- Estará bien - Dijo Mark - Se desmayo al no haber comido nada durante un día entero, además que salió al pueblo y el cansancio lo debilitó más rápido.

El Rey Alfa sintió alivio, pero también se sentía muy culpable por todo. Si tan solo hubiese cuidado mejor a su esposo y se hubiese preocupado más por su salud que por otras cosas, nada de aquello hubiese sucedido.

- Con el suero por intravenosa, se mantendrá hidratado, debe tenerlo por 12 horas como mínimo - Explicó el médico.

- Entiendo. ¿No despertara pronto? - Pregunto el Rey.

- Quizá dentro de poco lo haga. Pero lo recomendable es que descanse - Sugirió Mark.

- Está bien - Asintió Min, tomando la mano de su esposo.

- Yo me retiro, pero vendré mañana temprano a seguir con su revisión - Aseguro el médico y solo recibió un asentimiento de parte del Rey.

Sabía que recibir un simple gracias de parte del Rey Min es muy difícil, pero Mark no le tomaba importancia. Se daba por bien servido sabiendo que el Rey comienza a mostrar más interés y preocupación por su esposo.

El médico se retiró y Yoongi acarició suavemente el cabello de su esposo. Hace unos minutos, Taehyung junto a Mark lo cambiaron a una de sus pijamas cómodas, así que Jimin podría descansar bien aquella noche y él se mantendría a su lado para velar por su bienestar.

Unos pocos minutos después. Yoongi salió al pasillo, para ordenar que le llevarán un café y poder mantener sus energías por algunas horas, pues necesitaba mantenerse despierto y velar los sueños de su esposo.

En esos minutos, Jimin despertó sintiendose un poco mareado, llevó su mano hasta su cabeza y noto que tenía una intravenosa conectada. La observó un poco y suspiro, no se sentía bien consigo mismo, odia causar problemas y pareciera que él es un detonante de problemas.

Justo el Rey entro y Jimin se asustó un poco, se quiso sentar y hacerle ver al Rey que está bien y disculparse por causar tantos problemas.

- No, ¿Qué haces? - Yoongi llegó hasta él y evito que se levantará.

Jimin huyó de su tacto y no porque no quiera sentirlo, es porque se siente muy avergonzado. El Alfa mordió su labio sutilmente y suspiro, tratando de controlar todos sus impulsos.

- Lo siento... - Susurro el Omega, alejando sus ojitos de los del Alfa, y no dejando que este lo toque.

- ¿Por qué? - Pregunto Yoongi, solo viendo como nuevamente, su esposo jugaba con el anillo de bodas.

- Por siempre causarle problemas - Respondió, sintiendo un nudo en su garganta.

- ¿Cambiarás tu forma de dirigirte a mi cuando te sientas incómodo o mal? - Pregunto, pues Jimin ya no se dirigió hacía él de forma informal como lo había estado haciendo.

- Lo lamento... - Se disculpó nuevamente, cerro sus ojitos y las primeras lágrimas fueron derramadas, al mismo tiempo que apretaba fuertemente sus manos.

El Rey tomo las pequeñas manos de su esposo entre las suyas, separandolas y evitando que siguiera haciéndose más daño, luego las envolvió en una de sus manos y con su otra mano, limpio las mejillas humedas del Omega.

- Mírame Jimin - El Omega volteó a verlo con dificultad - ¿Qué te dije está tarde antes de ir al pueblo? - Pregunto.

Pero Jimin negó, no encontrando las palabras para responder, pues se sentía muy mal, solo quería llorar y ser consolado como un niño.

- No bajes la mirada, no te escondas, no tengas miedo - Recordó el Alfa Rey - Mírame Jimin, mírame y dime, ¿Por qué no me dijiste lo que mis padres te han estado haciendo?

Entonces el Omega no resistió más y se lanzó al llanto. No pudieron ser lágrimas silenciosas como suelen ser, fue un sollozo doloroso, uno que no pudo ser retenido por más tiempo de parte del Omega.

Yoongi solo pudo soltar un lento suspiro, se acercó más al menor y lo abrazo con delicadeza, con cuidado y con cariño. El Omega lloro en el hombro de su esposo, se desahogó todo lo que parecía haber estado reteniendo por un tiempo indefinido, lloro por largos minutos, pero Min nunca se alejo, lo consoló, acarició su espalda, y pronto comenzó a susurrarle palabras dulces en el oído.

- Lamento hacerte pasar por tanto cariño. Se que no soy un bue esposo mucho menos un buen Alfa contigo, pero... Es difícil para mí, ¿Sabes? Es difícil cuando jamás supe cómo tratar a un Omega, crecí rodeado de Alfas y creyendo que los Omegas siempre deben ser sumisos y dominados por un Alfa. Se que esto no te consuela, se que no puedo mejorar tanto como quisiera, pero por tí intentaré mejorar, solo... Tenme un poco de paciencia cariño, solo un poco, es lo único que te pido. Perdóname si un día soy un patán, mezquino, grosero y te grite, aún me cuesta controlar mis emociones. No sé lo que es ser dulce, demostrar cariño, amor, compasión o algo similar, no sé tampoco... Que es lo que en realidad siento por tí.

Yoongi confesó todo lo que tanto su lobo como él, quería decir y expresar, pero no encontraban las palabras correctas. Se dejó llevar y junto a las emociones de Jimin, dijo todo lo que en verdad quería.

Y Jimin lo entendió, sintió que pudo comprender fácilmente las emociones del Alfa, pues él tampoco sabía controlar sus emociones, no sabía la mitad de ellas, por ende también intentaría ser paciente con las constantes emociones cambiantes de su esposo, así como él intentaría mejorar su forma de ser.

Unos minutos después, Jimin se calmo. El Alfa lo recostó nuevamente sobre la cama y limpio las mejillas de su esposo con una toalla. Jimin suspiro tembloroso y se sintió cálido. El Alfa se levantó para ir por un poco de agua, pero Jimin tomo su mano.

- No... - Murmuró él Omega - No te vayas - Pidió con ojitos suplicantes.

El Alfa sonrió, se sentó una vez más y dejo un beso sobre la frente de su esposo y una sobre sus labios. El Rey Alfa sabe que un beso sobre la frente de tu pareja significa algo importante, pero aún debe averiguar por si mismo lo que aquello quiere decir.

- Solo iré por agua para ti. No tardaré, ¿Si? - Jimin asintió y dejo ir al Alfa.

En ese momento, la puerta fue tocada. Min abrió y Tae le llevo el café que pidió, en la bandeja también iba una jarra con agua, Yoongi vió al Omega sirviente de su esposo y esté bajo la mirada ante la intensa que su Rey le dió.

- Necesito que mañana estés temprano aquí - Le dijo a Tae - Ahora ve a descansar, mi esposo está bien, si es lo que te preocupa. Ya despertó y solo quiere descansar.

- Gracias su alteza - Tae se inclinó ante su Rey, más tranquilo por sus palabras.

En verdad estaba tan preocupado por su Rey Jimin, que a medio camino le quitó la bandeja a una de las sirvientas, que llevaba únicamente el café para el Rey. Él se regresó y añadió la jarra con agua, para después él mismo llevarla hasta la alcoba de sus Reyes.

El Omega se retiró más tranquilo, sabiendo también lo que Jungkook le hizo a su Rey Jimin y aquello no cree poder perdonarselo tan pronto al Príncipe Alfa.

En cuánto a Yoongi, entro nuevamente a la habitación, dejó la bandeja en una mesita cerca a la puerta de la terraza. Lleno un vaso con agua y se lo llevó a Jimin, quien parecía estar muy concentrado en los movimientos de su esposo.

- Toma un poco - Ayudo al Omega a tomar y este acepto más que gustoso.

Luego de tomar. Jimin cerro sus ojitos, Yoongi dejó el vaso a un lado y acarició el cabello blanco del menor, lo admiro un poco, hasta que este se quedó dormido. Min lo cubrió bien con las sábanas y después se levantó, tomo su café con lentitud, mientras trabajaba en algunos documentos. Fue al tocador y se cambió a una pijama cómoda.

Sin querer vió un sobre que Jimin tenía entre sus cosas, lo tomo y pronto supo que era, suspiro por enésima vez y se dirigió a la mesa donde estaba trabajando, leyo la solicitud y sabiendo que era aquella carta que una mujer le dió a Jimin mientras iban en su recorrido, solo sonrió hacía su esposo quien dormía tranquilo. Tomo el sello de aprobación y lo estampó contra la solicitud.

Jamás pensó que en tan poco tiempo, comenzaría a sentir nuevas emociones hacía Jimin, cuando lo vió por primera vez y lo vió convertir una simple piedra en un hermoso diamante, quiso solo utilizarlo, para vengarse de Busan y al mismo tiempo beneficiarse, lograr ser aún más poderoso, ambisioso por su poder de demostrar que sigue siendo un Alfa imponete, fuerte, audaz, temido y que siempre está un paso adelante.

Pero ahora que comienza a sentir nuevas emociones positivas por el Omega, sabe que muchas cosas podrían cambiar. Pero Jimin jamás se debe enterar que se casó con él por su habilidad, no por qué sintiera atracción por su persona. Si el Omega se llega a enterar, no sabe que reacción podría tener.

Por eso, intenta con mucho esfuerzo ser una mejor persona, un mejor Alfa para su esposo. Su Omega.

El Rey paso la mayor parte de la noche entre papeles. Cancelo su viaje a Seul y lo alargó por un tiempo indefinido, escribió una carta para el Rey de Seul, que en cuanto la termino, se la dió a Chanyeol, el guardia que estaba afuera cuidando de la habitación de los Reyes, ya que se turno con Jackson.

Luego preparó una carta para enviarla a Busan y avisarles que en dos días como máximo estaría visitando el Reino, pues tenía algunos asuntos que tratar con los Reyes y aprovecharía para realizar un recorrido rápido por el Reino.

Luego se dedicó a leer solicitudes de algunos pueblerinos de algunos Reinos, para poder cruzar a otros Reinos. Aceptó muchos y rechazo algunos otros, pero le quedaba mucho por terminar y con tanto que tiene por hacer, no está seguro de lograr terminar todo el papeleo.

Cerca de las 5:00am Yoongi no resistió más el cansancio, bostezo y dejo todos los papeles a un lado, se levantó y se dirigió a la cama. Se metió bajo las sábanas y en cuestión de segundos cayó rendido, intentaría dormir al menos una hora.

Jimin sintió cuando el Alfa se acostó a su lado, abrió sus ojos y noto como este en cuestión de segundos había caído rendido ante los brazos de Morfeo. Sonrió suavemente y se recostó de lado. Llevo su manita hasta la mejilla del Alfa y dejo una suave caricia.

Se sorprendió cuando el Alfa tomo su mano y la apreso delicadamente entre la suya. Min dejó un suave beso sobre la parte interna de la mano de su esposo y Jimin sintió sus mejillas acaloradas.

- Duerme cariño... - Susurro el Alfa.

- Tú también descansa - Hablo bajito el Omega.

Entonces Min se acercó más a su esposo, lo abrazo protectoramente, teniendo cuidado de no lastimarlo por la intravenosa conectada y se acomodo mejor, dejando su rostro en el cuello de su Omega. Por que sí, Jimin es SU Omega y comenzará a verlo como tal.

Las mejillas de Jimin parecía que explotarían ante la vergüenza y emoción. Pero aún así, se atrevió a corresponder el abrazo y suspiro. Acarició la negra cabelleza de su esposo hasta que escucho unos lejanos ronquidos provenientes de este. Supo entonces que ahora sí, quedó profundo.

Unos pocos minutos después, Jimin también se durmió. Era la primer vez que dormían de aquella forma, abrazados, cómodos y sintiéndose cálidos uno con el otro.

Alrededor una hora y media después, Tae tocó suavemente y al no recibir respuesta. Entro lentamente, de inmediato noto que sus Reyes seguían dormidos y muy abrazaditos.

Sonrió, pues sabía que Jimin haría muy bien al Alfa Rey. No sabía si entrar y despertar al Rey Min o dejarlo dormir. Noto todo el papeleo en la mesa y supuso que debió dormirse tarde.

Aún así, entro, pues sabe que el Rey siempre despierta temprano para no atrasarse más con su trabajo acumulado y cuando estaba por tocarle el hombro y despertarlo, la pequeña y cálida mano de Jimin lo detuvo.

El Rey Omega abrió sus ojitos y suspiro al ver que era Tae, mientras que este último se sorprendió por la acción de su Rey, pero supuso que fue algún mecanismo de defensa provocado por el lobo del Omega.

- Déjalo dormir - Pidió Jimin en voz bajita - Regresa en una hora.

- Pero él podría molestarse - Respondió Tae.

- No te preocupes, yo me encargo - El Rey Alfa se removió un poco y Jimin sonrió cuando se apego más a él.

Tae sonrió también y asintió ante su Rey Omega. Se inclino ante este y se retiró de la habitación, sintiendo su corazón cálido ante la hermosa escena. Pensó en ir a la cocina y decirle a la señora Cha que les preparé un delicioso desayuno a sus alrezas. Llegó a la cocina y lo pidió, cuando salió, se encontró con Jungkook.

- Tae - Llamo el Alfa pero este lo ignoro - Escúchame por favor - Tomo su mano, pero este se soltó.

- Príncipe Min. No es adecuado que tome mi mano de esa forma - Dijo con firmeza el Omega sirviente - Pueden malinterpretar la situación.

Jungkook sintió una punzada en su corazón al ver los ojitos cristalinos de Tae, sobre todo su rechazo, el Omega jamás lo rechazaba de aquella forma, y mucho menos se dirigía a él con aquel enorme respeto, de alguna u otra forma lo llamaba Jungkookie o Kookie.

- Solo déjame explicarte por favor - Rogó el Alfa - Estaba muy molesto con Yoongi por la forma en que te trato, quería... Que él pagará, pero no pensé en Jimin, no pensé en que él es quien sufriría y yo... Me equivoqué.

- Entiendo - Asintió Tae - Por ahora debo atender a los Reyes. Y tampoco creo que sea el lugar y el momento para hablar - Dichas sus palabras Tae se regresó a la cocina.

Jungkook se sentía frustrado consigo mismo, molesto y como un tonto, pero pensó que así como suele defender a Jimin y Tae de los insultos de Yoongi, así mismo debe aprender a ser maduro, aprender de sus errores y comportarse con un mejor carácter que el de su hermano, por muy molesto que este con él.

Quizá alejarse un poco de todos los problemas que el matrimonio de su hermano trae le ayude un poco. Irse a una de las residencias de la familia Min y despejar su mente, le aliviará el alma y corazón.

Una hora más tarde, Taehyung subió hasta la habitación con la bandeja del desayuno en manos.

Toco suavemente y escucho la delicada voz de Jimin sonar, diciendo que pase adelante. Con aquello afirmando que el Rey ya estaba despierto. Pero al entrar, se encontró aún con la escena que vió cuando entro la última vez.

Un perezoso Rey, aún escondido en el cuello de su esposo y parecía que ronroneaba de gusto en aquella posición. Jimin sonrió al Omega y este le regreso la sonrisa.

- El clima está muy frío afuera - Comento el Omega - ¿Le preparo un baño caliente Rey Min? - Se dirigió al Alfa.

- Sí... - Se escuchó la respuesta de Yoongi con voz ahogada por estar aún en el cuello de Jimin - Ah y Tae - Llamo cuando el Omega se dirigía al baño.

- ¿Si majestad? - Se detuvo el Omega.

- Si dices algo de esto te mato - Sentenció. El Omega solo pudo sonreír.

- Soy una tumba majestad - Siguió con su camino y Jimin río por ello.

- ¿Cómo te sientes cariño? - Pregunto Yoongi al Omega.

- Mucho mejor, ¿Por qué no duermes un poco más? Te acostaste ya tarde - Sugirió.

- Bueno, tengo mucho por hacer y tú no dejaste que me despertarán a la hora que era - Señaló y Jimin sonrió.

- No puedo decir que lo lamento, porque mentiría - Respondió y Min solo pudo sonreír.

El Alfa dejó un casto beso en el cuello de su esposo y después en su frente, luego se levantó, se estiró un poco y cuando Tae salió del baño, él entro para poder tomar un baño caliente y poder iniciar con el día.

Jimin noto que el suero estaba terminando. En lo que Yoongi tomaba un baño, Mark llegó, lo reviso y le quito la intravenosa, el Rey Omega estaba rodeado de sus únicos dos amigos Omegas, así que cuando Yoongi salió del baño con una bata puesta y su cabello húmedo, las mejillas del Rey Omega se calentaron.

- Estoy seguro que en otro momento los hubiese corrido de mi habitación - Dijo Yoongi, antes de entrar al tocador y poder cambiarse.

Los Omegas rieron bajo, ¿Desde cuándo el Rey se comportaba tan bien? Se preguntó Tae y Mark y bueno. Jimin comenzaba amar mucho aquella faceta de su esposo.

Tae preparó el baño para su alreza, cuando Mark se retiró. Jimin tomo un cálido baño de esponja, uno que alivio todo su estrés y malestar. Cuando terminó, entro al closet y se cambió con ayuda de su amigo, Yoongi había salido por unos papeles.

- Olvide preguntarle a Mark algo importante - Dijo Jimin cuando salió de cambiarse y arreglarse. Tae estaba tendiendo la cama.

- ¿Qué cosa? - Pregunto Tae.

- Es que... En mis celos nunca había sentido tanto calor o necesidad de una pareja, tampoco de ayuda, solo tomaba unos tez relajantes que yo mismo preparaba y fucionaban muy bien, incluso mis padres no se daban cuenta que mi celo estuviese cerca, solo mi hermano.

- Eso no es muy usual - Comento Tae - Aunque creo que la necesidad de una pareja aparece cuando encuentras al indicado - Comento con sus mejillas levemente sonrojadas.

Jimin sonrió, pero no quiso comentar acerca de la vida íntima de Tae, al menos no aún. Aunque por lo poco que sabe, él y Jungkook jamás han hecho nada, pero al ser como una pareja, quizá sus cambios son diferentes.

- Bueno, pero mi duda es. ¿Por qué... Comienzó a sentir mucho calor ahora que mi celo está cerca? - Pregunto Jimin.

- ¿Tu celo está cerca? - Yoongi entro, tomando por sorpresa a su esposo.

Las mejillas de Jimin se colorearon de un suave carmín y Yoongi sonrió.

Quizá el momento de consumar su matrimonio no esté muy lejos.

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¡Hola amigos!

¿Qué les pareció este capítulo?

Espero que haya sido de su total agrado. No diré mucho, solo haré una sola pregunta.

¿Qué les parece la actitud de Yoongi por el momento?👀

Sin más que decir... ¡Nos leemos pronto chiquillos!

Bye💜

No olviden dejar su estrellita si les gustó el capítulo ⭐