La gran boda había llegado...

Jimin se sentía nervioso, sus manos sudaban y no podía dejar te moverse de un lado a otro.

- Principe, si no se queda quieto, será imposible terminar de arreglarlo y llegar a tiempo. Además, debemos salir de aquí lo más pronto posible - Dijo Taehyung.

- Lo sé. Pero, es que en verdad me siento muy nervioso - Puchereo el Omega.

- Solo intenté respirar, estoy en mis últimos toques - El Omega sirviente colocó algunos broches más en el hermoso traje blanco del Principe y cuando terminó sonrió en grande - Listo. Se ve hermoso.

Jimin sintió sus mejillas sonrojarse, luego se poso frente al espejo y le encantó lo que veía. Pensó que incluso sus ojos combinan muy bien con el traje, le gustó, no lo negaría. Además que jamás había usado algo un poco escotado y esas perlas en su cuello y pecho se veían bien.

- Le añadiré está capa para poder transportarnos, por el frío - Explicó el Omega mientras acomodaba los últimos detalles en el Principe.

- Gracias Tae. El traje te quedó hermoso - Afirmó Jimin - Los detalles... Son preciosos.

- Me alegra saber que le ha gustado alteza. Aunque lamentablemente la capa cubre los detalles, aún así, resalta y brillará entre todos los presentes.

Jimin una vez más agradeció y sonrió hacía Tae. La puerta de la habitación fue tocada y Chanyeol les aviso que debían irse, que el tiempo se estaba acortando.

- Bien, es hora Príncipe. Recuerde que estaré muy cerca de usted siempre, ¿Si?

- Lo sé Tae. Gracias - Jimin no se privó de darle un cálido abrazo al Omega, quien le correspondió un poco sorprendido por el adorable gesto.

- Entonces vamos - Tae le ofreció su brazo y Jimin lo tomo, para luego salir de la habitación.

El momento de viajar hasta el Castillo principal de Daegu había llegado y Jimin se uniría en matrimonio al Alfa Rey.

Pasó un mes en recuperación en el palacio Yoon. Gracias a las curaciones del doctor Mark y los cuidados de Tae, estaba en un 90% recuperado. Se sentía más enérgico y tranquilo. Solo desea que su vida siga siendo así y que su futuro esposo no sea un Alfa cruel con él.

Subieron al hermoso carruaje que llevaría a Jimin hasta el Castillo, cuando fue acomodado. El Príncipe Omega noto que Chanyeol le dió una caja mediana al Omega, pero decidió ignorarlo y no preguntar sobre asuntos que no le interesan.

- ¿El viaje hasta el Castillo es largo? - Pregunto Jimin.

- Alrededor de una hora - Dijo Tae - Tranquilo, estamos a tiempo.

Jimin suspiro tembloroso y asintió. Vió sus manitas, las cuales ahora estaban limpias de hematonas al igual que todo su cuerpo. Pero sintió un pesor en su pecho al notar su manita izquierda vacía de cualquier anillo de compromiso.

Sintió cierta tristeza ante ello, pero prefirió ignorarlo. ¿Qué más daba? Dentro de una hora tendrá un anillo, representando que estará casado con el Rey de Daegu.

El viaje duro aproximadamente una hora, en la cual Jimin sentía cada vez más intensos sus nervios. Logro escuchar cuando fueron anunciados ante el Castillo. Pero Jimin sintió que logró ver el Castillo demasiado lejos.

- ¿Hemos llegado? - Pregunto Jimin.

- Estamos en el pueblo. Aquí será llevado acabo su unión con el Rey y... Príncipe - Tae debía hablar.

- ¿Qué... Sucede? - Jimin noto el suspiro del Omega.

- Debo quitarle la capa y cambiarle por algo diferente. Al ser un matrimonio arreglado, pero sobre todo... Por qué los Reyes no saben que su hijo mayor se casará con un Omega.

Jimin lo vió sin comprender. Ladeó el rostro ante la confusión. ¿Qué tenía de malo que él fuese un Omega?

- No entiendo. ¿Qué quieres decir?

- Le prometo que le explicaré luego - Chanyeol dió dos toques a la puerta - Dame dos minutos.

- Pero Tae... - Jimin quedó atónito al ver que Tae abría aquella caja sobre su regazo.

Dentro se encontraba una hermosa tiara con diamantes incrustados en ella. Jimin había visto una cantidad exagerada de joyería durante toda su vida, pero nunca una corona tan hermosa como aquella.

Bajo está se encontraba un hermoso velo muy largo con encaje y capas brillantes al final.

- Se verá mucho más hermoso. Se lo aseguro y un consejo Príncipe. Por nada del mundo intenté quitarse el velo, el mismo Rey lo hará, ¿De acuerdo?

Jimin asintió, sin cuestionar más al Omega. Permitió que este le quitará la capa y luego le comenzó a poner el velo, con un poco de dificultad debido al pequeño espacio del carruaje, pero lo logro.

Pronto, Jimin se encontraba con su vista un poco obstruida por el velo y sintió cuando Taehyung comenzó a colocarle aquella hermosa corona en su cabeza. Hubiese deseado verse a un espejo, pero no podía.

- Sabía que se vería mucho más hermoso - Tae sonrió - No podré estar a su lado en este momento. Pero estaré cerca - Afirmó Tae.

- Gracias Tae...

El Omega sonrió hacía el Príncipe y bajo del carruaje. Mientras Jimin tomo aire y lo soltó lentamente. La puerta del carruaje fue abierta nuevamente y por ella se acercó Chanyeol.

- Su alteza - Extendió la mano el guardia y Jimin la tomo.

Chanyeol lo ayudo a bajar y cuando el Omega lo hizo, solo pudo ser consciente del murmullo de las personas pero no les prestaba la más mínima atención, al estar pendiente de los pasos que daba y con el miedo de no caer. El guardia lo guío hasta el lugar indicado.

Jimin se detuvo al pie de muchas gradas, levantó un poco la vista y ahí lo vió. Tan imponente como lo recordaba, con una presencia demandante, su mirada fría y desinteresada. Sin mostrar expresión alguna.

- Puede subir alteza - Escuchó a Chanyeol y Jimin no dijo nada. Solo comenzó a subir.

El Omega ya no prestaba atención a nada que no fuese al Alfa en la cima de aquellas gradas. Viendolo atractivo con el traje que portada.

El traje blanco desde camisa hasta pantalón pero con un saco negro y algunos detalles que brillaban ante la luz del sol, el cuál iba desapareciendo lentamente tras las colinas.

El Alfa portaba su espada en su lado derecho del pantalón. No llevaba ningún tipo de corona, pero su cabello medio largo y lacio lo hacía lucir atractivo ante los ojos de Jimin.

Cuando el Omega termino de subir y detuvo sus pasos al lado del Alfa, sintió nuevamente el exquisito aroma del mayor. Le encantó sentirlo Menta y Vino. Pudo sentir nuevamente aquel toque fresco en sus fosas nasales. Sintió una fresca brisa llegar hasta su presencia y el invierno prevalecer y calar en su piel.

- Tan deslumbrate como desde el primer día que te conocí - Susurro el Alfa hacía un Jimin avergonzado.

El Omega sabía que sus mejillas debían estar de un tono carmín. Sonrió suavemente cuando el Alfa le ofreció su brazo y él sin dudar la aceptó.

Caminaron al frente y entonces Jimin fue consciente de la imponente presencia de tres Alfas frente a él. Sintió sus piernas flaquear un poco, así que se aferró más al brazo del Alfa.

Cuando se posaron frente a los presentes, Jimin pudo ver a un Alfa un poco mayor y una Alfa mujer, también mayor, al igual que a un joven Alfa de pie al lado de la mujer.

- Un Omega Min Yoongi... - Gruño entre dientes el Alfa Rey.

- Nos mentiste - Dijo la Alfa.

Jimin de inmediato se sintió intimidado ante la fuerte voz demandante de ambos Alfas. No entendía aún, que tenía de malo de que fuese un Omega. Intuyo que quizá no era del agrado de los Reyes que sea un Omega macho.

- No están para cuestionar, solo para aceptar - Fueron las simples palabras del Alfa líder.

- Min... - La Reina estuvo a punto de ponerse de pie y negarse ante tal atrocidad como ella lo pensaba.

Era inaudito que su primogénito les haya mentido diciendo que consiguió una Alfa como futura esposa, les mintió hasta el último segundo. Apenas se daban cuenta por el penetrante aroma a Frambuesas y vainilla del chico.

- La ceremonia debe dar inicio - Anuncio el Alfa líder.

Entonces el oficiador de la unión se acercó y dió inicio. Jimin se sentía desconcertado, menos preciado, justo como se sentía cuando vivía con sus padres, sobre todo se sintió más pequeño e intimidado ante la presencia de tantos Alfas. Todos a su alrededor lo eran.

Jimin se sentía como un fenómeno. Sobre todo cuando dió una leve mirada a la Reina y está parecía estarlo matando con sus ojos. Eran intensos y tan penetrantes como los del Alfa líder.

Desvío la mirada e inconsciente apretó su mano sobre el brazo del Alfa Min. No escuchaba lo que el oficiador decía, pues se encontraba muy nervioso e intimidado.

- Ignoralos y solo céntrate en mí - Jimin escuchó al Alfa líder.

Entonces automáticamente toda su atención se fue hacía el Alfa. Lo vió un par de segundos, aunque pronto, su mirada se dirigió hacía otro lado, pues se sintió pequeño nuevamente y es que en realidad, lo era. El Alfa líder era más alto que él.

Jimin es de complexión baja y con un cuerpo fino y delicado. Muy diferente a muchos Omegas, pues él, es diferente.

- Príncipe Park Jimin - El Omega escuchó su nombre - ¿Acepta usted cómo su legítimo esposo al Príncipe Min Yoongi?

Jimin se sintió nervioso, sus manos sudaron y dirigió la mirada al Alfa, quien lo veía fijamente, esperando su respuesta. Aunque el velo del Omega les evitaba verse bien, sabía que sus miradas conectaban perfectamente.

- Acepto - Respondió el Omega, manteniendo sus ojitos sobre el Alfa.

- Principe Min Yoongi - Se dirigió al Alfa - ¿Acepta usted como su legítimo esposo al Príncipe Park Jimin?

- Acepto - Dijo sin titubear el Alfa y regresando su vista al frente.

- Siendo así. Es momento de declarar su promesa uno frente al otro - Jimin se sintió nervioso.

Dieron media vuelta y Jimin dejó sus manos frente a él. Quedando cara a cara con el Alfa, quien lo veía fijamente.

- Park Jimin, acepta este anillo como símbolo de mi promesa eterna hacia tí. Prometo protegerte, serte fiel y estar contigo cada día de nuestros días en la salud, la enfermedad y la prosperidad, hasta que la muerte nos separé.

Dijo el Alfa, para luego tomar el anillo de una almohada que fue presentada frente a ellos. Jimin se maravillo al ver aquel anillo tan hermoso. Era un Zafiro y aunque él, los puede crear fácilmente, sabía que aquel diseño era delicado, difícil de obtener o siquiera crear.

Un hermoso anillo con un Zafiro azul al centro e incrustaciones de diamantes a su alrededor fue colocando en su dedo anular, el cuál brilló en todo su esplendor al ser colocado en su mano.

Jimin sonrió y lo admiró. Era hermoso y le encantó mucho. Pero su momento de decir su promesa llegó. Vió cuando un guardia se colocó tras el Alfa líder, con un libro que tenía en grande lo que él debía decir.

- Min Yoongi. Acepta este anillo - Jimin lo tomo con delicadeza - Como símbolo de mi promesa hacia tí. Prometo serte fiel, seguirte y respetar tu palabra. Estar contigo todos los días de nuestra vida, en la salud, en la enfermedad y prosperidad, hasta que la muerte nos separé.

El Omega colocó aquel hermoso anillo sobre el dedo anular del Alfa, con pequeñas incrustaciones de diamantes y zafiros, siendo de un estilo diferente al suyo, pero haciendo juego juntos.

Cuando ambos tuvieron sus anillos en mano. Jimin elevó el rostro y aunque sonrió levemente, pensando que era un momento hermoso y maravilloso al sentir aquel anillo en su mano. Él no sabía que no todo era un cuento de hadas.

- Por el poder que me otorga el Reino. Los declaro esposos. Su alteza, puede besar al Príncipe.

Entonces Yoongi, tomo el velo que cubría el hermoso rostro del Omega y lo comenzó a elevar. Su lobo se emocionó cuando el brillante rostro con aquellos hermosos ojos azules quedaron a la vista.

Exclamaciones de sorpresa se dejaron escuchar por la inminente belleza del Omega. Se veía lindo, delicado, su piel tersa y con mejillas rosas al igual que sus abultados labios. Esos brillantes ojos azules y el cabello... Tan hermoso como todo el Omega.

El traje del novio fue visto por todos y quedaron fascinados, pues nadie jamás había visto tanta perfección en una sola persona.

Aunque Yoongi en sus adentros se sentía molesto de tener que dejar que los demás vean al que ahora es su esposo. La belleza de este debería ser vista únicamente por él y nadie más.

Jimin conecto sus ojitos brillosos sobre los oscuros y aterradores del Alfa. Bajo la mirada al sentirse intimidado. Pero pronto, sintió como su barbilla era levantada y sus ojos nuevamente veían los oscuros gatunos del Alfa.

Min lo admiró un par de segundos. Después acercó su rostro al del Omega y Jimin cerro sus ojos, pero solo sintió un leve toque, uno que se fue tan rápido como llego.

Yoongi solo rozo los labios del Omega, sin intenciones de profundizar. Soltó el rostro del Omega y este abrió sus ojos.

Jimin sintió como todo perdió la magia al momento en que vió como el Alfa alejaba la mirada de él y se posicionaba viendo al frente. El Omega bajo la mirada e hizo lo mismo, uniendo nuevamente sus manos frente a él y ahora jugando con el anillo entre sus dedos.

- Iniciaremos con el nombramiento al nuevo Rey - Se anunció.

Entonces los antigüos Reyes se levantaron de sus tronos y se colocaron frente a la nueva pareja de esposos. La Reina Min So-Yeon frente a Jimin y el Rey Min Ki-Joon frente a Yoongi.

No dijeron nada, solo fulminaban con la mirada a la pareja. Pues estaban en total desacuerdo de que su hijo se haya casado con un Omega. Perderían el linaje que había prevalecido durante años, todo por un capricho de su primogénito.

Los Reyes se hicieron a un lado y Yoongi junto a Jimin se dirigieron a sus lugares. Se quedaron de pie uno al lado del otro frente a sus tronos.

Taehyung se acercó hasta Jimin y le retiró la corona y el velo que portaba dejando más a la vista el cabello del Omega y luego se retiró.

Frente a ellos apareció el líder de los consejeros. Cha Eun-woo. Un beta que podía parecer tranquilo e inofensivo, pero era todo lo contrario.

- Majestades - Se inclinó ante sus soberanos.

Entonces inicio a dar las palabras de oficiamiento ante los nuevos monarcas. El consejero se posicionó delante del Alfa Min.

- Alfa Min Yoongi. Levanté su mano derecha en juramento - El nombrado así lo hizo - Jura serle leal a la corona y seguir haciendola respetar.

- Lo juro - Respondió Yoongi con su mano derecha alzada.

- Jura seguir forjando la lealtad del pueblo y velando por su bienestar cada día que dure su Reinado.

- Lo juro.

- Jura hacer respetar las leyes impuestas por el Reino de Daegu como se a llevado hasta el día de hoy, junto a su esposo.

- Lo juro - Respondió el Alfa.

Entonces la corona que lo proclama como nuevo Rey fue colocaba sobre la cabeza del Alfa líder junto a una capa en color rojo y una espada de oro.

El consejero se dirigió hacía Jimin. No pudo evitar notar la belleza del Omega, era deslumbrate y parecía que sus ojos azules cautivaban a cualquiera.

- Príncipe Min Jimin. Alce su mano derecha para el juramento - El Omega así lo hizo - Jura serle leal a la corona y seguirla haciendo respetar.

- Lo juro - Respondió el Omega con su mano derecha alzada.

- Jura seguir forjando la lealtad del pueblo y velar por su bienestar mientras dure su Reinado.

- Lo juro.

- Jura hacer respetar las leyes impuestas por el Reino de Daegu, como se a llevado hasta el día de hoy, junto a su esposo, el Rey Min Yoongi.

- Lo juro.

Siendo así, como colocaron una corona sobre la cabeza de Jimin y una capa roja, dándole a él un cetro con diamantes.

- ¡Larga vida a los Reyes! - Se escuchó entre las personas del pueblo.

Quienes comenzaron a festejar, aplaudir por los nuevos Reyes. Pues el pueblo a pesar de que le temen al nuevo Rey Alfa, comenzaron a sentir que sus vidas podían cambiar con el Rey Omega a su lado.

El primer Omega Rey en Daegu.

Jimin sonrió hacía el pueblo, quienes quedaron aún más encantados con la dulzura del hermoso Omega. Pero sintieron de pronto el clima más frío, dirigieron sus miradas al Rey y este los veía fríamente.

Así que dejaron de fijar tanto su mirada en el Rey Omega y suguieron celebrando por ambos.

Los nuevos Reyes tomaron asiento en sus tronos y estarían ahí alrededor de diez o quince minutos recibiremos felicitaciones de las personas importantes que habían estado presentes.

Iniciando por ahora los antiguos Reyes de Daegu. Los padres de Yoongi.

- Jamás creí que un simple capricho te llevará hasta esto Min Yoongi - Dijo un molesto Min Ki-Joon.

- Tampoco lo imaginé. Acabas de tirar por la borda el legado de los Min. Un Rey y Reina Alfa fue lo que te pedimos. ¿Tan difícil fue para ti dominar a una Alfa hembra? - Tiro veneno la antigua Reina.

- Claro. ¿No te das cuenta querida? Le resultó más fácil un Omega sumiso, algo que si puede controlar - Se burló el antiguo Rey.

- Para colmo, es el segundo hijo de los Reyes de Busan. Un maldito fenómeno según dicen los rumores y mira que no es falso, toda su presencia física es molesta.

- Si no cierran ahora mismo la maldita boca, haré que los lleven a la horca por faltarle el respeto a sus soberanos - Sentenció Yoongi.

- No eres capaz... - Intento persuadir el antiguo Rey.

- ¿Quieres probarme? - La fuerte mirada de Yoongi hizo flaquear a sus padres.

- Como sea. Estoy seguro que esto no durará mucho...

- Guardias - Llamo el Rey y sus padres guardaron silencio, para después gruñir bajo ante la molestia.

- Bien. Nos iremos ahora - So-Yeon y Ki-Joon se retiraron.

El Alfa Rey volteó a ver a su esposo y noto que este mantenía la mirada gacha. Rodó los ojos y bufó al verlo, en verdad necesitaba mucha paciencia para su vida.

- Estoy pensando si no cometí un enorme error - Murmuró el Alfa. Pero no se dió cuenta que Jimin logró escucharlo.

El corazón del Omega se estaba convirtiendo en un frágil cristal que con el pasar del tiempo quizá acabe roto y sea imposible de reparar.

- Ánimos mi Rey - Jimin escuchó la suave voz de Taehyung en su oído - Levanté el rostro y sonría, por qué su belleza no debe ser desperdiciada.

Jimin sonrió levemente al escuchar al Omega, volteó a verlo y Tae le sonrió dulcemente, regreso la mirada al frente y suspiro lento, tratando de resistir el tiempo que sea necesario toda aquella tortura.

- Mira que tener a uno de los Omegas más hermosos de entre todos los Reinos y no valorarlo - Chasqueo el Principe Alfa.

- Deja de decir tonterías Jungkook. ¿Hermoso? - Río sin gracia el Rey.

- Espero hermano - Jungkook se acercó al oído de su hermano - Que cuando quieras comenzar a darte cuenta de la preciosa joya que tienes por esposo, no sea demasiado tarde.

Yoongi lo vió fulminante, con rabia en todas sus venas. Pero Jungkook lo ignoro y se acercó a Jimin, para quien era imposible no lograr escuchar todo lo que el Alfa Rey y su hermano hablaron.

- Un gustó conocerte por fin - Jungkook se inclino ante Jimin y luego tomo su mano, para dejar un suave beso sobre el dorso de esta - Jamás dejes que ese brillo desaparezca de tus hermosos ojos - Guiño y luego se retiró.

Las mejillas de Jimin se sonrojaron efusivamente. Le sonrió cálido al Alfa cuando esté se alejo y lo siguió con su mirada, ¿Cómo podían ser hermanos el Alfa Rey y el Príncipe? Parecían tan diferentes en personalidad.

- No llevamos ni una hora de casados y ya estás viendo a otros hombres - Jimin escuchó a Yoongi hablar. Así que regreso su mirada y la bajo - Vaya que cometí el error más grande de mi vida - Se quejó con molestia el Alfa.

- Lo siento... - Susurro Jimin.

Recibieron las felicitaciones de todos los consejeros y cuando terminaron. Los Reyes se pusieron de pie, para iniciar a bajar las gradas una a una, recibiendo los gritos eufóricos y felicitaciones de todo el pueblo.

Jimin sonreía y saludaba a todas las personas que lo llamaban con entusiasmo, les daba leves inclinaciones y tomo una que otra flor que le ofrecieron.

Mientras que Yoongi no le dirigió la mirada a un solo pueblerino. Siempre con su vista al frente, tan fría que acallaba a todo aquel que sentía la presencia del Rey pasar por su lado. Camino a pasos firmes, dejando a Jimin un par de metros atrás.

Cuando el Omega Rey logro alcanzarlo, le sonrió a un linda niña. La cual tenía unas hermosas rosas blancas. Jimin la vio extrañado, sentía que había visto antes aquella niña, pero no lo recordaba.

- Es hermoso Rey Min - Susurro la pequeña al Omega, entregandole las rosas.

- Gracias. Tú también eres muy linda - Respondió el Omega, aprensando hacía su pecho las rosas.

Pero pronto, Jimin sintió como las rosas eran tomadas bruscamente de sus manos y tiradas al piso. El Omega se espanto y vió a Yoongi frente a él, alejándolo de la vista de todo el pueblo.

- Deja de armar un escándalo entre estos pordioseros y sube al maldito carruaje ahora mismo - Ordenó el Alfa.

Jimin se aterro por el comportamiento del Alfa solo pudo asentir y subió con ayuda de Taehyung al carruaje. Yoongi se fue al suyo y ambos carruajes comenzaron avanzar hasta el Castillo.

No sé fueron en un mismo carruaje y Yoongi le hablo demandante frente algunas personas y por si fuera poco. Jimin escuchó las dos veces en que el Alfa dijo que se había arrepentido de su decisión en casarse con él.

Jimin ya no pudo retener sus lágrimas. Se sintió roto, desolado y triste, igual o peor de lo que se sentía cuando estaba en Busan.

¿En verdad esa era la vida que le esperaba de ahora en adelante?

Jimin no estaba seguro de si soportaría por tanto tiempo.

.
.
.
.
.
.
.

¡Hola amigos!

¿Qué les pareció este capítulo?

Espero que les haya gustado mucho. Se que ya odian a Yoongi, pero recuerden que el personaje de él tendrá muchas 🚩 y será difícil hacerlo cambiar.

Pero... ¿Confían en que Jimin logré mejorar la actitud de Yoongi?

Lamento si puse demasiadas imágenes en este capítulo. Son solo referencias para que tengan una mejor imaginación de la trama.

¡Nos leemos pronto chiquillos!

Bye💜

No olviden dejar su estrellita si les gustó el capítulo ⭐