushi de ballena muy pronto!- le gritó Nami a su lado con dientes de tiburón.

-¡Cierren la maldita boca!- gritaron Nojiko y Uta golpeandolos con furia.

Pero entonces, la ballena abrió su gran boca y el agua empezó a entrar provocando que el Merry fuera arrastrado con ella. El barco se mecía con tal fuerza que Luffy fue lanzado por los aires. 

-¡Luffy!- gritaron las chicas al verlo volar.

Pero Nami sacó su bastón y llamó a su fiel compañero:

-¡Zeus! ¡Vamos por Luffy!- 

-¡Si, Nami-san!- grito al nube saliendo del bastón.

De inmediato, Nami se montó encima de ella y salió volando hacia Luffy hasta que logró atraparlo.

-¿Estás bien, Luffy?- le preguntó Nami al sostenerlo con su mano.

-¡Si, estoy bien!- dijo Luffy con una sonrisa.

Cuando la ballena se calmó, ambos se pararon en el lomo de la misma y miraron todo con los ojos abiertos.

-¿Y ahora qué hacemos? Se los ha comido a todos.- dijo Luffy preocupado.

Luego comenzó a golpear la ballena con furia mientras gritaba:

-¡Oye, tu! ¡Escupelos! ¡Devuélvenos a nuestros nakamas!-

Nami suspiró un poco por eso, ya que ella sabía que su esposo era tan terco cuando se trataba de proteger a los suyos. Entonces, vio una escotilla en el lomo de la ballena y empezó a jalar a Luffy mientras decía:

-¡Vamos, Luffy! ¡Esta ballena se va a sumergir y no podemos sobrevivir en el agua del mar! Encontre una escotilla donde podremos entrar y buscar a nuestros nakamas.-

-¡Eso es genial, Nami! ¡Eres increíble! ¡Encontraste la entrada a esta ballena misteriosa tú sola!- dijo Luffy maravillado.

Nami sonrió orgullosa y le dijo:

-¡Siempre puedes confiar en tu futura Reina Pirata!-

Luego, ambos entraron por la escotilla justo cuando la ballena se sumergió en el mar y el lugar quedó en calma.

Mientras tanto, en el interior de la ballena

-¿Qué piensan?- preguntó Uta mirando la situación con el ceño fruncido.

-¿Que qué pensamos?- preguntó Kuina con una expresión seria.

-No importa lo que piense. Después de todo, yo planeaba ser tragada por la ballena.- dijo Reiju con calma.

-¿Es un sueño?- se preguntó Kaya asustada.

-Si, probablemente es un sueño.- dijo Nojiko con normalidad.

Todos miraban ante ellos una pequeña isla y una pequeña casa en medio del estómago de la ballena con una gota de sudor.

-Entonces, parece que hemos sido tragados por la ballena y hemos muerto por los jugos gástricos hasta terminar en el cielo.- dijo Robin con una expresión oscura.

-¡No digas cosas tan escalofriantes!- le gritaron casi todos.

Pero en ese momento, un gigantesco calamar apareció ante ellos y las chicas lo miraron con terror.

-¡Es un calamar gigante!- gritaron Uta y Kaya con terror.

Reiju y Kuina estaban listas para pelear cuando unos arpones provenientes de la casa atravesaron al calamar sorprendiendo a las chicas mientras que los viajeros permanecían en calma. 

-Parece que hay alguien allí.- dijo Kuina con seriedad.

-Menos mal que es una persona.- dijo Reiju con una sonrisa sádica.

Las chicas en el suelo, miraban todo con lágrimas y Robin les preguntó a sus nakamas:

-A propósito… ¿dónde están Luffy y Nami?-

-Supongo que están en los canales de la ballena.- dijo Usopp.

-A lo mejor buscando a cierta princesa que debemos ayudar.- dijo Zoro con una sonrisa.

-Yo sólo espero que todo salga bien.- dijo Sanji con un suspiro.

Entonces, vieron cómo el calamar era jalado por las sogas de los arpones hasta terminar al lado de la casa y todos vieron que salía una persona de allí.

Mientras tanto, en los canales de la ballena

Luffy y Nami miraban el pasillo con asombro y Luffy dijo:

-¿Qué es esto? ¿Por que hay una puerta en esta ballena… y pasadizos?-

“Increíble. Entonces así te ves por dentro, ¿verdad, Laboon-kun?” pensó Nami con una sonrisa.

Luego sintió algo más adelante y sonrió.

“Bien. Allá vamos, Vivi.” pensó ella con alegría.

De vuelta con los demás

La persona en la pequeña isla salió de la casa y los miro a todos con una mirada penetrante mientras decía:

-Un barco…-

-¡Hay que dispararle! ¡Simplemente volemos la isla con el cañón!- grito Uta mirando la isla.

-¡Esperen! ¡Alguien está saliendo!- dijo Sanji con calma.

Todos vieron a la persona que salía de la casa y Kaya grito:

-¡Es una flor!-

-¿Una flor?- se preguntó Robin confundida.

Todos pudieron ver a un hombre de edad avanzada con vestimenta playera y con una cabeza que parecía una flor. 

-¡No! ¿Una persona?- se preguntó Reiju al verlo.

-¿Qué le pasa a ese tipo?- preguntó Nojiko curiosa.

El anciano empezó a jalar las sogas de los arpones lentamente para encargarse del calamar y las chicas vieron esto con una gota de sudor.

-¡Ese viejo ha matado al calamar de un sólo disparo!- dijo Uta sorprendida.

-¿Estaba pescando o nos salvó?- se preguntó Reiju con calma.

Pero el anciano los miró a todos con ojos penetrantes, lo que causó pánico en las chicas y permanecieron así por varios minutos. El anciano los seguía mirando de esa manera sin decir nada, hasta que…

-¡Di algo, idiota!- le grito Reiju furiosa.

El anciano se les quedó mirando con la mirada fija y penetrante hasta que Nojiko le gritó:

-¡Te lo advertimos! ¡Lucharemos contra ti si es lo que quieres! ¡Somos muy fuertes y podemos contra alguien cómo tu!-

-Paren… o alguien morirá.- dijo el anciano por fin.

-¿Y ese quien será?- le preguntó Reiju con una sonrisa sádica.

-Yo.- dijo el anciano con total normalidad.

-¿Tu?- le grito Reiju ahora si totalmente cabreada.

-No te enfades tanto con él. ¡Oye, viejo! ¡Dinos quién eres y dónde estamos!- gritó Kuina mirando al anciano con una sonrisa.

-El maldito cabeza de mierda está jugando conmigo.- dijo Reiju con ira.

El anciano la miró con ojos penetrantes y dijo:

-¿No es de malos modales no presentarse a alguien antes de hacerle preguntas?-

-Uhmm… si, supongo. Lo siento. Pues yo me llamo…- dijo Kuina disculpándose.

-Me llamo Crocus. Mantengo el faro de las Twin Capes. Tengo 71 años, Geminis, grupo sanguíneo AB.- comenzó a decir el anciano ahora llamado Crocus con voz muy tranquila.

-¿Lo puedo matar ya?- gritó Kuina ya cabreada.

-Hey, tranquilízate.- le dijo Reiju con una gota de sudor.

Entonces, Crocus los miro con seriedad y les dijo:

-¿Quieren saber lo que es esto? Primero, interceptan mi búsqueda viril. Entonces empiezan a gritarme impertinentemente. ¿Quién creen que los han tragado? ¿Un ratón?-

-¿Así que realmente nos tragó la ballena?- preguntó Kaya con miedo.

-¿Qué nos va a pasar? No quiero ser digerida.- grito Uta asustada.

-La salida está allí.- dijo Crocus señalando una puerta en medio del agua.

-¿Puedes salir? ¿Por qué hay una salida en el estómago de una ballena?- gritaron casi todos al ver la puerta.

-¿Por qué hay una puerta flotando en el cielo?- se preguntó Nojiko confundida.

-No. Miren atentamente. El cielo, las nubes… es un dibujo.- dijo Robin con una sonrisa.

-¡El interior de la ballena está pintado por completo!- grito Uta asombrada.

-Me gusta divertirme.- dijo el anciano leyendo tranquilamente.

-¿Qué carajos estás haciendo aquí?- le gritó Uta furiosa.

-Da igual. Déjenlo en paz. La salida está allí, así que vámonos.- les dijo Zoro con seriedad.

Pero sintieron cómo todo se movía agitadamente y las chicas se asustaron demasiado por esto.

-¿Qué pasa?- grito Kaya aterrada.

-Así que… ya empieza.- dijo Crocus con calma.

Entonces el agua empezó a moverse agitadamente y Reiju miro la isla donde estaba Crocus con los ojos abiertos.

-¡Miren eso! ¡No es una isla! ¡Sólo es un barco de hierro!- gritó ella señalandolo.

-Así que si estamos demasiado tiempo en este jugo gástrico… ¡nuestro barco se disolverá! ¡Pobre Merry!- gritó Kaya aterrada.

-¡Hey! ¿Qué es lo que está pasando? ¡Explicalo!- gritó Nojiko furiosa.

Crocus los miro con seriedad y les dijo:

-¡Esta ballena ha empezado a golpearse la cabeza con la Red Line!-

-¿Qué?- gritaron Kuina y Reiju sin poder creerlo.

-Entonces, esa ballena tiene cicatrices en su frente por los golpes. ¡Pero qué ballena tan tonta!- dijo Robin con normalidad.

-Robin, por favor se un poco más amable con la pobre ballena.- le dijo Usopp con una gota de sudor.

-¿Y por qué se golpea la cabeza con la Red Line?- preguntó Kaya preocupada.

-Eso no es lo importante. Lo importante es salir de aquí una vez que Nami-san y Luffy aparezcan con los fisgones en este lugar.- dijo Sanji con seriedad.

Las chicas lo miraron con confusión y sintieron cómo la ballena seguía golpeandose la cabeza con la enorme pared roja.

Mientras tanto, en los pasillos de la ballena

Nami y Luffy estaban rebotando por todo el pasillo mientras la ballena seguía con su sufrimiento.

-¿Pero qué… ¿Qué está pasando?- gritaba Luffy mientras seguía rebotando.

-¡La ballena esta golpeandose la cabeza con la pared del Red Line, Luffy! ¡Por eso estamos asi!- le gritó Nami agarrándose a él.

-¡Pues qué ballena más tonta!- gritó Luffy enojado.

-¡Tiene una razón para hacerlo! ¡Pero ahora debemos buscar a dos personas que están cerca de aquí!- le dijo Nami sintiendo que se acercaban a ellos.

Cerca de allí

Un hombre con una corona y una mujer de cabello azul atado en una cola de caballo estaban ante la puerta que daba al estómago de la ballena con unas pistolas grandes.

-Muy bien. Nuestra infiltración ha sido perfecta hasta este punto, ¿no lo crees, Miss Wednesday? Al otro lado de esta puerta está el estómago… ¡y seguramente también el viejo! ¡Tenemos que acabar con el! ¡Todo esto es por el bien de la ballena!- dijo el tipo de la corona con seriedad.

Sin embargo, la chica estaba mirando al pasillo con una mirada extraña y no le respondió a su compañero.

-¡Miss Wednesday! ¿Me estás escuchando?- le gritó el tipo enojado.

-Oh, perdón. Sólo estaba analizando el área. Tienes razón, Mr 9. Esta ballena es cómo la dulce miel de nuestra ciudad.- dijo Miss Wednesday con una dulce sonrisa.

De vuelta con Luffy y Nami

Ambos cayeron en otro pasillo de la ballena y vieron ante ellos una especie de río que se dirigía a otro lugar.

-¿Y ahora qué es esto? ¿El mar? ¿Un río?- preguntó Luffy confundido.

-Parece un canal.- dijo Nami mirando el agua.

Pero pudo sentir más cerca la presencia de ambos fisgones y sonrió para luego jalar a Luffy hacia esa dirección.

-¡Vamos, Luffy! ¡Puedo sentir a dos personas aquí adentro y nos pueden ayudar a salir de aquí!- le dijo ella con mucha alegría.

-¡De acuerdo, Nami! ¡Yo te sigo!- le dijo Luffy con emoción.

Y así, ambos corrieron a través de la ballena hasta que divisaron a los dos personas en la puerta y Nami le dijo a Luffy:

-¡Vamos a sacarlos por la puerta de un empujón! ¿Que dices, Luffy?-

Luffy sólo le sonrió y ambos aumentaron su velocidad justo cuando los dos fisgones notaron su presencia.

-¿Pero quiénes son ellos? ¿Y por qué corren hacia nosotros sin planes de detenerse?- gritó Mr 9 asustado.

“¿No me digan que planean hacer eso? ¡Luego los mató!” pensó Miss Wednesday con los ojos abiertos.

Y de ese modo, ambos Mugiwaras chocaron contra los dos y salieron al estómago de la ballena ante la vista atónita de todos.

-¡Oh, no! ¡Abajo hay un mar de jugos gástricos!- gritó Mr 9 aterrado.

Miss Wednesday veía a Nami con una mirada furiosa mientras la misma sonreía y se mantenía en el aire gracias a Zeus que salió para salvarla. Luffy estaba saltando en el aire mientras su tripulación lo miraba con una gota de sudor.

-¿Luffy?- se pregunto Uta confundida.

-¿Qué pasa, chicos? ¿Están todos a salvo? Por cierto, ¡Nami, ayúdame!- gritó Luffy alterado.

Nami fue hacia él para tomarlo de la mano mientras que Mr 9 caía al agua y Miss Wednesday caía en el Merry a salvo. Luego, Crocus le administró un sedante a la ballena y la misma se quedó quieta en el mar. Luego, Zoro subió a Mr 9 mientras que Nami y Luffy volvían al Merry para ver a los dos fisgones de la ballena… más en concreto a la chica. Los viajeros la veían con una sonrisa mientras recordaban todo lo que vivieron con ella, cuando Crocus apareció y gritó:

-¡Mientras siga vivo, no pondrán un dedo encima de Laboon!-

-¿Quién es ese?- preguntó Luffy confundido.

Pero Mr 9 se levantó y tomando su arma, le apuntó a Crocus mientras gritaba:

-Hehehehe, pero si estamos dentro de la ballena… ¡podemos hacerle un agujero en el…-

Pero fue golpeado por su compañera en la cabeza y cayó inconsciente en el suelo del Merry bajo la mirada atónita de la mayoría.

-Vaya, fue muy tediosa la espera… pero valió la pena. Tener que volver a infiltrarme en Baroque Works sólo para poder llegar a ustedes no fue fácil. Pero por lo menos ahora puedo defenderme mejor y al fin estoy con mis amigos.- dijo Miss Wednesday mientras les sonreía a todos los Mugiwaras.

Nami, Zoro, Usopp, Sanji y Robin parpadearon por unos momentos, procesando lo que estaba pasando y luego gritaron con gran fuerza:

-¿QUEEEEEEEEEEEEEEEEEEE?-

-Jejejeje, he vuelto, chicos.- dijo la conocida por ellos cómo Viví, la princesa de Arabasta.

Continuara