Eran cerca de las 5:30am. El Rey Min apenas regresaba a su habitación.

Se sentía agotado, quería dormir un poco, pero desde que todo cambio en su matrimonio y no tiene a su esposo a su lado, nada es igual, no puede conciliar el sueño, duerme alrededor de dos o tres horas como máximo al día. Comienzan a mojarse un poco más algunas ojeras marcadas bajo sus ojos.

Su piel se ve más pálida y descuidada, su apetito disminuyó mucho, solo toma café para mantenerse despierto y activo en su trabajo, de lo contrario evita comer. Así que su aspecto físico y mental es un total desastre últimamente.

Entro y cerro la puerta de su habitación. Con la intención de tomar un baño y luego dormir al menos una hora, bostezo perezoso, pero pronto sintió un poco el aroma de su esposo en su habitación.

Enfocó bien su vista y prendió una lámpara de noche, se sorprendió mucho al ver a Jimin en su cama, parecía estar dormido y le daba la espalda. Frunció levemente el ceño, creyendo que veía mal o que quizá el cansancio le hacía imaginar cosas.

Pero pronto, Jimin se removió, ya que su lobo sintió el aroma de su Alfa, el lobo del Omega lo hizo despertar. Así es como Jimin abrió sus ojitos, perezoso, se volteó y pronto, enfoco sus ojitos con los del Alfa quien parecía aún estar estupefacto.

- Vienes manchado de sangre - Susurro Jimin, con voz un poco adormilada - Deberías ir a tomar un baño y luego descansar. Ya está por amanecer.

Yoongi no dijo nada. Quería creer en verdad, que quizá Jimin ahora lo perdonaría, quizá querría arreglar las cosas o quizá, simplemente quiere tomar su lugar nuevamente en su cama, pues tenía entendido que dormía un poco apretado junto a Tae. Pero tampoco sabía si esa era una razón, ya que habían muchas otras habitaciones. Sin embargo, Yoongi creyó que estaba pensando mucho.

- ¿Regresaste para quedarte aquí? - Fue lo primero que pregunto Yoongi.

- Es también mi habitación, ¿No puedo estar aquí? ¿Debo irme? - Cuestionó el Omega, mientras tomaba asiento en la cama.

- No, no es eso - Aclaro el Alfa - Estoy bien con que estés aquí. Solo que... Creí que odiabas sentir mi aroma o sentir mi presencia junto a ti.

- Lo hago - Respondió el Omega - Pero eres mi esposo a fin de cuentas y debo dejar los caprichos de lado.

Min entonces asintió y entendió. Jimin no estaba ahí para perdonarlo, quizá solo quería ser su karma personificado y hacerlo sufrir de culpa, por haberlo tratado tan mal. Quizá solo quiere que sienta dolor al no poder tocarlo o besarlo al tenerlo tan cerca.

- Está bien. Cómo mejor te sientas - El Alfa entro al baño y se encerró.

Jimin por su parte, bajo la mirada a su anillo de matrimonio y suspiro tembloroso. Debía ser fuerte y tratar de hacer sufrir un poco más a su esposo. Solo un poco más, no quiere verse tan fácil, pues todo lo que Yoongi le a hecho desde que está ahí, no debe ser perdonado de un día para otro. Debe hacerle entender, que él, es su esposo no su enemigo.

El Rey Omega se recostó nuevamente y cerro sus ojitos. Aunque ya no pudo dormir, sabiendo que Yoongi estaba dentro, aún así intento descansar un poco.

Algunos minutos después. Yoongi salió del baño, se fue a cambiar y en lugar de colocarse alguna pijama para descansar, se puso ropa normal de un día. Cuando salió del tocador, Jimin lo vió y se extraño ante ello, sobre todo cuando el Alfa tomo algunos papeles de la mesita de desayuno y comenzó a dirigirse a la salida.

- Pensé que dormirias un poco - Hablo Jimin, deteniendo los pasos del Alfa.

- No te quiero incomodar. Iré a mi despacho y pediré otra habitación para mí. Está es toda tuya - El Alfa se retiró, dejando con un agudo dolor en el pecho del Omega.

¿Acaso Min no quiere arreglar las cosas con él?

Jimin se molestó ante ello, sintió sus ojitos cristalinos. Se sintió un idiota por creer que Min le rogaría otra vez por su perdón, pero no fue así, prefirió irse y buscar otra habitación para no estar junto a él.

Ante ello. Jimin se levantó, tomo un baño él solo, pues quería bajar su rabia por la acción de Min, luego se metió al tocador y se cambió, se arregló lo mejor que pudo. Cuando eran más de las 6:30am Jimin ya estaba levantado, salió de la habitación y bajo, con toda la intención de ir en busca de su esposo.

Cuando iba bajando, vió a su esposo, en la entrada del Castillo, conversar con una sirvienta. Frunció el ceño cuando vio que aquella mujer se acercaba demasiado a su esposo, sobre todo cuando está misma poso sus manos sobre el pecho de Yoongi. Aquello hizo hervir la sangre del Omega, pero al instante, sintió su corazón doler.

¿Tan pronto su esposo busco un reemplazo? ¿Pensaba serle infiel por qué su matrimonio parecer haber fallado desde el inicio?

Jimin no pudo ante las miles de preguntas que llegaban a su mente, con el dolor, la amargura y la rabia. Así que tomo aire, escondió sus tontas lágrimas y bajo.

Pasó por el lado de aquel par, solo viendo de reojo como Yoongi quitaba las manos de la mujer de su pecho y la alejaba, pero hasta que él pasaba por el lado de ellos. Jimin sintió más dolor en su pecho ante ello, pero decidió ignorarlo y seguir su camino.

Afuera era un poco frío por la mañana, pero no importo, solo salió al jardín delantero, se abrazo a si mismo y se dirigió a su quiosco. Se quedaría ahí todo el tiempo que sea necesario, no importaba pero no quiere sentir más dolor por un amor no correspondido y sobre todo por su matrimonio fallido.

Parece que quizá Yoongi no siente remordimiento por todo lo que le hizo, por todo el dolor que le causó. Así que él, no debe permitirse llorar o sufrir.

- No dejes entrar a nadie. Ni siquiera a mi esposo, Tae o Jungkook, ¿Entendido? No quiero a nadie - Ordenó a Chanyeol, quien se había acercado a su Rey.

- Entendido majestad.

El Rey Omega entro al quiosco, preparó un poco de té para él, gracias a la pequeña cocina y todo lo necesario dentro de su amado quiosco. Era como una mini casita equipada con todo lo que desea, así que podía estar hasta tres días ahí, sin necesidad de salir.

Se preparó su té y luego tomo asiento en una silla mecedora. Tomo un sorbo a su té, deseando que aquel horrible nudo en su garganta desaparezca, pero fue imposible.

Involuntariamente, Jimin comenzó a derramar lágrimas silenciosas, luego llevo sus manitas sobre su boquita y comenzó a cubrir su llanto todo lo posible. Cerraba sus ojitos y lloraba con dolor, impotencia y rabia.

Él ama demasiado a Yoongi y aunque jamás se lo a dicho como desea, lo ama y le duele mucho la actitud de este hacía él. Si bien es cierto, él actúa así por qué quiere darle una lección, parece que quién más sufre es él, pues Yoongi parece que no le importará.

Pasó largos minutos desahogando su dolor. Alrededor de una hora y media después, cuando se había calmado y solo sus ojitos estaba rojizos y tomaba otro té, escuchó como Tae llegaba y le exigía a Chanyeol entrar, pero el guardia no lo dejo.

Claro que Chanyeol sabía que su Rey había estado llorando. Pudo escuchar un poco, así que quería que se desahogué y se tranquilice, no dejaría que nadie entre si él lo que quiere es estar solo.

La mañana paso y Jimin no salió. El guardia solo le preguntaba a su Rey al menos una vez cada hora, si se encontraba bien y Jimin respondía que si, solo así Chanyeol se tranqulizaba.

Durante la tarde, Jimin comió alguna fruta, luego se recostó en el sofá y durmió casi toda la tarde, con sus ojitos rojizos y llorosos, pues cuando quería lloraba y desahogaba su dolor, razón por la que ahora intentaba descansar, no pensar, no sentir, no sufrir.

Cerca de las 8:00pm. Jimin despertó, noto que ahora era de noche, se levantó, se cubrió un poco con la frazada que tenía puesta y suspiro. Luego la doblo y la dejo en su lugar, decidió que era momento de salir del quiosco e irse a su habitación, volver a dormir y dejar de sentir, quizá era lo mejor.

Salió del quiosco y Chanyeol aún estaba ahí. Este acompaño a su Rey hasta el Castillo, cuando Jimin entro, presenció aquella escena otra vez y aunque sintió rabia, dolor y tristeza al ver cómo la misma chica intentaba acercarse a su esposo. Decidió ignorar y solo irse.

Jimin comenzó a subir, ignorando a su esposo quien volteó a verlo y alejo a la insistente mujer de golpe, Jimin solo por un segundo pensó que Min iría tras él, pero no fue así. El Alfa se fue a su despacho y Jimin a su habitación.

El Omega entro y quiso desboronarse por milésima vez en el día, pero no lo hizo, en su lugar, tomo un baño, se colocó una pijama y luego se recostó en la cama, cerro sus ojos y se trago su dolor. Intentado dormir.

Quizá tres horas mas tarde, Jimin fue consciente de como la puerta de la habitación se abría, una lámpara era encendida y algunos pasos dentro.

Pronto, Jimin sintió como la cama al otro lado se hundía y se mantuvo quieto algunos minutos, luego como la persona se recostaba y suspiraba.

- Pensé que buscarias otro lugar donde dormir - Dijo Jimin, con voz áspera, lejana y firme.

- Lo consideré. Pero también es mi habitación, aunque odies tenerme a tu lado - Respondió Min.

- Como sea - Respondió el Omega.

- Dime Jimin. ¿Pasaremos así todo el tiempo? - Pregunto Yoongi.

El Alfa también estaba dolido, su pecho era un mar de sentimientos, se oprimia ante la evidente lejanía de su esposo. Como este demostraba desprecio, odio y asco hacía él.

Para mala suerte del líder Alfa. Durante la mañana y la noche, su esposo lo vió con aquella asquerosa mujer que fue su concubina solo en dos ocasiones y ella cree que puede volver a serlo. Le dió dos advertencias aquel día, pues lo tomo desprevenido y justo, Jimin alcanzó a verlo. La sentenció con una tercera, pero quizá pensó mal, debió haber acabado con ella antes.

Aún así, no fue tras Jimin, al notar como este se iba sin prestarle atención, como lo mataba con la mirada y como demostraba su desprecio hacia él. Yoongi creyó que era mejor no molestarlo y hacerlo sentir peor. Si es así como Jimin decide llevar su matrimonio, lo aceptará, al menos podrá sentirlo cerca, durante las noches, aún si no puede tocarlo.

- Toda la vida de ser necesario - Respondió el Omega.

- ¿Tanto me odias? ¿Tanto asco y repudio sientes por mi? - Pregunto Min, sintiendo un nudo en su garganta poco conocido para él.

- Con toda mi alma - Respondió el Rey Omega, con firmeza, pero quejándose por dentro.

- Entiendo - Afirmó Min - ¿Quieres que me vaya?

- Me harías el favor más grande de mi vida - Jimin solo respondía con rencor y dolor.

- Bien - Asintió Min y se levantó de la cama - Quizá... Te conceda tu deseó.

- ¿Qué deseo? - Pregunto el Omega, pero sin voltearse.

- Pensaré en romper una ley - Susurro Min, haciendo puño sus manos - Te daré el divorcio Jimin. Te concederé... Irte a otro Reino, menos Busan, te daré una propiedad para ti y podrás gozar de muchos beneficios, pero alejados, como tú quieres. Podrás ser libre, quizá... Mañana mismo.

Dichas sus palabras, Min se levantó y nuevamente se fue. Jimin no pudo más, se desmoronó, se levantó y se fue al balcón, sentía que se ahogaba, que moriría del dolor más horrible en su corazón, que este explotaría en mil pedazos y su vida se destruiría por completo. Su lobo aulló de dolor y Jimin se dejó caer de rodillas.

Aún cuando tapo su boca con sus manos para no hacer mucho ruido al llorar, se podía escuchar su lejano dolor. Cómo lloraba al saber que perdió en su matrimonio, que jamas funcionó y que el poco cariño que se profesaron fue quizá una farsa.

El Omega pensó, que si Yoongi se había rendido tan fácilmente, es por qué jamás lo amo o jamás sintió nada por él. Así es como se destruía más y sufría el doble.

Se acercó al borde de la terraza y dirigió su mirada hacía abajo. Se sintió mareado, dolido, aterrado, conmocionado. Se sostuvo fuertemente de la orilla y luego retrocedió lentamente, hasta dejarse caer en uno de los asientos.

Lloro hasta que su corazón no pudo más. Se quedó ahí hasta altas horas de la noche, con su corazón y vida destrozada.

Cuando la mañana llegó. Jimin hizo lo mismo que el día anterior, se arregló antes de que Taehyung llegara, se fue a su quiosco y se encerró en este. Se mantenía solo de té y una que otra fruta. Más nada.

Cuando las 4:00pm llegaron. Jimin estaba sentado en su sofá, con la frazada alrededor de su cuerpo y hecho una bolita de dolor en aquel lugar. Veía un punto fijo y solo dejaba que una lágrima silenciosa rodará por su mejilla, hasta que está se secará por si sola.

El Rey Omega fue consciente de como la puerta del quiosco era abierta y el aroma fuerte e intenso del Rey Alfa invadir el lugar. Jimin no se movió, no reaccionó, pero por dentro fue un mar de dolor desgarrador otra vez.

- ¿Por qué no has estado comiendo estos dos días? - Fue lo primero que pregunto el Alfa - No es bueno para tu salud.

- Como si eso importará... - Murmuró el Omega, sin darle la mirada al Alfa.

Pues los ojitos de Jimin se veían de un gris opaco, tristes, lejanos, desolados, sin brillo y sin vida.

- Importa Jimin. Deja de hacer eso, sal de aquí y ve a comer... - Intento el Alfa.

- ¿Cuando estarán los papales del divorcio? - Pregunto Jimin, ignorando el pedido anterior del Alfa.

- ¿Tanto te urge? - Yoongi apretó sus manos en puños, sintiendo impotencia, rabia y dolor.

- No sabes cuánto... - Mintió el Omega - Cuando sea libre de tí.... Seré feliz.

Aquellas palabras tocaron un punto delicado en el Alfa. Solo aquellas últimas palabras hicieron a su lobo aullar de un dolor indescriptible y entonces Min se replanteo.

¿Para eso se casó con Jimin? ¿Para hacerlo sufrir y hacer que lo odie? ¿Para eso lo hizo su esposo? Solo para que entre ellos se maten con palabras que duelen más que un golpe o una herida física.

- Entonces sal de aquí y vamos a firmar justo ahora - Sin más el Alfa dió media vuelta, listo para salir de aquel lugar.

- Yoongi... - Jimin detuvo los pasos de su esposo - Alguna vez... ¿Tú sentiste un poco de amor hacía mí?

El Rey Alfa guardó silencio ante la repentina pregunta del Omega. Entonces Jimin tomo aquél silencio como la respuesta que necesitaba, para poder levantarse y firmar aquellos papeles.

Así es como Jimin se levantó de su lugar y con el corazón en su mano, comenzó a dirigirse a la salida, una que inevitablemente tendría que pasar muy cerca del Alfa, pues este estaba cerca de la salida.

Sin embargo, Jimin no contó, con que el Alfa lo tomará de la cintura y lo apresara a su pecho. El Omega se sorprendió cuando el Alfa se apoderó de sus labios y comenzó a darle un profundo, sincero y cariñoso beso, uno que en cuestión de segundos, Jimin comenzó a corresponder.

La pareja de esposos se besaban con una pasión, devoción, cariño y sobre todo amor. Que en ese beso, ellos supieron la verdad de sus corazones, sus deseos reales, su sentir, sus anhelos. La necesidad tan grande que tienen de poder sentirse así de cerca.

Al separarse del beso con lentitud, pero quedando demasiado cerca. El Omega con ojos cerrados y Min admirandolo, sus respiraciones irregulares y sus corazones desbordantes.

Jimin comenzó a llorar. El Omega recostó su frente sobre el pecho de su esposo y lloro, saco con dolor todo lo que había mantenido oculto en su pecho, en su corazón y sus verdaderos sentimientos.

Min solo pudo abrazarlo tan fuerte y cálido. Que su único deseo era transmitirle amor, cariño y protección.

- Perdóname mi amor - Susurro Min - Soy el idiota más grande del mundo Minnie. Pero de lo único que jamás dudaré, es de mi verdadero amor hacia tí - El Alfa elevó el rostro sonrojado y lloroso de su esposo, le sonrió suavemente y dejo un beso en la punta de su nariz - Te amo Jimin, te amo como jamás creí sentirlo por nadie. Eres mi Omega, mi esposo, mi debilidad y fortaleza, al único que he amado y siempre amaré con el alma. ¿Entiendes eso mi amor?

Jimin conecto sus ojitos llorosos con su esposo y mostró un suave puchero, se aferró fuertemente al pecho de su Alfa y asintió levemente.

- Yo... - Jimin inicio y Min lo escucho - También te amo Yoongi, eres el único Alfa en mi vida, al único que le he entregado todo de mi, eres mi primer beso, mi primera vez, mi primer amor. ¿Cómo puedo odiarte cuando mi amor hacia tí es aún más grande? No sabes cuánto te he extrañado, cuánto he deseado darte un golpe por idiota, pero al mismo tiempo consolarte, acariciarte y poder dormir abrazado juntos a tí. Pero tenía miedo, miedo a que realmente no quisieras luchar, buscar a otra persona y... Divorciarte.

Jimin hipeo tembloroso, más aún cuando recordó aquella chica que estuvo demasiado cerca de su esposo, que aún no sabe quién es.

- Lo siento mi cielo. Quería darte tu espacio y creí que en verdad me odiabas y me despreciabas, creí que sentías asco hacía mi y no quería seguir siendo el culpable de tus malestares o incomodidades. Solo... Perdóname mi amor, yo te amo Minnie, me he enamorado como un idiota de ti, ¿Me perdonas cariño mío?

- Solo... Si tú me perdonas a mi, por decirte que te odiaba cuando no era así. Perdón Yoon, creó que los dos somos unos tontos - Puchereo el Omega y Min rio.

- Lo somos cariño, somos la primera experiencia amorosa uno del otro, así que supongo que es normal cometer errores como pareja. Pero debemos aprender, mejorar, no seguir cometiendo el mismo error una y otra vez.

- Nos falta comunicación, tolerancia y respetó mutuo Yoon. Será un poco complicado, pero... Jamás me dejes, confía en mí, así como yo en tí. Te amo y no quiero que estos problemas sigan, por favor Yoon - El Omega hizo ojitos suplicantes.

- Te lo prometo mi cielo. Trataré de ser más tolerante, confiar en tí y respetarte siempre, te diré mis incomodidades y opiniones. Tampoco quiero seguir mal contigo, por qué también te amo y me duele estar separado de ti.

- Te extrañe Yoon... - Susurro el Rey Omega con una leve sonrisita en su rostro.

- También te extrañé mi cielo - Respondió Min, sonriendo dulce a su esposo.

Sellando sus promesas con un delicado, dulce y amoroso beso. Pues ahora ellos saben que no existe pareja perfecta, no existe pareja fuera de conflictos, equivocaciones, errores.

Ellos saben que deben aprender a comunicarse todo, confiar uno en el otro y respetarse mutuamente, sobre todo, siempre demostrar su eterno amor.

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¡Hola amigos

¿Qué les pareció este capítulo?

Se que fue muy triste y doloroso al inicio, la falta de comunicación y confianza entre ellos, al final les hizo darse cuenta de sus errores, pero terminando de una agradable forma. Asi que mis chiquillos...

⚠️¡ADVERTENCIA!⚠️

En el siguiente capítulo habrán escenas explícitas sexuales, Lemon+18. Si dichas escenas no son de tu agrado abstente de leer y dejar comentarios innecesarios o fuera de lugar. Si gustas puedes saltarte el capítulo.

Espero que les guste mucho está recompensa del siguiente capítulo por tanto llanto, dolor y tristeza mis chiquillos.

Sin más que decir... ¡Nos leemos pronto!

Bye💜

No olviden dejar su estrellita si les gustó el capítulo ⭐