Perdon x la demora.🤧

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ꕥ

Las tenues luces del amanecer se colaban a través del enorme ventanal. Jungkook comenzaba a recobrar el sentido. Y como siempre, todas las mañanas tenía la necesidad de tomar un vaso con agua. Así que con total pereza trató de removerse pero, sintió un peso extra sobre su pecho.

Bastante asustado, abrió sus ojos con velocidad y de inmediato, una sedosa cabellera rubia impacto su rostro.

Mierda...

¿Que hiciste lobo impertinente?

"¿Yo?, no hice nada. Además, tu también lo querías así que..."

¿Estas loco? Yo no quería nada de ésto. Fue ese omega el que me sedujo.

"No te hagas el desentendido que bien que lo disfrutaste."

Jungkook golpeteo su lengua contra su mejilla interna. Su lobo tenía razón pero se negaba a aceptarlo.

Con sumo cuidado, removió el cuerpo del rubio hasta acomodarlo a su costado, luego se levantó buscando cada una de sus prendas. Se vistió velozmente y salió disparado de la pieza sin siquiera dejarle alguna nota al omega. Total, ¿solo fue sexo casual, no?

Jungkook se autoconvencía que era así. De ninguna manera podía aceptar que ese loco fuera su omega y mucho menos su destinado y pareja.

Con los nervios de punta, Jeon cuidó que nadie notará su presencia al bajar a la recepción. Lo cuál fue un rotundo fracaso porque se topó con la misma mujer del día anterior.

— Tú, que-

Jungkook ignoró a la fémina y corrió rumbo a la salida, antes de que lo acusará. Al llegar a la acera, se apresuró a montar su motocicleta para posteriormente, huir del lugar.

"D-dejaste a nuestro omega sólo"

El alfa ignoró por completo la voz de su lobo y centró su mirada al camino.

•••

Mientras tanto, Taehyung se removió incómodo cuando un fuerte dolor atacó su parte baja. Por mero instinto, buscó el cuerpo de su acompañante sin tener éxito. Se reincorporó con velocidad y echó un vistazo a su alrededor.

¿De verdad se fue?

"S-se fue... Nuestro alfa también nos abandonó."

Un horrible sentimiento atacó el pecho del omega. El aroma a tristeza comenzó a expandirse por toda la pieza y los recuerdos golpeaban una y otra vez su mente.

"— ¡Entiende Taehyung! No podemos llevarte con nosotros. Tienes que quedarte aquí...

— ¡NO! Mamá, papá... Por favor, quiero ir con ustedes.

Los señores Kim se fueron sin importarle las súplicas de su pequeño hijo.

— ¡Mamá! ¡Papá! No se vayan sin mí..."

— ¡NOOO!

El desgarrador grito del omega, resonó por todo el Departamento. Namjoon, quien había llegado hace unos minutos, corrió en busca de su Jefe-amigo.

Cuando llegó a la habitación, encontró al rubio echo bolita en el suelo. Tenía los ojos bañados en lágrimas y en sus manos sostenía una vieja fotografía.

— Tae...— el moreno se puso a la altura del mencionado y lo envolvió en un reconfortante abrazo.— Llora. Llora todo lo que quieras, estoy aquí.

Bastaron esas palabras para que el omega se derrumbara por completo.

— Nam... Y-yo. Ese A-alfa...

— No es necesario.

— Lo és. Necesito contarte ésto que siento...

— Entonces hazlo. Sabes que puedes confiar en mí.

— E-ese alfa. Creo que... Creo que es mí destinado.

— ¿Crees?

— Mmh... Cuando lo ví por primera vez, sentí algo inexplicable. Un sentimiento de felicidad que nunca antes experimenté con nadie.

El alfa no comentó nada al respecto y simplemente se dedicó a observar el rostro ya más tranquilo del rubio. Éste lo notó y conectó miradas. El mayor fue cerrando la poca distancia entre los dos y justo cuando sus labios estaban por tocarse, Taehyung se alejó de forma abrupta.

— No Hyung. Ya hablamos muchas veces de ésto.— el moreno soltó un corto suspiro.

— Tae, tú me gustas.

— Te gusta mi hermano, no yo.

— Bien sabes que no es así.

— Nam, deja de engañarte. Seokjin te gusta y mucho.

— Pero es un alfa.

— ¿Y eso qué?

— Está mal visto.

Taehyung negó disconforme y se alejó por completo del mayor.

— Sal y prepara el auto, saldremos a buscar a Jungkook.

— ¿Jungkook?

— Mi alfa... Mi futuro alfa.— sonrió ligeramente.

Namjoon hizó una mueca de disgusto y asintió sin ganas. Luego se retiró a regañadientes de la habitación.

Taehyung se dedicó a asearse y ponerse lindo. Necesitaba estar impecable, porque demostraría quien es el omega de ese guapo alfa azabache.

En cuanto Jungkook llegó a su casa, su madre lo atacó con miles de preguntas.

Preguntas que por supuesto no sabía como responder.

—Mamá, Ya te dije que me quedé a dormir en casa de Yoongi.

— Deja de mentir Jeon Jungkook. Ayer hablé a su casa y él mismo me dijo que no sabía nada de tí.

— ¿Encerio te atreviste? ¡Mamá, ya estoy grande!

— Pues no parece. Jungkook dime la verdad, ¿estuviste con un omega?— el azabache vió a su madre con sorpresa.

— ¡¿Como supiste?!

— ¡Caíste!— la señora Jeon sonrió triunfal y Jungkook cubrió su boca con rapidez— Ahora, cuéntame todo sobre mi futuro yerno.

— ¿Como sabes que es un chico?

— Soy tu madre, Jungkook. Te conozco a la perfección.

— Como sea, no hay nada que contar.— dijo con desinterés.

— ¿Estas seguro?

Jungkook asintió y se encaminó de mala gana a su habitación. Necesitaba un buen baño y de paso, pensar en que excusa daría en su trabajo luego de que nunca regresó.

(...)

"Si les digo que me robaron la moto, ¿me creerán?

No, no. Tiene que ser algo muy convincente...

¡Ya sé! Les diré que me dió diarrea.

"Vaya estupidez, humano tonto"

Jungkook se encontraba en un debate mental y su lobo impertinente de pronto salió a molestar.

— Tu cállate, pulgoso. Todo ésto es culpa tuya.

"¿Mi culpa?"

— Pues tu cediste ante ese omega loco.

"En primera, el loco eres tú. Y en segunda, deja de referirte a mi omega de esa forma."

Jeon rodó los ojos con fastidio y continuó enjuagando su cuerpo. Sin embargo, de un momento a otro, las calientes y eróticas imágenes del rubio inundaron su mente...

El Omega bajó su cuerpo mientras lo penetraba con rudeza. Sus gloriosos gemidos le daban el toque perfecto a la situación.

"— Mmgh~ sí, justo ahí... "

— Mierda...

Sin darse cuenta, Jungkook había cerrado sus ojos y tomado en sus manos su enorme erección. Tiraba de arriba a abajo con fuerza, mientras recordaba lo rico que se jodió al rubio de culo grande.

— S-sí~

Bastaron unos segundos para que el espeso líquido blanquecino saliera disparado, mezclándose con el agua que caía de la regadera. El fuerte aroma a excitación se podía percibir en toda la casa. Odiaba ser un jodido hormonal. Se regañó mentalmente y el sentimiento de culpa comenzaba a atormentarlo, sin embargo optó por dejar de lado porque tenía que apresurarse o llegaría tarde a su trabajo.

Salió disparado de la ducha y tomó lo primero que encontró en su clóset. Se vistió como si su vida dependiera de ello y corrió a la salida. Antes de salir, se despidió de su madre con un beso en su mejilla y entonces partió hacía la pizzería.

(...)

Jungkook llegó a su destino faltando apenas dos minutos para su horario de entrada.

— Justo a tiempo.— celebró.

En cuanto pusó un pie dentro del local, su Jefe lo vió con cara de pocos amigos. Sonrió con falsedad y se acercó con miedo a éste.

— A mi oficina, ahora.— fue lo único que dijo. Jeon elevó plegarias a Dios y siguió a su jefe.

Una vez dentro, el señor Byun se sentó trás el escritorio y Jeon simplemente se quedó parado a un costado con la mirada gacha.

— Soy todo oídos, Jeon.

— S-señor yo... Tuve un percance y volví a casa.

— ¿Que clase de percance?

"Coger con un omega".

— Es algo personal.

— Perfecto, entonces tu despido también es personal.

— Pero señor yo-

— Estás despedido, Jeon. Toma tus cosas y vete. Tu liquidación se te será depositado hoy por la noche.

— Ésto es injusto. Jamás he faltado a mi trabajo, señor Byun.

— Lo sé, pero la verdad es que ya no te quiero más aquí, le das un mal aspecto al lugar con esos tatuajes en tu brazo, pareces maleante.

— Váyase a la mierda.— gruñó con molestia. Luego salió dando un fuerte portazo, dejando al viejo con las palabras en la boca.

Jungkook necesitaba el trabajo, sí, pero no dejaría que lo insultaran de esa manera y más por sus tatuajes que no tenían nada de malo.

Para terminar de rematar, sus odiosos ex-compañeros alfas, quienes le tenían envidia, lo comenzaron a molestar con malos comentarios.

— Ya era hora de que te largaras, idiota.

— Jódete, Wang.

— Oh~ la princesita quiere llorar.— otro de los tres alfas, se burló. Jungkook los ignoró y salió del local.

— Por ese carácter de mierda, es que no tienes un omega, Jeon.— Jihoon el alfa que más odiaba al azabache, lo siguió hasta afuera para burlarse de el.

— Eso crees, idiota...— murmuró con una media sonrisa.

Antes de que Jihoon contraatacará, un lujoso Lamborghini se aparcó frente al local. De él salió un precioso omega rubio que dejó deslumbrado a todos, incluído a Jungkook.

El omega se acercó a pasos decididos y en cuanto estuvo frente a los alfas, sonrió en dirección a Jungkook.

— Hola de nuevo, alfa.

Sorprendentemente, Jungkook sonrió en grande en cuanto el bonito omega pronunció esas palabras. Ver la cara de decepción del idiota de Jihoon, alimentó su ego.

— Hey bonito, estaba por ir a buscarte...— se acercó por completo al rubio y rodeó su cintura con posesividad.

Taehyung lo miró extrañado, pensó que Jungkook lo ignoraria.

— ¿Nos vamos?— cuestionó en un tono meloso y Kim bastante consternado asintió.

Cuanto subían al auto, Jungkook vió como sus ex-compañeros lo veían perplejos. Sonrió burlón y les mostró el dedo del medio antes de cerrar por completo la puerta.

— Larguemonos de aquí.— demandó con seriedad.

— Donde quedó el: "Hey bonito, estaba por ir a buscarte"— Taehyung imitó la voz de Jungkook.

— Eso lo dijo mi pulgoso, no yo.— se excusó bastante avergonzado.

"A mí no me eches la culpa, idiota."

Kim sonrió triunfal al lograr su cometido, poner tímido al alfa... Amaba causar ese efecto en él.

Sin más que decir, el auto emprendió camino rumbo a la dirección que el omega líder ordenó.

•••

Luego de veinte minutos de viaje, por fin llegaron a su destino, la playa. Haeundae era el lugar perfecto para hablar con tranquilidad y sin interrupciones.

— ¿Puedo saber el motivo de tu huída?

— ¿Te parece poco haberme violado?— cuestionó sarcástico.

— ¿Violarte? ¿Yo?

— No te hagas, se que me pusiste afrodisíaco en la bebida. No soy tan estúpido como crees.

— Sí sabías... Entonces, ¿por qué te la tomaste?— Jungkook se dió tremenda cachetada mental al darse cuenta de que se había echado de cabeza el mismo. Sumamente avergonzado, desvío su mirada. Kim rió divertido.

— Perdón por dejarte solo. Soy muy torpe para esas cosas del amor y no se como actuar.

— Soy yo quien debe disculparse. Te drogué para poder acostarme contigo y eso está mal.

— Lo hiciste sí, pero la verdad es que yo también lo quería.

Taehyung se sorprendió al escuchar tal confesión. Pensaba que todo había sido por los efectos del afrodisíaco.

— Que te parece iniciar de nuevo, tú y yo...

— Me parece un trato justo.— Kim sonrió sincero y por primera vez, Jungkook también lo hizó.

— Bien... Hola bonito, soy Jeon Jungkook un humilde alfa, ex repartidor de pizzas.— tendió su mano en forma de saludo y el rubio imitó la acción.

— Mucho gusto, Jungkook. Soy Kim Taehyung, líder de la mafia asiática.— dijo sin rodeos.

— ¡¿Que?!

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༆

Les invito a leer mis demás obras, les prometo que se divertiran mucho😁

By- AG🍄