- Tae... - Llamo el Rey.

- Majestad - Tae se acercó ante su llamado, tomo asiento y le prestó atención.

- Estoy cansando... - Susurro el Omega - Cansando de llorar, de sufrir y de sentirme así, tan... Insuficiente. Yo... Estoy cansado de sentirme un asco y ahora... Hasta utilizado.

El Rey Omega estaba en la habitación que comparte con su esposo. Sentado en la cama, en la que hace unas horas creyó que estaba viviendo el momento más memorable, romántico y amoroso de su vida. Pero no fue así.

Jimin se encontraba en una posición que ya se estaba volviendo costumbre en él. Con sus rodillas hasta el nivel de su pecho y abrazando estás mismas. Mientras recargaba su barbilla sobre sus rodillas. Mientras veía un punto fijo en la habitación.

Eran más de las 5:30am Jimin no había podido dormir, por más que lo haya intentando.

Sus ojitos estaban rojizos, hinchados. Su corazón dolido, roto y su lobo humillado, al igual que él.

- Mi Rey... - Tae sentía un enorme nudo en su garganta. Dolía verlo en aquel estado.

- Le e-ntregué todo de mi... - Jimin inicio una nueva ola de lágrimas - Mi primer beso... Es mi primer amor, mi primer Alfa, él... Fue mi primera vez y... ¿Por qué? - Volteó a ver a Tae, rogando por una explicación - ¿Por qué... Me hizo sentir como la basura más sucia de la tierra? ¿Por qué hizo que me sintiera asqueroso y utilizado?

El Rey Omega había llorado tanto, se había roto tanto, pensando y tratando de encontrar una respuesta a todo lo sucedido. Intentando encontrar algo que le haga entender, ¿Qué sucedió?

- Mi Rey... ¿Puedo preguntarle? ¿Qué fue lo que el Rey Min le dijo exactamente?

Jimin puchereo, luego suspiro tembloroso, recostó su rostro sobre sus rodillas y respondió.

- Pregunto que... Si yo había estado antes con alguien. Que si era virgen - Susurro, sintiendo aquellas palabras quemar en su garganta.

Tae frunció el ceño. Luego se levantó, se dirigió al baño y reviso las sábanas que cambio de la cama, entendió a lo que se refería su Rey. Regreso y vió a Jimin que se mantenía soltando lágrimas silenciosas y dormitando sobre sus rodillas.

- No sangro, ¿Verdad? - Pregunto Tae. Jimin abrió sus ojitos y nego.

- Acaso... ¿Tenía que sangrar? - Pregunto en susurro. Sin comprender del todo.

- Hace un tiempo, el doctor Mark me explico un poco de ello - Inicio Tae - Los Omegas tenemos un útero, el cuál nos facilita poder cargar con un cachorro, pero antes de ello, en el inicio de nuestro órgano tenemos algo llamado himen pegado a las paredes de nuestro órgano, es como una telita blanca. Este puede estar o no estar adheridos a las paredes de nuestro órgano, pero todos la tenemos. Ante una primera penetración, si está se rompe, puede llegar a sangrar, pero si no, no quiere decir que no eres virgen, simplemente, no está adherido a las paredes y ya. El doctor Mark me lo explico, por qué estaba con él, cuando un chico Omega de unos 17 años, llegó llorando por qué pues su novio lo dejó por esa razón.

Jimin lo escuchó atento, se sorprendió ante la información que claramente él, no conocía. Frunció levemente el entrecejo y pensó entonces.

Él no tiene ningún tipo de culpa de nada. ¿Por qué debe sentirse triste o asqueado de si mismo cuando no cometió ningún error? Él, le ha sido más fiel a su Alfa desde antes de existir que siendo fiel a su propia vida.

- Tae... - Susurro - Debes prepararme uno de tus mejores diseños para la mañana - Dijo, sorprendiendo al Omega - De preferencia... Negro.

Luego de sus palabras, se acomodo en la cama, se cubrió con una frazada y se envolvió por completo. Cerro sus ojitos y en cuestión de segundos, cayó totalmente dormido.

El Omega sirviente, solo pudo sonreír y déjarlo dormir, en unas pocas horas lo despertaría.

Justo dos horas y media después. Jimin despertó por si solo, el Omega abrió sus ojitos, se estiró un poco en la cama y suspiro. Vió el brillante sol entrar por la ventana y supo que sería un día diferente.

- Majestad. Veo que a despertado, le traje una taza de té...

- ¿Puede ser café? - Pidió Jimin en cambio.

- Claro, ahora lo pediré, ¿Desea que le prepare un baño? - Pregunto el Omega.

- Por favor - Asintió Jimin.

Pronto, Tae se encontraba ayudando a tomar un baño a su Rey. Eran cerca de las 8:30am, aún si no había sido una noche buena para Jimin, sintió que logró descansar un poco. Cuando salió de su agradable baño, Tae lo ayudo a cambiarse.

Quizá por lo sucedido y la humillación de la noche anterior. Al Omega Rey se le había cortado su celo y aquello no era algo bueno, eso solo significaba que el próximo mes quizá dure cerca de cinco días. Eso Jimin aún no lo sabe.

Taehyung eligió un conjundo totalmente fabuloso para su Rey. Era alucinante y no podía dejar de admirar lo bien que le queda y acentúa cada curva del cuerpo del Rey Omega. Es que le quedaba glorioso.

- Me encanta... Todo le queda tan perfecto - Aplaudió Tae - Le aseguro mi Rey, que jamás nadie lucirá tan perfecto como usted en mis diseños.

Jimin sonrió encantado con la forma en que Tae siempre le hablaba, era dulce y se emocionaba por cada prenda que le ponía.

En ese momento la puerta fue tocada. De inmediato Tae volteó a ver a Jimin y este asintió. Tae no pudo más que suspirar y salir.

Mark salió de la oficina del Rey Alfa.

El Rey, se quedó procesando toda la información que acaba de recibir del doctor. Gruño por lo bajo y soltó un sonoro suspiro.

Se levantó de su asiento. Pues toda la noche paso en su despacho, sabiendo que había cometido un error.

Pero se sentía traicionado y como un verdadero idiota por andar rogando y mendigando por el amor de Jimin y que él, le haya mentido, lo enfureció, así que él regreso a ser el mismo del inicio.

Un idiota patán.

Sin embargo al recibir la explicación de Mark, ya no supo que sentir, que pensar. Aún se encuentra confundido, cansado de toda aquella idiotez. Pero su lobo no dejaba de decirle que es un idiota por lastimar así a su Omega.

Yoongi sabe que cometió un error muchísimo más grave que el anterior, que está vez no conseguirá un perdón tan pronto, pero su orgullo, no le deja ver qué su actitud puede llegar arruinar mucho más su matrimonio fallido.

Aún así, se levantó y salió. Se dirigió directo a su habitación, en su mente Jimin estaría en la cama, quizá llorando, sintiéndose triste y quizá no querría verlo, algo que comenzaba a doler en su pecho.

Pero el grado de idiotez que cometió, lo estaban haciendo actuar inmaduro, pues él cree que al no saber sobre dicho tema y creer que todos los Omegas deben sangrar la primera vez entonces no cometió un error y solo fue una equivocación.

Pero claro... Los Alfas idiotas existen y el Rey líder es uno de ellos.

Cuando se acercó a la habitación, supo que no todo sería fácil.

La puerta de aquella habitación matrimonial fue tocada con delicadeza.

Un toque...

Dos toques...

El sirviente personal del Rey Omega abrió la puerta, encontrándose con su alteza real; el Rey Min.

- Su alteza - Reverencio educadamente el sirviente Omega. Aún si quería matarlo a golpes.

- ¿Dónde está mi esposo? - Pregunto el Alfa, con una presencia escalofriante. Parecía que no tenía ni una sola pizca de remordimiento.

- En el tocador su majestad - El sirviente se hizo a un lado cuando su Rey entro a la habitación.

Min Yoongi se dirigió al tocador. En dónde encontró a su esposo, de espalda, con una vestimenta totalmente negra y que acentuaba perfectamente su curvilíneo cuerpo, mientras se colocaba el hermoso anillo de Zafiro azul que le dió en su matrimonio.

Un matrimonio forzado.

- ¿Qué haces aquí? - La simple pregunta sorprendió al Alfa. Sobre todo por aquel tono frío.

Pues su esposo siempre demuestra ser un chico educado, frágil. Jamás utiliza un vocabulario inapropiado o fuera de lugar, siempre se ha dirigido a su esposo con respeto, al ser el Rey monarca. Incluso en sus constantes discusiones, las cuales Jimin a sólido responder en la última, no suele pasarse en su forma de dirigirse al Rey.

El Omega fue criado como un sumiso, dócil, débil. Jamás responde despectivamente, no cuestiona, no se aqueja.

Solo calla... Y sufre en silencio.

Entonces...

¿Por qué el Rey Omega se dirigió de aquella forma hacía su Rey y esposo?

La respuesta es clara...

- Lo lamento... - Se disculpo el Rey - Cometí un error al haber dudado de tí cariño. No debió suceder...

- Pero dudaste - Interrumpió el Omega. Volteandose y enfrentando a su esposo. Con una mirada escalofriante y desafiante al Rey.

- Lo sé. Pero consulte con el médico de la familia Real y él me explico la situación - Intento excusarse el Alfa.

- Debiste recurrir al médico para confirmar que no te engañe, que jamás te falte al respeto como mi esposo. Debiste resolver tus dudas con un tercero y no confiaste en tu esposo... En mí.

- ¿Pretendías que me quedará de brazos cruzados? - Río sin ninguna gracia el Alfa - No sangraste Jimin... - Se acercó amenazador a su esposo - ¿Cómo querías que lo tomara? - Siguió mostrando cierta molestia ante el recuerdo. Aún cuando ya tenía una explicación para ello.

- Con madurez - Respondió el Omega con sus ojitos azules cristalinos. Empañados por las prontas lágrimas. Que aunque quería retener, no creía soportar por mucho.

Unas lágrimas que se habían multiplicado desde el día en que fue obligado a casarse con el temible Rey de Daegu. Un hombre que solo sabe lastimarlo cada día.

- No me diste elección. Yo no tenía idea sobre algunas reacciones diferentes en algunos Omegas - Enfrentó el Alfa, cada vez sintiendo más molestia. La cual no debería ser así.

- Quise creer y confiar en tí. Intenté entregarme a tí... Por qué creí que era amor - Las lágrimas silenciosas bajaron por las rosadas mejillas del Omega - Pero... Me humillaste, me gritaste y desconfíaste de mi pureza, de mi fidelidad. Desconfíaste de mi virtud y te la entregué toda a tí. Aún así... ¿Crees que puedes recibir fácilmente mi perdón? Te he dado... Todo de mi, Min Yoongi.

- No puedes correrme de mi propia habitación - Sentenció el Alfa, con firmeza. Aún sin aceptar su grave error.

- ¿Es lo único que dirás? - El Omega quería gritarle, correrlo de su habitación y golpearlo. Pero no podía y jamás lo haría.

- ¿Qué más quieres? Cometí un error, me estoy disculpando, deberías conformarte con eso. Un Rey jamás pide perdón, ¿Por qué debería hacer más cuando ya hice suficiente? Te he pedido perdón tantas veces los últimos días, que... Comienzó a cansarme.

El Rey Omega se sentía dolido, lastimado y menospreciado. Pero sobre todo roto... Empuñó sus dos manos frente a su delicada vestimenta y mantuvo su mirada azulada firme en los ojos oscuros del Alfa Rey.

Pero pronto, se encontró bajandola y cediendo ante su Rey y esposo, se encontró mostrándose sumiso, como lo es. Cómo fue criado y como debía comportarse. Pues aunque intente ser fuerte, mostrarse demandante y superior a su esposo, no puede lograrlo ante un Alfa de linaje puro.

- Si no quieres dormir a mi lado. Puedes buscar otra habitación, hay muchas en el castillo - Entre aquellas palabras frías y poco sutiles, se encontraba el arrepentimiento.

¿Pero como lograr cambiar su actitud y forma de ser de un día para otro cuando fue criado por dos Alfas líderes?

Fue criado para gobernar, para imponer respeto, para hacerse respetar no solo a sí mismo como futuro Rey, también para respetar las reglas y las leyes que fueron creadas por Daegu para mantener el orden y paz entre los Reinos.

Así que sentir arrepentimiento, culpa y dolor no siempre estaba en la lista de sus mejores emociones.

El Omega asintió ante su Rey. Le mostró una reverencia perfecta de 90° luego elevó la vista y lo observó un poco.

- Espero Min Yoongi... Que él Karma no te llegué pronto - Susurro Jimin, con sus ojitos cristalinos.

Paso por su lado, saliendo de aquella habitación mientras Tae lo seguía. Después de escuchar lo que él Rey Alfa le dijo a su Rey Omega.

El hermoso Rey de brillantes ojos azules como el cielo, piel clara y suave como la ceda, cabello blanco como la nieve. Es un Omega que fue criado para obedecer y mostrar sumisión.

¿Cómo lograr cambiar un poco su forma de ser y pensar?, cuando hasta su esposo colabora para que se siga comportando de aquella forma tan sumisa e inocente.

El Omega quería descansar, despejar su mente y olvidar la humillación más grande que había vivido durante sus cortos veinte años. Deseaba ir a su quiosco y liberarse de todo su dolor en el pecho e intentar buscar un poco de fuerza de voluntad en lo más recondito de su ser.

Al salir del castillo, para poder redondearlo, caminar un poco y llegar a su hermoso santuario que es aquel quiosco. Se detuvo abruptamente, cuando se encontró con una escena aterradora frente a sus ojos.

Quiso gritar, pedir ayuda, llamar a su Alfa. ¿Pero como este lo escucharía cuando jamás lo marco?

No comparten un lazo como tal y sus llamados de auxilio... Eran en vano.

Jimin tenía justo frente a él y muy cerca a la antigua Reina. Min So-Yeon, la mujer cubrió sus labios y le apunto el abdomen con una navaja.

- Si gritas... Te mato - Susurro la mujer.

Quién se veía desaliñada y como si no había tomado un baño en días. Taehyung al percatarse, quiso gritar también y pedir ayuda, pero So-Yeon... Lo apuñaló, en el abdomen.

Tae soltó un leve chillido de dolor. Se dejó caer de rodillas al suelo y como se encontraban en un punto ciego de la entrada, nadie más veía. Taehyung pensó, en que quizá fue mal momento de haber enviado a Chanyeol por el desayuno del Rey Omega, pues ahora... Ambos necesitan ayuda.

Jimin soltó en llanto cuando vio como So-Yeon hería a Tae. La mujer lo jaloneo y comenzó a llevarlo por un camino poco vigilado, siempre amenazándolo con matarlo a puñaladas si se le ocurría gritar.

Unos pocos pasos después, Jimin se encontraba subiendo a un carruaje, siendo obligado por So-Yeon, la muerte no tendría piedad y el Omega lo sabía.

El carruaje negro comenzó avanzar. Jimin iba al lado de la mujer, quien iba apresurando al caballo. El Omega noto como pronto se habían alejado del castillo. Veía el camino pasar y le tentaba mucho saltar, pero eran muchas piedras y rocas. El Omega sabe que tendría una muerte segura ante una caída aquella velocidad.

Pero pensó... Morir era mejor opción que seguir viviendo en aquel infierno.

Alrededor de diez minutos después. Jimin escuchó muchos caballos subiendo el carruaje, intento voltear, pero hasta eso le ocasionó miedo. Solo podía llorar y rogar que se detuviera, pero la mujer parecía fuera de sí, parecía fuera de lugar.

So-Yeon solo apresuraba el caballo y no escuchaba a Jimin y parecía que el acercamiento de los caballos del palacio tampoco importaban.

El Rey Omega cubrió sus oídos cuando comenzó a sentirse abrumado, asfixiado, aterrado y el aire comenzó a faltarle.

Pronto, fue consciente de como lanzaban flechas con fuego adelante del caballo que corría con el carruaje y ellos atrás. Aquellas fechas comenzaron a crear una enorme llama frente al caballo, el cuál relincho y se levantó en sus dos patas delanteras cuando se detuvo abruptamente.

Ocasionando que el carruaje frenará de golpe y ante el movimiento brusco, Jimin saliera volando por un costado y cayera con un fuerte golpe sobre las rocas del camino. Inmediatamente Jimin perdió el conocimiento.

Sin saber, que sucedió después.

Yoongi gruño frustrado y enojado consigo mismo.

- ¿Qué demonios te pasa Min Yoongi? - Gruño con rabia - Yo lo amo y aún así... ¿Por qué lo lastimo?

Min se sentía frustrado y molesto consigo mismo. Salió de la habitación que comparte con su esposo y decidió ir a buscarlo, no importaba si tenía que arrodillarse frente a todos los empleados ante su esposo, pero tenía que reparar el error que cometió.

Sin embargo, cuando bajo las gradas se encontró un disturbio, muchos empleados y guardias rodeaban algo. Min frunció el ceño y se acercó.

- ¿Qué ocurre aquí? - Pregunto y todos los empleados se hicieron a un lado.

De inmediato Yoongi, se detuvo y sintió su alma tocar al piso cuando vió a Taehyung tirado en el piso y con un charco de sangre bajo él. Chanyeol parecía estar deteniendo el sangrado, pero el Omega ya estaba inconsciente.

- Jimin... - Susurro, sintiendo a su lobo inquietarse y comenzar aullar - ¡¿Dónde demonios está mi esposo?! - Gritó.

- Majestad... No lo sabemos, solo encontramos al sirviente personal de su alreza en este estado - Respondió un guardia.

- ¡¿Y que demonios esperan para buscar bola de imbéciles?! - El Rey Alfa, empuñó su espada y salió del Castillo.

Ordenó que llamarán a Mark y luego él, salió hecho un demonio en llamas, subió a su caballo y comenzó a buscar. Pronto sintió el aroma a miedo de Jimin, así que comenzó a seguir el rastro, gruño cuando lo sintió más perceptible. Su Omega estaba cerca.

En cuestión de minutos, logro ver un carruaje ser jalado por un solo caballo a gran velocidad. El Rey pudo ver el cabello blanco de su esposo y como este se mantenía aterrado al lado de alguien más. Yoongi se dió cuenta.

Aquella mujer es su madre.

Gruño mucho más enfurecido. Sus ojos estaban oscuros y se sentía cegado por la ira. Su intención era llegar hasta su esposo y lograr tomarlo aún si el carruaje estaba en movimiento y tenerlo sano y salvo.

Pero algunos de los guardias comenzaron a disparar flechas con fuego y todos los arbustos iniciaron a incendiarse. Logrando así que el caballo del carruaje relinche, se detenga y ocurra la tragedia.

Min sintió su alma caer al piso cuando vió como su Omega salió volando de aquel carruaje y caía fuertemente sobre las rocas.

Cuando logro llegar hasta él. Se bajó rápidamente del caballo y se dejó caer de rodillas frente a su esposo, lo tomo con delicadeza y noto un golpe en la frente de este y como sangraba, así como también había perdido la consciencia.

- Mi amor... Despierta cariño... - Lo ojos de Min se empañaron cuando su Omega no abrió sus ojos - Mírame Jiminie... Escúchame cariño, estoy aquí, por favor... - Rogó. Pero fue en vano.

El Rey Omega no despertó.

Entonces... ¿El karma existe?

¿Puedes llegar a sufrir un dolor tan grande como el perder a la única persona que amas pero la cual más lastimas?

Quizá... Min Yoongi lo experimente pronto.

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¡Hola amigos!

¿Qué les pareció este capítulo?

Espero que haya sido de su total agrado. Se que repudiaron una vez más a Yoongi y no les pediré que lo comprendan, pero sufrirá y mucho. Así que quizá... Solo quizá... Con esta lección aprenda y cambie.

Añadí, quite y modifiqué algunos detalles que aparecieron en el prólogo, hemos llegado por fin a esta parte y ahora saben quién fue la persona que intento secuestrar a Jimin.

Mis chiquillos, quiero hacer un pequeño paréntesis. Con respecto a mi último enunciado en mi tablero (Mi perfil) lo único que yo les pido a cambio de mis locas ideas, es que sean pacientes, por favor, quiero que entiendan, que yo tengo una vida fuera de Wattpad y sí, acepto que cometí un error al mal acostumbrarlos a traer un capítulo por día, pero al igual que ustedes se emocionaron leyendo, yo me emocioné escribiendo, por eso lo hacía. Pero también recordó haberles dicho que no se acostumbren, pues en algún momento los capítulos en borradores se me acabarían y tendrían que poner fechas de actualización.

No quiero llegar a eso, quiero ser constante y traerles un capítulo cada vez que pueda, lo más seguido posible. Pero no sé los prometo, sean pacientes, respeten mi espacio, mi tiempo, sean amables y sepan tener tacto para pedir algo, no me exijan y digan ("quiero actualización, ¡Actualiza!, y mi actualización?, etc...") No saben lo frustrante que es. Por eso hay muchos escritores que prefieren irse de la app. Así que una vez más, solo les pido paciencia y que respeten mis tiempos.

Así como ustedes sean de pacientes, así yo intentaré regresar pronto, pero cuánta vez el tiempo me de. Pues tengo muchísimo trabajo y quiero darle tiempo a todo. Poder organizarme bien y traerles siempre los capítulos que aman leer y yo escribir.

Lamento el mensaje tan largo ↑ espero que me hayan comprendido un poco. Los amo🫶🏻

Sin más que decir... ¡Nos leemos pronto chiquillos!

Bye💜

No olviden dejar su estrellita si les gustó el capítulo ⭐