Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

42 - It's my son!

Las horas transcurrieron con tranquilidad en esa habitación de hospital, todos sus conocidos entraban y salían de la habitación, y absolutamente todos quedaban totalmente encantados al ver a sus gemelos, pues como no, si eran unos bebés preciosos, claramente sus padres no pudieron evitar mostrarse completamente orgullosos por la llegada de sus nietos, no sabía porque, pero Onodera tenía el presentimiento de que sus padres harían una gran y extravagante fiesta en honor del nacimiento de los gemelos, soltó un suspiro, tendría que huir de la ciudad ese día.

Restando a sus padres y a su novio, los primeros en entrar fueron Isaka-san y Aikawa la cual al verlo se le lanzó encima para estrujarlo con fuerza y jalarle las mejillas, hablándole como si de un niño pequeño se tratase, el castaño soltó una ligera risa mientras trataba de quitarse a la pelirroja de encima, una vez que logró su cometido, la editora fue directo hacia la cuna donde los niños dormían profundamente, notando que sus pequeñas manitas estaban entrelazadas, una escena bastante tierna para los tres, rápidamente ella se autoproclamó como la madrina de Yamato y Hisoka, porque, según las propias palabras de la editora, tenía todo el derecho de serlo, ya que ella se había encargado de cuidarlo cuando Yokozawa no estaba presente, aunque tenía razón, negó con la cabeza con una sonrisa en los labios y le dijo que sería madrina de uno junto Isaka, los cuales aceptaron gustosos, el director de la editorial llegó junto a su secretario el cual traía consigo un par de cajas de tamaño considerable, las dejó en el suelo, le dio una simple felicitación antes de llevarse a Isaka arrastrando; de ahí le siguieron los editores de Shojo, nuevamente Kisa reclamó ser el padrino, luego le mostró su anillo de compromiso, comenzando a brincar de felicidad por toda la habitación, una vez que se calmó le pidió ser su padrino de bodas, feliz por su amigo de cabello negro, Ritsu aceptó con gusto.

Así sus visitas se fueron yendo hasta que finalmente se había quedado él solo con los niños, ya los había alimentado y por lo tanto ya estaban profundamente dormidos a un lado suyo, no podía dejar de observarlos, eran hermosos, demasiado para sus simples ojos de mortal, todavía no habían abierto los ojos, pero estaba segurísimo que sus ojos solo los harían ver mucho más hermosos, tan distraído estaba el castaño viendo fijamente a sus gemelos que no notó la presencia de una segunda persona en su habitación.

—Veo que por fin nacieron tus hijos.

Onodera algo alarmado levantó su cabeza, buscando a dueño de esa voz, al hacerlo se encontró al mismísimo Misaki, el cual sonreía levemente, su mirada se le notaba cansado y ojerosa, no se veía tan delgado como la última vez, pero parecía estar en una situación no tan favorable, lo examinó de arriba hacia abajo, deteniendo su mirada exactamente en su vientre, el cual era el castaño menor cubría con su abrigo con cierto recelo.

—¿Qué haces aquí? —interrogó el mayor de los castaños—

—Vine a mi consulta mensual, pero había demasiado bullicio en la sala de espera, por lo que decidí investigar. —dijo Misaki con tranquilidad, Onodera solo asintió lentamente con la cabeza, su vista volvió hacia el menor e hizo cálculos mentales, sin temor a equivocarse, el de cabello oscuro ya tendría 4 meses—

—¿Ya sabes el sexo de tu bebé?

—Es un niño. —afirmó sonriendo con ternura mientras acariciaba su vientre— Su nombre será Hikaru...

—Entiendo... dime, ¿has pensado en lo que te dije?

—Así es y ya tengo una respuesta.

—¿Y cuál es?

—Acepto hacer las paces contigo, Onodera, sin embargo no aceptaré ningún tipo de ayuda económica, ya te lo había dicho anteriormente y sigo firme a eso. Yo mismo me metí en este problema y yo mismo saldré de este, seremos yo y mi bebé contra todos.

Mi bebé y yo... —corrigió en voz baja soltando un suspiro, tenía la leve esperanza de que Misaki cambiaría de opinión, que aceptaría su ayuda para salir de ese lugar donde estaba viviendo, pero no fue así, al menos ya no había rencores entre ellos y eso era un avance por sí solo— De acuerdo Misaki, no pienso obligarte a aceptar mi ayuda, pero recuerda que siempre contarás conmigo para todo, ¿está bien?

La respuesta a su pregunta fue afirmada por un simple movimiento de cabeza por parte del menor.

—Lo sé, pero es hora de marcharme, muchas felicidades por tus gemelos son hermosos... —se dio la media vuelta con toda la intención de irse, pero algo de hizo detenerse—

—¡Espera! —exclamó Ritsu—

—¿Sí? —atinó a preguntar Misaki en voz baja—

—Eh... —el editor jugó con sus dedos, no sabía hacer la pregunta sin ofender a su acompañante— Dime, ¿por lo menos puedo saber quién es el padre de tu hijo?

Takahashi se quedó mudo ante esa interrogante, tuvo que morderse la lengua para no soltar alguna maldición hacia el otro castaño por haberle recordado ese horrible suceso, pero muy en su interior, él sabía muy bien que el menos culpable era el reciente padre, ¿o madre? De familia, él le había hecho una simple pregunta, fruto de su curiosidad, negó con la cabeza cruzando de brazos mientras que el sus labios se dibujaba una sonrisa amarga y dolorosa, intentando mostrarse fuerte y no soltar lágrimas frente a quien una vez fue su "rival".

—Créeme, esto es un secreto que me llevaré a la tumba...

Volvió a darse la media vuelta con la intención de irse, su intención no era ser grosero con Ritsu, pero para él, aquel tema estaba prohibido, su Hikaru no tenía padre, solo lo tenía a él y era lo que importaba, se abrazó a sí mismo y antes de irse dijo lo siguiente.

—Tal vez algún día te lo diga... —salió de esa habitación y caminó hacia la salida del hospital, tenía la cabeza lleno de distintos pensamiento y debido a eso su brazo golpeó a otro sin querer... —Lo siento —murmuró Misaki sin voltear a ver a la otra persona que no era nadie más que Usagi-san—

—No se preocupe... —el escritor paró de hablar al reconocer la voz del otro— ¡¿Misaki?!

El anteriormente mencionado palideció al escuchar la voz del escritor y en ese momento solo pasó una cosa por su mente, huir de ahí, como alma que lleva el diablo, el castaño aceleró el paso tratando de escapar del hombre de cabellos plateados, pero para su desgracia, la suerte no estaba de su lado el día de hoy, no supo en qué momento Akihiko ya lo tenía sujetado del brazo y lo hizo voltear hacia donde él estaba. El agarre demasiado fuerte por lo que le fue inevitable soltar un quejido de dolor.

—¡S-Suéltame!

—¿Qué hacías en la habitación de Onodera? —la voz de Usami era severa, no se tomó la molestia de aflojar el agarre, al contrario, apretó su brazo con mucha más fuerza, Misaki sentía que se lo iba a romper—

—Tranquilo Akihiko, no lo envenené si eso es lo que te preocupa... —siseó el de ojos verdes tratando de no verse intimidado para luego soltarse un manotazo con su mano libre y así soltar su brazo, lo sobó, le dolía, pero de nueva cuenta, el escritor lo volvió a agarrar, en esta ocasión de las muñecas—

—¿Ah no? —dijo apretando más las muñecas del chico— Honestamente, Onodera ni siquiera debería dirigirte la palabra, no después de todo el daño que hiciste...

—En primer lugar, eso lo sé, sin embargo él me perdonó, en segundo, ni siquiera deberías hablarme, así que no qué demonios estás esperando para irte mucho a la mierda.

Después de que Misaki pronunciará esas palabras, la mano del escritor golpeó su mejilla izquierda con fuerza, eso hizo que su cuerpo se volteara un poco, pero no tardó mucho tiempo en volver a incorporarse, posó su mano sobre su mejilla lastimada mientras veía al de ojos lilas con un aire desafiante.

—No te atrevas a faltarme el respeto, infeliz. —dijo el de cabello plateado acercándose al castaño lo acorraló contra una pared con sus ojos lilas impregnados en una intensa furia, furia la cual desapareció al percatarse de algo bastante peculiar, bajó su mirada hacía el vientre de Misaki y notó que estaba abultado, un momento— ¿Estás...?

—¿Pasado de peso? Sí, no necesito que me lo digas. —el castaño se mordió el labio, esperaba que el escritor no se diera cuenta, nuevamente sintió como sus muñecas eran apretadas por el de cabello lila—

—Por favor, es obvio que ese vientre no es de unos kilos de más, ahora responde ¿estás embarazado?

—¡Claro que no! ¡Ahora suéltame! —el de ojos verdes trató de quitárselo de encima, pero la diferencia de fuerza era bastante—

—Por supuesto que lo estás, eso se nota a leguas... —el de ojos lilas colocó una mano sobre el vientre del chico de ojos verdes, abrió los ojos con fascinación al sentir como había movimiento— ¿Cuándo pensabas decírmelo, eh?

Takahashi miró fijamente al escritor, como desafiándolo con la mirada, intentando ocultar que el miedo estaba sintiendo, necesitaba tranquilizarle, el estrés no era nada bueno para su Hikaru, pero para que eso ocurriera necesitaba que Usami dejará de joderlo, pero aquello parecía algo completamente imposible, suspiró tomando el aire suficiente para contestar.

—No tengo porqué darte detalles sobre mi vida privada...

—Se trata de mi hijo, ¡por un demonio!

Eso, definitivamente, fue lo que volcó la paciencia de Misaki.

—¿ hijo? —el castaño sonrió de lado— No me hagas reír, ¡¡mi bebé no es nada tuyo!!

—¡No me quieras ver la cara de idiota Misaki! —Akihiko lo sacudió por los hombros— No creas que soy estúpido, fui la última persona con la que estuviste, ¡es mi hijo! Fin.

—¡Ja! Te vi la cara de idiota por un año entero, ¿crees que no puedo volver a hacerlo? ¡Hikaru no es tu hijo!

Y de nueva cuenta, otra bofetada de igual o a lo mejor de mucha más fuerza golpeó su mejilla, en esta ocasión dejándolo tendido en el suelo, sus ojos fueron cubiertos por sus castaños cabellos mientras sobaba su mejilla, una mirada llena de enojo fue la que le dirigió a su expareja y este le correspondió de la misma manera.

—Escúchame bien Takahashi, no permitiré que mi hijo se quedé con un cualquiera como tú, así que disfruta de ese bebé el tiempo que te queda, porque en cuanto nazca te lo voy a quitar.

Esto no podía estarle pasando a él, ¿ahora qué carajos le había picado al conejo idiota? Le quería quitar a su bebé y eso era algo que jamás iba a permitir, pero muy dentro de él sabía que no podía a hacer absolutamente nada, una discreta lágrima cayó por su mejilla dando pasos a muchas más, permaneció así por algunos minutos hasta que por fin decidió levantarse del suelo con la intención de decirle algunas cuantas verdades al de pelo plata, pero él ya no estaba ahí, no importaba como lo haría, pero él mantendría a su bebé a su lado, a cualquier precio, suspiró pesadamente sobando sus sienes, sentía impotencia y al mismo tiempo estaba muy enojado con Usagi, pero al menos ya no lo tenía cerca, eso era una ganancia y lo único que tenía que hacer ahora era regresar a su cara, comenzó a caminar, maldiciendo a diestra y siniestra a Usami Akihiko mientras desquitaba su frustración en una piedra que se encontró en el camino

—Hijo de puta, estúpido escritor de quinta, infeliz, bastardo, ¿quién se cree para amenazarme de esa manera? Él no me quitará a mi hijo, primero muerto antes de que eso suceda... —luego de esas palabras el castaño pateó la piedra con una gran fuerza lanzándola lejos de su alcance, no vio como esta cayó sobre la cabeza de un hombre—

—¡Ouch! —dijo al sentir como su cabeza era golpeada por algo, luego vio la piedra en el suelo— ¿Quién la pateó? —con la mirada buscó al responsable y ahí lo vio, un chico lindo de estatura mediana, algunos centímetros más bajo que él, cabello castaño y ojos verde que a simple vista parecía algo molesto, lo más probable era que su enojo fuera resultado que la acalorada discusión que había tenido anterior mente con el tipo de cabello plateado, fue inevitable para él no sonrojarse, nunca en su vida había visto a semejante belleza, se acercaría a él, aunque corría el riesgo de ser mandado por un tubo, se acercó a él— Disculpa...

—Malnacido, asquerosa rata inmunda y rastrera, el rey de las escorias... —Y si, Misaki seguía insultando a de ojos lilas—

Un nuevo intento, dijo el desconocido.

—Oye... —posó una de sus manos en el hombro del castaño y ahora si llamó su atención—

—¡¿Qué quieres?! —gritó el de ojos verdes antes de voltear a verlo—

"Oh, mierda..." Fue el único pensamiento que llegó a la mente de Misaki, no quería ser agresivo con ese hombre, pero su molestia hacia Usagi seguía aún latente, lo observó mejor, era alto, un tono de piel claro, unos ojos grises bastante atractivos y hermosos, su cabello era negro con algunos reflejos en color gris, sin quererlo, se sonrojó, tragó saliva y hablo.

—Y-Yo... lo siento, no quería... —estaba realmente apenado—

—Tranquilo, está bien —el desconocido le sonrió con amabilidad y su voz hizo que su mal humor se fuera, suavizó un poco sus gestos— ¿Te pasa algo?

Misaki volvió a abrazarse a sí mismo, como una forma de protegerse.

—No... No es nada, estoy bien. —Misaki esperaba que sus palabras fueran creíbles—

—¿Seguro? —interrogó el más alto con una ceja levantada— No lo parece, ¿qué te parece si vamos a tomar algo y así me cuentas lo que ocurre?

—¡¿Eh?! No quisiera molestarlo...

—Para nada, anda vamos, yo invito —volvió a sonreír, vio a Misaki suspirar y darle una respuesta afirmativa con la cabeza— Genial

Ambos chicos comenzaron a caminar hasta una cafetería que fuera cercana a ese lugar en completo silencio, ninguno de los dos sabía cómo iniciar la conversación, pero el primero en romper el silencio claramente fue Misaki.

—Misaki Takahashi, ¿y tú?

Él detuvo su andar antes de contestar la pregunta formulada por el castaño.

—Ryota Fujimori, un gusto.

*****

Onodera e Ijuuin estaban hablando cuando vieron que Akihiko entró a la habitación, el mangaka con un ligero rubor en las mejillas le saludó pero este no hizo más que ignorar olímpicamente a los otros dos, tomó su celular antes de volver a salir de esta habitación.

—¿Qué demonios le ocurre? —interrogó Kyo en voz baja, pero fue lo suficientemente alta para que el castaño lo escuchara—

—Me pregunto si se cruzó con Misaki... —dijo el editor colocando una mano en su barbilla—

—¿Eh? ¿Misaki vino a visitarse? —Interrogó el de cabello oscuro bastante sorprendido, hacia un buen tiempo que no sabía nada de él, ambos habían arreglado las cosas quedando en buenos términos pero hacía ya un buen rato que lo no veía—

—Así es, vino a ver a los bebés

—Ya veo, ¿pero solo por eso se va a poner de esa forma? No lo entiendo... aunque, teniendo en cuenta lo que ocurrió, creo que tiene algo de sentido que esté de mal humor

—No creo que haya sido solo por eso, ¿y si se enteró del bebé que Misaki espera?

—¡¿Qué?! ¡¿Misaki está esperando un bebé?! —la voz de Ijuuin se pudo escuchar hasta la otra habitación—

—¡Cállate! ¿O es qué quieres que también América lo sepa? —regañó Ritsu mirándolo severamente, luego de esos, los gemelos comenzaron a llorar— Oh, gracias Ijuuin, ya los despertaste...

El mangaka se acercó a los gemelos y los cargó para dárselos al castaño, el cual rápidamente comenzó a arrullar a los niños que a los pocos minutos volvieron a dormirse, el mangaka veía la escena realmente fascinado y enternecido, no podía negar que ver al de ojos verdes con ambos bebés en sus brazos era algo que conmovía su corazón, en ese momento se preguntó cómo se sentiría tener a un bebé en el vientre o como se sentiría cargar uno... oh no, él no podía estar pensando en eso, sacudió su cabeza queriendo sacar esas absurdas ideas de su cabeza, eso jamás le pasaría con él, y si le llegará a pasar sería más que obvio que el peliplateado lo mandaría muy lejos, debía quitarse esa estúpida idea de la cabeza, Usami-san jamás iba a corresponder a sus sentimientos, pero por más que lo intentará, no podía sacárselo de su cabeza.

—Con respecto a tu pregunta... —comenzó a hablar el editor— Si, Misaki tiene 4 meses, me sorprende que no lo haya sabido antes.

—Pues, me acabo de enterar, ¿y quién es el padre? —preguntó—

—No me lo quiso decir, pero estaba algo nervioso cuando le pregunté, pero, y si el padre del bebé es Usami-san...

—Se lo va a querer quitar... —completó Ijuuin con los ojos abiertos, luego ambos chicos se miraron fijamente por varios minutos— No lo podemos permitir, sabemos que Misaki no está en buenas circunstancias y esa es una ventaja para Usami-sensei, además, estoy más que seguro que mandará a alguien para que siga a Misaki.

—¿Cómo puedes saber eso? Estás especulando demasiado rápido —dijo el castaño suspirando—

—Solamente lo sé, no me preguntes como. —dicho esto tomó sus cosas para dejar la habitación— Vendré mañana, adiós. —comenzó a caminar hacia la salida pero antes de llegar vio al de ojos amatistas hablando por teléfono con alguien, este estaba de espaldas, por lo que se ocultó para no ser visto—

—Así es... —escuchó la voz del escritor, la cual sonaba algo bajita— Necesito que vigiles a Takahashi Misaki, el bebé que espera es mío y necesito pruebas para quitárselo, si, de acuerdo, entonces te veo en una hora en el bar que dijiste para darte más detalles, gracias.

"Entonces mis teorías no eran tan descabelladas después de todo". Una vez que el escritor se subió a su auto y arrancó, Ijuuin imitó la acción, necesitaba verse lo menos sospechoso posible, no permitiría que Akihiko se saliera con la suya, no esta vez.

Continuará...

¡Hola! Si, por fin hay un nuevo capítulo, es su regalo de navidad adelantado 7u7

Como pudieron leer, hubo desmadre y del bueno xd Misaki conoció a un men wapo porque le tiró un piedra, lo voy a intentar xD

Y si, Usagi es pendejo y aun no pela a nuestra querido Ijuuin, pueden tirarle hate al igual que a Bakano aunque no haya hecho acto de presencia jaja, y además porque le quiere quitar el bebé a Misaki, todos sabemos que la bendición es de Bakano menos Bakahiko (?)

Well, creo que ya se los he dicho, pero muchas gracias a todos los que leen, comentan y votan, los amo mucho con todo mi kokoro ♥♥♥♥ es por eso que este capítulo es su regalo de navidad, un pequeño presente de mí hacia ustedes mis amados beibiz, mis lectores que me siguen en este fic todo loco y de una pareja poca convencional, si leen esto, les quiero desear que tengan una feliz navidad y año nuevo a lado de sus familiares, mascotas o amigos, lleno de amor, salud y mucho yaoi 7u7 okey no xD

Les dejo esta bella imagen de mis amados Kagamine ♥♥ y hablando de eso, apenas nacieron los gemelos y ya quiero hacer algo parecido a Servant of Evil *le pegan*(?)

Ahora si, sin más que decir, me despido

Nos leemos

¡Bye!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro