Jimin llevó su manita hasta su pecho.

El Alfa Rey le hacía vivir un sin fin de emociones. ¿Cómo es que podía tener ese tipo de cambios? El día anterior le dejo en claro que se arrepentía de haberlo elegido cómo esposo y que le causaba asco y ahora le decía que le gustaba como se ve y aspiro su ahora con tanto deseo.

El Rey Omega debía acostumbrarse o quizá, él encuentre la forma de sentir solo emociones positivas de su esposo.

- Majestad - Se acercó Tae - Lo están esperando - Comento.

- Claro... - Jimin dió media vuelta y fue anunciado para entrar al comedor.

Cuando las puertas se abrieron, todos los empleados se inclinaron y mostraron respeto ante su Rey Omega. Todos asombrados de la inigualable belleza de aquel ser tan hermoso.

En quella mesa. Se encontraban los antiguos Reyes, más el hermano menor del Rey Alfa.

Jungkook se puso de pie y mostró una leve inclinación ante su Rey. Sin embargo, los antiguos Reyes no lo hicieron, ambos mostraron una gran falta de respeto ante Jimin, al hacer como si no hubiese entrado e iniciaron a tomar sus alimentos sin que su Rey haya tomado su lugar en la mesa.

Aquello se consideraba una falta de respeto y romper una regla entre la monarquía. Pues quién sea que esté en la mesa de los Reyes de Daegu, deben esperar a sus soberanos antes de tomar los alimentos. Nadie puede iniciar antes que estos hayan tomado su lugar. Sin embargo, es algo que los antiguos Reyes, ignoraron y pasaron por alto.

Aún así Jimin no le tomo importancia, él aún debe aprender mucho sobre Daegu, así que no estaba enterado sobre aquella regla. Pues en Busan no es así.

- Cuñado, es un placer verte está mañana - Hablo Jungkook, tratando de aligerar el ambiente.

- Gracias. Digo lo mismo - Sonrió Jimin hacia el Alfa menor.

- Por favor, ven aquí. Estoy casi seguro que mi hermano no vendrá. No suele tomar el desayuno con nosotros.

Jungkook comento mientras invitaba al Rey a tomar asiento en su lugar. Que es en la silla del lado derecho de la mesa, justo al lado del asiento de la cabeza que es donde debe ir el Alfa Rey.

Pero otra falta de respeto ocurrió. Cuando el antiguo Rey. Tomo el lugar que ahora le pertenece a su hijo mayor y la antigua Reina tomo el lugar que debe corresponderle a Jimin.

Este se sintió muy avergonzado y fuera de lugar. Detuvo sus pasos cuando la Reina lo golpeó en el hombro y tomo su asiento. Jimin se alejó un poco y no supo que hacer. Jungkook se molestó por las actitudes de sus padres.

- ¿Qué creen que hacen?, esos ya no son sus lugares - Dijo un molesto Jungkook.

- Mientras el Rey no esté. Siempre podré ocupar su lugar - Dijo Ki-Joon.

- Te equivocas padre - Dijo con molestia el Príncipe Min - Ese lugar le pertenece a su Rey Alfa, o sea mi hermano o en este caso a su esposo. Que vendría siendo Jimin, quien está frente a ustedes.

- Claro. Cómo si puedo llamar Rey a un maldito usurpador - Dijo con evidente molestia So-Yeon.

- No te preocupes Jungkook-ssi - Dijo Jimin - De igual forma. No tengo apetito - Sonrió amable hacía el Alfa - Mejor saldré a caminar un poco.

El Omega Rey mostró una venía hacía los antiguos Reyes y Jungkook. Para salir pronto de aquel comedor, sentía su estómago revuelto y no específicamente por hambre, cada vez se sentía más fuera de lugar y despreciado por todos a su alrededor. Odia sentirse una molestia, pero él creía que era eso. Una molestia.

Cuando salió, colocó su mano sobre su abdomen y suspiro tembloroso, sosteniéndose de un mueble cercano. Cerro sus ojos y retuvo las lágrimas. No debía llorar, no quiere y no lo haría.

Aunque sus ojitos estuviesen cristalizados.

- Majestad - Se acercó Tae - Si gusta puedo hacer que lleven su desayuno hasta la terraza de su habitación o al jardín trasero - Sugirió.

- No te preocupes Tae. Estoy bien así, no tengo hambre - Negó y comenzó a caminar.

- Pero majestad. Ayer no almorzó, tampoco quiso cenar, no puede saltarse el desayuno, no le haría nada bien a su cuerpo.

- Estaré bien. Te lo aseguro - Jimin sonrió, tratando de no hablar más del tema.

Entonces salió del castillo y soltó el aire lentamente al sentir como la fresca brisa golpeaba su rostro. Cerro sus ojos y solo sintió como una lágrima bajaba por su mejilla izquierda. La limpio sutilmente y volvió abrir sus ojitos. Se centro en intentar conocer el Castillo.

Noto la cantidad exagerada de guardias por todos los alrededores. Decidió conocer un poco el lugar, con un insistente Taehyung de que debía tomar su desayuno.

Pero pronto, Jimin detuvo sus pasos, pues frente a él, tenía un hermoso quiosco, se veía un poco descuidado, se encontraba en el jardín trasero y cerca del bosque que rodea el Castillo. Jimin quedó maravillado y recordó que Tae una vez le hizo la mención sobre aquel quiosco y le comento que estaba un poco descuidado y necesita algunos arreglos.

- ¿Crees... Que si le pido al Rey este quiosco acepte dármelo? - Pregunto Jimin en susuros.

- Supongo que sí... - La respuesta de Tae se vio abruptamente interrumpida.

- Claro que no. Ese quiosco me pertenece a mi - Una tercera voz se dejó escuchar.

Jimin se volteó y vió a una mujer demasiado hermosa. Con cabello negro, mirada imponente, perfección en todo su esplendor, ojos oscuros y una sonrisa inquietante.

- Princesa Kim - Se inclino Tae y se puso un paso detrás de Jimin.

Kim Chan-mi, mejor conocida como la Princesa Chungha. De rango Alfa, con 24 años, una princesa caprichosa, demandante, exigente y berrinchuda. Ella siempre creyó que el Rey Min Yoongi sería su esposo, pues sus padres la prepararon para ser la futura Reina de Daegu.

Ella pertenece al Reino de Jeju. Su aroma es de piña y zanahoria. Es la segunda hija de los Reyes de Jeju. Uno de los Reinos menores de Corea. Al nacer siendo la segunda y presentándose como Alfa, siempre le hicieron creer que sería la Reina y esposa de Min Yoongi.

Pues es exactamente lo que los Reyes de Daegu y Jeju, habían acordado para cuando sus hijos crecieran. Sin embargo, Yoongi siempre se negó, argumentando que él decidiría con quién contraer matrimonio.

Cuando Chungha se enteró del matrimonio de Yoongi, enfureció. Así que no dudo en utilizar su autorización para cruzar a Daegu y conocer al famoso esposo del que considera SU Alfa.

En el momento en que Jimin volteó a verla. Hasta ella sintió aquella molesta atracción hacia el Omega, claro, ella siendo Alfa era normal. Sin embargo, para ella fue molesto saber que el esposo de Yoongi es mucho más hermoso y lindo de lo que creyó.

- Así que tú eres el esposo de Yoongi - Sonrió ladina la mujer.

- Sí. Soy Min Jimin, esposo del Rey Min, ¿Usted es...? - La dulce voz de Jimin pregunto con curiosidad.

- Soy Kim Chan-mi. Pero todos me dicen Chungha, debería haber sido la esposa de Yoongi, no tú - Escupió con evidente desprecio.

Jimin sintió una punzada en su pecho, ¿Qué era eso que sentía? ¿Por qué le molestó que aquella mujer dijera que ella debía haber sido la esposa del Rey?

- No entiendo cómo Yoongi se atrevió a romper la tradición de los Min, debía casarse conmigo que soy una Alfa y no con un simple Omega insignificante - Siguió atacando la mujer - Pero estoy segura de que tú sumisión, debilidad y torpeza lo cansará, terminará dejándote de lado y me buscará a mi, como siempre lo hizo cada vez que necesitaba de una verdadera hembra.

- Princesa Kim. Le recuerdo que está tratando con el Rey Omega y sus palabras son ofensivas hacía él - Se atrevió a opinar Tae. Sintiendo molestia por las palabras de aquella mujer.

- ¿Y tú quien demonios eres para opinar o pensar que puedes hablarme? Eres un simple sirviente, no te metas o puedo hacer que te hechen a la calle.

Taehyung bajo la mirada, sin poder hacer mucho y sintiendo impotencia. Jimin no sentía la fuerza para defenderse y aún cuando tenía toda la autoridad y derecho, no lo hacía, pues la mujer frente a él... Es una Alfa.

- ¿Chungha? - La penetrante voz del Rey Alfa se dejó escuchar y la expresión de la mujer cambio al instante al igual que su forma de hablar.

- Oh. Yoongi - Sonrió encantadora - No sabes cuánto extrañé poder verte - Se colgó del brazo del Alfa y este la vió sin expresión alguna - Acabo de conocer a tu tierno esposo. Es adorable déjame decirte.

- Claro - Yoongi rodó los ojos.

Entonces Jimin bajo la mirada. Sintiendo que no podría más con toda aquella escena, quería salir huyendo de ahí, salió del comedor para poder encontrar paz y no sentirse tan despreciado, pero se encontró con algo mucho peor.

- Le decía al Rey, que ese quiosco es mío, ¿Recuerdas? Es que él te lo quería pedir. Tan inocente - Sonrió la mujer - Pero solo le comentaba que es mío.

Yoongi frunció el ceño. ¿Desde cuándo aquel desolado y poco atrayente quiosco es de Chungha? Pero aún no dijo nada.

- ¿Verdad que siempre me lo dejaras a mi? - Hizo ojitos la Alfa hacía el Rey, siempre aferrándose al brazo de este.

Yoongi se soltó de aquél agarre molesto para él y se sacudió un poco, odiando sentir el aroma a piña y zanahoria impregnado en su vestimenta y no el de Jimin, como había estando sintiendo.

- Como sea - Le resto importancia.

Jimin hizo puño sus manos. No podía creer lo que tenía que estar viviendo, era molesto y degradante para él. Pero como siempre, prefería callar, no discutir ni enfrentar a nadie, pues pensaba que era mucho mejor así.

- Ese quiosco no es tuyo - Llegó Jungkook, sabiendo las artimañas de aquella mujer.

Entonces Chungha se sobresalto al escuchar la voz del Alfa menor detrás de ellos. Jungkook se puso al lado de Jimin y de cruzó de brazos, viendo con evidente enfado a Yoongi, quien seguía sin comprender toda aquella situación.

Él solo iba en busca de su esposo y cuestionarle la razón del porque no quiso desayunar. Pues la noche anterior tampoco tomo sus alimentos, pero olvidó todo aquello al ver a Chungha en el jardín.

- ¿Qué de importante tiene? - Cuestionó Yoongi - Solo es un lugar insignificante, no le veo el problema.

- Que ese maldito quiosco es mío - Dijo Jungkook - Pero Jimin lo quiere para él y yo mismo se lo daré a él. Por qué es el Rey de este lugar y tiene más derecho que una mujer que ni siquiera pertenece a este lugar. Dime Chungha, ¿Dónde está tu autorización firmada de poder ingresar a Daegu? - Cuestionó Jungkook.

Yoongi volteó a ver a la mujer y está se notó nerviosa. Pero sobre todo molesta y humillada por un mocoso que es mejor que ella y acaba de faltarle el respeto. Sintiendo su mandíbula apretarse, la Alfa saco el permiso y se lo extendió al Alfa menor.

Jungkook lo tomo entre sus manos y comenzó a leerlo. Mientras Yoongi comenzaba a irritarse, ¿En qué momento podrá estar a solas con su esposo para hablar solo ellos dos?

- Tu fecha de llegada fue la semana pasada. ¿Por qué te dejaron entrar con un permiso vencido? - Cuestionó el Alfa menor.

- Bueno. Es que, la Reina le dijo a mi madre que podía entrar aún y...

- La Reina ya no tiene ningún tipo de autorización - Dijo Yoongi por fin - Ella ahora es la antigua Reina. Los únicos que tienen ese poder de aceptar los permisos es mi esposo y yo.

Chungha nunca antes se había sentido tan humillada en su vida. Volteó a ver con odio a Jimin, quien desvío su mirada al sentir la fuerte y penetrante mirada de la Alfa sobre él, con evidente odio.

Yoongi noto aquello y le molestó mucho. Frunció su ceño y apreso a la Alfa del cuello fuertemente, Chungha se sorprendió por aquello, jamás en su vida se llegó a imaginar que Yoongi llegaría asfixiarla de aquella forma.

- Yoon... - Logro articular con dificultad.

- Te prohíbo que vuelvas a ver a mi esposo de esa forma. ¿Entendido maldita loca? Nadie tiene el derecho de intimidarlo de esa forma, nadie más tiene el derecho de intentar doblegarlo con una mirada, una palabra u ofenda ante mi presencia. ¿Te quedó claro?

La soltó y la tiró al pasto frío por la escasa nieve. La Alfa tosia con dolor en su garganta, intentando recuperar el aire perdido.

- Largo de mi Castillo y mi Reino antes que te mandé al calabozo por entrar con un permiso inválido - Sentenció el Alfa Rey - ¡Largo!

Chungha se aterro, así que se levantó. Se inclino ante los Reyes y se retiró rápidamente, sin argumentar nada más, aterrada por la voz de mando del Rey y humillada por qué este mismo la haya corrido y amenazado, pero odiando a Jimin y pensando que él es el único culpable de todo.

Yoongi se volteó hacía Jimin. Quién mantenía su mirada gacha también, por haber escuchado a Yoongi utilizar su voz de mando, mientas seguía jugando nerviosamente con el anillo en su mano.

- ¿Por qué no desayunaste? - Pregunto Yoongi, fuerte y demandante hacía su esposo.

- Yo... - Jimin elevó su mirada con dificultad - No tenía... Hambre - Respondió.

- ¿Hoy tampoco? - Río sin gracia - Anoche no cenaste. ¿Qué? ¿Intentas hacer una dieta inútil? Déjate de idioteces y ve a desayunar - Ordenó.

- No desayuno por qué nuestros padres le faltaron al respeto y por si fuera poco lo humillaron y denigraron haciendole creer que no vale nada al igual como intentó hacerlo esa inútil de Chunga. Pero tú debes saber sobre eso, ¿No? También te encanta humillarlo cada vez que puedes.

Jungkook estaba molesto con su hermano y escupió todas las palabras que tenía guardadas para este en el momento que tuvo oportunidad.

- Sigo sin entender por qué demonios lo hiciste tu esposo si lo vas a tratar de esa forma - Gruño Jungkook.

- No hables si no sabes mocoso - Dijo un furioso Yoongi.

- Sí se. Por eso hablo - Contratacó el Alfa menor - No eres nada diferente a sus padres - Le susurro a su hermano en el oído, evitando que Jimin escuché.

Luego, Jungkook se poso entre medio de los dos Omegas. Tomo una mano de cada uno y se los llevó de ahí, no permitiría que nadie más intenté humillarlos. Pues él no puede entender como su familia cree que los Omegas deben ser sumisos y con ningún tipo de autoridad en la jerarquía o Rangos solo por ser Omegas.

El Alfa Rey empuñó sus manos al ver cómo su hermano menor de llevaba a Jimin de su lado, pero lo que más le enfureció fue verlos tomados de las manos. Sintió rabia ante aquella imagen.

Decidió ir hasta su despacho e intentar trabajar el resto de la mañana, pues en la tarde tenía entrenamiento con el arco y flecha. Debía organizar también el recorrido al pueblo el siguiente día y comenzar a preparar el recorrido que debe hacer cómo Rey Líder en todos los Reinos, ya sean Reinos principales así como los menores.

Es una tradición que durante cinco meses, los nuevos Reyes líderes realicen un recorrido por los Reinos principales y los Reinos menores, presentándose como tal a cada uno de estos Reinos y sus pueblos.

Tenía mucho por hacer. Así como enfrentar a sus padres por humillar a su esposo en su ausencia. Pues no permitirá que aquello vuelva a suceder.

Aunque claro, debe tener una plática con su hermano menor, por intentar pasar sobre su palabra y no respetarlo como su Rey. Pero Min no se daba cuenta, que él también rompe la regla de no faltarle a su Rey. Pues él lo hace cada vez que puede contra su esposo.

Así que no es muy diferente a su propios padres y los de Jimin.

Pasó casi toda la mañana trabajando sin descanso en mucho papeleo, tenía mucho por firmar, aprobar, revisar y sentía que no tenía fin. Pues sus padres al ser los dos Alfas líderes siempre se apoyaban uno con el otro, mientras que él, siente que no puede darle a Jimin alguno de esos trabajos... Por ser Omega.

Un pensamiento estúpido la verdad. Pero lo tomará en cuenta, tal vez cuando sienta algún tipo de confianza o cercanía hacía Jimin, entonces pueda darle algún deber por resolver.

La hora de almuerzo llegó y pensó que iría al comedor y tomar sus alimentos, para saber que tipo de trato le dan sus padres a Jimin.

Para llegar al comedor, debía cruzar por la puerta de la biblioteca y justo cuando iba de paso, está se abrió y de ella salió un sonriente Tae junto a Jungkook, pero siendo acompañados por Jimin, quien a pesar de no mostrar una enorme sonrisa como los otros dos, sonreía sutilmente, con sus mejillas sonrojadas, ojitos brillosos y evidentemente más cómodo con su hermano al lado.

- Oh hermano. Justo vamos almorzar, ¿Vienes? - Pregunto Jungkook, quien noto que Yoongi veía solo a Jimin.

Entonces Jungkook tomo la mano de Tae y se lo llevó de ahí, dándole su espacio aquel par que es evidente, deben aprender a conocerse.

- ¿Con él si estás feliz y no sientes miedo? - Fueron las palabras de Yoongi hacía Jimin.

El Omega no dijo nada, tampoco negó o afirmó. La fuerte presencia de Yoongi lo abrumaba. ¿Por qué le gusta sentirlo cerca?, se preguntaba el Omega. Le gusta mucho, pero le asusta sentiste así.

Yoongi lo empujó un poco dentro de la biblioteca, con cuidado de no lastimarlo y cerro la puerta de esta misma. Jimin se sintió muy nervioso.

Entonces el Alfa líder, lo apreso de la cintura e hizo la misma acción que había hecho aquella misma mañana antes de entrar al comedor. Acercó su fría nariz al terso cuello del Omega y aspiro su aroma, embriagandose de este mismo.

- ¿Por qué demonios me encantas tanto y al mismo tiempo odio sentirme así? - Confesó el Alfa.

Jimin entre abrió sus labios y se sorprendió al sentir una leve mordida del Alfa en su oreja y después como este lamía su cuello y subía su rostro hasta quedar cara a cara.

El Rey Omega se sentía abrumado, nervioso, pero sobre todo, deseado por alguien y no rechazado. Instintivamente llevó sus manos sobre el pecho del Alfa y las dejó sobre este, cuando Min acercó sus labios y sus alientos quedaron a un par de centímetros.

- Me gusta como te ves - Susurro Yoongi - Pero me gusta más saber que soy yo el único que te pongo nervioso y te hace sentir deseado.

Entonces el Alfa apreso los gruesos belfos del Omega entre los suyos y Jimin suspiro tembloroso cuando sintió aquel profundo beso, adueñándose completamente de sus labios inexpertos, pero correspondiendo de inmediato aquellos delgados labios que sabían exquisito.

El beso se profundizó y Min dejó una muy leve mordida en el labio inferior de Jimin para luego romper el beso. Pues Min pensó que perdería los estribos si no se separaba y piensa que aún... No es el momento.

Jimin lo veía con ojitos brillosos y pidiendo a gritos un beso más, pues le gustó mucho, más de lo que creyó.

- Sabes tan bien como hueles - Susurro el Alfa Rey, para pronto, cumplir con el deseo silencioso de su esposo.

Se adueñó una vez más de aquellos labios y lo apreso más hacia su cuerpo, profundizando un beso que ambos sabían que querían pero no, cuánto necesitaban.

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¡Hola amigos!

¿Qué les pareció este capítulo?

Yo ame el beso del final la verdad🤭 pero el drama y los problemas será algo que no tiene abasto. Apareció otro personaje que quizá tenga o no relevancia.

Por aquí les dejo la ficha de Chungha.

Sin más que decir... ¡Nos leemos pronto chiquillos!

Bye💜

No olviden dejar su estrellita si les gustó el capítulo ⭐